Hoseok se lavó las manos antes de sacudirlas y tomar la toalla terminando por dejarlas secas. Volteó a ver a su hermano quien se veía concentrado preparando el desayuno, ya estando por finalizar. Ese día él y Jungkook habían sido los encargados de preparar la primera comida del día, así que ambos se decidieron por algo verdaderamente sencillo.
El mayor de los dos caminó hasta uno de los almacenes para estirarse y tomar miel, mermelada e incluso crema batida. Aprovechó para tomar pocos platos, los suficientes para no tirarlos al suelo, dejándolos al lado de Jungkook apilados para que colocara ahí las piezas ya listas. El de sonrisa con forma de corazón la lució inclinándose para fijarse en su hermanito cocinando, riendo ante el pensamiento de lo tierno que se veía cocinando con el mandil de sus padres. Le quedaba grande, pero le hacía sentir como si le quedara a la medida, moviéndose como todo un chef profesional.
-¡Ya hyung! –le empujó con un brazo esperando a que se apartara, sintiéndose tímido ante las burlas de su hermano.
-Te ves tierno Kookie, todo un chefsito. –el menor bufó enfadado tomando un vaso cercano a él para amenazar con él a su hermano.
Hoseok se fue entre risas a la mesa del comedor, dejando ahí los botes de miel y mermelada, dejando simplemente todo en el centro sabiendo que apenas llegara Taehyung acomodaría diferente para que se viera más presentable la mesa.
-Ya está listo el desayuno. –avisó Jungkook desde su lugar a su padre menor y hermano cachetón, ambos dentro del cuarto de lavado sacando la ropa que había pasado toda la noche dentro de la secadora. Se suponía que debieron de sacarla antes de dormir pero ambos lo habían olvidado así que fue lo primero que hicieron apenas Jungkook les reclamó al no verlas colgadas.
-¡Ya vamos! –fue lo que gritó Namjoon, soltando una carcajada cuando se dio la vuelta y vio a su hijo inclinado dentro de la secadora, estando a punto de caer dentro por querer alcanzar la última prenda- Deja eso Jiminnie, a desayunar.
-¡Mira appa! –mostró entre risas lo que se encontró, unos audífonos que quedaron inservibles, unos que enseguida Namjoon tomó con una expresión de sorpresa, sin poder creerlo- Estoy seguro de que son de Taehyung.
El chico aseguró marchándose a la cocina, dejando a su padre riendo falsamente, suspirando al ver que sus audífonos ya no servirían así que se acercó al bote de basura para tirarlos, sin hacerlo porque pensó que quizá podrían funcionar así que acabo por guardarlos en el bolsillo de su pantalón, esperando no volver a olvidar que ahí se encontraban.
Pasando a la cocina, vieron a Hoseok llevándose los platos ya servidos a la mesa, con Taehyung ahora ayudando a acomodar contento y tarareando, mostrándose tan animado y de buen humor que incluso acomodó las servilletas bajo los cubiertos que probablemente no usarían. Jin se pasó junto a su hijo, entregándole unos vasos ya servidos para que también los acomodara, riendo al verlo cuidadoso que era en ese momento.
Ya toda la familia estaba abajo, o bueno, casi todos.
-¿Yoongi sigue dormido? –Seokjin preguntó mirando hacia las escaleras, dirigiéndose hacia ellas para ir a llamar a su hijo una última vez cuando Hoseok vio su oportunidad.
-¡Yo voy appa! –el chico le rodeó corriendo, subiendo los escalones rápidamente mientras su padre se detenía y le miraba subir, riendo y negando con su cabeza antes de darse la vuelta y regresar hacia la mesa, topándose con su esposo que le mostró los audífonos, sacándole la primera carcajada del día.
Hoseok abrió la puerta sin tocar, fijándose en su hermano acurrucado en su cama con una cobija gruesa cubriéndole todo a excepción de la cabeza. El apodado Hobi se acercó hasta hincarse en la cama, moviendo a su hermano y descubriéndolo para verle fruncir el ceño ante la interrupción de su sueño –Hyung, hyung, debes bajar a desayunar. –le llamó sacudiéndole.
El mayor gruñó lo que pareció una maldición antes de intentar darse la vuelta para ignorarlo –Voy a desayunar luego, vete al diablo. –Hoseok le pegó en el brazo, rodando los ojos antes de acomodarse y sacar su teléfono para ir abriendo una aplicación.
