¿Qué más da, jugar con una tercera persona? ¿No? Al fin de cuentas eso piensas de mí. – y sin más me pego un puñetazo en la cara.
¡¡Ja!! Que sepas que si ellas quieren estar conmigo, es asunto de ellas, no tuya. Así que no te metas en donde no te llama. – y sí más salí de ese pequeño apartamento y me dirigí al mío.
Me dirigí a mi casa estaba realmente cabreado por lo que había pasado, él solo me ataco a preguntas y me acuso sin ninguna prueba, me cegué por la rabia y eso es lo que paso, cuando llegue entre sin pensar, encontrarme con una imagen que me bloqueo, Hinata estaba tumbada y Sakura tenía un... ¿un miembro en su mano?
¡¡BUUUAAA!! Lo siento, de verdad yo pensé... - se comenzaron a vestirse las dos, mientras yo me giraba muy rojo por lo visto. – yo pensé que ya habían terminado han pasado más de dos horas. – les dije espaldas para no verlas.
Tienes razón Naruto ya han pasado, pero... - mientras lo decía miraba a Hinata con una cara de pervertida que no savia que tenía, que me puso los pelos de punta, Esta Sakura, era una Sakura que yo no quería conocer. - como no venias yo... me anime a jugar con esto. – y me mostró un montón de juguetes sexuales. Hinata se puso roja como un tomate cuando vio a su amante, mostrándome todos los juguetes que tenían.
¿¡Pero... pero Sakura donde lo has sacado todo eso!? - le dije impactado por la cantidad y diversidad de esos juguetes que tenía.
¿Te puedes quedar con alguno si quieres, Naruto? – eso ya me mato me quede en blanco... que yo... - claro, así te acostumbras y no te dolerá tanto cuando pase tu primera vez, ¿no?
¿Acostumbrarme? ¿Doler? ¿De... de que hablas? – dije casi asustado por las ideas, que se me estaba pasado por la cabeza.
No lo sabe a las parejas de chicos, utiliza su... - Hinata interrumpió a Sakura cuando se dio cuenta de la herida de la cara de Naruto y su labio mordido.
¿Qué te ha pasado en la cara y el labio? – dijo Hinata mientras tocaba la cara de Naruto con delicadeza para no hacerle más daño.
¡Es verdad! se te está hinchado la cara, vamos a por hielo. – dijo Sakura que parecía culpable por no a verse dado cuenta de las heridas. Fuimos a la cocina e Hinata preparo una bolsa de hielo para ponérmela en la cara, mi cara cambio cuando me acordé de lo había pasado antes de llegar.
¿Qué ha pasado, Naruto? – dijo Hinata muy preocupada por mis heridas y mi estado de ánimo, Sakura comenzó a curarme y me aparte la bolsa de hielo de la cara.
Bueno... - dije agachado mi cara por la pregunta de la morena. – me lo encontré mientras iba al Ichiraku a comer y fuimos juntos, todo parecía ir bien. Pero... - un nudo se formó en mi garganta y un gran dolor en mi pecho que no permitía hablar. - bebimos... un poco de sake y él... comenzó a preguntarme por vosotras, ¿qué si estábamos juntos los 3? ¿Que no jugara con vuestros sentimientos? y me dio tanta rabia, que lo bese, bueno ya veis los resultados, ¿no? – Hinata me abrazo muy fuerte para consolarme, mientras Sakura me cogió la cabeza y me beso tiernamente en la frente. Las abrace a las dos por la cintura y puse mi cabeza en el hombro de Hinata. – lo sabía Hinata, él nunca... - y unas lágrimas salieron de mis ojos, no lo pude evitarlo, estuvimos unos minutos así hasta que me tranquilice. – será mejor que volváis a casa es tarde. - ya tranquilo, me fui a mi habitación y me senté. Sakura me siguió preocupada.
¿Estás mejor, Naruto? –se sentó a mi lado.
Sí, estoy mejor, lo siento por preocuparos así. – en ese momento, Hinata vino hasta mí con un vaso que tenía una infusión.
