winwin peinaba el pelo de renjun mientras ten curaba las heridas que las cuerdas habían dejado sobre sus brazos.
- entonces... ¿seguro que no vais a hacernos daño?
- ya os hemos dicho que no, solo sois un trámite, ahora no te muevas que te voy a echar alcohol.
renjun hizo una mueca mientras ten lo curaba, no sabía qué hacer, solo podía mirar a chenle mientras otro de ellos curaba sus heridas. los chicos que estaban con ellos no daban tanto miedo como los que estaban fuera, y además, había una gran diferencia de tamaño entre ellos.
- ¿cómo os llamáis? - chenle preguntó tímido, no sabía si debía hablar.
- yo soy jungwoo, y el que te está peinando es doyoung. - ambos chicos le sonrieron al rubio, parecían intimidantes pero eran muy dulces.
- yo soy ten
- y yo win win
- el bebé que os va a dejar su ropa es yangyang.
- ¡no soy un bebé! - yangyang se levantó y le sacó la lengua a ten, para después salir de la habitación.
- yo me llamo jaemin
-yo soy chenle... y el mi hermano renjun.
- lo sabemos -ten se sentó en el suelo delante de ellos. - sabemos bastantes cosas sobre vosotros
- los vas a asustar ten - jungwoo se sentó a su lado mirando a los dos chicos.
yangyang volvió a abrir la puerta, traía algo de su ropa y alguna prestada con él.
- creo que tenemos una talla parecida, espero que os sirvan -sonrió mientras les daba un pantalón a cada uno, no podían dejar que estuvieran siempre en pijama.- os he traído unas sudaderas de Hendery y Xiaojun, son grandes y muy calentitas -el pequeño era una bolita de amor, y más si hablaba de sus alfas mayores.
- ¿necesitáis ayuda para cambiaros? - jaemin levantó la cabeza para verlos pero ellos negaron mientras se quitaban la ropa.
-estáis... muy delgados... - jungwoo sonaba preocupado, y como para no estarlo, a los dos niños se les notaban las costillas demasiado.
-voy a ir a avisar -no dio tiempo a que rechistaran, doyoung ya había salido de la habitación y había avisado a jaehyun.
- menos mal que hoy les toca cocinar a kun y taeil- winwin se sentó con los demás mayores- seguro que tenéis un lío de nombres tremendo
renjun asintió
-sois muchísimos...
- 19 para ser exactos.
- ¡pero somos como una familia!
- yangyang no te pases
-pero lo somos, ten -el menor hizo un puchero y el mayor río. doyoung volvió a la habitación y ellos siguieron hablando un rato.
jaehyun caminaba por el pasillo a paso firme hasta llegar a la puerta de la habitación de Johnny, se detuvo y se dispuso a llamar.
- qué, ¿a la habitación del alfa a pasar un buen rato?
-vete a la mierda yuta -jaehyun rodó sus ojos quitándole importancia a sus palabras, pero el susto si que se lo había llevado. llamó a la puerta y tras oír la voz de Johnny entró y cerró. El mayor lo miró, estaba sentado en el escritorio mirando unos papeles
- ¿y tú por aquí?
jaehyun miró su sonrisa y se apoyó en la pared
-doyoung me dijo algo - sus ojos vagaron por toda la habitación hasta volver al alfa, que ya estaba de pie y algo más cerca de él.- cree que esos niños tienen problemas de alimentación, están demasiados delgados
- ahg y será verdad que ese cerdo hijo de puta millonario ni si quiera se preocupa en darle de comer a sus hijos - ambos se miraron asqueado pensando en aquel hombre- como me gustaría matarlo con mis propias manos - el mayor de ambos se sentó en la cama con los codos apoyados en las rodillas.
-venga alfa, no te frustres - jaehyun caminó hasta Johnny y se puso a su lado, pasando las manos por sus hombros - ya encontraremos una solución a lo de esos niños, por ahora están bien con nosotros, ¿no? - el mayor asintió mirandolo de reojo - lo importante ahora es recuperar lo que es nuestro - sus manos recorrieron su pecho y volvieron a los hombros- tú solo relájate.
Johnny sonrió ante el susurro del menor, acariciandole la cintura con una mano.
-siempre haces que me sienta bien, jaehyun - el nombrado sonrió al sentir las caricias del mayor- podríamos dejar que coman con nosotros cuando estemos seguros de que no se van a escapar.
jaehyun asintió mientras acariciaba el pelo de Johnny, peinandolo hacia atrás. tras unos moemntos de slencio y caricias, el alfa volvió a hablar.
-yuta te ha dado un susto, ¿eh?- johnny rió, haciendo que jaehyun se sonrojara y le diera un golpe en el hombro
- ese cabrón es muy sigiloso.
ambos se rieron, y a decir verdad, podrían pasarse la vida así.