Ya tres meses habían pasado y Benjamín me estaba volviendo loca. No tenía vida. Mi día se basaba en cambiar pañales, amamantar, levantarme, calmarlo. No sabía qué hacer, empezaba a pensar si no había sido buena idea rechazar el asunto de la adopción.
En cuanto a la ayuda mi madre me ayudaba bastante, ella ya tenía experiencia. Notaba instantaneamente si el llanto era por hambre, por un cambio de pañal o simplemente por un berrinche de querer mimos. Fran era muy bueno con Benja. Lo tenía en un trance mágico. Cada vez que lo miraba, sus ojos brillaban como dos luceros.
Fran conmigo estaba especialmente cariñoso, cada vez que podia me tomaba por la cintura y me repartía besos por todos lados, me acariciaba y abrazaba. De lo que se la pasaba en mi casa se podría decir que viviamos juntos, y esto es porque estábamos en las vacaciones de verano, no se que hariamos cuando tengamos que volver al instituto y estar tanto tiempo distanciados.
Kendall había venido a visitar a Benja la primera semana. Que descarado, estuvo un dia y ya pensaba que había hecho gran cosa. Luego de eso no hable mas con el; me entere por Jacob que la niña de Summer había nacido la semana siguiente. Y como predije, el estaba a su lado dándole todo lo que necesitaba, mientras yo y mi hijo no las arreglabamos a nuestra manera.
A veces me ponia a pensar que hubiese pasado si no había encontrado a un hombre tan amable como Fran. No habría podido hacerlo sin él.
Benja no paraba de llorar, me estaba poniendo histérica, no sabia que hacer. Estaba muy cansada y hace mucho que no dormía bien.
-MAMA! NO SE QUE HACER! NO PARA DE LLORAR! MI VIDA SE ACABO MAMA, NO PUEDO! NO PUEDO! -Lloraba mientras lamentaba. Hace dos horas que Benja lloraba constantemente, no paraba. Ya le habia cambiado el pañal, y le habia dado de comer; no entendia porque lloraba.
-Ashley! Tranquila! Calmate por favor!
-MAMA NO SE QUE HACER!
-ASHLEY! -Mi madre ya se había puesto nerviosa. -Haber, pasamelo.
Como acto de magia Benja se calló cuando mi madre lo dio vuelta sobre su mano, con mucho cuidado y despacio le fue dando pequeños golpecitos en su espalda. Se escuchaban los pequeños eructitos que salían de su boca. El silencio inundo la sala. Pero de pronto senti como me faltaba el aire, y el llanto volvió; con la única diferencia de que esta vez provenía de mi.
-Mama, no se que hacer; nunca voy a saber como hacer eso. No estoy lista mamá, no se como hacerlo, no se como hacerlo. Voy a ser una terrible madre. No se como hacerlo, no se como hacerlo. -Me faltaba el aire, tenía una presión en el pecho. -Mama no voy a poder hacer esto!
-Ashley, estas palida. Que te pasa?!
-Mama me estoy mareando, hace mucho calor. Mamá... -Sentí como mi ojos se cerraban a pesar de que intentaba no hacerlo. Senti unos brazos rodearme y sujetarme antes de que me cayera al piso. Eso fue lo ultimo que pude sentir, antes de que se nubla la memoria.
Desperté en mi habitación, con una toalla que parecía húmeda en mi frente. Abri los ojos lentamente y ahi estaba ese hombre tan perfecto.
-Hey, como estas? -dijo acercandose, sus ojos azules brillaban.
-Bien, que paso? Me desmaye? -mi voz salia muy lentamente y suave.
-Un ataque de ansiedad me parece, pero ya esta, no paso nada. -dijo acariciándome lentamente la mejilla.
-Y Benja? Donde esta? Esta bien? -Me preocupe otra vez.
-Tranquila. Esta perfecto. -Me respondió con una sonrisa. -He hablado con tu madre, coincidimos que necesitas un descanso. Estas muy estresada ultimamente. Por eso, hoy a la noche, ella se va a quedar cuidando a Benja y nosotros vamos a salir a cenar y luego si quieres podemos ir a bailar un rato.