Tómalo te irá bien para descansar. - dijo Hinata mientras me daba ese vaso, bebí un poco y lo sujete con ambas manos.
Es tarde sería mejor que volvierais a casa. – ellas se miraron entre sí y...
No te vamos a dejar solo ahora Naruto, sé por lo que estás pasando y es mejor que nos quedemos aquí hasta mañana. – dijo Sakura e Hinata insistió con la cabeza.
Pero solo tengo la cama y no es muy grande que digamos, de verdad estoy bien, podéis dejarme solo. – Sakura me puso la mano en la cara y...
No te vamos a dejar solo en estos momentos, Naruto. – gracias a dios que las tenía a ellas, nos acostemos el mejor que pudimos y nos quedemos dormidos los tres.
Me desperté porque Sakura me había pegado una patada en la pierna, la verdad, es que era más bruta que un caballo, me senté, ella estaba espatarrada e Hinata ya se había despertaba, me dirigí a la cocina y ella estaba preparando algo de desayuno para los tres.
Buenas ¿Cómo te encuentras esta mañana? – dijo la morena, con una sonrisa que hizo que me animara.
Bien gracias a ti y a Sakura, me ayudaron y ahora me encuentro mejor. - aun me sentía deprimido, pero no quería que se preocuparan de mí.
Venga Naruto no digas tonterías. – dijo Sakura que se había levantado de la cama tocándose la espalda. – es imposible que estés bien, solo ha pasado una noche, además hay que hacer algo con esa cama.
¿El qué? – dije sin saber a qué se refería.
¿Cuándo fue la última vez que cambiaste el colchón o el somier? – me quede mirado la cama, preguntándome a mí mismo esa pregunta.
Creo que nunca ¿Por qué? – Sakura se quedó sorprendida e Hinata no dijo nada solo se rió sutilmente.
¿Pero no te duele la espalda cuando duermen en esa cama o qué? ¡¡Decidida vamos de compras y comprarnos una cama más grande!! – la mire de reojo. - ¿Qué pasa, Naruto?
¿No será que quieres una cama más grande, para hacer cosas pervertidas con Hinata? – vi como Hinata se ponía roja y Sakura se le salía una sonrisa picara.
Qué va es imaginaciones tuyas, Naruto. – y se giró para que no le mirara la cara, me acerque y le toque el hombro.
Gracias chicas, si fuera por vosotras estaría tirado en esa cama tan incómoda. – Sakura y Hinata sonrieron.
Por eso hay que cambiarla. –dijo Sakura sentándose a desayunar y yo le seguí, desayunemos los tres y salimos comprar lo que necesitábamos. Fuimos a la zona comercial y pasemos toda la mañana mirando tiendas. Al final fuimos a una tienda de camas bastante grandes donde entremos a mirar, yo aun no tenía claro lo de la cama, pero Sakura me dijo que pagaría la mitad o toda, si no tenía dinero, creo que realmente estaba obsesionada con la cama grande, yo tenía por Hinata es que Sakura a veces ponía una cara que daba miedo.
Mirar esta es muy grande y cabríamos los tres para dormir. -se tumbo en la cama diciendo. lo de la cama bastante fuerte haciendo que todos los de la tienda nos miraran a los tres.
Sakura, no grites nos están mirando la gente. – dijo Hinata muy avergonzada por el comportamiento de su amante. – vamos, sal de la cama. – le dijo dándole la mano a Sakura.
¿Y tu Naruto no me vas ayudar? – dijo con una sonrisa picara que me dio mal espina, pero le seguí la corriente y le di la mano como lo hacía Hinata. Nos cogió de las manos y nos tiro a los dos en la cama. – ¿a que es cómoda? ¿Chico? – lo dijo con una sonrisa y que al cabo de nada estábamos riendo los tres, dándonos igual que la gente nos viera y murmuraran de nosotros, yo solo podía agradecer todos esos momentos con ellas. Me quede tumbado mirado fijamente a la nada solo pensé en él, en que me hubiera gustado pasar cosas así con él, pero era imposible.
