♦ Se recomienda escuchar la canción Satellite de Guster durante el capítulo.
Shining like a work of art, hanging on a wall of star. Are you what I think you are? Always the first star that I find.
Hawaii, 2019.
Si hubiera podido relantizar el tiempo, lo hubiera hecho sin dudarlo por un segundo. Pero la noche llegó, la playa quedó bajo el cielo oscuro y brillos de estrellas. La luna iluminaba la superficie del mar y las escamas lucían mágicas bajo el agua.
Sentía todo el cuerpo frío, los labios morados al mismo tono que aquellos que rozaba. Su temperatura corporal y la de Harry eran prácticamente la misma, solo que para su salud, no pasaba por alto en lo absoluto.
No quería salir del mar, no quería dar su brazo a torcer. Quería gritarle y rogarle una vez más. No quería salir caminando de nuevo a lo que ya había dejado atrás. Pero estaba ahí, abrazado al cuerpo de Harry, mirando fijamente sus ojos e intercambiando respiraciones.
Contando las gotas de su rostro. Contando los segundos.
— Necesitas irte.
Fue una simple frase que devolvió todo el temor a cada una de sus conexiones nerviosas; incluso perdió el control de sus manos que hicieron fuerza sobre la piel de los hombros de Harry.
— No, no me quiero ir. No puedo volver.- sus palabras estaban ahogadas en sensaciones, su voz parecía estar bajo agua; pero sus labios ya estaban besando a Harry.
Harry acarició su rostro y sonrió levemente admirando lo que tenía delante.
No podía ser otra persona. Tenía que ser él. Tenía que ser Louis. No fue ni el momento ni el lugar equivocado. Fue todo lo contrario; lo sintió mucho antes de salir del mar. Como siempre que pasaba cuando Louis llegaba.
No había nada igual en el mundo. O quizá simplemente era tan complicado de explicar que ni si quiera encontraba una comparación que hiciera justicia.
— Con Jo. A casa de Jo. No a Londres.
— No quiero dejar de tocarte.
— Vas a enfermar. Tienes que irte, Louis.- su tono era simple ruego a los ojos cristalinos que tenía delante; sinceros y aún asustados.
— No hemos terminado. Nos queda mucho que discutir.
— Lo sé.
Que lo admitiera fue un gran alivio para Louis, que por segundos cada vez lo daba más por perdido. Pero en el fondo había esperanza, y no se rendiría tan fácilmente; para él no había vuelta atrás.
Harry lo ayudó con delicadeza a subir en la roca y esperó a que Louis le mirara para dedicarle una sonrisa. Desde que había vuelto y lo había tenido entre sus brazos le había parecido estar soñando todo el tiempo; pero verlo desde el mar, subido en una roca, con sus ropas mojadas y el frío notorio en el rostro, quería gritar debido a las mil sensaciones que recorrían su cuerpo en ese instante.
Estaba ahí. Había vuelto.
— Te quiero.
— Y yo. Tanto que volvería una y otra vez.
No hubo una nueva respuesta. No necesariamente cuando una mirada dicta una severa sentencia. Y la de su amor estaba impuesta.
Mientras atravesaba el bosque y caminaba por el paseo hasta entrar en la ciudad, creó varios discursos y preparó frases clave que utilizar cuando Jo volviera a verle. Todo estaba bien construido y perfectamente verbalizado en su mente durante el camino hasta que se encontró frente al portal.
La gente se paraba a su alrededor y lo miraba varias veces antes de seguir caminando. Sus ropas aún mojadas y pegadas a su cuerpo. Estaba dando un espectáculo que le importaba bien poco.
Sin dudarlo ni un segundo más, tocó el telefonillo y esperó unos segundos hasta que la puerta se abrió. Ni si quiera había preguntado; probablemente estuviera esperando a Nicole. O Nicole a Jo.
Tomó aire antes de tocar al timbre ya arriba y tras separar los dedos de la pared, la puerta se abrió y la voz de Jo resonó en la casa que tan familiar le resultaba.
— He hecho puré, te he preparado una bandeja y está en el salón. ¿Sabes que Mila y Noah fueron pareja hace unos años? Creo que Liam todavía no lo sabe, aunque no debe ser la gran cosa, ¿no? Tamb-
Un teléfono móvil comenzó a sonar y mientras Jo refunfuñaba y decía palabrotas, Louis cerró con cuidado y caminó con lentitud por la casa hasta entrar en la cocina. Se prepararó un vaso de agua y lo rellenó al menos cuatro veces.
