Jimin caminaba con el celular pegado a su oreja, mirando de un lado a otro buscando a su hermanito. Pronto le vio, frente a un chico de su estatura, Jungkook se mostraba serio, incluso parecía aburrido, frente al chico que hablaba energéticamente, casi gritando -¡Ya le vi! Ahora vamos. –y colgó.
El de grandes mejillas fue corriendo hacia su hermanito, sin borrar su sonrisa » ¡Jungkook! –los dos menores voltearon, y el otro chico se marchó no sin antes pegarle con algo de fuerza en la espalda del nombrado. Kookie avanzó hasta su hermano mayor, acomodándose la mochila al llegar a su lado- , ¿Cómo te fue hoy?
-Horrible, como siempre. –respondió desganado, y Jimin negó.
-Con ese tipo de respuestas vas a hacer que sigan creyendo que eres emo. –le recordó.
-¿Y eso es un insulto?
Jimin no supo que decir, por lo que frunció su ceño, caminando junto a su hermanito, que ni lo parecía. Algunas veces hablaba con más frialdad que Yoongi, y a pesar de ser un bebé (como él le decía) le había escuchado decir malas palabras que incluso él desconocía su significado, seguramente las había aprendido en la escuela, o por parte de su hermano mayor. Ambos avanzaron entre la multitud de estudiantes hasta llegar a la puerta principal, donde Tae les esperaba -¿¡Por qué tardaron tanto?! ¿Dónde estabas Kookie?
-Nos estábamos poniendo de acuerdo para un trabajo colaborativo. –les contó mientras salían de la escuela, y como tenían haciendo desde hace pocos años anteriores, se encaminaron solos hacia el restaurante de su padre.
-¿Para qué materia?
-Matemáticas.
-Iugh. –se quejó Tae.
-Cállate, las matemáticas son geniales.
-Claro que no lo son.
-¡Sí lo son! La mejor materia del mundo.
-Estás loco Jimin.
-¡Tú estás más loco Taehyung!
Jungkook solo suspiró, acomodándose la mochila. Siempre era así, por lo que ya estaba acostumbrado –Sí Yoongi hyung estuviera aquí les hubiese pegado en la cabeza.
Los de 15 llevaron una de sus manos a su nuca, acariciándolas como si realmente hubiesen recibido un golpe. Kookie rió al verles hacerlo al mismo tiempo.
-Auch, aunque a veces lo extraño –habló Tae, deteniéndose junto a sus hermanos en la esquina de la calle para esperar a poder cruzar-, era divertido cuando los cinco íbamos a la misma escuela.
-Sí –Jimin recordó-, era gracioso que le temieran tanto a Yoongi hyung.
-No mucho, algunos no quería ser mis amigos cuando se enteraban que era su hermano. –Taehyung dijo, entrelazando su mano con la de Jimin al igual que Jungkook, ya que el cachetón tomaba siempre sus manos cuando atravesaban la calle.
Llegaron al otro lado, y Kook agregó -Conozco gente que considera Kim Yoongi como una mala palabra.
Eso provocó que los tres rieran –Oye Kookie, Tae y yo pensamos en convencer a nuestros appas de que nos dejen venir en bicicleta a la escuela, ¿No te gustaría? Queda mucho más cerca ahora en nuestra nueva casa.
El menor se emocionó -¡Sí! –por alguna razón, le entusiasmaba la idea de imaginarse a los tres llegando a la escuela en sus bicicletas, algo que nunca habían hecho anteriormente- ¡Hay que decirles!
Jimin estaba por decirle lo que tenían planeado cuando Tae gritó -¡CORRAN! –se fue corriendo tan rápido como pudo, y solo entonces los otros dos notaron que intentaba alcanzar el camión que estaba aún detenido en la parada. Jimin tomó la mano de Jungkook antes de correr, y los tres lograron llegar a tiempo entre risas, pagando su boleto antes de sentarse, Taehyung al lado de Kookie, y Jimin atrás de ellos. Pronto se hallaban escuchando al de sonrisa cuadrada, quien hablaba con energía sobre cómo habían planeado él y sus amigos una pequeña pelea, aventándose bolas de papel mientras intentaban que el profesor no les descubriera. Su anécdota causaba carcajadas a sus hermanos, risas que llamaban la atención de varias personas y que molestaban a algunos, pero intentaban calmarse pensando que solo era unos adolescentes jugando.
*****
-No tenías que esperarme.- fue lo que dijo Yoongi al llegar a la puerta principal de su escuela, arrancando los auriculares de Hoseok, asustándole.
-¡Hola hyung! –el menor le ignoró y se puso de pie, guardando su celular y demás cosas que tenía fuera en su mochila-, ¿Otra vez el maestro alargó su clase?
Yoongi asintió –Debería conseguirse un nuevo oído para que escuche las campanadas y nos deje ir.
-No sé queje, hyung –los dos imitaron a los demás estudiantes saliendo de su escuela para encaminarse también hacia el trabajo de Seokjin, solo que ellos debían tomar el tren subterráneo-, hoy tengo mucha tarea de física, ya quiero que se acaben las clases.
-Ya casi se acaban Hobi, ya casi.
