Escuadrón Anti-Chicos© (En ed...

By xDamnWritterx

93.3K 5.2K 803

¿Que sentirías cuando tu vida ya no es como la de antes? Me refiero a que eras feliz y ya no lo sigues siendo... More

[Aclaraciones]
[Personajes]
Capítulo 1: Es como una paloma, viene y te caga encima.
Capítulo 2: Chica problemas.
Capítulo 3: Empecemos de nuevo.
Capítulo 4: Castigos y más castigos.
Capítulo 5: Más competencias que limpieza.
Capítulo 6: ¿Fantasmas en el instituto?
Capítulo 7: Cena con los Langford.
Capítulo 8: Tacones e Instagram
Capítulo 9: Una dulce venganza.
Capítulo 10: ¿Papá nuevo?
Capítulo 11: Sorpresa inesperada.
Capítulo 12: Pijamada épica.
Capítulo 13: Anciana molesta.
Capítulo 14: Mentiras piadosas.
Capítulo 15: El Aniversario (Parte uno).
Capítulo 16: El Aniversario (Parte dos).
Capítulo 17: Me involucraste.
Capítulo 18: Fingir.
Capítulo 19: Dieciocho años practicando.
Capítulo 20: Tiempo de hablar.
Capítulo 21: El Plan.
Capítulo 23: Derríbame, nena.
Capítulo 24: Brotherzone.
Capítulo 25: ¿B de cristal o de deseo?
Capítulo 26: Lazos de hermanos.
Capítulo 27: Revelaciones.
Capítulo 28: Decisiones.
Capítulo 29: Adiós, Miami.
Capítulo 30: Doble cara.
Capítulo 31: ¿Me estás amenazando?
Capítulo 32: Inglaterra y el chofer personal.
Capítulo 33: Espías.

Capítulo 22: Alumna de Intercambio.

1.5K 130 22
By xDamnWritterx

Danielle Campbell como Sophie Clark (Multimedia).

Abby.

Mierda, es cómo me siento... Un verdadera mierda. Han pasado dos semanas y tres días que ni siquiera me he dignado a salir de mi cuarto. Ni sé que fecha es hoy o que día... ¿Martes?

Creo que así es.

Mi vida estaba acabada y no podía hacer nada al respecto, sólo... Me hubiese gustado ya no saber la verdad, no saber que soy básicamente un peligro para todos, ¿Por qué me lo ocultaron tanto tiempo? Mis padres dijeron que era por mi bien, ja. Como si fuera a creerles. Muchas veces escuché que mis padres o mis hermanos venían para pedirme que saliera, pero me negaba o les pedía que me dejaran sola. Y es así como quiero estar el resto de mis días. Me da mucha pena y rabia no poder contestarle las llamadas a mis amigas, pero es que... Si les llegara a contar esto, seguramente de alejarían de mi. Quiero estar sola, pero tampoco quiero perderlas.

Suspiré mirando el techo blanco de mi cuarto, el sol me molestaba en la cara cómo todas las mañanas, así que con toda la pesadez en mis muslos y estómago fui a cerrar las cortinas de mi gran ventanal. Estaba vestida con una camiseta más grande que mi talla normal y mi ropa interior debajo de ella. Si se lo preguntan... Es la misma ropa de hace dos semanas. Puede sonar asqueroso pero en serio no tengo ánimos de nada hoy y nunca, apenas voy al baño a orinar o defecar... ¿Qué? No se asqueen, hacer eso es totalmente normal.

Aunque necesitaba un buen baño. Y lo tomaría ahora, para luego volver a encerrarme en mi mundo y no saber nada de nadie. Me dirigí a mi armario donde sacaría ropa cómoda y ropa interior para ponerme después de ducharme. Tomé una toalla grande y una toalla pequeña para salir de mi cuarto. Al aparecer no había nadie, porque no escucho las voces ni de mis hermanos ni de mis padres.

