Miré su brazo, estaba vendado.
-Ese día, ¿qué pasó exactamente?
-La gente de la ciudad nos atacó.
-¿La gente de la ciudad? Pensé que había sido él.
-Iba ayudado por ellos. Te sacaron partes de una bala de la clavícula.
-Me lo han contado. Y a tí, ¿qué te pasó?
-Me hicieron un corte bastante profundo en la pierna. Al salir del agua terminaron.
Jace tenía la mirada perdida. Le cogí la mano y la puse entre las mías.
-¿Cuánto tiempo nos vamos a quedar aquí?
-Hasta que me traigan una pierna. Ayer me enseñaron las que había. Se supone que no tardan mucho.
Apoyé la cabeza sobre su hombro y cerré los ojos.
-Se está muy bien el el jardín del hospital. -dije para cambiar de tema-. Quien lo iba a decir...
-Ya no voy a poder defendernos como antes. Te voy a tener que enseñar algunas cosas.
-No te preocupes, aprendo rápido.
-Vamos a volver a la habitación.