Caminaron un momento en silencio, y sin saber que sus hermanitos también se habían acordado de ellos, Hoseok mencionó –Casi puedo ver a Tae, Jimin y Kookie corriendo conmigo, y usted solamente gritándonos que le esperáramos. –rió, al igual que Yoongi.
-Ni me lo recuerdes, te juro que la primera vez que les deje solos, cuando solamente yo estaba en esta escuela, pensé que se perderían porque ustedes solo corrían al ver un camión, sin saber si era el que debían tomar o no.
Hoseok soltó una carcajada, asintiendo, pues él llegó a pensar lo mismo, pero por suerte no había ocurrido. No volvieron a hablar hasta que estaban sentados uno al lado del otro en el tren, ambos con celular en mano, uno hablando con sus padres para avisarles que ya iban en camino, mientras que el otro recibía emoticones de una chica. Hobi rió, llamando la atención de su hermano mayor, notó los corazones, y rodó los ojos.
-Guarda el celular. –le pidió Yoongi, mientras él guardaba el suyo.
-Ah, hyung, espere –mandó un mensaje, y entonces obedeció-. Yoongi hyung, estoy feliz, pronto vendrá a Seúl.
-Wuhu. –fingió celebrar, y Hoseok le pegó en el brazo, riendo.
-No seas así hyung, Suyun está ansiosa por ver a todos.
Yoongi se recargó cómodamente en su asiento, recordando cuando creyó haberse librado de esa niña. Unos seis años atrás, más o menos, la niña tuvo que irse a un lugar lo suficientemente lejos como para que él pensara que era cuestión de tiempo para que ambos dejasen morir un poco su amistad, pero vaya que se equivocó, pues olvidó por completo al maravilloso Internet, lo que logró hacer que Hoseok y Suyun continuasen siendo amigos a pesar de la distancia.
» Las vacaciones se acercan, así que pasara el verano con sus tíos y primos, ¿¡No es genial!? Falta poco. –Yoongi asintió, escuchando la voz emocionada de su hermano. Debía recordarse que ella era su mejor amiga, y por lo tanto, tenía que comportarse, y dejar de sentirse incómodo con su presencia. Era algo inmaduro, pero no podía dejar de sentirse así a pesar de que habían pasado muchos años de conocerle.
-Despiértame cuando lleguemos.- pidió, riendo cuando Hoseok comenzó a reclamarle porque quería hablar con él y no podría hacerlo si se dormía.
*****
-¿¡Son tus hijos?! –preguntó asombrada una mujer, amiga de la adolescencia de Seokjin. Se saludaron, y ella no pudo evitar sentirse completamente sorprendida cuando dos muchachos llegaron abrazando al adulto, llamándole appa.
-Dos de cinco –le dijo, riendo cuando la mujer se vio aún más choqueada-, ¿Verdad que son guapos? Y están tan grandes.
-¡Appa! –Hoseok se avergonzó, mientras Yoongi solo negaba con su cabeza, divertido por la expresión de la mujer.
-Me alegra que llegarán bien, vayan adentro a hacer su tarea que hoy nos iremos temprano.
Hoseok asintió, despidiéndose de la mujer con un movimiento de mano, y Yoongi se acercó a su padre antes de irse -¿Ya llegaron los demás? –Jin asintió, apuntando hacia el segundo piso para darle a entender que estaban ahí- Ah, ¿Appa Nam vendrá a casa? Me dijo que tenía mucho trabajo. –habló.
-No lo sé, le hablé hace rato y me dijo que haría lo posible, pero tal vez no pueda –le respondió con una mueca-, le llevaremos comida cuando vayamos a casa, apuesto a que no comerá algo.
Yoongi asintió, recordando que si su padre tenía mucho que hacer en la compañía no le dejaban poner un solo pie fuera, y no tenía tiempo para comer.
El peli negro finalmente se fue no sin antes quejarse porque su padre le despeinó, yéndose a paso apresurado hacia donde sus hermanos. Seokjin le miró riendo, y cuando regresó su atención a la mujer, soltó una carcajada al darse cuenta de que seguía sorprendida. Le divertía que la mayoría de personas reaccionaban así al saber que estaba casado con Namjoon, que tenían cinco hijos, todos ellos mayores a los diez años. Jin volvió a mirar hacia donde estaban, escuchándoles ya soltar carcajadas, las de Hoseok escuchándose más fuerte que el resto.
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Cortito <3
Me alegra volver a actualizar y a escribir, uf, y tengo muchas ganas de escribir terror así que tal vez haga un one shot, o algo así, jeje.
Oh, quería responder esta duda. Muchos me preguntan si habrá incesto, y pues, no. Al igual que en la primera temporada habrá "momentos", "guiños" a ships, pero nada más que amor de hermanos.
La verdad es que igual a mí me gusta leer fics de ese estilo, hay historias lindas y bien escritas por ahí, pero de vez en cuando. No me gustaría hacer eso en este fic, se me hace muy lindo dejarles como hermanos.
Oh, y esto es Namjin, así que no piensen que dejaré el ship de lado, todavía tendrán sus hermosos momentos de pareja feliz, con cinco morros adolescentes casi encima de ellos y quejándose de mil cosas, pero siendo felices ¡Viva el Namjin! *avienta confeti*
Listo, good night y perdón a quienes afecte en su horario de dormir con esta actualización, recuerden que les quiero <3 <3
Gracias por leer <3