Caminé de lo más normal y me adentré al baño poniendo la puerta con seguro, por si llega alguien y me descubre que estoy aquí. Me deshago de mis prendas y me meto enseguida a la ducha, el agua helada corre por mi espina dorsal hasta mis glúteos redondos, apliqué el shampoo en mi cabello para que sacara el mal olor y lo pajoso que estaba. Mientras enjabonaba mis brazos, pude ver como tenía un arañazo casi profundo en mi estómago, eso explica entonces el molesto dolor.

¿Y cómo demonios me lo hice? No recuerdo haberme pegado o cortado con algo en esa zona. Como sea, ya estaba cicatrizando y no le iba a dar importancia ahora. Luego de estar lista, hice mis necesidades, me lavé el rostro y mis dientes, me vestí con un jeans mom's —que es algo suelto—, y una sudadera color amarillo mostaza. Mis vans y listo. Decidí vestirme porque creo que hoy ya es tiempo de salir e ir a la escuela, cosa que no he hecho durante muchos días. Y la verdad es que necesito despejarme, y estar encerrada en mi cuarto no ayuda mucho.

Dejé la ropa sucia en el canasto de-ropa-sucia y puse la toalla pequeña en mi pelo mojado. Salí del baño procurando que no haya nadie rondando por aquí, no quería escuchar preguntas ni menos regaños, sólo quería entrar a mi cuarto para sacar mi mochila, mi teléfono y ya. Pero en eso, escuché una risa femenina proviniendo del primer piso de mi casa, las risas de una chica y un chico que creo que es Mike no cesan, sólo aumentan.

Frunzo el ceño, Mike no tiene permitido traer a chicas a casa después de lo que pasó hace un año, me refiero a que terminó repitiendo el año y como castigo le prohibieron muchas cosas, cómo llevar su auto a Inglaterra, no traer chicas a casa, adiós internet móvil en su teléfono y adiós fiestas. El castigo no pudo haber durado tan poco, aunque pensandolo bien, mi hermano pido haber roto las reglas, lo cual es lo más probable... Es Michael James, un James.

La curiosidad por dentro me mataba, quería saber de quien era esa risa chillona y que hacia en mi casa. Así que bajé las escaleras en silencio para ver de quien se trataba. Abro mis ojos de golpe a ver que la chica esa, cuya risa chillona molestaba mis oídos, tenía sus brazos enrollados en el cuello de Mike y este tenía sus manos en su cintura por poco tocando sus muslos desnudos, ya  que la chica trae un short de mezclilla negro.

Indignada viendo como hacen gran escenita y en mi propia casa, carraspeo fuertemente. Por suerte —y para el bien de esta tipa— se alejaron.

Me cruzo de brazos viéndolos muy mal.

— ¿Abby? —Mike abre sus ojos como platos viéndome atónito.

Ruedo los ojos, para él es obvio que es sorpresa porque no ha hablado conmigo después de dos semanas. Tampoco no estoy de humor para que me haga preguntas, yo soy la que debe hacerlas, no él.

— ¿Quien más, estúpido? —pregunté sarcásticamente. Puse mi mirada sobre la chica esa cuyo nombre no sé, mantiene su vista baja.— ¿Quien es?

La tipa se levanta rápidamente y se acerca a mi extendiéndome su mano en forma de saludo.

— Oh, yo soy Soph... —la interrumpo mirando con indiferencia su mano.

— Perdón pero le pregunté a mi hermano —le sonreí falsamente. La chica aprieta sus carnosos labios, la intimidé supongo.— ¿Quién es, Mike?

— Ella es Sophie Clark —Mike se pone de pie para luego sonreír y tomarle la mano a esa tal Sophie, ¿Por que demonios le está tomando la mano?— Mi novia.

Mi... ¿Qué? Diganme que escuché mal y esta tipa que apenas conozco y ya me cae mal no es novia de mi hermano, por favor.

¡No puedo creer que Mike! ¡Mi hermano! ¡Mi Mike, esté con esta chica salida de no sé dónde! Por favor, diganme que esto es una broma. Debe serlo.

