—Ya se va a hacer tarde, bebé —recordó JungKook —Debemos irnos.
TaeHyung frunció el ceño con indignación y sin pensarlo se lanzó contra el alfa haciendo que juntos cayeran pasto mojado. Rieron como niños mientras se ponían a jugar, forcejeando quién iba arriba de quién y haciéndose pequeñas cosquillas en el estómago.
—No es justo —se quejo TaeHyung entre risas —Aún tenemos un poco de tiempo...
El omega enredo sus piernas contra las caderas del alfa y en un movimiento rápido se posicionó de manera definitiva sobre JungKook, arqueando un poco la espalda, mirando con orgullo y burla al pelinegro.
—Gane —dijo con malicia —¿Cuál será mi premio?
JungKook carcajeo y alzando su cuello beso de manera rápida el cuello del omega, succionando lo justo para dejar una marca en la acaramelada piel del omega.
—¡JungKook, me las pagaras por esto! —exclamó de forma dramática el mayor.
El jugueteo de a poco se empezó a convertir en caricias y las risas en besos robados que cada vez eran más necesitados. Por instinto JungKook metió sus manos por dentro de la ropa del omega, acariciando su suave piel sin tener ninguna tela de por medio mientras TaeHyung pasaba sus dedos por los musculosos brazos del alfa, tanteando su espalda y acariciando todos los lugares correctos, como si ya supiera el cómo complacer de mejor forma al pelinegro.
Sin darse cuenta entre tantas caricias el rubio movió su cadera, rozando su entrepierna con la del pelinegro, experimentando un escalofrío de placer que encendió todo su cuerpo.
—JungKookie —susurró algo avergonzado y, sin ser del todo consciente de las reacciones de su propio cuerpo, volvió a mover sus caderas, sintiendo algo duro chocando contra sus partes íntimas —Yo...
Los ojos de TaeHyung se abrieron de par en par al notar como su alfa imitó el acto, con los ojos cerrados y moviendo de igual forma sus caderas, friccionando de esa manera tan adictiva sus cuerpos.
—JungKoo-
TaeHyung no pudo seguir hablando cuando el pelinegro ya lo tenía tomado de la cintura. Cambiando las posturas para posicionarse sobre el omega guió un vaivén parecido al de una danza y al mayor le fue imposible el seguir tratando de acallar esos pequeños gemidos de placer que escapaban por su garganta, con su voz algo rota mientras le facilitaba el trabajo a su alfa y abría sus piernas, restregando sus miembros por sobre la ropa.
—Alfa —susurro —se siente muy bien...
—Mi omega... —llamó JungKook tomando del cuello al rubio para besarle con mayor lentitud, sin dejar de dar investidas por sobre la ropa que el mayor fue correspondiendo de a poco, algo inseguro de poder seguir de manera correcta el ritmo —Mi TaeTae...
Los dos eran nuevos con este tipo de sentimientos, ninguno sabía de verdad que estaban haciendo asi que guiándose solamente por sus instintos deslizaron sus pantalones lo suficiente para que sus miembros se rozaran sin el impedimento de la ropa.
TaeHyung posiciono sus manos contra los hombros del pelinegro, apretando estos con fuerza como reacción ante el placer, JungKook no pudo aguantar más y sacó sus manos de las caderas del omega para ponerlas en el expuesto miembro de TaeHyung, masturbando este con insistencia pero cuidando no dañarlo.
—JungKookie... —susurro TaeHyung y luego imitó el acto del menor, poniendo su mano contra la erección de este, casi ronroneando ante la satisfacción que sintió al notar como JungKook reaccionaba ante el estímulo, soltando pequeños gruñidos y siseando su nombre.
Al omega le encantaba complacer a su alfa.
JungKook abrió los ojos y miró a su amado, sus mejillas rojas, labios entreabiertos, sintiendo su cuerpo temblar bajo el suyo, completamente a su merced.
Y eso era simplemente lo más hermoso que había visto en toda su vida.
Se sentían extasiados ante el placer, masturbando el miembro del contrario con las manos en sincronía y las respiraciones aceleradas. TaeHyung acercó su rostro, besando los labios de su amado con insistencia, provocando un juego entre sus lenguas.
—Te amo, TaeTae —susurro contra los labios del mayor, moviendo con más ímpetu su mano —mierda, te amo tanto...
Sintió su vientre cosquillar y su pene palpito, en espera de su liberación, beso el cuello de TaeHyung mientras una corriente cálida y placentera envolvió su cuerpo y soltando un gruñido bestial se corrió de forma poderosa, aun cuando ni siquiera se habían quitado toda la ropa.
