La puerta de mi habitación se abrió y las chicas entraron, me miraron y fruncieron el ceño.
-¿Qué te pasó Styles?- Preguntó Kathy haciendo un puchero.
- ¿Por qué lloras tonta? - Sav se sentó a mi lado.
Era muy tonto estar llorando por una persona que al siguiente día de terminar ya estaba tirándose a cualquiera, sólo que lo amaba, y me dolía escucharlo y recordar todo el daño que me había hecho.
Les conté lo de la llamada- Él se lo pierde - dijo Sav acariciando mi cabeza - Además te vas a volver toda una perra rompecorazones.
- Cuando estés con siete hombres a la vez lo verás y... Además bueno es que no lo volverás a ver y ya - Dijo Kathy y justo entró Louis a mi cuarto para suspirar.
- Los chicos vendrán mañana - Me levanté rápidamente de la cama cosa que me hizo hacer caerme y sin embargo evité el dolor para volver a levantarme inmediatamente.
-¿¡Qué cosa estas diciendo!?- Pregunté/Grité - Ellos no pueden venir - Miré a Sav y estaba igual o más alarmada que yo.
-Yo... Se nota - Sav señaló su panza - No, ellos no pueden venir, lo siento mucho pero me iré a un maldito hotel o alguna mierda pero no los veré.
Los únicos que realmente sabíamos acerca del embarazo éramos nosotros, casi podía recordar el día que le contamos a Louis, le iba dando un infarto y tuvimos que hacerle prometer no contarle a nadie.
- Cálmate y siéntate - Dijo Kathy y la ayudé a sentarse en mi cama - Te puedes poner una blusa holgada, además sólo es muy poco.
- ¿Reconoces la diferencia de una embarazada a una gorda? - Preguntó y negué con la cabeza - Pues que la embarazada tiene pipa, es algo así como la barriga inflamada, y una gorda tiene rollitos en su estomago, ¿Yo qué tengo? ¡Ambas malditas cosas! - Exclamó - Lo siento bebe por maldecir - Miró su barriguita.
- ¡Bueno ya! - Exclamé frustrada - ¿Cuándo dijiste que llegaban?- Masajeé mi cuello.
- Mañana - Dijo ahora Kathy y suspiré.
-Está bien, no mostraremos debilidad ante todo - Murmuré para mí misma.
- No mostraras tu mi ciela porque yo me voy a algún hotel o mejor... - Se levantó y me señaló - Me voy del país - Se levantó Sav de la cama sonriendo y la tomé del brazo.
- No irás a ningun lado, no me dejarás sola - Supliqué y cerró sus ojos para luego sentarse de nuevo.
- Sólo porque ustedes siempre estuvieron conmigo cuando mas lo necesité - Contestó y le sonreí.
- Ay que tiernas - Dijo Louis - Ahora miren como esta el cochera de casa.
Era cierto la casa estaba horrenda, le hacía falta un aseo, parecía que vivieran monos y no personas - Haremos aseo solo porque vienen Alex, Niall y Chris, solo para ellos haremos aseo - Dije señalando a Louis.
- Olvidaste a Jack - Sonrió Sav.
- No lo olvide, lo evité - Contesté señalandola y frente a ellos me cambié de ropa para hacer aseo. Agradecí a Dios que sólo era meter la ropa a la lavadora, barrer, trapear y organizar las cosas. Por suerte un departamento del tamaño decente.
- Listo - Me tiré en el sillón esperando a que todos hicieran lo mismo que yo y sin embargo cuando se tiraron yo me levanté del mueble - Tengo hambre - Dije y me dirigí a la nevera, solo cerveza, comida chatarra, dulces, nada de sal - Debemos ir al supermercado.
Minutos después llegamos y nos bajamos, entramos tomando un carrito para comenzar escogiendo cosas de estantes.
- Debemos llevar, leche, huevos, pan, yogurt, amo el yogurt griego, fruta.. Oh verduras, para la dieta de Sav... - Kathy comenzó a aleer la lista que habíamos hecho en el camino.
Buscamos en cada estancia los elemento necesarios y justo pasamos por el lado de una torre de salsa de tomate enlatada.
- Louis toma una, la necesitamos - Dijo Kathy aun mirando la lista.
Louis tomó una lata pero de las de la parte inferior haciendo derrumbar la torre.
- Eres un idiota ¿No sabes que eso se saca de las de Arriba?- Sav le dio un zape en la nuca.
-Auch... Disculpa no saber como comprar - Murmuró este sobando su cuello.
- No necesitas saber comprar para sacar una maldita lata de la torre - Se quejó Kathy.