— ¿Qué? —pregunto saliendo de mis pensamientos y estado de trance.— ¿Es una broma, verdad?

Debe ser una broma.

— No, Abby —Mike niega con su cabeza.— Sophie y yo somos novios.

No puedo creerlo, ¿Cómo es que Mike se dejó seducir por otra chica? Sé que no le conviene, apenas la conozco pero siento que este romance es una farsa. Esta tal Sophie no me da muy buena espina, estoy desconfiando de ella ¡Y ojo! Apenas la estoy conociendo... Pero como dice mi madre, "No juzgues a alguien sin conocerlo antes", pero no sé, es cómo un presentimiento. Y uno malo. Sólo espero que esta chica no haga sufrir a mi hermanito porque juro que yo misma la mato... Y a todo esto, ¿Cómo es que son novios? Yo que recuerde, Mike estaba profundamente enamorado de Sarah y sé que lo está... Ojalá no esté usando a la chica esta cómo su segunda opción y así olvidar a mi amiga.

— Espero que no estés usando a esta chica para olvidar a Sarah —miro a Mike arqueando una ceja.

Mi hermano aprieta sus labios y me hace una seña en señal de que cerrara la boca. Sí, quiere olvidar a Sarah, si no... No estaría tan urgido y molesto. Ni me ordenaría que me callara, aunque no le haré caso. Obviamente.

— ¿Sarah? —Sophie frunce sus cejas y mira a Mike.— ¿Quien es Sarah?

— Um, ella...

Interrumpo a Mike.

— Sarah es la chica de la cuál Mike ha estado enamorado durante siete años —sonrío.— ¿Sorprendente, no?

Sophie baja su mirada algo apenada. Mi hermano se da cuenta de eso y me regaña, ¿En serio va a regañarme por decir la verdad? Que estúpido.

— Abby —me mira muy mal.

— ¿Qué? No es mi culpa que estés enamorado de Sarah —ruedo mis ojos.

Niegamelo Michael.

Pero ni me lo niega ni lo acepta, sólo vuelve a regañarme diciendo mi nombre y tratando de abrazar a Sophie que se ve bastante incómoda.

— Es mejor que me vaya —toma su bolso y se dirige a la puerta. Pero el imbécil de mi hermano va tras ella.

— Soph, hablaremos en el camino al instituto ¿Sí? —la ojiverde asiente. Mike posa su mirada en mi ahora.— Y Abby hablaremos a mi regreso.

Termino de bajar las escaleras de brazos cruzados con una fingida sonrisa.

— No creo que eso sea posible —frunce sus cejas—, iré al instituto hoy al igual que ustedes, hermanito —sonreí.— Así que... ¿Me esperan? Busco mi mochila y nos vamos.

Los par de tórtolos se miran entre sí, no les dejaré irse como la pareja feliz que están aparentando ser, no. En su trayecto tendrán la dulce y grata compañía de Abby James. Mike ha espantado a mis "novios" ¿Por qué yo no? Mike termina por ceder y yo rápidamente me deshago de la toalla que está en mi cabello y corro para buscar mi mochila. Si les soy sincera, noté enseguida a que la "noviecita" de mi hermano no le agradó mucho la idea de que me fuera con ellos.

Mala suerte tienes, muñeca.

Al estar abajo, les sonrío para dar entender que ya podíamos irnos.

En el trayecto notaba a Mike algo... Nervioso y preocupado. Pero me dio exactamente lo mismo, quizás teme que le haga algo malo a su noviecita, ¡Por favor! No soy tan mala cómo para hacer desaparecer a Sophie Clark... Agh, odio su nombre y con tal de pronunciarlo tanto por mi boca cómo en mi mente me da ganas de vomitar. Apenas la conozco pero siento que la he odiado toda la vida... Es algo raro.

En el trayecto fue inevitable hacerle unas preguntas a la tal Sophie, cómo por ejemplo cuando se conocieron y esas cosas.

— Soph, cuñadita —le sonreí falsamente volteandome a verla. Oh, si bebé, yo estoy en el puesto del copiloto no tú.— ¿Cómo es que se conocieron tú y mi hermano?

