INEFABLE © 2018 (sin editar)

By wanderhrts

187K 15.8K 5.7K

La vida en el año 2089 ha cambiado completamente. Todo ha evolucionado, y no solo la tecnología y la ciencia... More

NUEVA VERSIÓN INEFABLE?
Nota de autora
REPARTO
| Book tráiler |
Prólogo| Dr.Smith
Capítulo 1| Encontrada
Capítulo 2 | Pura ciencia
Capítulo 4| Distintos
Capítulo 5| Triste pasado
Capítulo 6| Conociéndolo todo
Capítulo 7| Cruda realidad
Capítulo 8| Pruebas
Capítulo 9| Poderosa
Capítulo 10| Comportamientos extraños
Capítulo 11| Verdad o reto
Capítulo 12 | Un plan necesario
Capítulo 13 | Querer sin poder
Capítulo 14 | Inmune
Capítulo 15 | Juntos en todo
Capítulo 16| Valentía
Capítulo 17| Invasión de recuerdos
Capítulo 18| Grupo de rebeldes
Capítulo 19| No, por favor, no.
Capítulo 20| Planes para el futuro
Capítulo 21| Enfrentamiento
Capítulo 22 | Caos
Capítulo 23 | Sorpresas
Capítulo 24 | Inesperado
Capítulo 25 | En acción
Capítulo 26 | Vamos a jugar
Capítulo 27 | No seguimos órdenes
Capítulo 28 | Intenso
Capítulo 29 | Una lucha continua
Capítulo 30 | La libertad cuesta
Capítulo 31 | Un respiro
Capítulo 32 | Noah
Capítulo 33 | Corazones tranquilos
Capítulo 34 | Motivación
Capítulo 35 | Heridas abiertas
Capítulo 36 | Miedo
Capítulo 37 | La verdad
Capítulo 38 | Transparente
Capítulo 39 | Ellos
Capítulo 40 | Apagados
Capítulo 41 | Oscuridad
Capítulo 42 | Un aura peculiar
Capítulo 43 | Desesperación
Capítulo 44 | Palabras cálidas
Capítulo 45 | Tensión
Capítulo 46 | Inteligente
Capítulo 47 | Indomables
Capítulo 48 | Inevitable
Capítulo 49 | Dolor
Capítulo 50 | Inmarcesible
Capítulo 51 | Conexión
Capítulo 52 | Vuelta a la CDI
Capítulo 53 | Explosión
Capítulo 54 | Original
Capítulo 55 | La teoría
Capítulo 56 | Sangre oscura
Capítulo 57 | "Lo siento"
Capítulo 58 | Minutos
Capítulo 59 | Apoyo
EPÍLOGO
Agradecimientos
Preguntas y respuestas
Especial | Tipos de inteligencia
EXTRA | Noah Ross
ECDMD | SPAM 1
TRILOGÍA MENTES | SPAM 2

Capítulo 3| Familiares especiales

4.3K 378 288
By wanderhrts


Mientras caminaba, el silencio entre la chica la cual se llamaba Lucy y yo, se volvió incómodo. El camino pareció ser largo, solo íbamos por pasillos sosos llenos de guardias, y que de vez en cuando aparecían algunas personas distintas sin cargar con ellas armas.

Mientras aún caminábamos escuché varios gritos.

-¡Dejadme!¡Capullos!¡No hice nada!-ante nuestros ojos hubo una escena en la que un chico estaba siendo sujetado por dos guardias y dos médicos les estaban acompañando.

Los ojos castaños del chico, me miraron con frialdad.

-Ah, típico de él-murmuró Lucy a mi lado. Se giró y continuó caminando.

-¿Por qué lo dices?¿Quién es él?-pregunté con curiosidad. Ante nosotras apareció una enorme puerta. Lucy puso su dedo sobre una máquina que había al lado para reconocer su huella dactilar y tras el sonido de un pitido, la puerta se abrió y entramos en ella-¿Hizo algo malo?-inquirí ante su silencio.

-Ese es Noah Ross. Tiene telepatía. Es el único poder difícil de controlar aquí, los efectos de nuestras medicaciones no le hacen mucho efecto, y a veces se la pasa leyendo los pensamientos de los demás-explicó sin expresión alguna.

-¿Y cómo podéis saber que hacer eso?

-Porque oímos a su compañero quejarse.

La zona en la que estábamos era distinta. Tanto el suelo como las paredes eran grises, de cemento. Me recordaron a la habitación en la que estuve una hora atrás. Después de varios pasos, paramos enfrente de una puerta de metal.

