El Diablo es Malo, Pero no Feo (ADAPTADA)

Capítulo 36

-Nada... ahora me voy-dijo enojado y desapreció.

-Por lo menos avisó que se iba a ir-

Encendí el motor, ya arreglado, y me fui a casa, llegaría a darme un baño de agua congelada, necesitaba bajar esta calentura repentina. Luego de un par de minutos, llegué, que extraño... el auto de mis padres ya estaba ahí.

-¿Hola?-dije entrando a la casa- ¡Volví!- avisé.

Oí sollozos y fui algo preocupada al lugar de los sonidos, en efecto, en el salón se encontraba mi madre recostada en el regazo de mi padre, que se encontraba en el sofá, lloraban ambos.

-¿Qué ocurrió ahora?-

-¿Qué ocurre? ¿Por qué lloran? ¿Quién murió? -dije, mi última pregunta fue un error, solo logré que ambos lloraran más.

-Tú... tú abuela... tú abuela falleció-dijo mi mamá entre sollozos.

-¿Qué? Esto no puede estar pasando.

-¿Qué? ¿Esto es una broma? Porque si lo es, es de muy mal gusto, ¿Dónde están las cámaras?-dije mirando a mi alrededor mientras mis ojos se humedecían.

-No hay cámaras hija, esto es real-dijo mi padre sobándole el hombro a mamá.

-Pe... pero... ¿cómo?-dije, mis mejillas comenzaban a mojarse.

-Un infarto-dijo papá, seco.

Yo solo atiné a ir a mi cuarto, nada mas llegar me tiré a mi cama, no lo podía creer, mi abuela había muerto, lloré, lloré, lloré y lloré. Sentí un brazo pasar por mi cintura y acercarme a alguien, al cual miré y en efecto, Louis me miraba con esos ojazos color cielo que ahora estaban brillantes.

-Lo siento mucho-dijo sinceramente y me acercó a su cuerpo, yo no tenía ganas de nada, ni de rechazarlo, al contrario, solo quería apoyo.

Lloré, mucho, quizás horas, pero siempre acompañada de Louis, quien me acariciaba mi cintura en forma de reconfortación y me daba pequeños besos en la frente. Lloré en su pecho hasta quedarme dormida.

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os lo merecíais.

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