— Bueno, mmh... Nos conocimos en el club "Moon in that Night" —sonríe. Ese es mi club favorito, era.— Charlando y entre bromas las cosas se dieron, venos como novios ahora.

Vaya, así que esa vez que Mike no estaba en casa fue para conocer a esta tipa.

— Wow, ahora todos mis hermanos tienen pareja menos yo —me cruzo de brazos, fingiendo molestia.— Soy un fracaso.

— ¿Cómo sabes que Ann tiene novio? —Mike voltea a verme.

Esa noche del sábado salí a husmear que cosa pasaba abajo en la sala de estar ya que se oía muchas risas. Y en eso me encontré a todos cenando y riendo con el nuevo novio de mi hermana... Luke Langford, primo de Steve Langford. El mundo es tan pequeño, no quería relacionarme con los Langford en ningún sentido, ahora uno de ellos es mi cuñado. Aunque eso explicaba las ausencias de Annahís en casa... Seguramente estaba allí besándose con su novio Luke. Los estaba observando esa vez desde las escaleras, por suerte no vieron que estaba allí mientras mi familia y mi cuñado cenaban... No me cae tan mal como Sophie.

— Sólo lo sé —me encogo de hombros.— ¿Cuanto tiempo llevan juntos?

Les pregunto aunque ya se la respuesta.

— Tres días.

JAJAJAJAJA... Dios. Okay, Abby deja de reírte en tu mente.

— Oh, vaya eso es mucho —digo tratando de aguantar una risa.

— No hace falta usar el sarcasmo, Abby —Mike rueda sus ojos.

Ya estábamos llegando al instituto, y creanme que le hice la vida casi imposible a Sophie... Insisto con que me da muy mala espina. De hecho, nunca la había visto por aquí en Livingstone pero ella dijo que hace muy poco la transfirieron de otro instituto a aquí, es alumna de intercambio.

Cuando entre junto a mi hermano y mi... Cuñada, ugh, odio llamarla así, me hubiese gustado enormemente que Sarah fuera mi cuñada. Entré al gran instituto y algunas miradas se posaron en mi.. ¿Qué? ¿A caso nunca vieron a un bombón cómo yo? O quizá se sorprendieron verme después de dos semanas... Debo seguir mi vida cómo si no hubiera pasado nada, y de hecho ya estaba mejor hace una semana pero debía aprovechar la situación.

— Bueno, chicos... —les sonrío a Mike y a Sophie.— Me debo ir a clases y enseñarles a estas personas cómo se brilla —dije con aires de egocentrismo. — Ah y Soph... Un gusto conocerte.

Me sonríe y me despido de mi hermano y ella. No hace falta decir que las miradas curiosas otra vez se posaron en mi, hablando y diciendo no-sé-que cosas entre ellos. Y no es que me importe, me da lo mismo.

Era tarde como para ir a ver a mis amigas donde sea que estén, aunque Jess comparta clases conmigo igual la veré. Estoy... Nerviosa, la verdad que me contaron mis padres es terrible y la verdad es que pone en riesgo mi amistad con ellas.. Tengo miedo y no quiero perderlas.

Miles de esos pensamientos se posaron en mi mente llenandome de preguntas, pero no les tomaría importancia, ya sé de que se trata. Mis amigas para mi son demasiado importantes y perderlas por... Esto, me daría mucha rabia e impotencia.

Olvidando todo eso, me acerqué como si nada pasara a mi casillero. Cerca de allí habían chicas chismoseando quien sabe que cosa, pero seguramente es de mi y mi llegada, ¿Les dije que era muy conocida? Bueno, si no lo hice... Ahí está la prueba. No faltó ni dos minutos para que otras personas me vieran y dijeran cosas realmente estúpidas:

Oye, escuché que le dijeron a Abby que es adoptada y por eso no había asistido a clasesdice la chica castaña.

¿¡What!?

Imposible.. La vi con su hermano hoyla pelirroja se encoge de hombros.

