taeyong miraba a ten de reojo mientras intentaba concentrarse en los papeles que estaba leyendo. el menor estaba practicando con unos nunchakus mientras se sentía observado, haciendo que perdiera el control y se diera un golpe en la costilla.
- ah joder... otra vez
taeyong levantó la vista para verlo seguir practicando como si no hubiera pasado nada.
-¿estás bien? ¿te has hecho daño?
- sí alfa, estoy bien
- ven, déjame ver si te has hecho algo
ten se acercó sin replicar, nunca contradeciría a su alfa. taeyong se levantó de la silla y se acercó bastante a él, casi notando su respiración. ten se tensó cuando taeyong comenzó a levantar su camiseta con suavidad sin dejar de mirarlo a los ojos.
- ¿te duele? - comenzó a acariciar la piel de su cintura con los dedos, observando como el menor abría la boca despacio
- solo un poco - sus ojos pasaron desde la mano de Taeyong en su cintura hasta su brazo y su pecho, subiendo hasta sus labios
- ¿que te pasa pequeño? -taeyong lo atrajo más a su cuerpo, estaban a centímetros de besarse. ten mordió su labio y cuando empezó a acercarse para besarlo se vió interrumpido por unos cuantos chicos que se iban de misión.
- ¡alfa nos vamos! - la voz de yuta acercándose hizo que se separaran de inmediato, maldiciendo internamente
yuta, doyoung y winwin estaban preparados para irse. Los demás salieron al salón para despedirle, realmente no podrían asegurarse al 100% de que iban a volver por lo que cuando alguno se marchaban todos se despedían con un "hasta luego".
- tened mucho cuidado chicos y no tardéis demasiado
- tranquilo kun, estaremos bien - yuta guardó su puñal y se dirigió a la salida.
- eh tú a dónde ¿te crees que vas?
chenle y renjun se encogieron por la repentina voz de johnny, pero se sorprendieron al ver que quería el mayor era un abrazo familiar.
- vosotros dos también tenéis que venir.
los más pequeños se dirigieron hacia el grupo de mafiosos. doyoung los metió en medio a los dos y los abrazaron. la sensación fue realmente extraña porque por primera vez en muchos años habían sentido amor de alguien más que de su hermano.
- venga ya, que tenemos trabajo.
se separaron y los tres elegidos del día se acercaron a la trampilla.
- ¡esperadnos para cenar eh!
los tres chicos salieron de la casa subterránea y se dirigieron en su forma de lobo hasta donde tenían la furgoneta, emprendiendo camino hasta el centro de la ciudad. una vez aparcaron se dividieron. contactaban con kun y taeil mediante un auricular. ambos les informaban sobre la situación en el edificio en que estaban a punto de entrar.
las cámaras y los sistemas de seguridad estaban en su poder, tenían paso libre. doyoung, camuflado con un uniforme de repartidor esperó su turno de actuar. Los otros dos chicos habían conseguido burlar a los guardias logrando así el acceso al apartamento donde se encontraba su siguiente víctima. fue un trabajo rápido y limpio, digno de profesionales. en cuanto acabaron su tarea doyoung subió a su puesto. a los 5 minutos bajó con una gran caja de cartón con un cartel que ponía "ropa para beneficencia". pasó completamente desapercibido. yuta y winwin salieron por la parte de atrás del edificio y cuando los tres estuvieron fuera kun devolvió la señal a las cámaras de seguridad, pero nada de lo que había pasado en esa media hora que habían estado allí había sido grabado. doyoung metió la caja en la furgoneta como si nada y dio un rodeo hasta el sitio acordado con winwin y yuta, quienes lo estaban esperando.
- ¿como ha ido?
-ha sido perfecto.
doyoung condujo hasta la casa del padre de chenle y renjun, cuando llegaron bajó y dejó la caja en la entrada, se retiró y volvió a subir a la furgoneta.
- espero que te guste el regalo, cabronazo.
los tres chicos emprendieron el camino a casa, por el camino se reían imaginando como sería la cara del hombre al abrir la caja y ver que dentro se encontraba uno de sus mejores hombres mutilado y metido en una bolsa de basura.