Reiji ya llevaba una semana de viaje hacia Ventara y la Ciudad Imperial, había dejado su casa en una pequeña villa de Espein, su vida feliz hasta el momento había terminado, perdió a su amada y al hijo que esta esperaba.
Reiji había descubierto la oscuridad que tenía en su interior, una oscuridad muy poderosa la cual poseyó su cuerpo, su meta podría sonar estúpida, matar al rey, ¿realmente tiene el poder para hacer esto? Si bien su poder se veía cada vez más aumentado desde que empezó su viaje, desarrollando nuevas y poderosas técnicas.
El chico estaba almorzando bajo un árbol en un bosque, Lyon estaba comiendo un monstruo que había cazado, Lyon llevaba unas bolsas en su lomo, eran las pociones y la comida que Reiji llevaba.
—Reiji, alguien viene, es una frecuencia de Maná conocida de una bestia —dijo Lyon.
— ¿Quién es? —preguntó Reiji.
—Gaar, pero hay tres frecuencias más, dos son conocidas y la otra muy poderosa
—¿Dos conocidas?
—Sí, son, son de la chica y su bestia de Ciudad Imperial.
— ¿Ellas? —la mirada de Reiji era desinteresada y vacía.
—Sí, al parecer vienen hacia aquí.
— ¿Y la otra frecuencia?
—Su nivel de Maná es alto, debe de ser el compañero de Gaar
Dos personas y dos bestias se dirigían hacia Reiji y Lyon, sus motivos se desconocían, pero si era luchar Reiji lo haría, no le importaría nada más que lograr su venganza, Reiji siguió comiendo hasta que llegaron los que los seguían.
La primera una chica de cabello púrpura y ojos de igual color, lo llevaba suelto a excepción de una pequeña trenza, su vestimenta era un short negro corto, una camisa azul manga tres cuartas con una especie de cola, en sus piernas llevaba dos porta dagas negras y dos dagas del mismo color, unas medias negras hasta los muslos, unas botas altas color negro, su camisa tenía unos botones sueltos por su busto, sus uñas pintadas de púrpura.
La chica montaba una bestia de forma de esfinge blanca, eran Chelsea y Neimy, las que Reiji había ayudado a escapar de Ciudad Imperial, al lado de ella un hombre joven de cabello rubio con las puntas más oscuras, llevaba una camisa manga larga a rayas color naranja con negro, su manga izquierda era totalmente negra, llevaba una chaqueta negra, un collar con una pluma plateado, un suéter amarillo atado a su cintura, pantalón gris y zapatos negros, un su cabello llevaba una diadema, y ojos color naranja, podría decirse que era atractivo. Montado en un lobo blanco con rayas azules, Gaar uno de los que ayudó a Reiji en su entrenamiento.
El hombre bajó de Gaar, y se acercó a Reiji, se veía que portaba dos espadas, un color Esmeralda y otra Zafiro. Su mirada era confiada y algo fría.
— ¿Eres Reiji Akasha? —preguntó el hombre.
— ¿Quién eres? —dijo Reiji.
—Mi nombre es... Livius Lannzteer.
No le llevó ni un segundo el llevar su espada al cuello de Livius, Lannzteer el apellido del rey, el hombre por el cual Ange no estaba con él más.
Pero su cuerpo se vio paralizado por completo en ese momento, no llegando a cortar el cuello, los ojos de Livius eran rojos, no había duda, eran los Ojos de Eon.
Sus ojos más poderosos que los de Reiji, capaz de paralizar a Reiji, él dio una pequeña sonrisa algo soberbia.
—Así que eres la persona que buscaba, pero no eres tan fuerte como Chelsea me dijo.
—Cállate —dijo Reiji.
—No te puedes mover, no me puedes atacar.
Reiji comenzó a emanar gran cantidad de Maná de su cuerpo, su cabello se tornó carmesí, con dicho poder se liberó de la parálisis que Livius había lanzado contra él.
—Oh, vaya, pudiste liberarte.
—Gaar, ¿qué quieren? —dijo Lyon
—Lo siento, Lyon, pero esto es de Livius y el chico —dijo Gaar.