-Ay mi amor, te quiero mucho. Que he hecho para merecerte? -No dijo nada mas y me respondió con un beso. Un beso suave y delicado. Me acariciaba la mejilla mientras lo hacía y yo le masajeaba el cabello. Como me gustaban sus besos, cómo le quería. Lentamente deshicimos el beso. Nos quedamos mirándonos uno al otro. Directamente a los ojos, como amaba esos zafiros que él tenía.
-Pasaré por ti a las 8:30, Vale? Arreglate como sabes hacerlo, ponte preciosa...
-Vale. -Le conteste con una sonrisa. Nos dimos un corto beso de despedida.
-Y... bañate sucia! Que apestas! -dijo bromeando y riendo. Le arroje un cojin, después de soltar una carcajada. Luego de eso se fue, pero me quede con una sonrisa en mi rostro por el resto de la tarde.
Benja ya se habia calmado, le di de comer, y luego almorcé viendo television. Mi madre habia ido al mercado y luego volvería para la noche. Mi padre estaba de viaje, otra vez, y mis dos hermanas mellizas estaban en una campamento de verano en los Estados Unidos.
Almorze viendo "Gossip Girl". Amaba esa serie, la había visto como unas cuatro veces. Amaba a Blair y a Serena. Me hacía acordar a mi y a Savannah; chicas de la alta sociedad con diversos problemas, excepto que ninguna de ellas tenia un bebe de casi un mes. Asi es Hollywood...
Mientras lo veía tome a Benja en mis brazos y jugueteó con el. Como amaba a esta criatura por más de que haya sido resultado de una noche descontrolada. Realmente lo amaba. Como era posible que a un bebé que hace tan poco había visto su cara por primera vez, en este mismo momento daria la vida por él?
Era un bebe precioso, no lo decia porque estaba obligada a decirlo, era porque realmente lo era. Tenia muy poco cabello, pero se le notaba que iba a ser como el mio, castaño claro. Y los ojos... parecia que habia hecho una fotocopia con los de Kendall. Ojos mieles, grandes. Y su pequeña sonrisa... se le hacían los mismos hoyuelos que se le formaban a Kendall cuando sonreía.
Sin darme cuenta me quede dormida, Benja se habia dormido también. Me desperte y lo vi durmiendo tranquilamente en mi pecho. La inocencia en una persona... Sentí que alguien entró por la puerta, era mi madre con muchas bolsas en la mano.
-Niña! Todavia no te has alistado?, Francis vendra por ti a las 8:30!
-Todavía tengo mucho... -Dije mientras miraba mi reloj. Mierda. Eran las ocho. Rápidamente puse a Benja en su cuna y me fui a alistarme. Mientras me duchaba pensaba en como Benja sería cuando sea grande. El iba a ser un buen chico, un hombre que respete a todos, sin discriminar a nadie. El iba a ser un hombre del cual yo estaría orgullosa de haber criado.
Luego de ducharme, salí del baño para ver que me iba a poner. Quería estar hermosa, ya que ultimamente lo unico que hacia era estar en jogging y camisetas manchadas de vomito de bebe. Lo se. Un asco.
Decidí por un vestido blanco de encaje haciendo juego con unos tacones blanco. Me hice una coleta despeinada, y me maquille muy naturalmente. Me mire al espejo y sonreí. Me veía realmente despampanante. Como coincidencia, un grito llamándome vino de abajo.
-Ashley! Francis ya llegó! -bajé y vi a mi madre hablando felizmente con Fran. Lo salude con un beso en la mejilla y me despedi de mi madre. Le di un beso en la frente a Benja y nos fuimos en el auto de Fran.
-Adonde vamos?- Pregunté curiosa.
-Ya lo verás ansiosa. Por cierto, estas hermosa.
-Gracias; tu tambien te ves muy guapo. -Y no mentía. Lo que tenia puesto e sentaba muy bien. Tenia una camisa blanca y unos pantalones azul marino, junto con un cinturón y zapatos marrones. Estaba simple pero muy atractivo.
Durante el viaje cantamos todas las canciones que había en la radio. Ninguno de los dos cantaba bien pero nos encantaba. La mejor fue cuando sonó "Perro Fiel" de Shakira. Amaba esa cancion.