- Mierda ahora como arreglamos esto - Murmuré y justo llegaron dos guardias de seguridad.
- ¿Qué sucede aquí?- Preguntó uno y yo sonreí.
- Nada, todo está perfecto señor oficial - Sonreí y Kathy me dio con el codo en una costilla - Mejor que nunca.
- Es tu momento de volverte una perra - Murmuró Kathy - Como te enseñé tonta.
Sonreí coquetamente - No sucede nada - Dije acercandome a él, tratando de intimidarlo.
- Eso no funciona conmigo - Me miró mal y bufé para regresar al lado de los chicos.
- Tus clases son las peores - Vi a Kathy y soltó una carcajada - ¿Y que debemos hacer? - Pregunté entrecruzando mis brazos sobre mi pecho y viendo a los guardias.
- Recoger las latas y ordenarlas en torre - Contestó el otro y todos comenzamos a quejarnos a la vez - Son muchas no es justo.
- No acabaremos nunca - Suspiró Sav con fastidio.
Una brillante idea llegó a mi cabeza y sonreí imaginándome el resultado.
- ¿Podemos pagar esto y meterlo al auto? Para luego regresar y organizar esto - Pregunté y el guardia vaciló por un momento.
- Está bien- Contestó no muy convencido de su respuesta.
Pagamos las cosas y cuando caminamos hasta el auto los policías se quedaron de pie en la puerta del supermercado esperando a que acabaramos de subir las cosas.
- ¡Que desconfianza! - Exclamó Louis.
- A las 3 entran al auto - Murmuré y me miraron confundidos - No iban a creer que de verdad arreglaríamos las latas.
Cerre el baúl del auto y saqué las llaves del cerrojo - 1 - Susurré y todos tragaron en seco - 2... - No terminé de contar cuando vi a Kathy salir corriendo y subirse al auto - Creo que no tendremos que contar el 3. ¡Corran! - Exclamé y todos subimos rápidamente al auto.
- ¡Se escapan! - Exclamó uno de los guardias.
Encendí el motor y pisé el acelerador hasta el fondo hasta que los perdí de vista desde el retrovisor.
- Maldita sea Kathy, casi que nos atrapan - Gruñó Sav resoplando.
- Bueno creo que no podremos volver a este supermercado - Rió Louis y asentí.
- Si, y por tu maldita culpa - Dijo Kathy viéndolo.
Nos dirigirnos de nuevo al edificio, subimos al departamento con todas las cosas y entramos con mucho esfuerzo. Con ayuda de Kathy organicé todo el mercado en la nevera y la alacena.
- ¿Les parece hacer algo de cenar? Aún tengo hambre - Oí mi estómago rugir y esperé respuesta de ellos. Con el tiempo había aprendido a cocinar para todos y no era por ser mi comida pero realmente quedaba delicioso.
- Oh si, hagamos hamburguesa - Sugirió Louis.
- Con gaseosa - Siguió Sav y rodé los ojos.
- Justo ahora si debes comer saludable - La señalé y me miró mal
- Si tú ibas a ser la tia preferida de mi hijo - Reí a lo que dijo.
- Siempre lo seré - Contesté - Ahora comeremos ensalada y haremos la dieta con Sav.
- Espera, ¿Qué? No, yo quiero comer hamburguesa - Se quejó Louis.
- Te servirá la dieta, estás algo panzón - Me burlé y me miró mal.
- Quisieras tener este cuerpo - Se cruzó de brazos - Y aún así quiero hamburguesa.
- Hazla tú entonces - Kathy dejó su celular y lo miró.
- Pero no se cocinar - Rodé los ojos cuando me hice cara de cachorro.
- Haré ensalada para nosotras y para ti hamburguesa - Lo señalé y sonrió.
- No me quejo, necesitaba dieta urhente - Contestó Kathy riendi
- Yo si - Lloriqueó Sav - Necesito grasa en mi organismo.
Rodé los ojos y con ayuda de los chicos hicimos la cena, no podía negar que había recibido bastante ayuda de Louis, podía ser un idiota mujeriego pero era muy colaborador.
Luego comimos y cada uno caminó hasta su habitación para descansar.
Por mi cabeza realmente pasaba la opción de que moriría al ver a los chicos, tomé la carta que Jack me dejó y la leí detallando cada palabra podía sentir sus letras como si hubiera sido la primera vez que la leía y seguía causando un solor en mi indescriptible.
Suspiré para no llorar, luego de un rato la dejé sonre mi escritorio y me metí entre las sábanas para descansar.
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Llegue yo, como siempreee porfin, ¿Que tal les pareció el miss universo?
Yo soy de Colombia, cuentenme desde donde me acompañan