Dicen que el Diablo tuvo una hija... Pero algunos hilos a veces se cruzan, se enredan, y otras veces... Simplemente comparten el mismo destino. Laurie Griffin siempre ha soñado con conocer su destino, descubrir su gran misión en este mundo. Pero el Universo tiene un sentido del humor un tanto cruel y Laurie tiene que aprender varias lecciones antes de enfrentarse a un hecho real: Cada quién tiene el destino en sus manos. Un sinfín de circunstancias harán que Laurie se vea forzada a salir de su zona de confort y sentimientos inesperados le darán el coraje necesario para cambiar "lo que ya está escrito".