Íbamos camino al aeropuerto pues mañana comenzaba la gira y teníamos que llegar hoy a Alemania pues ahí sería el primer show de la gira. Eran las 2:00 am y el vuelo salía a las 4:00 am pero debíamos llegar horas antes para organizar todo el equipaje y esas cosas.
Sería un vuelo de casi 12 horas.
—¿Todo bien? — preguntó Ross al ver que yo sólo permanecía recargada en la ventana del auto observando la autopista rumbo al aeropuerto.
— Sí — lo miré y sonreí — sólo que no sé como sobreviviré casi 12 horas en un avión, sabes que no me gustan los vuelos largos — reí.
— Oh, si quieres podemos volver. No tienes que ir a la gira si no quieres — dijo mi rubio.
— No, sí quiero ir. No voy a dejarte solo— Apoyé mi cabeza en su hombro y entrelacé nuestras manos .
—Se ven tan tiernos — dijo Rydel al vernos y sólo reímos.
Alrededor de 40 minutos después el auto se detuvo.
— Llegamos — dijo Andrea.
Andrea se había ofrecido a traernos al aeropuerto y por fin habíamos llegado. Bajamos del auto y tomamos nuestras maletas, el avión salía en una hora pero debíamos llegar temprano.
— Te voy a extrañar — me dijo Andrea.
—Yo también — la abracé.
— Cuidas a mi RyRy — me pidió.
— Claro, no permitiré que mire a ninguna otra chica — reímos.
—______, es momento de irnos — me indicó Ross.
— Te llamo luego, adiós — me despedí de Andrea y me fui junto a Ross.
2 horas más tarde ya nos encontrábamos rumbo a Alemania.
Ross se encontraba sentado a mi lado pero estaba dormido. Miré su rubio cabello por unos segundos y luego procedí a jugar con el. Enrollaba su dorado cabello en mis dedos y luego lo soltaba.
No me di cuenta en que momento me quedé dormida junto a Ross. Fui despertada por una luz que chocaba contra mi cara pero no era precisamente el sol o algo parecido.
— Mierda, creí que había desactivado el flash—maldijo Rydel cuando vio que desperté.
— ¿Qué hacías? — pregunté extrañada.
—Se veían tan tiernos Ross y tú que decidí tomarles una foto — dijo inocente y reí.
— Me despertaste — le dije.
— Lo siento, creí que estaba apagado el flash.
— No importa — Sonreí & ¿no piensas dormir? — le pregunté a la rubia.
—No, no tengo sueño—respondió.
—Yo estoy emocionada, nunca he estado en Alemania y tengo curiosidad —dije.
— ¿Nunca has estado en Alemania? Wow. Es genial, cuando lleguemos lo entenderás.
Se generó un silencio por unos segundos pues todos estaban dormidos u ocupados en sus teléfonos.
—¿Sabes? Esto es romántico. ¡Estarás de gira con Ross justo antes de tu boda y visitarás todo tipo de ciudades! Sí que eres afortunada — dijo Rydel rompiendo el silencio.
—No me emociona mucho la idea de estar de gira— hice una mueca — es lindo pero será tan cansado. Vengo a apoyar a Ross antes de nuestra boda, debe estar nervioso — dije mientras Rydel tecleaba algo en su teléfono.
—Mira tus notificaciones — rió la rubia .
Tomé mi teléfono.
RydelR5 te ha etiquetado en una foto
Eso decía la notificación. Observé la foto, era la foto que minutos antes nos había tomado a Ross y a mí. Esta tenía la siguiente descripción "Amor en las alturas".
Observé a Rydel con una sonrisa y comenté la foto.
"Este amor llegará a Alemania pronto"
Comenté para luego darle like a la foto. Guardé mi teléfono y me dispuse a dormir de nuevo.
Cerré los ojos para tratar de dormir y lo logré.
Cuando desperté lo único que se podía ver era la oscuridad de la noche en las alturas.
— ¿Cuánto he dormido que incluso ha anochecido? — pregunté asombrada al despertar.
— Dormiste como 4 horas —rió Ross — ya sólo faltan alrededor de 6 horas de vuelo, ánimo! — bromeó Ross.
— Que gracioso — dije sarcásticamente y le di un ligero golpe en el brazo.
— ¿No estás emocionada por llegar a Alemania? — preguntó Ross.
— Algo así... La gira será cansada — respondí.
— Lo sé. Imagínate yo que tendré que dar un show casi diario y en diferentes ciudades — respondió.
— ¿ya despertaste? Creí que lo harías hasta que llegáramos a Alemania — me molestó Ryland.
—Sigue así y le diré a Andrea que estuviste con otra chica aunque no sea cierto y me creerá porque soy su mejor amiga — advertí en broma y Ryland me miró aterrado. Solo reí para dejar en claro que estaba bromeando.
— Ya escuchaste a mi esposa — Ross le guiñó un ojo.
Sus palabras resonaron una y otra vez en mi cabeza, se escuchaba tan lindo que me dijera esposa.