Quieres dejar el mal rollo, para otro momento. – me dijo Sakura como si me hubiera leído la mente. – ¿te digo un secreto? - dijo bajo cerca de mí y Hinata se acerco a escuchar muy atenta, mientras la gente nos miraba, pero eso a nosotros nos daba igual.
¿Qué dime, que es? – dije muy atento.
Lo que tiene que pasar, pasara, así que no te ralles, si él es para ti, lo será. – una sonrisa se formo en mi cara de forma inconsciente, esas tontas palabras me ayudaron, aun que pareciera mentira. – ¿que nos la quedamos? – dijo con una sonrísa, que yo y Hinata asistimos con la cabeza, la compramos y nos dijeron que en la tarde la tendríamos en casa, decidimos ir a comer y como agradecimiento les invite al Ichiraku. Lleguemos y nos sentemos y pedimos lo de siempre.
¿Venga dame el Naruto de tu plato? – el Naruto que era mi nombre, 'pero también era una pasta de pescado que se añade al ramen y la verdad me gustaba mucho. – ¡¡venga!! No seas antipática. – pero la verdad es que lo hacía para meterme con Sakura y ella me seguía el rollo, Hinata y yo nos reíamos por las tonterías que hacíamos, y Sakura sacaba pucheros como una niña. Casi habíamos acabado de comer cuando.
¡Naruto! – me gire y mire era Sasuke no parecía demasiado alegre, se acerco a nosotros y... – ¿podemos hablar, de lo que paso ayer? – Sakura se sorprendió.
Lo siento estoy ocupado ahora ¿no lo ves? – le dije dándole la espalda, para seguir con la comida.
Por favor quiero hablar un minuto, contigo. – mire a Hinata.
Ven nosotras nos quedaremos aquí, ¿vale? – me cogió la mano para darme apoyo.
Hey no te tarde tenemos que volver pronto ¿vale? – me dijo Sakura poniendo su barbilla en mi hombro.
Tranquilas, no tardare nada, en volver. – les dije mirado primero a una y luego a la otra y cuando mira a Sasuke tenía una mirada fría, más de lo normal.
Bueno vamos. – le seguí a un callejón cerca del restaurante. – ¿bueno, que quieres? – le dije tan serio como podía.
Lo que paso ayer, lo siento. – me dijo serio casi sin cambiar la expresión.
¿Bueno si eso es todo? me piro, para eso no hacía falta que me alejara de ellas. – le dije alejándome de él, pero no pude me cogió del brazo.
¡¡No he terminado!! – me gire para verle. – pero... piénsalo bien lo que estás haciendo, te estás liado con las dos ¿Qué crees que pensara la gente?
¡¿Que sé montármelo bien!? – dije con una sonrisa orgullosa y él me fulmino con la mirada. – me da igual lo que piensa la gente, la verdad. – le dije serio.
Entonces... lo de ayer... - su cara se suavizo. Me lo quede mirado, tenía la sensación que quiera decirme algo, pero...
¡¡NA-RU-TO!! – apareció Sakura y me cogió el brazo, yo solo la mire.
¿Qué quieres, Sakura? – le dije serio, mientras su comportamiento era extraño, como si estuviera coqueteado conmigo.
Venga. – dijo muy melosamente. – tenemos que volver pronto a casa, que nos va a traer la cama nueva y la quiero utilizar. – lo último, lo dijo tocando mis labios y bajado lentamente hasta mi pecho, apoyando su cabeza en mi hombro. – ¡¡Ho!! Lo siento, se me escapo lo de la cama. No sabía que todavía estabas aquí Sasuke. - Sasuke no dijo nada serio de ahí, con una expresión que yo nunca le había visto.
Sakura a que viene este numerito de novia melosa. – dije y ella solo sonrió maliciosamente, yo la verdad no entendía a Sakura para nada.
Bueno solo es un empujoncito a tu felicidad. – dijo mirando en dirección a donde se había ido Sasuke. – vamos, Hinata nos espera.