Aún sentía la sal en sus labios.
— ¿Se puede saber por qué llamas a estas horas? Me da igual qué hora sea allí, estaba por meterme en la ducha. Espera, ¿qué?- Louis escuchó los silencios quieto como una estatua desde la misma posición, atento a la conversación que se hacía desde otro lugar.— ¿Qué demonios? ¡Está loco! ¿Cuándo ha sido? ¡Lo voy a matar si viene por aquí!- tras unos segundos, unos pasos fuertes en el suelo retumbaron por el pasillo y la piel de Louis se erizó.— ¡Nicole! ¿Te puedes creer que el idiota de Louis se ha ido d-de...?
Jo apareció con una toalla alrededor del cuerpo y se quedó mirándolo de arriba abajo con los ojos muy abiertos. Sus zapatillas llenas de arena, sus ropas mojadas, su cabello goteando sobre la mochila que aún colgaba en su espalda. Su rostro de inocencia.
Activar discurso; pensó Louis.
El gesto de Jo pasó de sorpresa a seriedad. Luego a enfado. Frunció el ceño y las aletillas de la nariz se ensancharon mientras respiraba con fuerza. Estaba apunto de gritar.
Activar frases clave.
— Le quiero. Estoy enamorado. No quiero vivir allí, ni aquí; quiero vivir en el mar. Eres preciosa, Jocelyn. Me encanta la comida rara que haces.
— Yo...- esperó unos segundos y respiró para calmarse. Luego sonrió cínicamente.— Yo te voy a matar, Louis Tomlinson. Te voy a ahogar en la bañera y te vas a convertir en pececito de plástico de los que se pegan en suelo y se pisan para no resbalar. Y luego cuando dejes de servir, te tiraré a la basura.
Louis la observaba con gesto divertido, ceja enarcada y sonrisa torcida. Esperó unos segundos y cuando ninguno de los dos dijo nada, él decidió romper el silencio.
— ¿Me abrazas?
— Te odio.
— Necesito que me abraces. Estoy sonriendo pero no he tenido más ganas de llorar en mi vida... No ha querido hacerlo.
— Louis.
Jocelyn caminó con rapidez y lo estrujó entre sus brazos mojando la toalla contra sus ropas. Estaba frío, demasiado, pero el abrazo era cálido como siempre lo habían sido. Ahora intentaría entenderlo, de verdad que lo haría.
Cuando se separaron y sus ojos se encontraron, Louis no había podido evitar dejar escapar unas lágrimas de impotencia y decepción. Pero había decisión en su mirada.
— Tienes que entenderle.
— Y él me va a entender a mí. Lo hará. Tiene que hacerlo.
Jocelyn abrió la boca para hablar pero el sonido de la puerta abrirse y cerrarse la interrumpió.
— Dime que no hay puré para cen... ¡Louis!
...
Nicole lavó sus pantalones esa noche y en la mañana se vistió con ellos y con una camiseta que Jo le había dado; de hecho, de caballero.
Estaba ansioso por volver a la playa, pero Jo tenía que ir al médico en uno de sus descansos y le pidió a éste que la acompañara. Nicole los llevó a la científica y el estómago se le revolvió al pisar el suelo de aquel lugar. Sencillamente no le traía buenos recuerdos.
— Niall volvió a llamar esta mañana, creo que deberías hablar con él; no es tonto, sabe que estás aquí.
— No estaba en mis planes volver a la civilización. Como un estúpido creí que en estos momentos estaría nadando entre delfines y ballenas.- comentó con sarcasmo y entraron en el ascensor.
— ¿Por qué te es tan malditamente difícil entenderle?
— ¿Por qué es tan jodidamente difícil que alguno de vosotros me entienda a mí?
Jocelyn decidió dejar la conversación ahí sabiendo que en el lugar en el que se encontraban sería demasiado complicado llegar a un punto medio porque no lo había. Y en el fondo, ella temía que todo se destrozara, porque conocía demasiado bien a Harry como para saber que nunca lo haría.
Entraron en los laboratorios y Jo le hizo un gesto para que entrara en uno de los despachos internos y esperara ahí haciendo cualquier cosa.
Una voz resonó en la sala y lo hizo girar a encarar a uno de sus tantos cabos sueltos.
— ¿Qué tal una ronda luego para los que tenemos doble jornada? Mila, ¿tú me esperas?