Tú me confundes, no sé qué hacer
Yo lo que quiero es pasarla bien
Yo tengo miedo de que me guste
Y que vaya a enloquecer
Si eso pasa yo seguiré
Contigo aquí como un perro fiel
Yo tengo miedo de que me guste
Y que vaya a enloquecer
P.O.V Francis
Tenia todo planeado a la perfección. La llevaría a un restaurante italiano donde ya había pedido si nos podian preparar una mesa que diese a el retiro. También había ordenado que preparasen una past-pizza. Era un plato que Ash y yo habíamos inventado en el internado un dia que teníamos mucha hambre y yo queria pizza y ella pasta. No tuvimos mejor idea que juntar las ideas y hacer este delicioso plato.
Luego de ese dia, lo seguimos comiendo. A pesar de que era algo raro, nos encantaba. Por eso, le di instrucciones precisas al chef por teléfono para que lo haga a la perfección. Le iba a encantar, era la noche perfecta.
Junto con el cielo estrellado llegamos a el restaurante. Le vendé los ojos para que sea perfecta. Estaba muy ansiosa, se le podia notar. La ayude a bajar del auto, ya que no podia ver nada, y no quería que se lastimase. Le entregue las llaves al muchacho del Valet Parking, y la tome lentamente por la cintura. Un mozo nos indicó donde estaba nuestra mesa.
La mesa tenia un mantel blanco y uno rojo por encima mas pequeño. De cada lado había un plato cubierto con un cubreplato de metal, típicos de los de las películas. En el centro había un florero con dos rosas blancas, las que le gustaban a ellas. Sonaba una canción lenta romantica de fondo y podía ver como la nariz de Ash se movía curiosa. Era muy tierna.
La ayudé a sentarse, y le acaricie la mano. Le di un corto de beso y le acaricie la mejilla.
-Lista?-le pregunté.
-Si. -Le quite la venda y vi como sus ojos miraban todo muy curiosamente. Era muy linda cuando hacia eso, parecia una niña pequeña.
-Wow! Esto es... No tengo palabras. Gracias, gracias. Eres lo mejor!
-No tienes nada que agradecer, te lo mereces. -dije acariciándole la mano.
-Te amo.
-Espera a la comida. -En ese instante un mesero se nos acercó y quitó los cubreplatos. Los ojos de Ash se abrieron de par en par.
-No lo puedo creer! Si! Amo esto! -Parecía una niña pequeña, se veía muy linda tan emocionada por un plato. Sin esperar tomo sus cubiertos y lo probó. Puso los ojos en blanco. -Esto esta buenisimo! Esta perfecto! Que hambre!
-Te gusta?
-Me encanta, me encantas.
Todo había salido a la perfección, todo como lo esperaba. Durante la comida habíamos hablado sobre muchas cosas, de vez en cuando alguna broma o chistesito. Hablamos de Benja, de lo lindo que era, y de lo bien que estaba creciendo. Le propuse ir a bailar a alguna discoteca y aceptó con gusto. Si ibamos a disfrutar la noche, lo haríamos a lo grande.
Iríamos a Kapital, una discoteca cerca de donde estabamos. La temperatura de la noche estaba perfecta, no hacia ni mucho calor ni mucho frio. Al llegar ya se podía escuchar la música que provenía de interior del lugar. Baje del auto, y le abri la puerta a Ash.
P.O.V Kendall
Estaba harto, estaba cansado; no aguantaba mas a Summer. TODO ERA QUEJAS. Que Kendall esto, que Kendall lo otro. Que tenía que encontrar un trabajo, que nuestros padres no nos podían mantener todo el tiempo, que ella no iba a ser una mantenida.
De no ser por Ariel ya la habria dejado. Era insoportable. Ariel en cambio era una hermosura, era tan pequeña y tan linda. Sus ojos verdes como los de su madre, y mi cabello rubio. Era preciosa, me gustaba estar con ella; era lo unico que me hacía querer ir a la casa de Summer.
Aunque a pesar de que amaba a Ari, una parte de mi extrañaba intensamente a Benja. Lo queria ver, ya se que habia ido una vez la primer semana, y sentí que era la mejor cosa que me habia pasado en todos estos años. Desgraciadamente Ashley me habia dejado bien claro que no quería que este cerca de el. Por el tiempo no iba a luchar contra ella, este tiempo ella era existencial para el niño, y no quería generar problemas. Además si Summer se enterase que yo iba a la casa de Ashley, se enoja mucho conmigo y no tenía ganas de tener otro planteo inútil como el que había tenido la noche cuando nació Benja. Eso si, Yo, Kendall Santos, iba a estar presente en la vida de ambos hijos, no iba a permitir que Ashley me quitase de la infancia y vida de mi hijo.
