Camila POV
Renan se durmió rápido y Lauren se levantó para llevarlo al cuarto de él, volvió para la sala y se sienta al lado mío.
- ¿Quieres hablar sobre lo que paso ayer?. –me mira y bajo mi mirada a mis manos. –Como mujeres adultas.
- No tenemos nada que conversar Lauren, nosotras nos besamos y...
- Me gusto. –dice y se aproxima un poco mas a mi. –Me gusto y mucho, pero no quería que nuestra amistad cambiara.
- No va a cambiar a causa de un beso. –Lauren aproxima su rostro al mío.
- ¿Y por uno mas?. –toca mi rostro.
- Tampoco. –coloca sus labios sobre los míos, en pocos segundos nuestras lenguas ya se estaban tocando, coloco mis manos en su cintura y la aprieto.
Lauren aleja sus labios de los míos y comienza a besar mi cuello, me da una pequeña mordida y vuelve a besar mis labios.
Llevo una de mis manos a su cabello y lo tiro, no muy fuerte y Lauren sonríe. Paso mi mano por el lateral de su cuerpo y ella se sienta sobre mi muslo, mis manos van a su muslo desnudo y subo por dentro de su vestido parando en su culo y lo aprieto.
Mi celular comienza a sonar y nos separamos, lo tomo, veo que era Dinah y miro a Lauren.
- Contesta. –Susurra y contesto.
- ¿Qué pasa?
- Camila, mañana no tienes que venir, el restaurante no va abrir.
- ¿Por qué?
- Hubo un accidente en la cocina y se quebraron muchos platos, vamos a comprar más mañana.
- ¿Me llamaste solo para eso?
- Necesito que vengas aquí en... espera, ¿estas cogiendo con alguien?
- ¿Qué? ¡No!
- ¿Con quién? ¿Con Jauregui?
- No Dinah, no es nadie.
- Estoy segura, chao Camila.
Dinah cuelga y Lauren suspira.
- Creo que mejor paremos por aquí. –habla al percibir que el volumen en mi pantalón comenzaba a crecer.
- También lo creo. –Lauren sale de mi regazo y se sienta al lado mío.
- Hm... ¿quieres comer algo?. –me mira.
- Ya son las diez, creo que es mejor que me vaya.
- ¿Siempre que nos besemos vas a huir?. –pregunta.
- No estoy huyendo.
- Parece que sí. –me mira seria. –Ayer fue lo mismo.
- Pero ayer yo... –me quedo cayada.
- Esta bien, vamos con calma. –Lauren se levanta y arregla su vestido.
- Igual creo que es mejor que me vaya. –me levanto.
- Oh cierto, ¿puedo preguntarte una cosa?
- Claro. –sonrió.
- ¿Eres donadora?
- ¿Donadora de qué?
- De espermatozoides. –explica. A mi no me gusta hablar sobre eso, no es que me de vergüenza, era mas por ser algo personal.
- No, ¿Por qué?
- Por Nada. –sonríe.
Lauren POV
Días después...
Camila había desaparecido, no daba señales ni nada, no venía aquí hace cuatro días. Renan y Alana estaban medio mañosos porque veían a Camila todos los días y ahora ni se oía el nombre de ella.
Estaba dispuesta a averiguar quien era el donador, porque me estaba incomodando el tener dos hijos y no saber quien era la persona, quería solo saber su nombre.
Estaba frente a la clínica de inseminación artificial, respiro profundo y entro, voy hasta la recepcionista y ella me mira.
- ¿En que puedo ayudarla señora Jauregui?
- Quería saber quien era el donador. –hablo directa.
- Usted necesita llenar estos papeles. –me entrega. –Cuando termine venga aquí y le entregare los documentos de pacientes y donantes. –afirmo con la cabeza.
Después de firmar, la mujer me entrega un documento y comienzo a buscar mi nombre.
"Paciente Lauren Jauregui – Donador Karla Estrabao"
- ¿Karla? ¿Una mujer?. –pregunto mirándola.
- Las personas intersexuales son mas comunes en ese ramo del que usted imagina señora Jauregui. –explica.
- Ah sí...
- ¿Quiere el número de ella en caso de que quiera comunicarse?
- No, gracias. –sonrió. –chau. –me giro y salgo.
Voy caminando y choco con alguien, miro a la persona y veo a Camila con una gorra floreada volteada hacia atrás, un pantalón negro y una blusa blanca que muestra su estómago.
- ¿Camila?. –hablo sorprendida.
- Hola Lauren. –sonríe forzadamente.
- Ya no vienes a mi casa. –hablo intentando no demostrar que extrañaba que fuera.
- Necesitaba salir de Miami por unos días, perdí mi celular en el aeropuerto. –dice
- ¿Enserio?. –ella afirma con la cabeza. –Los gemelos te extrañan, han estado mas mañosos que nunca. –ella sonríe.
- Acabo de ir para por tu casa, pero el portero me dijo que habías salido.
- Vine a la clínica a ver unos documentos. –explico.
- ¿Cómo han estado Alana y Renan?
- Bien. –nuestras miradas se cruzan haciendo crecer una sonrisa en los labios de ambas.
- ¿Con quién los dejaste?
- Con Normani, ella se quedó en la cafetería con ellos mientras yo venía a aquí, ahora voy a buscarlos, ¿quieres venir?
- Claro. –ella sonríe.
(...)
- ¡Hola!. –Camila habla animada, Renan al verla se anima y comienza a sonreír pidiendo que lo tome. –Hola mi amor. –lo coge y besa su mejilla.
Alana mira a Camila con la cara enojada igual a la mía y extiende los brazos, la tomo y se la entrego a Camila.
- ¿Puedes tomar a los al mismo tiempo?. –pregunto y ella afirma con la cabeza.
- ¿Encontraste a Camila perdida por ahí?. –Normani pregunta con una sonrisa maliciosa.
- No es nada de eso, choque con ella saliendo de la clínica.
- ¿Descubriste el nombre del donador?. –cambia de tema Normani.
- Donadora.
- ¿Cómo?
- Parece que ser intersexual no es tan raro como dicen. –ella levanta la ceja y me mira.
- ¿Cuál es el nombre?
- Karla Estrabao.
- Nombre fuerte. –comenta. –¿Vas a buscarla?
- No, yo solo quería saber el nombre para quedar mas clara. –levanto los hombros.
- ¿Te mostraron una foto o algo?
- Apenas tenían mi nombre y el de ella.
- Que mala suerte. –comenta, sonrió al oír la risa de Alana, miro y veo a Camila sonriendo para ella haciendo una cara graciosa.
- ¿Ya tuvieron sexo?
- Casi, dos veces, la primera ella literalmente huyo de mi y la otra tu enamorada interrumpió y ella huyo de nuevo.
- ¿Cuál es el problema de ella?. –pregunta. –Lauren Jauregui toda ofrecida para acostarse con ella, y ¿ella simplemente huye?
- Parece que mis encantos no la afectan. –bromeo.
- Al parecer o tú la asustaste. ¿Sera que es virgen?
- ¿A los veintisiete años virgen? Yo creo que no. –ella ríe.
Vamos donde esta Camila y mis hijos, algunos minutos después ella los coloca en el carrito y se sienta a mi lado.
- Camila, ¿Tu y Lauren están juntas?. –Normani le pregunta y Camila ríe, la miro y acabo sonriendo.
- Juntas como amigas sí.
- Ah sí. –Normani dice y yo la fulmino con la mirada.