Reiji tomó su espada, Livius desenfundó sus espadas gemelas LlamRem, la espada esmeralda llevaba por nombre, Llam—vibrar en el idioma de los antiguos—, la espada zafiro llevaba por nombre, Rem —estirar en el idioma de los antiguos—
La Llam, una espada de mango dorado y hoja color esmeralda, la cual vibraba, la Rem una espada de mango dorado con hoja color zafiro, ambas hechas de Diranium y piedras cristalizadas, al igual que la Claymore de Reiji, la Rem era una espada látigo, ambas espadas de una mano.
Livius sonrió mientras se colocaba en posición de batalla, Reiji emanaba gran cantidad de Maná por el Burst Prana Mode, Livius se lanzó contra Reiji a gran velocidad sobrehumana, esto empleando su habilidad Speed.
Reiji bloqueó su ataque, Livius lanzaba cortes a gran velocidad con ambas espadas, Reiji las bloqueaba una y otra vez gracias a su velocidad y los Ojos de Eon.
Chelsea y Neimy solo observaba la batalla, Gaar detenía a Lyon para que no se involucrara en la batalla.
Era un combate de velocidad, chispas y estruendos salían con el choque de las espadas, Livius dio un salto hacia atrás y luego lanzó un corte con la Rem, dicha espada se estiró de gran manara hasta donde Reiji, colocando su espada frente a él, Reiji bloquea el ataque, pero ve como una gran cantidad de llamas recorren la espada hasta él.
La Claymore liberó gran cantidad de llamas, chocando contra las llamas de Livius neutralizándose entre ellas, el guardián de los Lannzteer era Kurenai y si elemento era fuego.
En un instante luego del choque entre las llamas Livius apareció a un costado de Reiji lanzando un corte con la Llam, dicha espada vibraba con una gran cantidad de Maná.
Nuevamente Reiji bloqueó con la Claymore cargada de su Maná, Livius tenía la iniciativa en la batalla, llevando a Reiji a sólo defenderse, ataque tras ataque Reiji bloqueaba, Livius era un buen espadachín con una gran maestría.
Ambos podían leer los movimientos de su oponente con sus ojos, Reiji dio un salto y comenzó a volar gracias a su habilidad Fly, Livius no podía volar a diferencia de Reiji, pero dio un poderoso salto alcanzando a Reiji, la Claymore liberaba gran cantidad de relámpagos, usando Thunder Blade, lanzó un poderoso corte que Livius bloqueo colocando sus espadas frente a él, siento lanzado hacia el suelo con gran fuerza.
Livius cayó al suelo y del impacto se creó un enorme cráter, pero el chico rubio se levantó, escupió sangre al levantarse, el impacto había sido muy fuerte a pesar de todo.
Salió del cráter con una sonrisa en su rostro.
—Genial, esto es lo que esperaba —dijo Livius.
El Burst Prana Mode de Reiji hacía que su cuerpo creara el doble del Maná que podía crear, pasando de 30% a 60% y a la vez hacía que el Maná que venía de su guardián aumentará un 20% pasando de aportar 70% de Maná a 90%, dando como resultado que el cuerpo de Reiji tuviera 150% de Maná, un 50% más de lo que un humano podría soportar.
Si bien le había afectado, últimamente su regeneración ha aumentado por la oscuridad, por lo cual su cuerpo no sufriría daño al usar dicha habilidad. Antes de tener el poder de Ophis, Reiji absorbía el Maná de Lyon por medio del sello del contrato, aumentando a un 130% su poder.
Con esta habilidad, todas las características de Reiji poseía ese porcentaje, volviéndolo extremadamente poderoso, pero menos que cuando usa la Crimson Armor la cual eleva su poder a un 180% de Maná y la nueva armadura la cual generó con Ophis y Lyon a un 250%, en caso de la Dark Beast un 190% y la Dark Beast: Evolution un 220%.
Pero en la Crimson Armor como la nueva armadura no se produce mucho desgaste, comparado con la Dark Beast y su evolución, si bien para la nueva armadura, Reiji aporta su 30% de Maná y Ophis y Lyon el restante, cuando la armadura se crea se da la explosión de Maná que hace que aumente a un 250%.
