❤Autoritarios❤
Era inútil, por más que corrí entre las personas no los encontraba. Así que comence a distraerme y me acerque a Elisabett y los bocadillos.
Narra Sebastian#
_________, se había ido a duchar luego de las clases que le di de baile y yo fui a preparar los bocadillos para la fiesta, creo que he estado tan pendiente de aquella chica que se me olvidaban las cosas que debía hacer, hasta el orden...
Bueno, antes de enseñarle a bailar ella había ido al patio trasero a buscarme, estaba tan emocionada que al tenerla sobre mi me hacia reír. Luego la seguí, ya que creí que iríamos a ensayar, pero...estaba cambiandose y su ropa interior iba perfecto con su cuerpo, creo que debo tener más control, pero ella me provocó lo que me hizo querer hacerla mía igual que cuando llego a la mansión. ¿Pensamientos estúpidos? ¿Qué me sucedía? Pues, nada.
Le enseñaba a bailar y me pizoteaba los pies, creo que quedaron hasta hinchados. Pero luego aprendió rápidamente, así que yo volví a mis labores. Ordene el salón, coloque cortinas que combinaran, coloque los bocadillos y abrí las puertas.
La gente entraba y _______ bailaba con todos aquellos que llegaban, supongo que era ''buena'' para sociabilizar con los demás, yo solo me mantenía observando hasta que...
-¿Quién es él?-pregunto la señorita Elisabett.
-Sebastian.-dijo mi señorito.
-Voy.-me dirigí a investigar quien era ese extraño y al seguirlo, me lo encontre con _______ besándose...¿Era posible aquello que estaba viendo? por primera vez sentía este sentimiento extraño dentro de mi.
Agarré del brazo al sujeto y los observe enfadado, como un demonio. Lo saque de la fiesta, me dirigí al patio trasero y le quite el antifaz. Era otro demonio, lo presentía...
-Me presento, soy Claude.-dijo con cortesía.
-Yo Sebastian.-dije indiferente.
-Sebastian Michaelis...¿Te gusta esa chica no? Mmm...un demonio enamorado. ¿Extraño no?
-No sé lo que es estar enamorado, son sentimientos de humanos, ¿Tal vez tu lo estás de su belleza como humana?-dije con una sonrisa en mi cara.
-Tal vez, bueno me retiro.-dijo presumido.
Volví a la mansión, todos seguían bailando y divirtiendose, buscaba a _______, a lo lejos, pero no la encontraba. ¿Dónde se habrá metido ésta chiquilla traviesa? Necesitaba observar esa mirada dulce, esa sonrisa que te enloquecía, esa manera de hacerte pensar que está loca y ese cuerpo con esas curvas, que solo te hacian pensar babosadas, pero un demonio enamorado de ella para mi era difícil de entender, ya que no la conoce tanto como yo.
Narras tu#
Cuando la fiesta termino, estaba agotada y por otro lado confundida. ¿Quién era ese mayordomo y por qué sabia mi nombre? ¿Dónde estaba Sebastian? ¿Estará enfadado? Creo que estaba tan celoso que podría matar a todos si así lo quisiera Ciel. Pero, me besó un completo extraño y yo no lo detuve como a Sebastian y sus extrañezas de cada día...¿debió sentirse mal al ver aquel beso?
Bueno, me di una ducha con agua caliente para relajarme y olvidar todo lo sucedido, quería sacar de mi cabeza a esos dos que me tienen enredada en pensamientos idiotas. Luego de mi ducha, me seque el cabello, me coloque la pijama y me recoste pensando en la imagen de Sebastian enfurecido, no tenía cara de enfurecido ni mucho menos de malvado, tenía cara de un verdadero...bueno...no sé como decirlo, pero... era de un verdadero demonio.
A la mañana siguiente abrí mis ojos y me encontré con un gran desayuno, de los cuales solo preparaba Sebastian, pero el siempre me los venía a dejar cuando despertaba...que mal me sentía con aquello. Bueno, mi apetito no era mucho así que solo tome rebanadas de pastel, unos sorbos de té y me vestí, me coloque ropa cómoda, me dirigí a la cocina para dejar la bandeja y esperaba encontrarme con Sebastian. Cuando llegue a la cocina...el no estaba, deje la bandeja y me dirigí a la puerta, ahí estaba el hablando con alguien, pero no con su tono normal.