-Ésta es tu habitación-aclaró-La hora del desayuno será en pocas horas. Aprovecha para asearte y descansar. Tu ropa está lista en tu cama-me dio una sonrisa por primera vez desde que la vi, y se marchó dejándome sola.

Cogí una bocanada de aire intentando relajar mis músculos. Llevaba varias horas tensa. Toqué el botón blanco que había al lado de la puerta, y ésta se abrió de inmediato.

Entré en la habitación, y la puerta se cerró. No había nadie en el lugar. El cuarto era espacioso y las paredes al contrario que las exteriores, eran de color blanco puro; había dos camas separadas junto a dos mesitas de noche, una estantería llena de libros, una televisión plasma pegada a la pared, y otra puerta, la cual se encontraba cerrada

Me acerqué a la cama que estaba bien hecha, ya que la otra estaba desordenada. Suponía que era la de mi compañera. Me senté y cogí mi nueva ropa, era una camiseta azul turquesa junto a un pantalón chándal de color gris. Lo dejé a un lado y miré mis manos entrelazadas. Toda esa situación me hacía sentir extraña, eran tantas cosas nuevas...Jamás había pasado por algo parecido.

Yo era una adolescente normal. Recién había cumplido los dieciocho. Era conocida en mi instituto, tenía varios amigos y a casi todos les caía bien. Mis notas en matemáticas y en ciertas asignaturas como psicología y filosofía, eran las más altas de mi curso. Iba a una academia prestigiosa de baile contemporáneo y cada fin de semana competíamos con otras academias. Leía, dibujaba, y de vez en cuando, hacía maratón de series de Netflix junto a mis mejores amigos: Lydia y Damon.

Mi vida era sencilla y agradable. Nunca tuve problemas. A excepción de la muerte de mis padres a mis tres años. Aquello me sumió en una tristeza profunda con tan sólo tres años de edad. Era curioso, porque a esa edad tenía la mente más madura que el resto de niños. Comprendía las cosas a la perfección, y pensaba en las cosas antes de hacerlas.

Mi tía, sorprendida por mi inteligencia, me llevó a una psicóloga para que me hiciera un test de coeficiente intelectual. En ese entonces, tenía 9 años. Y el resultado dejó a todos boquiabiertos. Mi resultado fue un 132. Lo normal era de 90 a 110. Y de 130 para arriba, era prácticamente, ser superdotada. Pero mis tipos de inteligencia se limitaban solo en la matemática y la emocional. En lo demás, era normal. E incluso había veces que me costaban determinadas asignaturas como biología y química.

Suspiré pensando en aquello. Mi inteligencia superior tenía una explicación. Y era el cómo funcionaba mi cerebro. Usaba un mayor porcentaje de mi capacidad cerebral, y eso hacía que tuviera telequinesis.

El sonido de la segunda puerta abriéndose me llamó la atención, y miré en su dirección. Una chica alta, con la misma ropa que tenía reposando en la cama, y con el pelo pelirrojo mojado, apareció delante de mí. Me miró con sus ojos color esmeralda, llenos de curiosidad. Tras unos segundos, alzó la cabeza a la vez que fruncía sus labios.

-Anda. Eres nueva-comentó.

-Sí-respondí y la sonreí.

La pelirroja me devolvió la sonrisa.

-Me llamo April Davis, encantada. ¿Cómo te llamas?-preguntó mientras se sentaba en su cama.

-Reese Haynes.

-Vaya, tu nombre me suena. ¿Hija de Eleanor y Liam Haynes?

Alcé las cejas sorprendida.

-Sí. ¿Los conoces?

-Fueron los primeros inefables en existir.

Mis ojos se abrieron de par en par. Me levanté de la cama y ella hizo lo mismo. Me miró con extrañeza.

-¿Qué?-murmuré en voz baja.

No me lo creía. Mis padres también eran como yo. Y jamás me enteré de ello hasta aquel momento.

-Sí. ¿No lo sabías?¿No te lo han dicho?-dijo cruzándose de brazos. Negué lentamente con la cabeza-No me esperaba que Eleanor y Liam fueran así.

-¿Co-cómo los conociste?-tartamudeé nerviosa.

-Los conocí de pequeña-contestó mirando sus manos. Luego volvió a centrar su mirada en mí-Ellos trabajaban en la empresa de mi madre. Y más tarde me contaron que ellos murieron y que por eso habían desaparecido unos meses. Cuando vine aquí, hace apenas unos meses, me enteré de que les habían traído a este centro. Y que al intentar atacar a los demás y huir, les tuvieron que matar.