La chica a su lado asintió con una sonrisa y Liam se hizo paso entre los trabajadores hasta llegar a la puerta de uno de los despachos interiores. Estaba apunto de entrar cuando posó la mirada en Louis y por un segundo sus ojos reflejaron miedo; pero fue eso, tan solo un segundo.
— Hola, Liam.
— Has vuelto. ¿Por quién has vuelto?
Louis abrió la boca para contestar pero luego la pregunta de Liam hizo eco en su mente. Por quién. ¿Qué maldita pregunta es esa? ¿Por qué hacerla de esa manera? Frunció el ceño y suspiró.
— Me gusta este lugar.
— M-me alegro. Mucho, de hecho. ¿Quieres venir luego con nosotros? Pasaremos un buen rato.
— No creo, llegué ayer y aún sigo cansado. Otro día. ¿Tú estás bien? No estabas cuando Niall y yo nos fuimos.- se atrevió a preguntar y Liam simplemente asintió con la mirada cansada.
Sus ojos hablaban demasiado, pero ocultaban todo a la vez. Entró en su despacho y Louis hizo lo mismo en el que Jo le había indicado. Releyó varios mensajes de Niall, de sus hermanas, de su madre. Tenía tantas llamadas perdidas y no podía devolver ninguna.
Era algo que había zanjado y no volvería atrás. Su único objetivo ahora mismo, era que Harry lo ahogara.
Ni si quiera el pensamiento lo estremecía.
Cuando Jo terminó su turno a la hora de comer, ambos tomaron un taxi para ir al hospital. Allí el médico les dio los resultados de las nuevas pruebas y por suerte todo estaba igual. No podía simplemente desaparecer, podía empeorar y volver al punto tan extremo en el que se pusieron hacía un tiempo. Esto era de las mejores noticias que podían tener.
Decidieron tomar taxis diferentes y al fin Louis estaba de vuelta a la playa. El sol brillaba pero con mucha menos intensidad que semanas atrás. Sonrió mirando el horizonte al pensamiento de saber que aquí nunca despertaría con cielos grises un día tras otro.
Con suerte, abriría los ojos cada día observando el fondo del mar.
Observando a Harry sonreír en la profundidad del océano.
Caminó por la orilla de la playa después quitarse la camiseta y dejar su mochila cerca de unas rocas; se tomó su tiempo esperando a Harry.
Vio a lo lejos un brillo intenso y sin pensarlo comenzó a caminar de vuelta al bosque; sin embargo no duró demasiado dando pasos en esa dirección puesto que aquel sonido familiar pero ahora lejano colapsó su mente.
— ¡No! ¡No, joder! ¡Para!
Caminó hacia el mar de nuevo viendo cada vez con más claridad la silueta de en el mar. Entró en el agua y cuando ésta cubrió sus rodillas, cayó en la arena quedando sumergido hasta el pecho.
— Louis.
— No lo hagas, no lo hagas te lo ruego. No me ahogues.- pronunciando aquellas palabras otra vez después de tanto tiempo, miedo y temor en la voz a pesar de no sentir pánico hacia el hecho que trataba.
— Te la pasaste llorando ayer para que él lo hiciera. ¿Ya te has arrepentido?
— ¡No quiero que lo hagas tú! ¡Déjame ir!
— Te dije que tenías que ayudarme.
Louis soltó un quejido ahogado al intentar mentalmente moverse y no conseguirlo. Miró el mar, pero Harry no aparecía.
— No sé qué demonios quieres que haga. Él lo ha olvidado todo, ya está, olvídalo tú también. No puedo hacer nada, ni si quiera sé qué tienes pensado.- sus argumentos eran gritos e impotencia, de verdad no comprendía el punto.
— Estuvo aquí hace dos días.
— Vive cerca de aquí, es normal que pasee por la maldita playa, Zayn.
— En aquella playa. Se paró justó ahí, dónde estaba con la chica. Tienes que ayudarnos a todos; si lo haces convenceré a Harry para que te ahogue. Ayúdanos. Él sigue buscándonos.
— Pues no dejes que os encuentre.- contestó ignorando su oferta.
Los ojos de Zayn se volvieron oscuros y bajo sus ojos aparecieron unas marcas aterradoras. Louis ya lo había visto antes. Harry había intentado asustarlo, y sabía que Zayn también lo conseguiría.
— Tú no sabes todo lo que había en la mirada de ese hombre. Tiene grabada la imagen de lo que vio todo el tiempo. Se repite en su mente una y otra vez. Lo sé.
