[Séptimo mes de embarazo]
Alec casi se desmaya de la impresión y la angustia de imaginarse a un bebé solo. Algo es su pecho se agitó ante la sola idea, y sus hijos se removieron inquietos.
-¿Alexander? -fue Magnus, como siempre, quien lo sostuvo.
-Tenemos que ir por el niño -Alec parecía no darse cuenta de que él estaba mal- no puede quedarse solo, Esperanza. ¿Dónde está ahora? ¿Qué le sucedió a su madre? ¿Cuántos meses tiene? Quiero verlo, vamos.
-Alexander -la voz de Magnus sonaba firme, mientras lo hacía sentarse-, tú no vas, no puedes salir así, y no debes alterarte, les hace mal a los tres.
-Pero...
Magnus negó y miró a Esperanza.
-Voy a ir yo, ella está en el hospital. Ángela y yo crecimos juntas, somos más que sólo amigas, soy su contacto de emergencia, espero que eso ayude para quedarme al pequeño Rafa.
Rafa.
Alec y Magnus se congelaron un momento, después -incluso cuando entre ellos no lo habían hablado- se miraron con ojos llenos de sorpresa. Sonrieron comprendiendo, cada uno, quién era ese bebé.
* * *
Raziel estaba ahí cuando Esperanza llegó y Ángela murió.
Recibió el alma de la mujer que había cargado nueve meses en su vientre a su hijo, que lo tuvo entre sus brazos dos meses más, aun sabiendo que era temporal, que el bebé era sólo prestado.
Ella había aceptado eso sólo para ayudar al ángel y traer al primer nefilim puro a la Tierra.
-¿Y ahora qué? -preguntó Ángela cuando vio al pequeño Rafa ser entregado a los brazos inseguros de su amiga-. ¿Ella va a cuidarlo?
Estaba arreglado que el niño quedara bajo la custodia de Esperanza.
Raziel negó. -Ella, como tú, sólo es un eslabón que lo acerca a su destino. La pareja que va a cuidarlo, criarlo, y protegerlo es otra.
-¿Estará a salvo? Aprendí a quererlo en este corto tiempo.
La mirada de Raziel se volvió dulce un momento. -Él también te quiere y siempre te recordará, pero su destino es otro, y está por llegar a él. Nadie lo cuidará mejor, ellos son su hogar.
CONTINUARÁ...
Entonces no se sientan mal, la mami biológica de Rafa fue un ángel 😭