Sólo lo hacen para que todos crean que estan normaldice la otra chica obvia.

Aburrida de sus estúpidas e incoherentes suposiciones me acerco a ellas y las miro mal, ¿Quien demonios se creen para hablar de mi y de mi familia?

— Chicas, ¿Las interrumpo? —les sonreí falsamente, otra vez. Se me hizo una costumbre.— Escuché que andan hablando de mi y por favor les pediré que callen ese pico de cotorras que traen —me miran atentamente y avergonzadas.— Si no quieren que sus traseros queden atascados en el cesto de baloncesto del gimnasio, primera advertencia.

Después de eso, me fui. Amaba intimidar a los estúpidos, y no sé cómo es que me sale muy bien. Siempre salen corriendo o quedan frente de mi tartamudeando y es en verdad muy gracioso. Olvidé a lo que iba a mi casillero pero no me importaba, si vine aquí fue para asegurarme que esa Sophie no se acercara mucho a mi hermano —aunque será imposible porque son novios—, además de que debo continuar mi vida normal.

Iba a dirigirme al baño de mujeres, de la nada sentí las necesidades de ir a hacer pis. Pero no pude porque un chico que creo que es del salón de Steve me detiene y me entrega un sobre.

— ¿Qué es esto? —le pregunto frunciendo mis cejas.— ¿Una declaración de amor? Dejé claro que...

Ríe.

— No, boba —rueda sus ojos cafés.— Esto te lo envía Steve, ¿El contenido? Ni idea, sólo me pidió que te lo entregara.

Asiento lentamente y le doy las gracias por entregarmelo.

Confundida me adentro al baño, que por suerte estaba vacío. Al parecer ya tocarán la campana e iniciarán las clases de hoy, pero primero debo ver que es esto que Steve me envía, aunque ya tengo una idea al respecto.

Abro la pequeña apertura del sobre blanco y veo que tiene dinero dentro y un pequeño papel doblado por la mitad junto a los cincuenta dólares. Saco la nota y la desdoblo para ver que decía:

Abby, aquí está lo que te prometí. Gracias por ser parte de esto y de mi mentira, los cincuenta dólares están ahí en el sobre... Cuentalos si quieres. Eso y... Gracias, otra vez.
                                Steve L.

Frunzo el ceño y empiezo a contar el contenido, sé que Steve no me fallaría pero tenía que asegurarme.

Por otra parte me confundió que él no haya venido personalmente a traerme el dinero acordado esa vez. Pero no, decidió mandar a otro chico... No lo sé, es raro. Digo, si fuera yo quien debería entregar tal dinero no se lo entregaría a cualquier persona y le dijera: Toma y entregáselo a.. Una persona X, por ejemplo. Soy algo desconfiada. Y pienso que no debió hacer eso, pero bueno es su dinero. Ahora mío.

No estoy conforme con mis conclusiones, mi instinto dice que Steve algo me oculta y es mejor que vaya y se lo pregunte personalmente. A lo mejor, algo tiene que ver con que no haya venido a entregarme el dinero él.

Y lo mejor será que me lo diga.

Sarah.

Nada.

Ni una sola llamada de Abby. Es como si se la hubiera tragado la tierra pero según su hermano está enferma... ¿Saben? No le creo mucho ese cuento de que mi rubia mejor amiga esté enferma, osea... Ella a asistido muchas veces en peores condiciones de salud al instituto, por eso es que no creo mucho que esté enferma.

Y si ese fuera el caso, espero a que se mejore y vuelva pronto ¡O que al menos nos llame! No tiene idea cuanto estamos preocupadas por sus inasistencias y su salud. Tampoco contesta nuestras llamadas, una vez intenté convencer a Mike de ir a verla pero me dijo que Abby contrajo un virus y es muy contagioso, por lo cuál, debe estar aislada.

¿Es en serio? Yo creo que son puras mentiras. Habría que oírlo de la boca de ella.

