Luces, música y acción

By endlesscurl

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¿No te pasó algo como que de pronto te vuelves un cantante famoso, ganas incontables premios, tienes muchos a... More

booktrailer oficial
Sinopsis
Introducción
Uno
Dos
Tres
Cuatro
Cinco
Seis
i m p o r t a n t e 🦋
Siete
Ocho
Nueve
Diez
Once
Doce
Trece
Catorce
Quince
Dieciséis
Diecisiete
Dieciocho
Diecinueve
Veinte
Veintiuno
Veintidós
Veintitrés
Veinticuatro
Veinticinco
Veintisiete
Veintiocho
Veintinueve
Treinta
Treinta y uno
Treinta y dos
Treinta y tres
Treinta y cuatro
Treinta y cinco
Treinta y seis
Treinta y siete
Treinta y ocho
Treinta y nueve
Cuarenta
Cuarenta y uno
Cuarenta y dos
Cuarenta y tres
Cuarenta y cuatro
Cuarenta y cinco
Cuarenta y seis
Cuarenta y siete
Cuarenta y ocho
Cuarenta y nueve
Cincuenta
Cincuenta y uno
Cincuenta y dos
Cincuenta y tres
Cincuenta y cuatro
Cincuenta y cinco
Epílogo
ª

Veintiséis

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By endlesscurl

Nick

«Buenas noches, Bee» 02:24

Queen bee 🐝

«Buenos días, Nick!! Voy de camino a trabajar, que tengas un buen día <3» 07:15

Nick

«¿Cómo te despiertas tan temprano y tienes tan buen humor? Dormiste cinco horas!!!!!!» 10:02

Queen bee 🐝

«Porque voy a renunciar dentro de poco y estoy disfrutando los últimos días. Buenos días, princeso» 10:02

Nick

«Bueno, hoy tengo un largo día, estoy listo para seguir pasando malos días» 10:02

Queen bee 🐝

«Aquí estoy si quieres hablar, te respondo en el descanso. Recuerda que eres genial y no le debes nada a nadie :)» 10:04

Nick

«Gracias, Bee <3 Ya me contarás qué tal tu día, quiero seguir oyendo de ese tal Billy» 10:06

Suspiré con el teléfono en la mano, Chase aclaró la garganta y le eché un vistazo.

—¿Te duele la garganta?

—No, solo estoy aquí hace cuatro minutos mirándote, se supone que Kevin nos está esperando y tú estás aquí, sentado en tu cama. —Chase colocó sus manos sobre su cintura y me juzgaba desde lejos.

—Estaba hablando con Bee y...

—¿Ya se amistaron? —preguntó emocionado, yo negué con la cabeza.

—Digo, con Bee, la Bee de Buzz.

—Ah, tu amiga de internet. —Chase entendió, yo solo asentí con la cabeza. —Bueno, Kevin nos está esperando, tenemos que buscar a Rob en la oficina.

Comprendí que debía terminar de alistarme para salir, aquel día iríamos a conocer al papá de la niña. Rob consiguió que Andrew nos diera un día más para solucionar las cosas, así que eso haríamos.

Una vez junto a mi representante en el auto, Kevin manejó de camino a la casa de la niña.

El plan era relativamente fácil, conversaríamos con el señor de forma civilizada hasta quedar en un acuerdo en donde las cosas serían justas para ambas partes.

Pero cuando pensaba que todo iba a salir bien, ahí estaba el destino diciéndome que debía trabajar un poco más por ello.

No podía creer en la situación que nos encontrábamos en ese momento. ¿Por qué nada podía ajustarse al plan inicial?

Todo empezó cuando el progenitor de la niña abrió la puerta. No nos quería dejar pasar.

—Pero hombre, ¿no quedamos en algo? —preguntó Rob, había colocado su pie entre el marco y la puerta para que el señor no la cerrara.

—¡¡Ustedes solo quieren llevarse a mi hija y a mí a la cárcel!! ¡¡Quieren matarme!! —nos gritó alarmado, sus ojos estaban algo desorbitados, parecía estar salido de sí.

—¡Que no! —intervine. —No es verdad, le prometo que solo queremos conversar con usted para que el dueño de la disquera no lo denuncie de verdad.

—¡¡Me llegó esto!! —Nos lanzó una carta y cayó cerca de mis pies. La recogí para leerla.

