Àlex no consigue la pole. Pero si queda segundo en la Qualy. El que si queda primero es Marc. Marta ni escucha las protestas de Cristina y la arrastra fuera del circuito. Ya disfrutará mañana domingo. Ahora lo que quiere la mayor de las hermanas a dejar a la otra en el hotel y volver para ver a los chicos sin tener que estar pendiente de Cristina.
Y eso hace. Cristina no está feliz con la decisión de su hermana pero le toca obedecer. Ha sido ella la que la ha traído y sin pedírselo ella antes. No va a cagarla y que ya no quiera traerla más. Si es que vuelve alguna vez. A saber.
Marta deja a Cristina y vuelve. Casi preferiría que se hubiera quedado allí o se hubiera ido sola. Saca el móvil una vez de vuelta y le habla a Marc.
Marta:
Campeón del mundo. ¿Se te puede ver?
Marc:
Claro. ¿Àlex también entra en el pack?
Marta:
Si quiere verme sí
Marc:
Se lo preguntaré pero creo que será un sí.
Marta:
Mejor no le digas nada.
Marc:
Vale. ¿Dónde nos vemos?
Marta:
Dónde mejor te venga.
Marc:
Dime dónde estás y voy.
Marta:
En la entrada.
Ya Marc ni responde. Ve el mensaje y sale directo a buscarla. Menos porque Àlex lo para.
-¿A dónde vas con tanta prisa?
-Necesito arreglar un problema con una persona. Luego te cuento.
-Vale misterioso.
Lo deja seguir a donde iba y cuando su hermano pequeño ya no lo ve echa a correr para llegar antes a donde está Marta.
-Lo siento me han entretenido un poco.
-No pasa nada Marc.
-¿Damos una vuelta?
-Claro.
Los dos chicos se ponen a dar vueltas por el circuito hablando de todo lo que se le ocurre. Nada del otro mundo. Marta le pregunta por la moto. Por cómo cree que irá mañana. Marc pasa de hablar de trabajo y cambia de tema enseguida.
-Ya se verá Marta. Pero ahora no quiero hablar de eso. Cuéntame de ti. ¿Qué es lo que estudiabas?
-Periodismo.
-¿En Almería?
-No. En Madrid. Aunque si te soy sincera había llegado a pensar en irme a Barcelona o Lleida.
Marc al oírla sonríe.
-¿Te gusta la idea?
-Sí. Y se de alguien que se volvería loco si lo supiera.
-Por él fue por lo que empecé a querer irme...
Marta baja la mirada tras reconocer que fue Àlex quién la empezó a volver loca a tal nivel de querer renunciar a todo lo que conocía. A la estabilidad que tiene ya e irse sin más a un sitio que no conoce y dónde tendría que aprender un idioma que nunca le gustó ni oír.
-¿Te gusta mi hermano?
-¿Àlex? No es mal piloto. Sólo ha tenido muy mala suerte.
-No me refería a como piloto.
-No conozco a tu hermano bien. Ni siquiera sé si fingia su forma de ser también.
-Yo nunca he fingido. Sólo me cambié el nombre un poco.
-Súper original vaya.
-Lo primero que me vino a la mente.
-Marquitos. Tienes muy poca imaginación.
-Marc. Me llamo Marc.
-¿No te gusta que te llame Marquitos?
-No.
-Pues Marquitos entonces.
Marc la mira con mirada atravesada y luego pasa. Con esa chica no se puede pelear.
-Martita no me cabrees.
-¿Y Àlex?
-Ese sabe que no es bueno cabrearme.
-¿Qué dónde lo has dejado?
-Ahh. Pues... No sé dónde está la verdad. ¿Es muy urgente?
-No. Da igual. Sólo quería desearle suerte para mañana.
-Se lo diré yo después.
-Vale.
Siguen dando una vuelta por el circuito hasta que ya no hay más que ver.
-Bueno. Ha estado bien pasar un rato contigo. Gracias por tu tiempo Marc.
-Gracias a ti por hacerme pasar un rato bastante divertido. Necesitaba esto.
Marta no sabe que hacer así que se da la vuelta y se va alejando. Pero Marc la alcanza y la agarra. Marta se da la vuelta al notar que la agarra y se queda a nada de Marc. Ninguno reacciona al verse tan juntos. No saben que hacer. No hablan. No se mueven. No reaccionan.
Marta lo mira. Pero no sabe como moverse. O si hacer lo.
-Marc...
-Di.
-¿Me sueltas y me dejas irme antes de que nos pille un paparazzi y la liemos?
-Claro. Sólo quería decirte que tuvieras cuidado.
-Lo tendré.
Le da un beso en la mejilla antes de soltarse y luego se va. Corriendo una vez que ya Marc está lejos.
Llega al hotel y pasa olímpicamente de Cristina que la mira con mala ostia.
