Es un secreto que tan sólo quiero compartir con esos ojos que le han dado luz a mi vivir, que en esta noche no hay mas luna que como tu me alumbre más 🎶
* * *
-Muy bien. Empiezo yo -Magnus tenía tantas preguntas. Tanto que quería saber de él-, ¿A qué te dedicas, Alexander? ¿Qué haces durante todo el tiempo que no puedo verte?
-Y-yo... -Alec dudó, su vida era tan aburrida, en cambio Él era un Dios-, yo...doy clases de matemáticas en la universidad. Generalmente ahí paso mis días, aunque ahora estoy, al menos esta semana, de vacaciones. Puedo -sus mejillas se calentaron- pasar estos últimas noches contigo. Si tú quieres...
¡Claro que quería! ¿Qué pregunta era esa? Pero también le preocupaba su salud, un embarazo de un Dios era peligroso para los mortales, y Alexander era varón, Magnus había tenido que adaptar su organismo... -Siempre te quiero, mi Alexander. Si por mi fuera, pasaría todo el día, todos los días, contigo. Pero... ¿no te hará mal desvelarte?
Alec también había pensado en eso, pero estaba decidido. Era más que feliz al aire libre, a la luz de la Luna, a Su luz. -Tú ya hiciste una pregunta, es mi turno -y Alec también tenía mucho que quería saber-. ¿Tú...qué haces durante el día? ¿Qué hace un Dios como tú de su vida?
Magnus sonrió muy a su pesar. Adoraba a este mortal. Nunca se había acercado a uno, pero no se arrepentía. Alexander Lightwood valía la pena y el riesgo...de todo. -Uumm, no hago mucho. Mi lugar es este, soy la Luna, no puedo dejar de serlo. Desde el momento en que mi padre me condenó a esto, hasta que muera, siempre lo seré. Cuando hay Luna llena soy más fuerte, es por eso que puedo bajar incluso durante una noche. Algo así, a menor escala, sucede todos los días, durante las noches soy fuerte, puedo observar el mundo desde aquí, durante el día soy débil, sigo en el lugar de siempre, pero el mundo es un lugar difuso para mí, nunca podría bajar de día...no mientras sea la Luna.
Alec se encontró mirando, con adoración y pesar, aquel cuerpo celeste, su parpadeo de oro y plata, su luz, la luz que tomaba prestada. ¿Condena? Eso lo hizo pensar en otra pregunta: -¿Cómo es que te condenó tu padre? ¿Tú no siempre fuiste esto? ¿No estabas destinado a serlo? ¿Qué eras antes? ¿Hace cuanto...?
-Wow, wow, wow -la risa cantarina de Magnus levantó grandes olas en el océano y sonrojos en las mejillas de Alec, además de mariposas en su vientre y esas no eran su hijo-, esas son muchas preguntas, y además me toca a mí. Dime ¿por qué hiciste esto? Si querías un hijo, ¿por qué no de forma convencional? ¿no te asusta lo que pueda ser nuestro bebé?
Nuestro bebé.
El corazón de Alec se aceleró con sólo esas dos palabras. -Uumm, como te dije, yo nunca me había enamorado, y...eh...las mujeres no me atraen de ese modo, no quiero atarme a una sólo por un hijo. Además tenía esta extraña necesidad de algo mío, de sentirlo, saber que algo de mí quedará en este mundo...
Magnus lo entendía muy bien. Tal vez por eso había aceptado cumplir el deseo de Alexander. Algún día, como el Dios anterior, él dejaría de existir, pero quedaría su hijo.
-...algo mío, mío y de alguien más. Tuyo. Y no, no me asusta que sea hijo de un Dios, hijo de la Luna. Yo sé que será hermoso. No te recuerdo, no sé cómo eres tú, físicamente, ese que estuvo conmigo, pero seguramente será hermoso si se parece a ti, y espero que tenga tu voz y tu risa, esas sí las conozco y me encantan.
Ambos sonreían para cuando Alec dijo eso último.
-¿Has pensado un nombre? -preguntó Magnus.
Alec rió. -Es mi turno. Dime tú cómo imaginas a...nuestro hijo. ¿Has pensado un nombre tú?
Magnus cerró sus ojos, privando a Alec del oro y la plata, y visualizó a su hijo: -Él será un hermoso semidiós, con piel pálida, más pálida que la tuya, suave y cálida, con una mirada llena de luz y poder. Sus ojos serán una mezcla de plata y celeste, algo tuyo y algo mío. Con el cabello oscuro como su padre mortal, contrastando con su piel blanca. Tendrá tus labios... Tus sentimientos... Será único y será hermoso. Será nuestro, mi...
Amor.
CONTINUARÁ...
Aaww ya se imaginaron al baby moon? Quieren saber el nombre?
Las preguntas que vi fueron estas, si tienen más o se me pasaron, pueden decirme, no las contestaran en un sólo día:
1. Cómo se llamará el bebé?
2. Hace cuánto es la luna?
3. Por qué no bajó antes?
4. Cómo pasa su tiempo? Come? *a Magnus*
5. Alec estudia? Qué piensa del futuro? Como se imagina al bebé?
6. Cómo se vuelve luna alguien?
7. Cómo muere el dios de la luna?
8. Por qué no habías cumplido antes un deseo así? *a Magnus*
9. Alguna manera de que se haga mortal Magnus?
10. Cuánto durará el embarazo?
11. Qué pasará con el bebé cuando nazca?
12. Si Alec sobrevive, podría vivir Magnus con él?
13. Magnus era humano o hijo de un Dios y siguió la tradición?
14. Cómo te Imaginas al bebé? Cómo te gustaría llamarle? *a Magnus*