Al parecer, era la carta de una «fan» que los amenazaba de muerte. No podía creer lo que estaba leyendo.

—No, eso no es nuestro, señor. De verdad queremos solucionar esto por las buenas, déjenos pasar para conversar con usted —pedí mirándolo, y así, poco a poco; fue dejando de hacer fuerza y miró al piso.

—Bien, pasen —murmuró y abrió la puerta.

—¿Cómo cambió tan rápido de humor? —pregunto Chase entre susurros, yo solo le pedí silencio con una seña.

El señor, aún desconfiado, nos pidió que nos sentemos. Cuando estábamos por hacerlo, apareció la niña. Se quedó petrificada en los escalones, yo no dije nada, solo miré a otro lado.

—Julien, yo...

—Ve a tu habitación, Susan —ordenó su padre, volví a observarla. Ahora con luz. Aparentaba unos quince años, no se veía precisamente como alguien que podría haberme arruinado la carrera musical. Incluso se veía inocente.

Ella asintió y volvió a subir las escaleras, me pareció verla llorar, pero ya no estaba en mi radio visual para comprobarlo.

—Bueno, a lo que vinimos —Rob llamó nuestra atención golpeando un poco su pierna, los tres pares de ojos se dirigieron a él. Kevin nos esperaba afuera en la puerta (que estaba medio abierta). —Quiero que sepa que mi jefe, el dueño de la productora, ya había hecho la denuncia, pero Julien lo detuvo. Él no quiere más problemas y decidió «perdonarlos». ¿Por qué las comillas, se preguntará? Pues le dejo la palabra a él para que lo explique.

—Sí —aclaré la garganta y me senté derecho—, pienso que es importante buscar ayuda para su hija, estoy enterado de que usted no cree en la psicología y no quiere llevarla a terapia ni nada parecido. Pero considerando la situación, ¿no le parece que sería bueno intentarlo? Tal vez, solo tal vez podría ayudarla a salir de todo esto. Le juro que no quiero más problemas, he pasado uno de los peores días de mi vida y no lo quiero repetir. Lo único que quiero es hacer música y ya —expliqué. El hombre se negó rotundamente, lo hizo desde que empecé a hablar, y quería replicar, pero alguien entró junto a Kevin mientras gritaba que él no era nadie para estar en su casa.

—¿Se puede saber qué está pasando aquí? ¿Por qué mi hija está en noticias internacionales, y por qué nadie me contesta el teléfono? ¡Tuve que tomar un vuelo de diez horas para venir a averiguar qué está sucediendo con mi familia! —les gritó a todos. La señora en cuestión tenía los ojos inyectados en odio y no dejaba de vociferar frases al aire. —Arnold, ¿quién es esta gente? —Nos observó de forma directa.

—Somos representantes Hook Records y este es Julien Garnier, si se sienta con nosotros, señora, podemos explicarle lo que está sucediendo. Pero, ¿podría decirnos quién es usted? —preguntó Rob, estaba calmado, yo estaba entrando en crisis.

—Soy la esposa de este inútil —Señaló a Arnold—, también soy la mamá de Susan. Explíquenme qué está pasando, ahora mismo. —La señora se sentó frente a nosotros, justo donde segundos antes había estado su esposo.

Así que tuvimos que repasar toda la historia del inicio. Cuando dijo que era su mamá, Chase y yo nos echamos «la mirada» de amigos que entendían cosas. Esa niña nos había mentido, pero también lo había hecho su papá.

Su esposo negaba todo lo que Rob contaba, interrumpía para decir lo contrario, nos estaba mintiendo a la cara, ¿cómo podía?

—Entonces, ahora estamos aquí, tratando de solucionar ese tema. Mi jefe quiere demandarlos de la peor manera, pero Julien no quiere tener más problemas y prefiere arreglarlo de una mejor manera. La verdad, yo no estoy tan de acuerdo con él, pero le voy a hacer caso porque confío en él. Queremos ayudarlos, así que nuestra oferta es llevar a Susan a terapia, Julien se ofrece a pagar el tratamiento y luego veremos la forma de que pague por lo que hizo, lo más seguro es que haga algún tipo de servicio comunitario. Quiero que quede claro que, hasta que le den el alta definitiva, no la dejaremos sola. Queremos estar al tanto de su mejoría, por lo tanto, estaremos informados del tema. Así que no los vamos a dejar solos —comentó Rob, su padre estaba moviendo la pierna derecha de forma rápida, su mamá ni se inmutó. —Eso sí. Si se niegan, nos veremos en la obligación de no hacerle caso a Julien y empezar con la demanda, no nos podemos quedar de brazos cruzados porque lo que hizo Susan fue algo fuerte. Es un tema complicado, como verán.

