La fiesta de Halloween
Parte ll
Estaba en mis cinco sentido lo único que pedía en la barda era jugó o algo que no tuviera alcohol.
La fiesta estaba a todo lo que da, me había encontrado a Samantha y unos compañeros del trabajo, cuando les pregunte que quien había echo la fiesta ellos dijeron que era de la prensa.
Estaba bailando con Samantha, movía mis caderas al compás de la música, aveces sentía alguien sobrepasarse conmigo pero cuando me giraba no vea señal de un hombre atrás.
Tenía ya un buen rato bailando que me olvidé completamente de buscar a Jon y Simón o mi ¡Madre!, Samantha estaba bailando con un chico dejando me sola pero yo seguía en lo mío.
No paso mucho para que sintiera una fuertes brazos tomando me de la cintura mi respiración se entre corto ya que lo tenía muy cerca de mi, me seguía moviendo y siento su respiración en mi cuellos.
—Te vez muy sexy con este disfraz.
Esa colonia esa voz, no me tomo mucho tiempo en averiguar de quién se trataba, me relaje al instante al saber que era el, me doy la vuelta para ver lo y me arrepiento de haber lo hecho.
¡Santa madre de las Candelarias! ¡Virgencita dame fuerzas!
Estaba en estado sock, su disfraz daba mucho de que hablar, están vestido de egipcio, un taparrabo era la único que traía abajo arriba tenía unos tatuajes en sus brazos, en las muñecas tenía una pulseras color oro una gorra color oro también, los tatuajes me llamaban mucho la atención ¿Serán de verdad?
—Disfrutando la vista -regreso a la realidad y lo miro.
—No, no ahí nada que ver.
Sigo bailando y veo a él como se muerde el labio inferior, no se por que pero me pego a el, llevo mis manos a sus hombros y los deslizo por sus fuertes brazos el me toma de la cintura y nos miramos a los ojos.
Nunca creí sentir esto, amar a otra persona que no sea tu madre o hermano, sentir ese temor, deseo de tenerlo a mi lado y temor de que si lo dejo pasar a mi corazón el me lo rompa en un abrir y cerrar de ojos.
Y eso es lo que más temo ser lastimada, ser usada o ser el juegete de alguien.
Cierro los ojos, no quiero enamorarme, no quiero que me lastimen más.
—¿Lili?
Siento a Luke que se agacha un poco, pega su frente a la mía y si no fuera por qué me está abrazando por la cintura ya estuviera en el suelo.
Cuando conocí a Luke en el trabajo y no en el súper, lo primero que pensé de el fue que iba hacer el típico jefe, regaño, engreído y el dios del universo, pero como dice mi madre no juzgues a las personas si no las conoces.
Estas semanas que llevo trabajando para el eh visto que es una persona amable y que se preocupa por sus trabajadores que no se enoja por una cosa pequeña mal echo, y eso me gusta de el, pero uno luego no sabe todo lo bueno tiene algo malo, y Luke tiene uno, las imágenes de ese momento en su oficina me invade.
El estaba a si por mí, por qué me fui con Simón aquella vez.
Y eso me destrozo el alma, recordar ese momento en el que un miedo y preocupación me invadió no sabía en ese momento por qué el estaba en ese estado, pero ahora lo tengo claro más claro que el agua, el tiene sentimientos por mí y para el verme ese día que me fui con Simón fue desgarradora lo sé por qué confieso que eso siento cuando lo veo con Amanda, no sé si llamar los celos ya que ¿Porque? No somos nada, el puede estar con quien quiera y yo con quien quiera, no estamos atados y espero por todos lo dioses seguir a si siendo jefe y secretaria ninguna relación ni nada.
Pasaron las horas y yo ya me quería ir, Jon y Simón no los veo por ningún lado y mi madre se fue ya que se sentía agotada le dije que me iba a ir con ella pero dijo que no que disfrutará la fiesta y que no me preocupara por ella.
No puedo estar tranquila a si que le envié un mensaje a unos de las vecinas para que estuviera atenta de mi madre.
Me encontraba sentada en la barra mirando a todos bailar, platicar o haciendo competencias.
—Ten -luke me extiende un vaso con jugo.
—Gracias.
Lo tomó y le doy un trago el se sienta y mira igual como yo a todos, un grupo de chicas no paraba de mirar a Luke y estoy más que segura que su mente a pasado de todo, una de ellas lo mira mordiendo se el labio y eso hace que me encabrone.
Me levanto del banco y me siento en las piernas de Luke el se sorprendió por mi acción pero luego se relajo y pasa un brazo a mi cintura pegando me a el.
—¿Celosa? -dice con una sonrisa en su rostro.
—¿Que? ¡No! -dije mirando a otro lado.
—Oh, vamos Lili eh visto como miras a ese grupo de chicas -me hago la desentendida- estás celosa, pequeña.
—No, claro que no.
El ríe un poco y se hacerca a mi oido.
—No te preocupes, soy tuyo y de nadie más.
Mi piel se pone de gallina y los nervios me invaden, intento ocultar mi rostro que está como tomate pero el con su manos libre me toma del mentor y me gira para verlo, el me mira por un rato y se hacerca a mi pegando sus labios con los mío, me tense por qué no me lo esperaba, pero al poco tiempo le correspondía el beso, sus labios eran suaves como el algodón de azúcar, el beso iba lento sentía el amor de el y el deseo de tenerme a su lado y nunca soltarme, llevo mis manos a sus hombros y juego con su cabello, profundizó el beso y ahí me doy cuenta de lo que jodida estoy.
Estoy enamorada de él, lo amor tanto, tanto que no quiero que se aleje de mi ni por un mento.
Estoy jodida
El me abraza más fuerte y le doy gracias por qué ya me estaba callendo.
Nos separamos por falta de aire y lo miro a los ojos, tiene ese brillo, ese hermoso brillo en sus ojos de felicidad y de amor.
—Te amo -su voz era ronca y con sinceridad dijo esas dos palabras que me dejan muda.
¡¿Que le digo?!
—Tranquila -toma un mechón de mi cabello y lo pasa detrás de mí oreja- no te presionaré solo quería que lo supieras y que también que nunca te dejaré ir, nunca.
—¿Nunca?
—Nunca -sonrie- mi pequeña.
Una sonrisa tonta aparece en mi rostro y lo abrazo escondiendo mi cara en su cuello escuchaba su corazón latir rápido y como inalaba y exaltaba, era como música por mis oídos.
—¡Hey! ¡Hermano! Los chicos y yo ya nos vamos -escucho que alguien le dice a luke- ¿Tu tambien? Mañana a las doce tenemos que estar en el aeropuerto.
¿Que? ¿Aeropuerto?
—Si, lo se nos vemos mañana -me pasa una mano a mi espalda subiendo la y bajando la.
—Sale hermano nos vemos.
¿Luke se irá?
Me separo de el y lo miro.
—¿Aeropuerto? -el suspiro y me sonríe dulcemente.
—Mañana tengo que viajar a España por trabajo.
—Oh. -dije desanimada.
—Te iba a decir te pero pasó lo del hospital y se me olvidó, luego de España iré a Canadá a ver a mis padres.
—Canada -dije voz baja.
—Lili -alzo la mirada- ¿Quieres ir conmigo?
—¿Que?
—Si, si quieres venir conmigo a España y ver a mis padres, mi madre le encantará conocerte y a si descanse de sus llamadas preguntando por ti si estás bien.
—¿Que?
—Le conté de lo que te paso en el hospital y ella desde ese día no me deja de enviar mensajes y llamadas.
—Ya veo. -miro a la nada.
—Si, vienes conmigo.
—No, no se a mi madre la operarán pasado mañana y yo necesito estar con ella.
—Cierto -hace una pausa- ya se, cuando la operen lleva la a mi casa te dejaré las llaves, Marta estará con ella no te preocupes, y ya tomás un avión a Canadá.
—No se Luke, es que nunca eh viajado sin mi madre.
—Anda... -hace pucheros.
Me rio por que se parece a los hijos de mi hermano cuando querían que les comprará un helado.
—Deja hablo con mi madre y ver cómo sale de la opresión.
—Si -dice feliz y me da un beso- ¿Ya te quieres ir?
—La verdad ya, me siento cansada -hago una mueca.
Nos paramos, Luke se despide de sus amigos y salimos de ahí, su carro estaba ni muy lejos y lo agradezco no quería caminar.
Cómo caballero me habré la puerta y entró al carro, en el camino me estaba hablamos de cualquier cosa, el me habló de su familia y uno que otra cosilla, miraba a la ventana y veía las luces de la ciudad pasando rápido.
Poco a poco estaba serrando mis ojos hasta que caí dormida.
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Gracias de nuevo.
Besos de Luke