Capítulo 40 | Apagados

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Aclaro una cosa. "Sombra", es un sustantivo femenino. Pero sin embargo, con los chicos pongo "Los sombra", ya que para las chicas, diré "Las sombras". De manera que se entienda mejor el género.

 De manera que se entienda mejor el género

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Narra Reese

El día pasó con total tristeza y preocupación.

Apenas hablamos. Todos estábamos apagados.

Tras lo ocurrido con los sombras, nos alejamos del lugar sin apenas mirarnos mientras cargábamos con el cuerpo sin vida de nuestro amigo.

Nathan. Me rompía el corazón no volver a verle, ni oír su voz. A pesar de que no pasamos tanto tiempo juntos, le había cogido cariño.

Al llegar a nuestro destino, decidimos enterrar a Nathan, de una forma que resultase respetuosa y digna de recordar su última lucha.

La lucha en la que se esforzó, ya que él estaba destrozado. Nathan ni sabía controlar su poder, ni se encontraba bien. Pero sin embargo, luchó. Lo intentó. Y lo logró.

Entre todos excavamos en la tierra muy lejos de la cabaña, en medio del bosque, con unas palas—que encontramos en la cabaña de Connor—, y al finalizar, enrollamos a nuestro amigo con una manta y lo enterramos.

Fue duro esa pequeña acción. Derek lloraba en silencio, y fue quien más pena me dio. Era el mejor amigo de Nathan. Desde que se conocieron en la CDI, jamás se separaron, según me contó Malcom.

Y April también se encontraba bastante triste. Suponía que era porque Nathan le gustaba (además de que eran amigos). O le gustó. Tampoco sabía con exactitud sus sentimientos, ya que apenas tuvimos oportunidad de hablar sobre el tema.

Malcom, quien también estaba muy unido a él ya que fueron compañeros de habitación en la CDI, no articuló palabra alguna desde su muerte. Aquello le marcó tanto como a Derek.

Los demás, simplemente intentaban distraerse y consolarles. Era lo único que podían hacer

Tras enterrar a Nathan—todos sumidos en un silencio respetuoso y a la vez triste—, rodeamos su tumba con flores. Fue idea de Noah, quien pensó que la mejor manera de darle las gracias por su valentía, era decorar su tumba.

Minutos después, su lugar estaba cubierto de flores de distintas especies que encontramos en el bosque, y piedras que circundaban su refugio.

Todos, parados a su alrededor, observamos como Malcom cogía una rama delgada que había encontrado en el suelo, y trazaba:

Valiente

Segundos después, Derek le quitó la rama para garabatear a su vez:

Héroe

Los demás—incluida yo—los imitamos escribiendo adjetivos que describían a Nathan: amigo, fiel, fuerte, leal, hermano... De modo que su tumba estaba rodeada de palabras.

INEFABLE © 2018 (sin editar)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora