-Mm... un gusto, pero... ¿Quién eres?-dijo _____ nerviosa.
-¡Oh! Que idiota soy, ¿no he dicho quien soy?-dijo-Soy el diablo.
_____ se rió.
-¡Si claro! Y mi novio no me engañó- dijo ______ recordando eso.
-Bueno, no me creas, tú en algún momento pensaste en vender tu alma y yo vine por ella- dijo el señor diablo.
_______ comenzó a caminar y el diablo a su lado.
-Que barbaridad- pensó ______- es imposible solo imaginártelo.
-Sí, es imposible- dijo el diablo- Lo siento, me metí en tus pensamientos.
- ¡¿Qué?!- comenzó a asustarse- ¿Sabes? ¡Eres un demente!-______ salió, dejó todas las cosas ahí y se fue, luego iría a comprar pero no con ese loco, a saber a cuanta gente a mentido y dado miedo.
______ llegó a su casa, un poco asustada pero nada fuera de lo normal, abrió la puerta, se fue a su cuarto y se recostó para dormir una siesta, ya luego para la cena pediría una pizza.
Se durmió, luego despertó, abrió sus ojos grandes de color verdes, y los abrió muchísimo más al ver al supuesto diablo a su lado contemplándola.
-¡¿Tú?! ¿En mi departamento? ¿Cómo entraste? ¿Qué haces aquí?-muchas dudas asaltaron a ______.
-Tranquila preciosa, una por una -dijo el diablo.
-¿Qué haces aquí?-dijo una _______ esta vez realmente asustada.
-¿No crees que soy el diablo no?
-Comienzo a tomarte realmente por un loco. Seguramente escalaste las paredes, llegaste a mi balcón y te pasaste a mi casa y a MI CAMA.
-¿Qué? ¡No! ¿Cómo se te ocurre que voy a hacer esa barbaridad para poder entrar a un apartamento? Eres idiota ¿sabes?
-¿Okey? ¿Sabes? Voy a llamar a la policía, no tienes nada que hacer aquí.
-Llámala, nunca llegarán.
-¿A no? Soy hija de uno y si saben que estoy con un completo desconocido en mi cama llegarán de inmediato.
- Uy, no creo que quieras ver a todos los colegas de tu padre muertos en el camino y yéndose al infierno ¿no? Así que dime ¡Qué mierda quieres a cambio de tu alma!- dijo el diablo, y su piel se hizo un poco rojiza de rabia.
-¡Nada! ¡Fue solo un estúpido pensamiento! ¡El diablo no existe!
-¿No? ¿Enserio crees que no? ¿Te lo demuestro?-dijo y ahora sus ojos se pusieron rojos. Era una falta de respeto para él que dijeran que no existe- ¡Pues bien! ¡Dime qué quieres en este preciso instante, cualquier cosa!-dijo aun mas enojado.
-¡Qué te largues! -dijo _____.
-¡Okay! ¡Cómo la dama quiera!- dijo, chasqueó sus dedos, todo se nublo un poco y desapareció.
_____ no sabía que pensar ni que decir.
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Cuando leí la novela no creía que tenía tantas faltas pero aquí está, puesto con tildes y comas.
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-Lydia