Resoplo y bajo la cabeza apoyándola sobre mi pupitre mirando cómo Mike teclea algo en su teléfono. No estamos sentados juntos hoy, porque por suerte que hoy nos toca con otro profesor y este no sabe muy bien nuestros asientos asignados por otros profesores y si lo supiera le daría igual, cómo suele decir "Mi clase, mis reglas". Es cómo la frase estúpida que dice Mike refiriéndose a su auto.

Hablando de Mike, recuerdo esa vez que lo encontré —más bien, Matt lo encontró— viéndonos por su ventana, fija y celosamente cómo diría mi mejor amigo. No entiendo porqué Mike se habrá puesto celoso, sé muy bien que dijeron que este andaba coqueteando con ciertas chicas hasta lo hacia conmigo... Quizá no está enamorado de mi como solía decir siempre y solamente está coqueteando conmigo sin ninguna otra intención.

Pero por otro lado, cuando vi a Mike viendo a Matt con ese rostro serio que siempre pone cuando algo le molesta y Matt luego me explicó que Mike estaba celoso... Sentí unas ganas de sonreír pero no lo hice. Los celos implican que aun él está enamorado de mi, ¿No? Ojalá pudiera ser así porque nunca lo intenté con él por miedo a lo que digan mis padres, me prohibían que saliera con chicos y si lo hacia, siempre fue en secreto. No entiendo porqué no me dejaban.

Para mi mala suerte, Mike nota que lo estoy viendo en este instante por lo que me saluda con una leve sonrisa dejando su celular de lado. Le respondo la sonrisa.

Antes de que hiciera algo más, tocaron a la puerta interrumpiendo la clase del profesor, al menos no le molestó. A muchos profesores les siele irritar que los interrumpa

— ¿Que se le ofrece, señorita? —escucho que el profesor le pregunta a alguien.— ¿Alumna de intercambio?

Frunzo el ceño y miro a Lu que está igual que yo, ¿En serio están aceptando alumnos nuevos? Porque ya estamos por entrar a septiembre y no creí que aun estuvieran aceptando a nuevos, pero cómo dijo el profesor... Es alumna de intercambio.

— ¿Quien crees que sea? —Lu me susurra acercándose a mi oído.

— Ni idea, es alumna de intercambio —me encogo de hombros.— Quizá es una niña rica.

Veo de reojo que Mike tiene en su rostro una sonrisa plasmada, ¿Por qué estará tan sonriente?

— Adelante, y preséntese ante sus nuevos compañeros —el profesor se hace a un lado para dejar pasar a nuestra nueva compañera.

Veo a una chica castaña con una sonrisa adentrarse al salón, lleva un short negro de mezclilla y una camiseta color rojo. Su mochila está colgando sobre su hombro, mientras mira por todo el lugar pareciendo buscar a alguien. Cuando veo que posa la mirada en Mike, sonríe y viceversa.

¿A caso se conocen?

— Alumnos por favor, exijo respeto y silencio para su nueva compañera. Saben que es difícil estar aquí adelante —El profesor nos regaña por estar surrando y hablando cosas —que nosotros pensamos— de la chica nueva.

Vuelve a poner su mirada en la chica y le asiente con la cabeza levemente en señal de que puede proseguir. Ella suspira.

— Mi nombre es Sophie Clark, vengo del instituto Miami high School, me transfirieron hace pocos días y la verdad es que estoy algo nerviosa —sonríe otra vez. No se le nota. — Pero realmente espero hacer buenos amigos aquí.

El profesor se le acerca para decirle que asiento puede tomar, pero Mike se le adelanta, ¿Es en serio? Ugh.

— Profesor, aquí hay un asiento desocupado —Sophie vuelve a sonreír clavando sus ojos verdes en Michael.— Sí Sophie gusta... Puede sentarse junto a mi.

Aprieto mi mandíbula viendo como esta tal Sophie y Mike se dan miradas mientras sonríen, me sigo preguntando si se conocerán de algún lugar. Osea, no es normal que si apenas se conozcan anden sonriendose así.