-¿Mejor?
-¿Ehh?
-¿Qué si ya estás mejor?
-Sí.
-¿Ha pasado algo?
-No. Descansa. Mejor dicho, descansemos las dos. Mañana va a ser un día pesado.
-Día de carreras. Bueno. Mañana nos vemos.
Las dos se van a la cama hasta la mañana siguiente.
Bastante temprano se despiertan y se preparan para desayunar y luego salir para el circuito.
Una vez que llegan van a las gradas y se quedan calladas. No saben que decirse una a la otra. Cristina nota que le pasa algo a Marta. Pero prefiere no preguntar. Lleva rara todo el fin de semana. Desde el jueves por la noche.
-¿Es por mí?
-¿Qué?
-¿Qué si estás así por mí?
-No hermanita. No es por ti.
-Vale.
Y ya no hablan más. Marta le manda un mensaje a Àlex antes de empezar Moto3.
Marta:
Suerte en la carrera campeón. Querría decírtelo en persona pero prefiero no molestar. Y tampoco puedo dejar sola ya más a Cristina.
Àlex:
Gracias. Sí cuida de tu hermana no se vaya a matar. ¿Nos vemos después?
Marta:
Luego te digo. Ahora concentrate en la moto y la carrera de después.
Y se desconecta. Ven la carrera de Moto3 y cuando llega la hora de Moto2 las dos hermanas están de los nervios. Àlex sale segundo.
Vueltas, vueltas, vueltas... Pasan las vueltas y los nervios cada vez van a peor. Y... ¡2°! Àlex acaba la carrera segundo. Cristina y Marta se ponen a gritar y a saltar de alegría. Podio para el Pistolas. Corralito, podio y todo sigue.
Marta:
Suerte hormiga. Más te vale ganar hoy.
Marc:
¿Lo dudas?
Que creído se lo tiene a veces. Claro que no lo duda. Pero aún puede pasar cualquier cosa.
Pasa el tiempo y empieza la carrera de MotoGP. Marc saliendo primero. Y primero acaba el niño. Como no. Feliz claramente todos.
Una vez que acaba todo y el circuito está más tranquilo y ya van a salir cuando suena el móvil.
Àlex:
¿Nos vemos al final?
Marta:
Lo siento Àlex. No puedo dejar sola a mi hermana sola de nuevo.
Àlex:
No molesta.
Marta:
Vale. ¿Dónde nos vemos?
Àlex:
Yo te busco.
Marta:
Vale.
Àlex aparece un rato después y Cristina se vuelve loca al ver por quien estaban esperando.
-¿Àlex Márquez?
-El mismo.
-No te mueras Cris.
-No, no. ¿Puedo sacarme una foto contigo?
-Claro.
Àlex le coge el móvil a Cristina y se sacan la foto. Nota a Marta media ida. Y cuando va a hablarle suena el móvil.
-Lo siento. Ahora vuelvo.
-Claro Marta.
Marta se va para hablar y le responde a Marc.
-Dime bicho.
-¿Nos vemos?
-Estoy con tu hermano y con mi hermana.
-Yo me refería a nosotros solos.
-Vale. Ahora voy. Deja que me disculpe con Àlex.
Y cuelga. Vuelve con Àlex y Cristina y se disculpa para ir con Marc.
-Lo siento. Tu hermano quiere que la ayude con una cosa. Vuelvo en nada.
-Vale. Tranquila.
-¿Por qué Marc te llama a ti en vez de a Àlex?
-No lo sé. Pero tampoco creo que te interese Cristina. Adiós Pistolas. Ahora vuelvo. No te vuelvas loco con mi hermana.
-No. Sabré aguantar.
Marta se va y va a dar con Marc. Hablan y hablan. Dando una vuelta por el circuito nuevamente. Hasta que deciden volver a dónde deben seguir Àlex y Cristina.
Van tan tranquilos y de repente Marc para a Marta y se le queda mirando.
-¿Qué pasa Marc?
-Esto...
-¿Sí?
-Da igual.
-Dime Marc.
Y entonces se lanza. Ni se lo piensa. Y la besa. Marta no reacciona. Al principio. Y cuando ya va a reaccionar y apartarse...
-¡¿QUÉ COÑO?! ¡¿ESTÁS CON MARC?!
Se dan la vuelta los dos y se ven a Cristina, que es la que ha hablado, con la boca abierta sin creerse lo que ve. Y a su lado Àlex. Que no sabe que decir.
-Àlex. Àlex escuchame. No es lo que parece.
-No tienes nada que decirme. No me debes explicaciones. Me alegro por vosotros.
Y se va. Marc la mira y luego mira como se va su hermano. Marta le da un beso en la mejilla y le dice que lo siga. Y entonces ella se va ahora sí al hotel con Cristina.
Cuando llega no deja de llorar metida en la cama.