Louis lo contempló por un momento y procesó sus palabras poco a poco bajo la mirada aterradora y fría de Zayn. Nunca demostraba nada más allá de la templanza. Y eso era lo que más asustaba a Louis.
— Respóndeme a algo que llevo demasiado tiempo preguntándome. ¿Por qué volviste? ¿Por qué justo tú estás aquí? ¿Por qué se repitió la historia contigo? No es casualidad, ¿verdad?
El tritón frunció el ceño haciendo por primera vez un cambio de gesto. Las olas rompían contra sus cuerpos pero ninguno de los dos se desplazaba ni un milímetro. Louis suspiró en la espera hasta que Zayn abrió y cerró la boca varias veces antes de hablar.
— Vine a buscar a Harry.
— ¿Cuánto se debe querer a alguien para volver años después con la certeza de que sigue vivo? ¿Cuánto?
— Mucho.- respondió sencillamente.
Louis sonrió de forma cínica y soltó un bufido, incrédulo.
— Viniste a por ella. Viniste a matarla porque lo viste.- Zayn levantó la cabeza buscando sus ojos, en su mirada únicamente cierta sorpresa y frialdad.— Pero alguien te ahogó primero. Por eso estás convencido de que Liam volverá; porque aquello trastornó tanto tu mente que nunca pudiste superarlo.
— Y lo hará.
— ¿Si tanto le querías que volviste a cobrar venganza por él, por qué demonios quieres hacerle daño?- preguntó angustiado.
Zayn se había llevado a Harry, lo había mantenido alejado de él. Lo había amenazado con ahogar a Louis. Y estaba con Chelsea. Estaba con ella.
— Él está contigo, y eso nos pone en peligro a todos. Porque tú eres como el resto de ellos. Y sí, le quería y por eso volví; pero cuando abres los ojos y te has convertido en esto, no sientes nada. ¿No lo entiendes? Todos los días recuerdo algo de la vida humana; es inevitable no hacerlo. Recuerdo estar con mis amigos, recuerdo a Harry. Incluso recuerdo ver cómo Chelsea lo ahogaba. Pero ya está; no son sentimientos de esta vida. Se acabaron.
Zayn se mantenía serio mientras hablaba, su mirada se había relajado y la conexión que mantenía a Louis unido a él había desaparecido; sin embargo, éste seguía frente a él; asustado, con lágrimas en los ojos, con el temor en cada por de su piel.
— No puede ser. No puedes dejar de querer a alguien por el que decidiste hacer algo así. Tienes que sentir algo por Harry. Aunque sea un poco.
— No. Y tú tampoco lo harás cuando te conviertas.
El agua seguía intacta, pero para Louis cada gota del océano se congeló.
— No-susurró—, es imposible. No podría olvidar lo que siento. Jamás.
— ¿Por qué? ¿Por qué a ti no te va a pasar? Me pasó a mí, a Chelsea, a Harry. Nos pasa a todos. ¿Quieres una vida nueva? Siempre tendrás que renunciar a algo o alguien.
— Cállate.- dijo con un hilo de voz rota.
Y Zayn lo hizo, no dijo nada. No fue su voz la que interrumpió en su conversación.
— Vete de aquí. Ahora. Louis, ven.- en ese momento Louis se dio cuenta de que volvía a tener el control de su cuerpo y se levantó para caminar a través del agua hasta llegar a Harry.
Harry lo abrazó con fuerza y de un golpe de alta se desplazaron varios metros dejando a Zayn cerca de la orilla; que poco después y tras decirle algo a Louis, nadó hasta poder hundirse y marcharse.
"Ayúdanos."
Por primera vez, el cielo azul de Hawaii se veía gris a ojos de Louis. El sol era frío y el aire congelaba los suspiros justo en los labios.
— No va a pasar. Estoy seguro de que no.
— Louis...
— Que no. Que no va a pasar. ¿No has oído hablar de lo que dicen del amor verdadero? Esas almas están condenadas a encontrarse una y otra vez en todas sus vidas. Y tú eres el mío. ¿Soy yo el tuyo?
La voz de Louis estaba tan rota y decía tanto por sí sola. Inocencia, miedo, amor. Sobretodo esperanza.
Harry sonrió a la par que una lágrima se escapaba con rapidez.
— Por su puesto que lo eres.
Louis quiso sonreír también, pero conocía a Harry demasiado como para saber que su siguiente frase era dolorosa, incluso si no la pronunciaba.