—Arnold, ve a tu habitación —comentó la señora, todos nos miramos asombrados, él señor quiso responder, pero ella no lo dejó y solo asintió. Poco después, nos quedamos a solas con la mamá de Susan.

—Señora, solo quiero ayudarla, no me gustaría que esto termine mal, así que le pido que lo considere —pedí, ella alzó un dedo para que me calle, se paró y caminó hacia las escaleras, parecía verificar que su esposo no estuviese cerca.

—Mitómanos —dijo ella en cuanto se acercó, ladeé la cabeza sin entender, pero luego recordé qué era y mi boca se abrió un poco para hablar, pero ella prosiguió—. Ambos son mitómanos. Ya no sé qué hacer... —La señora se desmoronó por completo—. Mi madre estaba enferma, me fui solo unos días. Nunca los dejo solos, no puedo creer todo lo que ocasionaron en tan poco tiempo. Quiero que sepan que, si es preciso, tomen las medidas necesarias. Yo ya no puedo más con esto. Por favor, háganlo. Si necesitan que firme algún permiso, puedo hacerlo. Háganlo, por favor —sollozó un poco más, miré a Chase, él suspiró.

—Creo que usted también necesita ayuda, señora. No es fácil tener que luchar con esto sola —habló Rob. Ella asintió.

—Lo que sea necesario... No puedo creer que me dieron por muerta para salir de esto —Se rio sin pizca de gracia y negó.

—Haré algunas llamadas, hoy mismo vamos a solucionar esto. Pero necesitamos que Susan haga algo... —Rob me miró y ladeé el labio.

—Sí, que se retracte de todo lo que sucedió. Prometemos que les daremos seguridad y nada les va a suceder, pero tiene que subir el video a su cuenta. Rob se va a encargar de que no tengan represalias —comenté, la señora asintió.

Y nos quedamos hasta que un equipo se llevó a la familia, incluso Rob envió a una enfermera para que cuide a la abuela de Susan. Arnold se resistió un poco, pero al final terminó cediendo. No le quedaba de otra porque su esposa, que era la encargada, había firmado un documento.

Susan grabó el video, pero lo hizo antes de que su mamá se lo pidiera. Nunca supe si nos había estado escuchando, o solo salió de ella, pero lo hizo, y lo agradecí.

Julien Garnier @esjuliengarnier・45s

«Hola, caos. Ahora que las cosas se aclararon, hay algunas cosas que debo explicar, pero no quiero escribir una declaración escrita desde las notas de mi teléfono porque me parece que no es lo correcto. Así que en breves estaré en directo para decir todo lo que tengo que decir. Por ahora, ya que tengo su atención. Solo espero que esto no sea usado como excusa para defender a quienes sí son culpables de tales actos.»

Y adjunté una página en donde Chase me ayudó a recopilar casos de personas a las que se les podía ayudar. Temas de la actualidad, problemas que estaban sucediendo. Me pareció adecuado ya que, al tener la atención de todos; por el simple hecho de querer saber, entrarían a ver.

Al llegar a casa, me senté en el sofá y Chase se sentó a mi lado.

—Lo logramos, amigo.

—Por fin se terminó —respondí aliviado.

—¿Jugamos Trick? —preguntó, yo lo miré y asentí entre carcajadas.

No había jugado en días. Lo necesitaba.

Quinn

«holi» 21:26

es que esto iba para la maratón, pero se volvieron locos en twitter y me armaron una dinámica gigante. los quiero mucho, en serio. 🥺

gracias, gracias por todo <3

si quieren ver qué está pasando, vayan al twitter de Orne, ella explicó todo: @chase_ooc 

creo que con el capítulo me uno al #LMAstreamparty (?)

¡espero que les haya gustado el capítulo! creo que finalmente se está solucionando el problema...

nos leemos pronto.

baai ✌🏻

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