-Aléjate de ella, es mía como el alma de mi señorito.-dijo enfadado. ¿Qué? ¿Alma? ¡¿Qué estaba pasando!?-. pensé.
-De todas formas será mía, la he estado observando desde hace unos días y me gusta su manera extraña de ser...Mmm...¿Ella sabe qué tu...?-fue interrumpido por Sebastian.
Sebastian lo agarro del brazo.
-Mira.-me observaban...-estaban enfadados.
-Y..yo...-sali corriendo de el salón y me encerré en mi habitación. ¿Qué estaba ocultando Sebastian? ¿Alma de Ciel? ¿Yo de otro mayordomo? ¿Me observan? ¿¡Qué hago!? Tengo miedo de ellos, siento que son tan peligrosos que me debería alejar...,pero Sebastian y aquel mayordomo eran interesantes.
Tocaban la puerta.
-¿Q..quién es?-dije tartamudeando.
-Somos nosotros.-dijeron serios como mayordomos normales.-les abrí la puerta y me senté en la cama.
-________, ¿Tienes miedo?-pregunto aquel mayordomo.
-Primero...¿Tu nombre?-dije seria.
-Claude Faustus.-dijo bastante serio. Era un interesante nombre.
-Bueno, lo que yo sienta no les incumbe a ninguno.-dije enfadada.
-Tu vives aquí y tu seguridad depende de mi.-dijo Sebastian.
-B..bueno...-dije sonrojada. Sebastian tenía su manera peculiar de hacerme sonrojar, colocarme nerviosa, colocarme...bueno, sentía sensaciones únicas.
-Yo quiero preguntar algo.-me coloque seria.
-Dilo.-dijeron al mismo tiempo y se miraron como si estuvieran compitiendo el uno con el otro.
-¿Qué me están escondiendo?-pregunte nerviosa, pero firme a mis palabras.
-¿Se lo decimos? Conoce a un shinigami...¿no crees que ya es raro?-dijo Claude.
-Te lo diré, mira... soy un mayordomo demonio y el igual.-dijo excluyendo a Claude, lo cual me dio risa.
-¿Y ustedes que hacen...?-dije nerviosa.
-Obtenemos nuestro alimento, son almas.-dijo Claude.
-A mi no me gusta cualquier alma.-dijo Sebastian riendo.
Claude siempre estaba muy serio, que aburrido. Pero sus gafas lo hacian sexy. (kfsjakfd sexy :$)
-¿Me lo haz ocultado todo este tiempo? Sebastian.-dije desilucionada.
-Los humanos suelen tenernos miedo y no deberían saberlo tampoco.-dijo serio.
-Me da igual esta charla, ______ ¿quieres salir a una cita conmigo? -dijo Claude.
-¿Qué?-dije incómoda por lo repentino que fue.
-¿Qué crees qué haces?-dijo Sebastian.
-Invitando a ______.-dijo Claude.
-Ni la conoces, haber dime el motivo por el cual vino a esta mansión.-dijo serio.
-Pues, me da igual el motivo, me interesa ella.-Serio como siempre, pero levantó una ceja, es un progreso.
Sebastian me agarro de un brazo.
-Es mía.-dijo con tono autoritario.
Claude me agarro del otro brazo.
-Será mía y no comparto he.-dijo retandolo.
-¡Basta! aún no te he respondido, no te pongas engreído.
-Yo no le daré permiso.-dijo Sebastian creyendose mi papá.
-Ya es grande, se da permiso sola.-dijo Claude mirando a Sebastian como si fuera un duelo por un trofeo.
-Dios...-dije cansada de peleas de niños.
AQUÍ TERMINA NUESTRO CAPÍTULO *-* SFAJDFKSA SEBASTIAN Y CLAUDE PARECEN BEBÉS u_ú