— Pero no lo harás.- adivinó y Harry no respondió, simplemente abrazó el cuerpo humano que aún estaba entre sus brazos y dejó que más lágrimas recorrieran sus mejillas.
Louis dejaba todo lo que tenía en ilusiones; apostando todo por la esperanza. Pero en el peor de los casos, en el caso realista, no podría sportarlo. Y lloraba por demasiadas cosas; lloraba porque el ideal nunca podría hacerse realidad. Lloraba porque no podía cumplir los sueños de Louis. Lloraba por no poder asegurarle nada; por no poder darle una vida nueva.
Lloraba por no saber qué le depararía el futuro a ambos.
Era egoísta, pero lo era por parte de ambos. Harry se estaba negando a algo por lo que Louis lo había dejado absolutamente todo. Pero lo que Louis pedía era injusto.
Y de una forma u otra, las cartas estaban sobre la mesa y uno de los dos debía ceder ante el otro. Rendirse y sumirse a otra solución. Pero ninguno de los dos tenía en sus planes esa opción. Se abrazaban, lloraba, se besaban. Tragedia en un conflicto de decisión con la vida, la muerte y el peor y más hermoso de nuestros problemas.
Y Harry siempre lo había sabido. Siempre sintió aquella pequeña sensación que confundió con naturaleza cuando en realidad sólo era amor. Hermosamente horrible.
Y eso los llevó a ambos a ser egoístas; creyendo que sus acciones eran cubiertas por el otro; cuando en realidad, sólo estaban pensando en ellos mismos.
Es una de nuestras más definidas características. El egoísmo. Todos somos egoístas incluso en el peor de los momentos. Y a veces es necesario, porque es nuestro único as con el que jugar. El último. Pero en ocasiones las personas hacen trampas.
Porque también somos injustos. Porque las cosas nos hacen daño y rompen partes de nosotros que nada ni nadie puede reparar. A veces encontramos esa persona que oculta parcialmente el dolor; que nos hace olvidarlo. Pero está ahí, y siempre lo estará.
En ocasiones no es una persona, sino un mero sentimiento. Como lo es la esperanza. Eso fue lo único que hizo valiente a Louis para comportarse de la manera más egoísta que pudo. Porque lo hubiera hecho de todas formas, porque Harry estaba en peligro al igual que Chelsea y Zayn si Liam seguía buscándolos.
Pero Zayn era cínico, frío y claramente manipulador. Era un gran peso para convencer a Harry y lo utilizaría sin duda.
Cuando aquella noche llegó al pub, Nicole lo esperaba en la puerta con una sonrisa culpable en el rostro. Louis llevaba ropa nueva que Jo por su parte se había encargado de comprarle y se había arreglado un poco, aunque sus ojos siguieran hinchados debido al llanto de horas anteriores.
— Jo me manda a vigilar. Lo siento, pero ella no puede venir y ya sabes como es.
— Me ha comprado ropa, me pone vigilancia. Es mi madre.- comentó mientras aguantaba la puerta para que la mujer pasara.
— Simplemente no quiere dejarte solo con ellos, no conoces a nadie. Bueno, a Liam y algunos otros pero puede que no hayan venido. Mira, ahí está. Ella es Mila, se están conociendo o algo así, pero creo que se gustan.
— ¡Nicole!- llamó un hombre desde la esquina. Se levantó del sillón y se acercó a ambos.
— Ryan, qué de tiempo. Él es Louis. Louis, él es Ryan, un antiguo compañero de trabajo. ¿Qué haces aquí?
Louis sonrió y se alejó dejando que Nicole tomara asiento junto a su amigo. Se acercó a la barra y pidió algo de beber; observó el lugar y a las personas que conversaban tranquilamente alrededor de las mesas del pub. Cuando posó la mirada en Mila, ya estaba sola atendiendo el móvil. A su lado una silueta tomó asiento y poco después una mano acarició su hombro.
— Me dijo Jo que al final venías.
— Sí, supuse que no sería tan malo a fin de cuentas. ¿Día duro? Pareces cansado.
— Bueno, los hay peores. ¿Qué tal por Londres?
Liam sonreía y se mostraba tranquilo; ambos dieron un trago a la vez y se mantuvieron en silencio durante un instante. Louis ni si quiera sabía qué contestar.
— Bien. Pasé tiempo con mi familia pero finalmente tomé la decisión de mudarme aquí. Aunque quizá algún día vuelva.- mintió mirando el vaso bajo sus manos. Sería una buena coartada si en algún momento desaparece del mapa.