La tal Sophie asiente y se acerca a Mike manteniendo esa sonrisa cómplice que desde que entró aquí tiene. Se me es imposible despegar mi mirada de ellos... Ugh, no se que es lo que siento al verlos juntos pero quizá es hambre.

Sí, es hambre.

(...)

¿Estás segura de eso? —me pregunta Jess.

Asiento introduciendo otra cucharada de mi helado en mi boca. Les estaba contando a Jess y Lucy lo que vi esta mañana, como esa tal Sophie y Mike se estaban mirando y sonriendo de una forma totalmente extraña para mi.

— Osea, recién se conocen —elevo mis cejas.— ¿No les parece raro que se miren y sonrían así a tan sólo conocerse hoy?

Lu mira a Jess con una expresión seria, vuelve a poner su mirada café sobre mi para luego estallar en risas. Jess se le une, a lo que las miro molesta.

— ¿Qué es tan gracioso? —frunzo mis cejas.

— Lo que pasa Sarah, es que tú estas celosa —dice Lucía al fin.

Jess señala con su tenedor de plástico a Lucy dándole la razón a lo que dijo ¿Yo? ¿Celosa? Pff, por favor... De algo del cuál no me caracterizo es por celar a la gente, ni mucho menos a esa tipa que recién estoy conociendo.

Es más, ni le he hablado.

— ¿Qué les hace pensar que YO —me sañalo.— Sarah Williams, voy a estar celosa de ella?

Jess abre su boca para decir algo pero no dice nada, se queda muda mirando la puerta de la cafetería con una expresión de asombro y confundida. Extrañada volteo mi cabeza a esa dirección y veo que hay una chica rubia caminando hacia la barra de comidas...

Abby.

Lleva en su cara plasmada una gran sonrisa, mirando cómo ella no más sabe a los demás estudiantes. En su bandeja carga una hamburguesa y una soda, al vernos sonríe levemente acercándose a nosotras.

Luce radiante cómo para estar enferma durante dos semanas.

— Hola, chicas —se sienta junto a Lucy, frunce sus cejas al ver que todas estamos asombradas de tenerla aquí otra vez.— ¿Qué? ¿No me extrañaron?

Sonríe juguetonamente a la vez que nos ponemos de pie para ir a abrazarla y llenarla de preguntas como por qué no contestaba mis llamadas y ni siquiera llamaba.

— ¿Que te pasó? ¿Por qué no viniste a clases? —Lu le pregunta.

— Tus padres y Mike dijeron que estabas enferma —digo.— Dijeron que tenías un virus muy contagioso y por eso estabas encerrada en tu cuarto.

Ella aprieta sus labios rosados.

— Sí, estaba congestionada, me dolía mucho mi garganta y tenía algo de fiebre. Mi cabeza me mataba —asiente.— Era es un virus que se contagiaba con el aire, pero ya estoy mejor.

Se encoge de hombros.

— ¿Por qué no nos llamaste? —vuelvo a preguntar.

— Porque... Estaba muy débil como para contestar llamadas —hace una mueca.— Y sí no las llamé es porque no tenía saldo.

Asentimos. Todo parece ser coherente y cierto, de todos modos, estoy feliz de que esté aquí otra vez. Aunque no es cómo si se haya ido a otro continente.

Nos pusimos al día contando muchas cosas que nos habían pasado, las veces que Jess fue a detención, las que Lucy comía solamente ensaladas y las que yo me dormía en clases. No le conté a Abby la supuesta y extraña relación que tiene su hermano Mike con la nueva... Sophie. Quizá, enterarse, haría que se enfadaría.

Y hablando de los reyes de Roma.

Mike y Sophie se adentran a la cafetería con una gran sonrisa en su rostro, ambos están riéndose de quién-sabe-qué mientras el hermano de Abby tiene el brazo de Sophie entrelazado al suyo caminando hasta la barra. De ahí sacan dos botellas de agua y fruta, bueno, Mike una manzana y Sophie una banana.

Se dirigen hacia la mesa donde están los amigos de Mike charlando animadamente, por qué siento que también la conocen. Esto es sospechoso.

