El vestido que llevo ahora lo diseño Gabriel Agreste, yo misma tenía muchos bocetos de mi creación para el vestido que usaría este día, pero decidí aceptar esa gentileza de su parte. Mi padre, al que ahora ya comienzo a ver como tal, me acompaña para entregarme en el altar y allí esta Félix, junto a él Claude... creo que es la primera vez que veo a Claude con terno.
Tuvimos que retrasar un año la boda porque Félix no tenía vacaciones en el hospital, después de todo se tomó cuatro meses de licencia para acompañarme, creo que no volverá a tener vacaciones en un largo tiempo, pero al fin logramos encontrar unos días libres para organizar la boda, una boda al aire libre, en Londres, porque aunque mis padres quisieran que se hiciera en París, no podíamos salir de la ciudad por asuntos de tiempo.
En el graderío, estaban todos mis conocidos, incluidos aquellos de mi otra yo a los cuales aún no me aprendo el nombre... aunque ahora tengo muchas damas de honor, hace tiempo creía que Allegra sería la única.
Al fin llegamos al altar y mi padre me dejo junto a mi futuro esposo, la marcha nupcial dejo de sonar en ese instante y no recuerdo que dije... solo podía ver esos hermosos ojos gris azulado que poseía Félix y su sonrisa tímida, luego el beso en los labios que cerraba la ceremonia, sentí que fue demasiado corto... pero de momento tendría que conformarme porque estábamos a la vista de todos los invitados.
¿A que no adivinan quien atrapo el ramo cuando lo lance? Sip, Kagami, aunque decir que lo atrapo es un error, lo correcto sería decir que casi le saco un ojo cuando lancé el ramo con demasiada fuerza sin esperarlo, al lugar donde estaba ella sentada junto a Adrien, ninguno de los dos estaba prestando atención hacia nosotros.
Luego vino la fiesta, el pastel de bodas lo hizo mi padre, pero el padre de Félix se aseguró de que los novios que decoraban el pastel fueran estatuillas en miniatura de Félix y yo.
¿Qué más puedo decir? Este día fue mucho mejor de lo que había imaginado cuando acepte casarme con Félix.
FIN