Eran las diez de la noche, estaba viendo televisión comiendo una pizza fría que había dejado en la nevera. Mis padres habian salido, y mis hermanos no sabia donde estaban; tenía la casa para mi. Que progama de mierda que estaban pasando. Mi celular empezó a sonar, era Daniel.
-Si? -pregunté desanimado.
-Que es esa poca onda marica!? Estoy en diez minutos en tu casa para buscarte para ir a una discoteca, vale?
-No se si tengo ganas... estoy muy cans... -me interrumpio antes de que terminase de hablar.
-Que no vengas con esa historia de que estaba cansado, vive la vida idiota. Pasó en diez, mejor que estes vestido y perfumado porque me dijeron que van muchas chicas guapas.
-Buenos, pero se te esta olvidando que tengo novia...
-Y, tu solo usalo como un distractor, que eso te vendria bien.
-Vale, adios.
-En diez estoy, adios.
Luego de colgar me duche rapido, y me puse unos jeans negros junto con una camisa negra, y mi chaqueta de cuero. Me puse perfume, y me mire al espejo, me veia bien. Baje a la cocina y tome un Red Bull, le di un sorbo y lo deje sobre la mesada. Escuche la bocina, y sali.
Puse la mejor cara que pude al llegar a la discoteca, Kapital creo que se llamaba. Estaba lleno de gente, la luces eran fluorescentes y la música estaba alta.
-HOY SE DESCONTROLA! -Gritó mi amigo al entrar, palmeando la espalda. Lo unico que pude hacer es sonreir. Fui directo a la barra, quería emborracharme, ahogar mis penas, mis desgracias, mi vida.
-Lo mas fuerte que tengas, por favor... y que sea doble. -dije cabizbaja al bartender.
-Noche dura?
-Vida dura...
-Para eso tengo la mejor solución, espera un momento... -Se fue al otro lado de la barra, podía ver como tomaba distintas botellas, y derramaba líquido en un mismo vaso. Desde vodka hasta tequila, habia alli dentro. Habrá tardado unos tres minutos y al volver trajo con sigo un vaso grande lleno hasta arriba.
-Fondo. -me dijo
-Perdon? -no entendí lo que me habia dicho.
-Tomatelo de una, sin respirar, rápido. - Y lo hice, sentí como mi garganta quemaba, mi cuerpo entro en calor, pero lo tomé hasta no dejar gota. Luego de pagarle por el trago, me levante y fui a bailar.
Miles de chicas con figuras perfectas estaban alrededor mío, pero aun asi sentia que me faltaba algo. En ese momento bailaba con una pelirroja candente, que movía sus caderas como si fuera una diosa. Ya estaba mas alegre, había perdido el cansancio y ahora gritaba la letra de la canción a todo pulmon. El alcohol ya habia hecho efecto en mi.
Y ahí estaba yo, totalmente borracho, cuando la vi. Llevaba un vestido blanco que le quedaba como si fuera su propia piel, se veia hermosa. Estaba sola bailando, me acerque por detras.
-Tan hermosa y tan solita? -se asustó.
-Kendall que haces aqui? No quiero estar contigo, sal.
-Que aburrida, ya toda una mami sexy.
-Kendall, estas borracho. Alejate. No quiero problemas.
-No te gusta bailar asi pegaditos. -Dije acariciándole el trasero. -Como cuando nos escapabamos para ir a bailar, para que no nos atraparan.
-Kendall, sal! Fran está aquí, y no quiero estar contigo.
-Dale, yo se que te gusta.
-Kendall! -Y sin pensarlo me abalancé sobre ella besándola. La pegue contra la pared, al principio no me correspondía, pero luego si. Esto me demostraba que seguia teniendo esa pequeña chispa dentro de ella. Nuestras lenguas danzaban, mis manos acariciaban todo su cuerpo, como había extrañado esos labios.
-QUE MIERDA?! -Puta, al darme cuenta reaccione de donde venia esa voz. Francis.
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Aqui os dejo el otro cap!
Espero que os guste!
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Los quiero!