- Esto es ridículo.
Rachael observa a Celine en su reclutamiento. Celine, quien en serio no es mi persona fuego favorita, está encendiendo una llama que no va a poder apagar.
- En los límites de lo absurdo - empieza a decir Lorelei - Debería ser yo.
Lorelei se cruza de brazos a mi mirada. Yo soy la de los reclutamientos. Selena Bennet fue el segundo reclutamiento de Aldrich.
- Bennet y Aldrich - le recuerda Izzy - Absurdo o no. Estás con nosotras.
- Y en verdad lo aprecio. Yo... - Rach mira a los chicos agua. Igui deja de sonreír y eso, en cualquier lugar en la tierra no es bueno.
- ¿Debería intervenir? - pregunto.
- No - Rachael parece enserio contrariada. Por una parte que Celine haga un movimiento en favor de Allan molesta a Rachael, no sólo por no considerar su propia elección. Sino que Nico y Will son propiedad de Avery.
- Locomotora a vapor. Lejos de Nico.
La voz de Oriana llega a nuestros oídos. Izzy se muerde el labio. Oriana va crear una escena.
- Por dios Kluger ¿a quién engañas? ¿Hay un gramo de poder en tu interior?
Oriana responde antes de que Igui pueda defenderla. William Igui no permitirá que nadie toque a Ori, él trata de tomarse la historia a pecho. Pero Oriana, la única Kluger, a excepción de Kara, no es conocida por un buen temperamento. Oriana es una niña mimada y el terror de algunos desafortunados. Modestia aparte. Celine Tyler tampoco se aleja del saco. Lorelei se debate consigo misma sobre cuál de las dos es más poderosa, aunque Kluger debería ganar la lotería genética, no tiene todas de su lado.
- ¿Es que nunca aprendes? Éste no es ni de cerca un buen comportamiento.
- Pobre chica. Su snobismo no se ha acentuado.
Las cuatro nos giramos para mirar a Abel. Oriana está tan lejos del snobismo como Rachael de posibilidades de intervenir. Los Kluger son territorio delicado y con todo lo que está pasando. ¿Cómo se le ocurre a Oriana Kluger interferir?