En un lugar de la aldea un moreno no se entendía para nada a sí mismo, se entero de la cercanía de Sakura, Hinata y Naruto, porque Shikamaru comenzó a rallar aChōji y a él, recordó ese día. Inicio de flash backs:
¿Chicos? – dijo Shikamaru serio mientras yo y Chōji le miramos. La verdad es que desde la vuelta, me había vuelto más abierto con la gente y era normal quedar con ellos, a veces también con Kiba, Lee y Naruto, pero últimamente Naruto no venia.
Si, dime Shikamaru, - dijo Chōji comiéndose una bolsa de patatas fritas, mientras tenía un bollo en la otra mano.
¿No os parece raro que Naruto no venga últimamente con nosotros y además pasa más tiempo con Hinata y Sakura? – dijo Shikamaru con una sonrisa picara.
¿Qué estas insinuando Shikamaru? - pregunte serio, por alguna razón no me gustaba por donde iba la cosa.
Que estén liados. –dijo serio. – además me he enterado que van a casa de Naruto muy a menudo cuando esta y cuando no está, les compra comida... - la verdad es que lo que decía Shikamaru me molestaba mucho. – creo que hasta tiene una copia de la casa de Naruto.
¿Pero las dos, no es eso un poco fuerte? – dijo Chōji, metiéndose el bollo en la boca de golpe. – pues que suerte tiene a dos chicas para que cocines para él ¿no?
¿Y tú qué opinas, Sasuke? – me pregunto Shikamaru, pero yo estaba confundido tanto había cambiado Naruto para que tuviera tanto éxito con las chicas, para mi, seguía siendo el mismo Dobe de siempre. De repente me sentí triste, él siempre me seguía y pensé que siempre iba a ser así ¿pero esto...?
No lo sé, pero esto no es normal. – dije estaba molesto, me levante e iba a irme cuando...
¿No será que este celoso por su éxito, Sasuke? – me pare en seco al oír eso de los labios de Shikamaru.
¡¿Yo celoso de su éxito con Sakura y Hinata!? ¡Claro que no! – me molestaba, no sabía qué pero me molestaba el hecho que ellos estuvieran juntos, no lo pude aguantar más y me fui ese lugar ya no podía escuchar.
Después de ese día, vigile los movimientos de Sakura, Naruto y Hinata. Y lo decía Shikamaru era verdad ellas tenían copia de la casa y estaban juntos casi siempre. En una de esas vigilancias vi como Hinata basaba a Naruto en la cara y como Sakura no se molestaba por ello, ¿de verdad? ¿Tenían ese tipo de relación? No pude soportar seguir viendo y me fui, me ponía triste y furioso todo eso.
Cuando tenia intención de irme a casa, me encontré con él estaba fuera de casa a esas horas, me invitó a ramen y el dueño nos invito a sake caliente, no pude evitarlo comenzó a beber como si no hubiera un mañana.
No recuerdo mucho de ese día, solo una cosa los labios de Naruto en mí y el haberle reprochado su relación con ellas ¿Qué coño me pasaba? ¿Esto no es normal? Y Salí de mis pensamientos fin del flash backs.
Tenía que solucionar todo eso así, a lo mejor tendría paz, ya era tarde. Así que me dirigí a casa del rubio para aclarar lo que pasaba con ellos y con suerte lo que me pasaba a mí. Al llegar a la casa de Naruto algo iba mal se oía voces, no pique me di la vuelta a la casa y me acerqué a la ventana estaba la cortina echada pero se oía claramente gemidos.
Sa... kura... más flojo... me duele. – oí ¿era Naruto? ¿Qué coño estaban haciendo?
Cuando más fuerte... y rápido mejor, Naruto. – esa... ¿es Sakura? ¿No puede ser? una rabia se formo en mi, que coño estaban haciendo eso dos, solo...
Hinata... ¡¡ha!! La crema... me duele... ¡¡ha!! Mucho. - ¿Qué Hinata también? Pensé esto...
¡¡Aquí la crema!! relájate... Naruto o te dolerá mas. –mil imágenes se formaron en mi mente y ninguna fue buena.