-Hyung, necesito que te levantes ya para hablar antes de bajar, debemos hablar sobre lo de su abue –sorprendentemente, Yoongi se sentó en seguida y le cubrió la boca, mirando con terror a la puerta antes de gruñir y pegarle con su almohada en la cabeza, aplicando la suficiente fuerza como para que su cabeza se estrellara contra la cabecera de la cama, pero Hoseok alcanzó a solo tirarse a la cama- ¡HYUNG!
-Vuelves a hablar de eso en voz alta y te arrancó la lengua. –de por sí Yoongi no se levantaba con el mejor ánimo del mundo, ahora se veía realmente enojado. Hoseok suspiró sentándose, mirando a la puerta entre abierta antes de volver a ver a su hermano, susurrando.
-Yo solo quería decirte que Suyun quiere hablar contigo.
Se quedaron viendo un momento, ambos luciendo enojados con el otro. El mayor se levantó finalmente, frotándose el rostro antes de ir a la puerta y asomarse fuera. Pudo escuchar cómo su familia reía abajo, aparentemente por algún adorno que puso Taehyung en la mesa. Eso le dio una señal de que alguien venía a desayunar a casa, seguramente. Esperaba equivocarse. Abrió más la puerta con la intención de tener mejor vista por si alguien subía.
Regresó a la cama -¿Y por qué metiste a Suyun en esto? –preguntó levantando una ceja.
Hoseok se acomodó, guardando distancia de su hermano –Suyun puede ayudar, ella me ayudo a encontrar a Yoora, recuerda que es stalker –Yoongi levantó una ceja, preguntándose si su hermano era tan ingenuo como para creerse cualquier cosa que le dijera su novia. Suspiró cuando le vio mostrarle el teléfono con una conversación en pantalla-. Habla con ella hyung, suerte, supongo. Baja a desayunar pronto.
Se levantó para irse, dejando a Yoongi con el teléfono móvil en mano. El peli negro miró a pantalla leyendo los últimos mensajes donde Hoseok le agradecía a la chica por aceptar ayudarles otra vez, afirmaba que significaba mucho para él y para su hermano. Yoongi suspiró, recordándose de que Hoseok hacía todo eso por él así que debería de aprovechar la oportunidad. Sin más demora, escribió un saludo y aclaró de quién se trataba.
*****
Yoongi se equivocó, los siete miembros de la familia desayunaron con sus mascotas yendo de un lado a otro pidiendo comida. Conversaron animados, mencionando sus planes para el sábado -¿Hoy podemos ir a por mi teléfono? –preguntó Taehyung, por más que habían querido ir antes no se había presentado la oportunidad así que era el día adecuado para ir. El adolescente junto sus manos- Por favor, arregle muy bonita la mesa ¡Puse una ardilla! –señaló a la pequeña charola de cerámica con una ardilla en el centro- Por favor appas, ya pase mucho tiempo sin un celular.
Jin y Nam se miraron serios, más que nada para poner tenso al muchacho y hacer reír a sus hermanos –Uhm... podríamos, tal vez ir, quizá si queda tiempo.
-¡Appa Nam! –se quejó el adolescente- Por favor.
Seokjin rió, asintiendo al tiempo que le sonreía a su hijo, inclinándose en la mesa para apuntar al animal de cerámica en el centro –Solo si prometes no volver a poner esa ardilla en la mesa, por algo estaba escondida.
-A mí me gusta. –señaló Yoongi mirando a la figura con los ojos entrecerrados, dándole un sorbo a su leche chocolatada.
La sonrisa cuadrada en el rostro de Taehyung creció -¡Gracias! –gritó a sus padres- Lo prometo, pero también creo que es una bonita ardilla, me gusta, ha salvado el desayuno.
Jungkook fingió ahogarse, causando que sus hermanos rieran -¿Disculpa? Yo fui quien cocino.
-¿Y yo? –Hoseok se cruzó de brazos- Te ayude por si lo olvidas.
-Aja, hyung solo iba de un lado a otro pasándome lo que necesitaba, gracias por caminar bonito hyung. –el apodado Hoseok se mostró ofendido al tiempo que los menores reían divertidos y Yoongi suspiraba volteando a ver a sus padres esperando que intervinieran, pero los adultos seguían comiendo, moviendo ligeramente sus cabezas.
Hoseok se estiró para tomar una banana con la intención de arrojársela a Jungkook pero Jimin se adelantó y la tomó primero -¡No avienten comida! –dijo señalando a ambos con la fruta.
-Dejen de pelear y terminen de comer. –pidió Namjoon esperando que la pelea terminara, y así fue, al menos en cuanto a palabras pues los hermanos se miraron molestos un momento antes de seguir comiendo hasta que terminaron su desayuno.
-Yo limpiaré, vayan a cambiarse –Seokjin señaló arremangándose las mangas de su sudadera-, entre más rápido bajen, nos iremos pronto a por el celular de Taehyung.