Livius se estiró y se colocó bien su hombro, ya que se le había desmontado
—¡Power Evolved
Del cuerpo del Livius comenzó a emanar gran cantidad de Maná, tan impresionante como el Burst Prana Mode de Reiji y que al igual que el del chico de cabello plateado aumentaba su poder de manera impresionante, llegando a un 140%, aumentando un 40% el poder de Livius.
Con su mano izquierda lanzó un corte y su espada se estiró de gran manera, cargada con gran cantidad de Maná, Reiji la evitó con su velocidad.
—¡Frozen Fire!
El chico agitó su espada y liberó gran cantidad de pinchos de hielo que en su interior contenían llamas, las cuales explotaban al contacto, Livius lanzó un ataque con la Rem, bloqueando los pinchos de hielos de hielo que explotaban con sólo tocar su espada.
En el rostro de Livius se reflejaba una sonrisa.
Dio un poderoso salto nuevamente hasta llegar a Reiji, al estar a la altura al la que se encontraba Reiji agitó a Llam liberando grandes cantidades de llamas, Explosión era el nombre de dicho ataque, el mismo que Paul usaba.
—¡Aegis!
Un escudo hecho de Maná se creó frente a Reiji protegiéndolo del ataque de su oponente, Livius no dejaba de sonreír, su corazón palpitaba a gran velocidad de la emoción, la adrenalina recorría su cuerpo.
Reiji voló a gran velocidad hasta llegar donde Livius, apareciendo en cuatro lugares al mismo tiempo, esto por Dash Tempest, lanzando diez estocadas en dos segundos cada uno, pero todo el cuerpo de Livius se cubrió de Maná evitando daño, Protection.
—Eres como Chelsea dijo, Reiji, te necesito, juntos destruiremos al rey, y reclamaré mi trono.
— ¿Qué?
Ambos se alejaron del otro a una distancia prudente, Livius sonreía por la batalla que había librado frente a alguien tan poderoso como Reiji.
—Eres Reiji Akasha, el que derrotó a Lander Vanford, mató a tres Guardias Imperiales para ayudar a Chelsea a escapar, derrotaste a los Generales Divinos uno tras otro, ¿no?
— ¿Cómo lo sabes?
—Solo lo sé, Máster de Lyon, portador de los ojos de Eon, portador de la Beast Armor, portador de la Claymore, portador del poder de Ophis y al parecer también de Cognitio —Livius lo puede ver ya que tiene los Ojos de Eon.
— ¡¿Acaso piensas que me conoces?!
—Sí, necesito conocer al que será mi aliado.
— ¿Aliado? ¿Piensas que te necesito para matar al rey?
—Para el rey no, pero derrotarás a su perro guardián, Arkos VanFiurer.
— ¿Qué con él?
La batalla se había calmado pero ambos están en guardia esperando un movimiento de su oponente.
—Arkos VanFiurer, el Caballero del trono de Sangre y Máster de la Bestia Sagrada que protege el este de Kenta.
— ¿Seiryu? —preguntó Reiji—
Seiryu una de las cuatro Bestias Sagradas, son las Bestias Míticas más poderosas de Kenta, se dice que protegen el continente junto a las Deidades, Seiryu es una bestia en forma de dragón o serpiente cuyo elemento es el agua.
Arkos VanFiurer el más poderoso caballero del reino, el hecho de que fuera una Bestia Sagrada era muy poderoso, igualando los de una Deidad.
Arkos ascendió al puesto de General Celestial, siendo líder de todo el Ejército y la Guardia Imperial de Ventara.
Arkos ha protegido esta reino desde que ascendió, él fue partícipe en la muerte del rey Krabel Lannzteer, cada vez que entra en batalla lo único que queda es sangre y cuerpos, de ahí su apodo El Caballero del Trono de Sangre.
—Sé lo que le hicieron a tu mujer, y la sed de venganza que llevas, pero con tu poder no lograrás llegar a Carlo Lannzteer.
