STEPHEN STRANGE X LECTORA
#DE PALABRAS: 857
ADVERTENCIAS: Tristeza para regalar #SorryNotSorry el Dr. recordando. ¡Leanlo hasta el final!
ESCRITO POR: PomeloVillano
N/A: Les va a sonar extraño, pero les juro que siempre que pienso en Dr. Strange, lo hago en la voz en off de Benedict Cumberbatch... Y eso me pone re loca(?
#PomeloCochino #LlevameALaDimensiónEspejoPapeh
💔💔💔
Ella era un ángel. No, no soy una persona creyente en lo absoluto, pero sin dudas ella era un ser de luz tan magnífico que me sigue siendo difícil creer que alguna vez se fijó en mi.
La conocí por casualidad en una conferencia que di en la universidad en la que ella enseñaba matemáticas avanzadas. Inteligente como nadie, espontánea, dulce, amable, cariñosa, con una fortaleza inquebrantable, sensual hasta los huesos e increíblemente bella. Si, esa era ella, la mujer más maravillosa de este y otros universos.
Su amor era tan puro que me sentía hasta culpable de que ella me amara. Era inmenso, dulce y tan sanador, que era capás de unir los pedazos de un ser roto y hacer uno nuevo de cero. Si, esa era ella.
Su capacidad de ver mas allá de lo que cualquiera podría llegar a ver era impresionante. Tan dadora de todo lo que era, tan despojada de frivolidad y egoísmo. Si, esa era ella.
Si le entregábamos el mundo quizá ella podría haberlo sanado y hecho uno mil veces mejor. Pero ni siquiera el mundo la merecía. Nada ni nadie merecía a alguien tan pura como ella. Mucho menos yo.
Los años que pasé a su lado fueron, sin dudas, los mas felices de mi vida. No existía rutina ni mundanidad en nuestra relación, es como si todo siempre fuera nuevo e impresionante. Siempre algo diferente, siempre algo innovador. Si, esa era ella.
Nuestra relación comenzó de manera frenética e incontenible, como la fuerza de un huracán. Los despojos que fueron quedando eran algo que valía totalmente la pena.
Me sorprendí a mi mismo al enamorarme perdidamente de ella. No por ella, sino por mi. Amar con esa fuerza era algo totalmente nuevo para mi... Y eso me daba mucho miedo. Pero me dejé arrastrar por la corriente de la cascada de su amor, dejandome ahogar lentamente en aquel torbellino.
Pero todo cambió cuando me uní a este nuevo universo. Ver los horrores que este y otros mundos resguardaban me aterraban. No por mi, sino por ella. Era demasiado valiosa y mi miedo a perderla me hizo alejarla lentamente de mi. Fue, sin dudas, lo mas doloroso que tuve que hacer. Pero era el precio a pagar por que su vida se mantuviera a salvo.
O eso creí.
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-Creeme, es lo mejor. No quiero que nada te pase.- Dije en tono calmado.
-Siempre pensando en lo que es mejor, puede que quizá te equivoques.- Su voz sonaba serena. Eso rompió aun mas mi corazón.
-Si algo te pasa no podré vivir con ello. ¡Solo lo hago para protegerte!- Mi tono de voz de elevó solo un poco.
-Stephen, no puedes vivir creyendo que se puede evitar todo, quizá mañana muera en un maldito accidente de auto y no podrás hacer nada, ¡NADA!- Tomó un profundo respiro. -Solo vete, tus excusas son estúpidas y lo sabes...-
Nuestro ultimo adiós me hizo conocer algo nuevo en ella; su rostro, el cual siempre emanaba calma y amor, mostraba una mezcla de enojo y tristeza que desembocaban en las mas grande decepción. Preferí que me odie a vivir con el miedo a perderla. Dejarla ir se llevó lo ultimo que me quedaba de alma, la cual siempre le pertenecerá. Siempre.
Solo una vez me atreví a observarla. Se veía tan bella como siempre, con su mente en mil cosas como de costumbre. Una vez mas, me encontré enamorado irremediablemente de ella. Era inevitable.
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El universo es extraño. Inmenso, constante e impredecible.
La vida siempre toma el curso que le vamos dando a medida que avanzamos.
El destino no es algo escrito, es un camino que se va pavimentando con cada paso que damos.
La tristeza puede desembocar en una mala noche y poco descanso. Poco descanso puede desembocar en una mala mañana. Una mala mañana en un mal día. Un mal día en un confrontamiento con algún desconocido. Aquel confrontamiento en pensar sin pausa en muchas cosas. Pensar sin pausa en muchas cosas en perder por un momento el control. Perder por un momento el control en un accidente. Un accidente en una trágica perdida. Esa trágica perdida en lágrimas y dolor. Un dolor tan grande como el universo mismo.
La recordaré como el ser mas inmenso, puro y maravilloso de este y otros universos, su vida como el instante mas significativo tanto en mi vida como en la de muchos. Su pasión, su carisma, su fortaleza, algo increíblemente inigualable. La amaré eternamente, porque su amor será eterno. La pensaré hasta el fin de mis días, porque ella será eterna.
Lamentaré hasta mi último aliento el haberla alejado. Quizá a mi lado la hubiera podido proteger de los males mas feroces y también de los mas mundanos. Lamentaré que, a pesar de mis conocimientos y poderes, no haya podido hacer nada para evitar que su vida terminara en aquel manojo de metal retorcido.
Lamentaré haber llevado tantos años dedicados al estudio de aquello que compone cada parte de un cuerpo e incluso las muchas maneras de salvar una vida, para que la única vida que quise proteger se escape de entre mis dedos.
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