-¡De acuerdo! –el chico exclamó contento antes de subir junto a sus hermanos, ya que Yoongi le pidió a Jungkook que fuera con ellos un momento, dejando solos a los adultos en la cocina.
Los cinco subieron, entrando en la habitación de los tres hermanos, el mayor de ellos cerrando la puerta y recargándose en ella para ver al resto –Bien, tengo que hablar con todos.
-¿Código morado? –preguntó Taehyung.
Jungkook, sentándose en la cama de Taehyung para bufar –Comienzo a odiar esa palabra –se quejó-, cada vez que la escucho se vienen problemas.
-No es código morado, exagerado –aclaró Yoongi, separándose de la puerta para caminar por la habitación-. Código morado es para emergencia, yo lo que quiero es pedirles un favor, y aclarar algo.
En seguida captó la atención de todos, incluso de Hoseok quien no podía imaginarse qué era lo que quería pedirles el mayor de todos, Rara vez pasaba algo parecido.
Suspirando, decidió hablar ya para no alargar más el asunto » He decidido buscar a mi hermana y abuela. –habló, no tan fuerte pero lo suficientemente claro para que escucharán los cuatro.
-Oh diablos. –jadeó Jimin preocupado por lo que podría pasar.
-¿Qué? –Taehyung dejó abierta la boca al preguntar, sintiendo que se desmayaba por la sorpresa- P-p-pero hy-hyung dijo que nunca las bus-buscaría...
-Dije buscarlas, solo quiero verlas, no planeó quedarme con ellas –suspiró pasando una mano por su cabellos negros-. Necesito saber qué ocurrió después de que me fuera de sus vidas.
Taehyung asintió, aún aturdido. Jungkook solo pudo pensar en una frase que veía en internet–Moriremos todos.
-Qué dramático eres Kookie –le regañó Jimin, negando con su cabeza antes de girar a ver a su hermano mayor-, ¿Qué iba a pedirnos hyung?
-Solo quiero que esté claro eso, y que no puedo hacerlo solo –se cruzó de brazos-... son mis hermanos y necesito su apoyo.
A todos pareció sorprenderles esas palabras, completamente inesperadas pero a las que reaccionaron con una gran sonrisa y un abrazo grupal que tomó por sorpresa a Yoongi » ¡Eh! –se removió entre los brazos de los cuatro, escuchándoles reír. Suspiró aguardando hasta que se apartaron, retrocediendo para guardar distancia de nuevo- Escuchen, olvidemos este momento, ¿Sí? Necesito su ayuda para -tomó aire, temiendo que se negarán-... distraer a appas... no pueden saber de esto así que si se los pido será necesario que los distraigan.
-Oh, jo jo jo jo –rió malvadamente Jungkook, recargándose en uno de los tubos de la litera para ver a su hermano sintiéndose superior-, esto le saldrá caro hyung.
-Shhhh –Taehyung fue con él y le pegó en el brazo-, calla que si hyung necesita algo lo vamos a hacer. Somos hermanos y nos necesita, él estuvo para ahí cuando lo necesitaste, como todos nosotros.
Jungkook pensó en la escuela, en todas esas veces que le había defendido, y en las otras en las que no, pero porque no sabían. Suspiró, asintiendo pero aun así pidió –Espero mis galletas lo más pronto posible.
Yoongi asintió, abriendo la puerta para asomarse fuera, confirmando que sus padres seguían abajo –Suyun me dijo que la mejor manera de comenzar a buscar será mirando mis papeles de adopción, puede venir el nombre de mi abuela, voy a buscar los papeles.
-¿Ahora? –Hoseok lució asustado, negando- Mejor cuando regresemos hyung.
-Ya están vestidos –señaló el pálido-, no van a subir hasta que estemos listos, y para eso están ustedes. Vayan e impidan que suban hasta que yo baje, solo le voy a tomar una foto.
-Los documentos importantes están en el cuarto de appas –recordó Taehyung-, en los cajones bajo la cama, será muy obvio que revisaste y se van a enterar, hyung, ¿Qué podemos hacer? –preguntó al mayor- ¿Me tiró por las escaleras? Puedo hacer que me lleven al hospital, voy ahora, me tiraré, ay no, tengo miedo, ¿Me empujan? ¡Kookie! ¡Empújame!
Yoongi rodó los ojos mientras Kook reía –Nadie empuja a nadie, solo vayan ¡Ya! ¡Ya! Muestra el celular que quieres.