Abby voltea a donde estoy viendo, y al ver a su hermano con ella frunce sus cejas y resopla molesta. Se para de su asiento y se dirige a ellos con una sonrisa bastante falsa...

¿Celos de hermana?

No justifiques los celos de Abby con los tuyos.

No estoy celosa, ¿Sí?

Puedo ver que Abby está hablando con ellos y en eso nos apunta a nosotras, donde Mike y Sophie nos miran. Volteo rápidamente mi cabeza, que estúpida.

— ¿Esa es la chica de la que estabas hablando? —me susurra Jess acercándose a mi. Asiento.

Esa es la tipa.

Abby se acerca a nosotras con Sophie y Mike detrás de ella siguiéndola. Mike les hace una seña a sus amigos invitándolos a nuestra mesa. Maldición.

¿Por qué las mesas deben ser tan grandes? ¿Y por qué Abby los invitó?

Ya que todos estábamos aquí, hablamos normalmente y riendo de los chistes malos que contaba Niall pero sin duda eran graciosos por la forma en que los contaba. En algunas ocasiones sentí la verdosa mirada de Sophie sobre mi... ¿Por que me estará viendo?

Ignorándola seguí charlando con los chicos de cosas estúpidas como por ejemplo cual profesor era el más molesto o el más divertido. Entre debate y debate, los minutos pasaban, este era el receso más largo de todos los días.

Sophie decidió hablar preguntandonos los nombres a nosotras.

— Um, chicas... —la miramos.— ¿Cómo se llaman ustedes? Tengo entendido que son amigas de Abby.

Asentimos con la cabeza.

— Yo me llamo Jess Stone — Jess eleva sus cejas.

— Mentira, se llama Jessica —habla Niall.

— No te metas, Johnson —le dice Jess en tono de advertencia mirandolo mal.

Sophie ríe.

— Un gusto, Jess —dice para luego mirar a Lucy.— ¿Y tú? ¿Cúal es tu nombre?

— Soy Lucy Willson —le estrecha la mano en forma de saludo.— Voy en tu misma clase junto con Sarah.

Lu me señala. La castaña de ojos verdes posa su mirada en mi y eleva sus cejas. Mike se remueve incómodo y... ¿Algo nervioso?

— Así que tú eres la famosa Sarah —sonríe asintiendo con su cabeza.

Frunzo mis cejas, ¿Famosa Sarah? ¿Quien demonios le estaría hablando de mi a ella? Ni siquiera la conozco.

— Um... Sí, me llamo Sarah Williams —le sonrío.

Ella mira a Michael quien trata de no toparse con su mirada por lo cual mira hacía a otro lado. Está mirando con nerviosismo.

Para relajar el ambiente decido ahora yo hacerle preguntas a Sophie.

— Y... ¿De donde te conoces con Mike? —le sonrío, falsamente.

Ella levanta la mirada confundida, oh sí, no serás la única quien haga preguntas, querida Sophie. Será mejor que respondas para salir de mis dudas.

— ¿A caso Mike no te lo dijo? —me pregunta. Mike tensa su rostro.

— ¿Decirme qué? —le pregunto.

— Mike y yo... —le toma su mano, entrelazandolas.— Somos novios.

*editado*

Continue Reading

You'll Also Like

97.8K 8.1K 65
Sus métodos de espantar a los hombres han mantenido a Melanie Grey a salvo de cualquier traición o decepción. Una estrategia que ha funcionado exitos...
597K 52K 55
"El día que empecé a extrañarla, ella dejó de quererme" Jeon Jungkook es un padre soltero, en busca de su propio bienestar, no parece estar preocupa...
21.5K 3.1K 36
Mr. Encantador es uno de los autores más populares de Wattpad. Escritor de novela juvenil romántica, tiene casi un millón de seguidores en la platafo...
800K 48.8K 89
Llene de aire mis pulmones, tratando de tomar el valor que aun me faltaba-tienes que hacerlo, es por salud, por tu propio bien- me repetía - tu puede...