-No, no, no-negué con la cabeza incrédula-No puede ser. Mi tía me dijo que murieron en un accidente de tráfico. Es lo normal.

-Pero aquí, nadie es normal, Reese-su voz se tornó suave-Supongo que esto te ha desconcentrado por completo. Lo siento mucho.

Tragué saliva. Mi respiración se volvió agitada, y mis ojos se cristalizaron. Me senté en la cama de nuevo, cubriendo mi rostro con ambas manos, y comencé a llorar. Necesitaba sacar el fuego que sentía en mi interior. Nada era como parecía: mi falsa tía, mis padres, y luego yo. Mi vida cambiaba cada segundo.

Sentí como April se sentaba a mi lado y me acariciaba la espalda como señal de consuelo.

-Llora si lo necesitas. Lo mismo me ocurrió cuando llegué aquí por primera vez. Era tanta información que procesar, que no podía soportarlo a la primera.

Suspiré a la vez que limpiaba mis lágrimas con la mano y la miraba.

-¿Qué poderes tenían?

-Tu madre hidroquinesis, y tu padre aeroquinesis-explicó mientras esbozaba una sonrisa de confianza.

Puse mi espalda recta y relamí mis labios. Aún sentía sed.

-¿Me...me lo explicas por favor?-pedí con la voz quebrada.

-No te preocupes, con el tiempo conocerás todos los tipos de poderes mentales que podemos llegar a tener-dijo mirando al frente-No es fácil a la primera, pero se entiende a la segunda-me volvió a mirar-¿Qué tipos de inteligencia tienes?

Su pregunta me sorprendió.

-¿Eh?

-Los inefables solemos tener un alto coeficiente intelectual. Pero cada uno tiene un tipo de inteligencia distinto. Yo tengo la inteligencia lógica-matemática, pero en el ámbito científico, no en el matemático. También tengo memoria fotográfica.

-Vaya-susurré-Yo... tengo la lógica-matemática, pero no en el ámbito científico sino en el matemático—April rió—, y la inteligencia emocional—continué.

-La inteligencia emocional me encanta-dijo en tono alegre-Sin embargo, no he tenido la suerte de tenerlo. Con esa inteligencia logras controlar tus emociones y tu sentido de intuición es demasiado alto. Me serviría mucho en la atmoquinesis.

Fruncí el ceño.

-Vale, mira, te explico desde el principio. Hidroquinesis, el control del agua; aeroquinesis, el del aire y atmoquinesis, el mío, es el control con la mente sobre el tiempo atmosférico. Puedo provocar una tormenta, lluvia, nieve, etc con mi mente. Y hay ocasiones en las que mis emociones me juegan en contra y me sale sin pensar. Pero ahora ando controlada gracias a las medicaciones que me administran cada mañana. Nos quitan ese efecto solo en los momentos de experimentación y demás.

-Tu poder es sorprendente-hablé después de unos minutos callada.

April volvió a sonreír y yo la imité.

-Todos lo son, Reese.

-Me hubiera gustado saber que mis padres eran así con anterioridad-comenté mirando mis manos-Porque, de saber eso, no lo hubiera pasado tan mal al descubrir mi poder.

-Ya, te entiendo-dijo con tristeza-La forma en la que descubrí mi poder, llegó incluso a matar a la persona más importante en mi vida.

La miré con los labios entreabiertos. Fruncí mis labios intentando pensar en cómo preguntar sobre aquello, pero me encontraba bloqueada. ¿Qué?

-Sí, Reese. Maté a mi novio. Al chico que amé desde el primer curso.

Continue Reading

You'll Also Like

44.6K 3K 39
Cuando aquel pasado que desconoces se abre ante tus ojos, debes aceptar el juego en el cual ambos estan dispuestos a participar. Y a aprovechar la op...
63.5M 6M 111
¿Qué harías si una noche encuentras a un chico semi desnudo y cubierto de sangre en tu patio? ¿Qué harías si es atractivo, pero también es perturbad...
14.6K 625 27
¿Te atreverías a arriesgar tu vida por la de tus seres queridos? ¿De ver cosas que jamas viste? Esta es la historia de una chica que se muda con su p...
10.7K 1.4K 29
La sociedad ha evolucionado, el ADN de los seres humanos a mutado, de tal forma que al llegar una edad específica se designa un «rango» del cual pued...