Y salió, Yoongi se fue para entrar con cuidado en la habitación de sus padres mientras Taehyung era llevado de la mano por Jimin hacia las escaleras, los dos bajando con Jungkook tras ellos y Hoseok quedándose en las escaleras para fijarse en sus hermanos. Vio a sus hermanos llegar al piso, fijándose en sus padres quienes estaban platicando en la cocina.
Tae iba a entrar cuando su hermano cachetón le detuvo, susurrando en su oído –No entres, vamos a interferir solo si uno de los dos quiere salir de la cocina. –tanto Tae como Kookie asintieron, caminando para alejarse de la puerta para sentarse en el sofá, mirando a sus padres desde su lugar.
Vieron a Namjoon darle un beso a su esposo, los adolescentes volteando a otra parte mientras bufaban escuchando las risas de los adultos. Esperaban que no hicieran más ni juguetearan entre ellos.
*****
Yoongi se hincó abrieron el primer cajón, sacando varias carpetas para revisarlas rápidamente, encontrando primero algunas facturas pagadas de cosas importantes que en ese momento no le importaban al adolescente.
Se sentía mal haciendo eso sin pedir permiso, entrando en la habitación de sus padres como si fuera suya y revisando en las cosas que si bien no eran solo de los adultos, estaban en su habitación. Suspiró dejando la carpeta en el suelo para revisar otra, encontrando actas de nacimiento y otros documentos pertenecientes al mayor de la pareja.
Las carpetas comenzaron a aparecer con nombres marcados en la portada, indicando qué había dentro así que eso facilito parte de su búsqueda hasta que se topó con una con su nombre. La tomó abriéndola, encontrándose con una copia de su identificación, certificados de la escuela, algunos reconocimientos que le dieron por parte de la escuela, hasta el final se encontró con el registro de su adopción.
Tomó la hoja, comenzando a leer. Vio su nombre, la edad a la que fue dejado en la casa hogar, dónde nació, los datos de sus padres al momento de adoptarle y, por supuesto, un pequeño apartado con los datos de la mujer que le crío. La puerta fue abierta de golpe haciéndole saltar -¡Hyung! ¡Apurese! ¡Taehyung es demasiado obvio! –advirtió Hoseok mirando todos los papeles en el suelo, abriendo sus ojos con asombro- ¡Rápido hyung! Intentaré frenarles.
Yoongi asintió sacando su teléfono con su mano temblando, dejando la hoja en el suelo para tomar varias fotos por temor a que alguna saliera borrosa. Comenzó a guardar, sintiendo el corazón latirle con mucha, mucha fuerza.
Afuera, Hoseok miraba con temor las escaleras, escuchando a Jin regañando a sus hijos -¡Les dije que se cambiarán! ¡Vayan arriba ya!
-¡Appa yo quiero irme con mi pijama! ¡No quiero subir! –señaló a su ropa rayada, a lo que Seokjin bufó.
El adolescente de 16 estaba a los pies de la escalera, asustándose apenas vio a sus padres voltear a verles y preguntarles si estaban listos. El muchacho planeaba ponerse como una barrera, bloqueando el camino.
-Taehyung, ve a ponerte otra ropa por favor –pidió Namjoon frunciendo el ceño. Sus ojos se dirigieron escaleras arriba, alcanzando a ver la cabeza de Hoseok asomándose antes de desaparecer rápidamente. Frunció el ceño-, ¿Qué haces?
-Avergonzarse a sí mismo. –susurró Jimin mirando a su hermano.
-Qué lamentable. –apoyó Jungkook.
-¡Me gusta mucho está pijama! –repitió Taehyung levantando los brazos y dando una vuelta para que le vieran mejor.
-Si no te cambias no vamos a salir. –señaló Seokjin a lo que el adolescente jadeó haciendo un puchero, volteando a ver detrás suyo en busca de ayuda. Casi enseguida, Yoongi bajó fingiendo que todo estaba bien, ignorando a su familia con Hoseok siguiéndole con una sonrisa forzada.
Ambos padres observaron la escena, también a Taehyung subir de dos escalones gritando que no tardaba nada. Jin abrió su boca para preguntar, sin hacerlo cuando Yoongi y Hoseok se sentaron fijándose en el celular del menor, mientras los otros dos hermanos se iban al patio para buscar a sus mascotas quienes se encontraban ahí descansando sobre el cómodo césped.
Jin y Namjoon compartieron una mirada, los dos pensando lo mismo. No les quitarían el ojo de encima en todo el día, algo tramaban sus hijos.
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¡Hola!
¿Cómo están?
Espero que muy bien <3 <3
Yo ya me voy a dormir, jeje, así que buenas noches mis galletitas amadas <3
¡Nos vemos!
Gracias por leer :3