—Alfa —gimió TaeHyung y JungKook se sintió lleno de orgullo al notar cómo el omega también se había corrido.
JungKook no respondió al instante, besando los labios del rubio con cariño, cuidando no volver a rozar sus ya sensibles partes íntimas para evitar que a TaeHyung le pudiese llegar a doler.
—Te amo, omega mío —Aseguró cerrando los ojos con cansancio, tan encimado en su burbuja de amor que no noto el sol levantándose a la distancia, anunciando la llegada de un nuevo día.
—Y yo mas, mi alfa mimado —Respondió TaeHyung dedicándole una rectangular sonrisa a su amado para luego caer dormido, usando el pecho de JungKook como almohada.
❅
—¿Se puede saber de dónde vienes? —Pregunto Jimin al momento en que TaeHyung apareció en el jardín —Hoseok tuvo que inventarle a Jina que tienes un dolor estomacal y que por eso no saldrás de la habitación. Ahora por tu culpa están en el pueblo comprando medicinas para ti.
El omega bajó la cabeza con el cuerpo tenso, él amaba a Jimin pero debía admitir que cuando este se enojaba lograba asustarlo y más cuando Hoseok no estaba junto a él para calmar a su mellizo cuando este se pasaba de listo, también estaba rezando para que JungKook —quién se encontraba escondido sobre un árbol vigilando que "TaeHyung volviera seguro a casa"— se fuese pronto, no quería que su alfa escuchara como era regañado, eso era vergonzoso.
—Jiminie...
—¡No, TaeHyung! —Grito el beta sobresaltando al omega, sorprendido por la rabia en las palabras del mayor —¡Teníamos un trato!
Jimin no era estúpido, sabía porqué TaeHyung había llegado tarde, podía oler la esencia del alfa sobre todo su cuerpo.
—Yo solo fui a caminar un tiempo —se justifico pero Jimin lo tomó del brazo, deteniendo cualquier excusa.
—Por lo que más quieras no te atrevas a mentirme —gruño —Estás bañado del aroma de ese alfa —grito —¿Acaso no te das cuenta que solo está jugando contigo?
El rubio negó con la cabeza sin atreverse a ver los ojos del beta, cansado de escuchar el mismo discurso en contra del pelinegro.
—¿Acaso no te das cuenta que lo único que quiere es acostarse contigo? —Interrogó tal vez apretando con mucha más fuerza sus manos contra los brazos omega —Te quiere para que seas su puta y cuando se aburra de ti te matara.
No, Jimin no estaba acostumbrado a decir groserías ni a ser tan impaciente pero estaba desesperado, él amaba a TaeHyung y odiaba que este se exhibiera de esta manera, que se dejara tratar de esa forma tan indigna.
Los únicos omegas vivos en Corea eran prostitutos, esclavos sexuales de todas las edades y portes. El sexo era la unica funcion que los alfas pensaban que los omegas tenían, JungKook no era diferente.
—¡Eso no es verdad! —Grito TaeHyung horrorizado —Tú no lo conoces.
—¿Qué cosa no te quedó claro que la historia que contó Jina ayer? Los alfas matan omegas, TaeHyung...
—Lo que me quedó claro es que Jina amo con todo su corazón a una omega —lo interrumpió —que la amo tanto que aun después de todos estos años llora su pérdida.
—Vas a hacer que te maten —gritó Jimin —¡Nos condenaras a todos por tu estupidez! ¿Acaso tanto quieres que ese idiota te joda?
—¿De qué demonios estás hablando?—preguntó TaeHyung para luego hacer una mueca —Ya suéltame, Jimin —pidió —me estas lastimando.
—Si te gusta la idea de ser la puta de JungKook te tratare como una —amenaza, arrastrando al menor a la casa con brusquedad —Es más, le diré a Jina ahora mismo en lo que estás metido, para que ella vea con sus ojos lo que en verdad eres...
Eso era una mentira, nunca traicionaría la confianza del menor de esa forma pero necesitaba que de alguna forma este entendiera, que se sintiera avergonzado de su comportamiento.
Avergonzado por amar.
—Yo que tú soltaría a mi omega en este instante —gruñeron a sus espaldas y TaeHyung no tuvo que darse vuelta para ver quién era, él reconocería la voz de su alfa en cualquier parte —Porque no tengo ningún problema en romperte la cara a golpes, Jimin.