— ¿Quién eres realmente?
—Livius Lannzteer, hijo de Krabel Lannzteer antiguo rey de Ventara.
— ¿El hijo del antiguo rey?
—Sí y al igual que tú busco venganza contra el Imperio, ese maldito de Carlo, mató a mi familia y usurpo el trono de mí padre.
— ¿Qué tiene que ver conmigo?
—Pues ambos buscamos venganza, sería más prudente actuar en conjunto.
—No me interesa, yo puedo hacerlo solo.
—Pobre niño tonto —Livius es mayor que Reiji ya que él tiene 24 años.
—Tengo entendido que el rey murió hace 19 años ¿Por qué buscar venganza ahora?
— ¿Por qué? Por el sufrimiento de mi pueblo, y porque hasta ahora tengo el poder necesario.
Reiji sabía que el trato era bueno, sabía que la Guardia del Rey era muy poderoso, esto sumado a Arkos VanFiurer haría muy difícil el asesinar al rey.
—Bien lo haré —su Maná comenzó a descender volviendo a la normalidad.
—Sabia decisión —dijo Livius, su Maná descendió volviendo a la normalidad.
Livius se acercó a Reiji y extendió su mano como señal del acuerdo, ambos se dieron un apretón de manos sellando el trato, Reiji ahora viajaría a Ciudad Imperial.
Chelsea se acercó a los jóvenes.
—Reiji —gritó al abrazarlo.
—Mm ¿Chelsea? —dijo Livius.
—Lo siento —dijo la chica sonrojada.
Chelsea y Livius son pareja, la chica era un poco infantil, pero a la vez era algo madura a la vez, ella aunque había sufrido aún sonreía, ella era diferente a Reiji en ese aspecto.
—Pues, me vuelvo a presentar —dijo Livius— Soy Livius Lannzteer, hijo de Krabel Lannzteer y Eleonor Akasha.
— ¿Akasha?
—Sí, mi madre tenía el cabello igual que el tuyo.
—Solo para dejar claro algo, solo te usaré para cumplir mis objetivos —dijo Reiji.
—No te preocupes, nosotros hacemos lo mismo —dijo Livius con una sonrisa.
Hace 19 años
Ciudad Imperial
Palacio Imperial
Un niño pequeño corría alegremente por los pasillos del Palacio, su nombre era Livius el hijo del rey, tenía unos cinco años de edad, alegre y animado, su cabello rubio con puntas más oscuras típicas de los Lannzteer, la que estaba siempre con él era su hermana mayor de quince años de edad, el cabello de la chica era plateado como el de su madre y sus ojos azules, una típica Akasha descendiente de Citrón y Yulia.
El pequeño príncipe y la joven y hermosa princesa pasaban su tiempo en el Palacio, ya que no tenían permitido salir.
Livius quería mucho a su hermana Silfy, ella era la que pasaba mayor tiempo con él por motivo de que sus padres permanecían ocupados.
El rey Krabel era un rey justo y amable, la paz se sentía en el aire de toda la reino y sus habitantes, no habían hambrunas y la pobreza era poca por la gran cantidad de trabajo para los campesinos que habían, además de las ayudas que él rey daba.
Pero no todo era alegría y paz, una pequeña facción detestaba los actos del rey y más por el hecho de no haberse casado con una noble, sino con la que ellos llamaban, mestiza, aunque Citrón y Yulia salvaron la reino, algunos les guardaban rencor, aún sin haberlos conocidos.
Eleonor Akasha, hija única de Miriam Akasha hermana mayor de Paúl Akasha, era una hermosa joven cuando Krabel la conoció, aunque ella era seis años menor que Krabel se casaron, dándole primero a una niña que heredó el cabello y los ojos de su madre, luego un chico de ojos color naranja, cabello rubio como un Lannzteer al igual que su padre.
Carlo Lannzteer odiaba a su hermano y su mujer, así que planeó la muerte de la familia real, Paúl era un veterano de la Guardia Imperial, que por sus logros llegó a ser un Guardia Real protegiendo al rey y su familia junto a otros fuertes guerreros, había un chico que recién había ingresado a la Guardia Real, su nombre Arkos VanFiurer.
Paúl Akasha tenía el deber de defender a su sobrina y al rey, él era un hombre serio y trabajador, Paúl enseñó a Arkos cuando era niño y ahora protegía al rey, era un gran logro para él, otro miembro era William Gong, era menor que Paúl pero mayor que Arkos, la madre de William era de Ventara, pero su padre de Jarkelia, de ahí el apellido Gong.
Una persona puso en alto este apellido, su nombre era Reile, Reile Gong, uno de los Caballeros Blancos de la Cruz Carmesí, compañero de Citrón y Yulia, que ayudó a sellar las armas. William al igual que Paúl llevaba unas armas muy conocidas, las Espadas Gemelas LlamRem que pertenecieron a Reile, al igual que la Claymore perteneció a Citrón.
William era muy cercano al príncipe Livius, él le enseñaba el uso de las espadas, una noche pasó lo que no se esperaba, la facción actuó para matar a la familia real, era una noche sin luna, William y Paúl estaban en sus rondas, mientras Arkos cuidaba la puerta de los aposentos de los reyes.
Arkos VanFiurer era un traidor que estaba con la facción que quería matar al rey, su líder no era nadie más que Carlo Lannzteer, mientras los reyes dormían Carlo entró a sus aposentos y enterró una daga envenenada en el pecho de su hermano, cuando Krabel abrió los ojos lo vio, vio a su hermano con una sonrisa macabra en su rostro.
— ¿Por qué haces esto? —preguntó Krabel.
—Tú más que nadie sabe —respondió Carlo.
Por las ventanas entraron los de la facción y asesinaron a Eleonor, eran cinco hombres aproximadamente, ellos corrieron rumbo a los aposentos de los príncipes, Paúl escuchó un grito ahogado de la habitación de Silfy, corrió hasta ahí y vio su cuerpo sin vida, fue a la habitación de los reyes y era igual, William por su parte corrió a la habitación de Livius, lo sacó en pijamas y dormido, sabía que era un atentado.
William saltó por la ventana del cuarto de Livius ubicado en el tercer piso, usando su elemento aire logró bajar sin daños, corrió a los establos y tomó un caballo.
— ¿Qué pasa Will? —preguntó Livius, ya que así le llamaba a William.
—Lo siento, ruego su perdón, príncipe Livius —dijo el hombre mientras aceleraba más al caballo.
— ¿Pero qué pasa? —dijo el chico preocupado.
—Su padre, su madre y su hermana, todos están muertos.
— ¡¿Qué acabas de decir?! —decía con lágrimas en sus ojos.
—Carlo Lannzteer, lo más seguro que el planeó esto, ¡maldición!
—Will, volvamos, quiero ver a mi mamá —decía llorando.
—Lo siento, príncipe, pero no hay dónde volver ya.
—Pero, pero Silfy me prometió llevarme a los Jardines Acuáticos.
—Ya no se podrá —decía con lágrimas en sus ojos.
—Pero, papá no puede morir, él es el más fuerte —decía llorando.
—Nuevamente ruego su perdón príncipe.
—No, no, no, mamá, papá y Silfy no pueden morir, ellos... —lloraba en niño.
En el Palacio Imperial, Paúl se topó con Arkos, la cara de Arkos parecía triste, aunque no lo estaba, se había herido para evitar ser descubierto.
— ¿Qué pasó? —preguntó desesperado Paúl.
—William, Willam Gong, mató a los reyes y la princesa, además secuestró al príncipe, traté de detenerlo pero me hirió.
—Ve a que te traten la herida —dijo Paúl.
Paúl sabía que William no podría ser capaz de dicha atrocidad, pero ahora como diría a su hermana que no pudo proteger a Eleonor y Silfy, que él príncipe estaba desaparecido.
De ahí nació el odio que actualmente tiene Miriam hacia él.
William fue inculpado y puesto precio por su cabeza, Carlo tomó el trono convirtiéndose en el rey de Ventara y ahí fue donde nació el corrupto y empobrecido Imperio.