— Bonito collar.
Louis tomó el colgante entre sus manos al instante, acarició la piedra en forma de cola de sirena y luego la dejó caer contra su pecho. Forzó una sonrisa y asintió.
— Sí, es muy bonito. Me lo regaló un niño pequeño que conocí aquí.
— ¿Te pasa algo?
Louis buscó su mirada y frunció el ceño preguntándose si había hecho algo extraño, pero había mantenido la compostura todo el tiempo. Negó y volvió a darle un trago al vaso dejándolo vacío.
— ¿Y a ti? ¿Qué pasó mientras estabas desaparecido? La policía vino a interrogarnos a todos.- atacó sin encontrar una mejor salida.
— Problemas personales, no tengo nada que ver con ese tema. También fue una sorpresa para mí. Solucioné mis problemas y ahora simplemente quiero seguir con mi vida. Hacer cosas normales, ir al trabajo, pasar tiempo con mis amigos. Conocer gente nueva. Estoy bien.
Louis asintió y llamó al camarero para pedir otra. Liam hizo lo mismo cuando éste llegó y volvieron a compartir silencio por un tiempo más largo esta vez.
— Me alegro de que estés bien, de verdad. Estoy aquí para lo que necesites.- admitió Louis con gesto serio pero sincero. Crédulo.
— Y yo de que hayas vuelto.
Louis hizo un gesto antes de levantarse y Liam lo vio entrar en el baño. En ese instante su mirada se oscureció y suspiró. Observó sus manos temblar de forma leve alrededor del vaso y cerró los ojos para tranquilizarse.
Sacó el móvil con rapidez y cuando encontró el número en sus contactos, llamó y cerró los ojos de nuevo.
— Él lo sabe todo. Absolutamente todo. Y él mismo me llevará hasta ese monstruo.
♦ Había muchas cosas que debían pasar en el capítulo y por eso creo que ha sido algo más rápido en cuanto a momentos y trama que otros. Como he visto muchos comentarios diciendo que no queréis que Drowned acabe ya, voy a intentar sacar uno o dos capítulos más de los que tengo previstos. Aún con esto, estamos en la trama final, por lo cuál no sé si podré alargarlo demasiado.
♦ Gracias por los votos y comentarios. Si podéis votar por favor en los capítulos que no hayáis votado, os lo agradecería mucho.
♦ Pido por favor que vayáis a la cuenta de drowned.larry en instragram, que aunque siempre la menciono, esta vez quiero que veais un dibujo que ha hecho December_Jan con el que me muero de amor. De verdad, es precioso y me ha hecho tanta ilusión... También podéis encontrar edits que hacen lectores o yo misma. Además, hay pequeños avances y pistas en ellos.
♦ Recuerdo que el nuevo trailer se ve desde cualquier dispositivo. Link en bio.
○ Esta vez tengo una propuesta diferente. Como sabéis, siempre soy yo la que hace preguntas respecto a la historia, pero esta vez quiero que seais vosotros los que dejéis en este párrafo preguntas que tengais. Para ver cuáles son vuestros intereses y lo que más queréis descubrir de esta historia. En fin, como si queréis preguntar qué comí hoy. Lo que sea, sobre la historia, sobre por qué los personajes son de tal manera, sobre el futuro de Drowned, ideas, temporadas. Alguna curiosidad.
#MiPregunta: Esto es importante para mí. ¿Habéis visto un avance positivo en Drowned respecto a trama y escritura? ¿Os sigue gustando la historia o la leéis por mero entretenimiento y curiosidad de saber el final?
#PreguntaNadaQueVer: ¿UAN, TMH, MM o 4?
♦ Dedicación a Figueroitai, BRAVERY_LARRY1, Mari_Lop, biebsxlarry, xLarry_is_lovex, xloveforniallx, niallsgx, -Juliertah003-, solrader22, Fernanda_Stylinson69 (porque me amenazó), DianaMrtz3, ReadInShadows, teamlxrry, OsiriisGomez yHarrySeLaReCome (me reí).
En especial para December_Jan, por su puesto. Y para ni4llmighty por tan lindos mensajes que me llegaron de tu parte, beba.
Mi snap es meritommo, por si me queréis agregar.
¿Sabéis? Estoy pasando por un momento muy difícil emocionalmete y vuestros comentarios me alegrran la vida. No entendéis cuánto os lo agradezco. Os quiero.
M.