Me Llaman Pistolas (MLLP 1)

Capítulo 31: ¡¿QUÉ TE HAS TIRADO A QUIÉN?!

Marta como dijo no fue a la Universidad. Se metió en la cama y no se despertó hasta que el huracán Claudia la sacudió y la hizo levantarse.

-Joder contigo. ¿Qué quieres?
-Saber que es de tu vida.
-Pues nada interesante. Me he enamorado de un piloto de Moto2 catalán que anoche me ha hecho de todo y luego se ha ido más seco que un sobado de vuelta a Lleida.
-Ahh, muy interesante. Ahora la verdad.
-Te la he dicho. Anoche me tiré a Àlex Márquez aquí mismo.
-¡¿QUÉ TE HAS TIRADO A QUIÉN?!
-Àlex Márquez Alentà. Piloto de Moto2. De un pueblito catalán llamado  Cervera.
-Ya sé quién es. ¿Pero me vas a contar que coño hacía alguien como él aquí?
-Lo conocí en Cervera cuando lleve a mi hermana y al final...
-¿Y cuando me lo ibas a contar?
-¿Cuándo te viera?
-Vale, vale. ¿Y como es?
-No te pienso contar eso.
-Entendido. Eso va a ser un... Déjame pensar... Un me ha dejado muerta.
-No vas muy mal. Pero que eres increíble tía. Y ahora me vas a contar como cojones te has quedado embarazada.
-Me arte de la píldora y parece que a sido en el peor momento para mandarla a la mierda.
-Si es que ya te vale tía.
-Pero que no te me duermas marmota. Ahora me cuentas todo. ¿Como es?
-Alto, moreno, ojos marrones verdosos, sonrisa permanente, muy delgado, amable, gracioso, un amor de niño.
-Hablas como si le sacaras 20 años.
-Dos meses y pico.
-Ahh, que al final si que eres mayor.
-Claro. Yo con mayores no me junto.
-Pues liamos a Almudena con Marc.
-Anda calla, que mi hermana casi lo viola ayer por la mañana. No sabía donde meterme.
-¡¿QUÉ CRISTINA QUÉ?! Anda con la niña, pero como aprovecha la tía.
-Dios pero Marc es mucho para ella. Eso es mucho hasta para mí.
-Uy sí que te saca 20 años.
-Cállate gilipollas que al final tu novio se queda sin pareja porque te encuentra asesinada.
-Prometido.
-Ahh, bueno pues pro... ¡¿QUÉ?!

Y Claudia le enseña la mano con un precioso anillo.

-¡OSTIAS! ¡¡ESTO SE AVISA HIJA DE PUTA!!
-Pues no te pierdas por esa Almería tuya tía.
-Que te casas y vas a ser madre. ¿Oye eso es una arruga?
-No estoy vieja idiota.
-Que planches la ropa te digo. Eso o intenta no tirarte a Adrián antes de salir para la Universidad.
-Idiota.
-Sólo es un consejo. Ahora déjame sola.
-Vale, vale. Adiós marmota.

Claudia se va a su habitación y deja sola a Marta. Que cuando se da cuenta tiene un mensaje de la que se acaba de ir.

Claudia:
Marta que se me ha olvidado decirte que no hagas planes para el 17 de febrero.

Marta:
No voy a celebrarlo este año. No tiene nada de especial los 21.

Claudia:
Venga que podría ser el último que pasemos juntas.

Marta:
No. El 17 de Febrero este año ya no es mi cumpleaños.

Claudia:
Celebremos el de tu cuñado entonces.

Marta:
¿Mi cuñado?

Claudia:
Marc Márquez. ¿No te has liado con Àlex? Pues es tu cuñado.

Marta:
¿Cumplo el mismo día que el idolo de mi hermana y aún no me había enterado?

Claudia:
Eso si que es raro. Bueno pero que lo es y ya sé que sólo estamos en noviembre, pero vamos a celebrar algo ese día sí o sí. Tu cumpleaños, el de Marc, o lo que te de la gana. Pero salimos.

Marta:
👍

Marta bloquea el móvil y se pone a pensar. En Madrid tiene a esas dos locas. Pero un cambio de aires nunca está mal. Ahora en mitad de curso no, aunque no va a aprobar ni soñandolo las asignaturas de este cuatrimestre así por la cara. Cuando no se ha ido a la otra punta del mundo ha estado en Almería queriendose morir.  Podría recuperar de alguna manera tanto tiempo perdido pero no cree poder aprovar. El mes que viene ya son los exámenes y no se ha mirado nada. Pero en sus pensamientos sigue ahí la idea de irse a Lleida. Y no es por tener más cerca a Àlex, que un poco también. Es que ya Madrid le aburre y ese le parece un buen lugar para irse. Lo único es el idioma. Pero ya se las arreglará para eso. Ahora tiene preocupaciones más importantes.

Mientras en Cervera el pequeño de los Márquez está en las nubes pensando en sus cosas.

-¡¡ÀLEX!!

Y no responde. Ni si quiera lo ha escuchado.

-Pues nada. Ya le diré a Marta que no quieres verla.

Y ni por esas. Àlex no reacciona. Y a Marc ya no le queda de otra que sarandearlo.

-Tierra llamando a Àlex. Joder, ¿pero que cojones le pasa a este hoy?
-Estoy bien. Déjame tranquilo.
-No. No estás bien. ¿Le ha pasado algo a Marta?
-No. Está perfectamente. ¿Pero que tiene que ver ella conmigo?
-Pues que sois pareja ¿no? Vais a... Bueno sabes de que te hablo.
-Tenemos que hablarlo aún.
-¿El qué?
-Nada Marc. Cosas mías.
-Vale. ¿Pero están bien?
-Sí. Muy bien.
-¿Y tú? ¿Te pasa algo hermanito?
-Estoy bien Marc.
-¿Seguro?
-Sí. Me voy a mi cuarto.
-Vale.

Y Àlex se levanta y se va a su cuarto. Se tumba en la cama y se acaba dejando dormir tan tranquilo encima.

Se despierta un par de horas más tarde con el sonido de una llamada entrante. A saber quien le llama. Coge el móvil y responde sin mirar.

-¿Sí?
-Hola Àlex. Soy Marta.
-Ahh, hola. ¿Ha pasado algo?
-No, no. Sólo quería hablar.
-Ahh, vale.
-Es que te vi tan... seco cuando te fuiste. Sólo quería saber si te pasaba algo conmigo.
-No. No tengo nada en contra de ti. Sólo estaba cansado Marta.
-¿Llegaste bien?
-Sí.
-Mejor te dejo tranquilo. Veo que no quieres hablar.

Y cuelga sin decir nada más. Àlex se queda con una cara de imbécil increíble. Tiene que hablar con ella. Pero por teléfono no es una opción. Así no van a llegar a ningún lado.