—Oye, eso es algo injusto, yo tengo que ser una chica.
—Mírale el lado bueno, serás ministro de magia.
—Claro, apenas y puedo controlar a un hipogrifo, ya me imagino un país completo.
—Scorpius, eres demasiado negativo, deberías de tener una mente más abierta.
—¿Entonces te parece si me uno al equipo de quidditch?, así yo seré el fortachon de los dos.
—Oye, oye, oye, tranquilo, ¿sí?, Puede que seas el más alto de los dos, pero aún así, eso no te convierte en el deportista.
—A ti ni siquiera te gusta ir a ver los partidos, ¡verlos!
—A ti tampoco, solo lo hacías por Rose.
—Cállate Albus— bramó Scorpius sintiendo el mal trago.
—Mejor vámonos ya, no tardan en partir.
Ambos chicos caminaron por la nieve hasta llegar a dónde estaban algunos alumnos subiendo a las carrozas para ir de regreso a Hogwarts.
—¿Estas seguro de que no van a recordar nada?— preguntó Scorpius algo nervioso.
—Eso supongo— Albus se encogió de hombros.
—¡Hola, chicos!— saludo Lily con un tono adorable para tener 13.
—¿No te vas a reír?— preguntó Scorpius para verificar.
—¿Por que me reiría?— dijo enarcando una ceja.
—Por nada— dijeron al unísono Al y Scorpius.
—Oye Al, me puedes ayudar con una tarea para pociones, según tus calificaciones eres bueno, y...— las risas de ambos muchachos la interrumpieron— ¿Qué?
—Es que él que hace todo el trabajo es Scorpius— siguió riendo Albus.
—Pero si quieres te puedo ayudar, ¿que poción es?— se adelantó Scorpius dejando de reír poco a poco.
—Solucion para encoger— dijo la pelirroja arrugandó la nariz.
—Solución para encoger— repitió Scorpius respirando profunda y exageradamente, como si al decir 'solución para encoger' el aire fuera mas limpio o algo así.
—Creo que eso es un sí, así que ve a la biblioteca esta tarde y te esperaremos allí— respondió Albus.
—¿Y tú por qué tienes que ir?— pregunto un poco ruborizada Lily.
—Porque eres mi hermanita, por que tienes 13, porque Scorpius tiene 15, porque es un deprevador sexual, y porque yo digo— sentencio Albus, Lily rodó los ojos.
—Llega a las 5, te esperamos allí— dijo Scorpius sonriente.
—Sí, sí, claro, dejemos las sonrisas para otra ocasión, ahora vete hermanita, sabes que te quiero mas... bueno, te prefiero a ti en vez de a James, pero eso no justifica que estés con nosotros, adiós—cuando Lily se hubo ido de mala gana empujada por Albus adonde sus amigas, Scorpius miro con una media sonrisa y una ceja enarcada a Albus— No me mires así que las intenciones de esa niña se huelen desde lejos— Scorpius soltó una risilla—ademas, tu solo eres mío.
—¿Eso tendría que asustarme o alagarme?
—No lo se, depende de la situación— dijo Albus poniendo cara de pervertido, Scorpius rodó los ojos.
—Luego yo soy el depravador sexual— seguido de eso subieron en la carroza que venia próxima.
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