La alarma sonó exactamente a las seis en punto, aunque Guillermo se despertó diez minutos después. Se dio la primer ducha del día y bajó a desayunar.
-¿Estás nervioso? -le preguntó su madre.
-Solo un poco.
-Harás nuevos amigos -la madre de Guillermo seguía sonriendo.
-Sí, solo espero llevarme bien con todos. Eso espero -contestó Guillermo, sincero.
El autobús escolar había llegado y era hora de que subiera. Se despidió de su madre y subió a toda prisa.
Las miradas era todas nuevas, aunque todos miraban a Guillermo que vestía una sudadera de Jack & Jones y pantalones azules, no lo intimidó en lo más absoluto. Sabia que, como el primer día, todo esto era de esperarse. Se sentó al lado de un chico de ojos cafés, con buen cuerpo y buena forma de vestir. Hasta su teléfono era bueno, era un iPhone 6 y llevaba «Rock or Bust» de AC/DC sonando en los auriculares. Guillermo pensó que este tío era de esos que vestían chaquetas de cuero y andaba de fiesta. Mientras que Guillermo estaba la mayor parte del tiempo en casa, escuchando «Fidelity» de Regina Spektor.
No compartían en nada, pero eso era algo que a Guillermo no le importaba en lo más absoluto, jamás había sido bueno haciendo amigos y menos si no tiene nada en común. Se bajó del camión y buscó su salón. Un vez dentro se sentó al lado de un chico llamado Frank.
-Hola -le dijo Frank alegre.
-Hola -contestó Guille.
-¿Sabes si el maestro es, tú sabes, malo? -le preguntó Frank.
-No, digo, no lo sé.
Mientras esperaban a que el maestro llegara, Guillermo notó muchas cosas. Notó que había más hombres que mujeres, notó que aquel chico se ojos cafés y buen cuerpo estaba en el salón y notó que el maestro apenas llegaba.
-Bien, alumnos. Hoy nos presentaremos, ¿quién empieza?
Todos comenzaron a presentarse. Guillermo, Frank, un chico que llevaba un gorro de nombre Borja, pero él quería que le dijeran "Luzu" por su apellido. Y cuando pasó aquel chico, Guillermo prestó más atención de la estaba poniendo.
-Soy Samuel. Samuel de Luque.
Una sensación escalofriante le recorrió todo el cuerpo. No sabía exactamente que le pasaba, pero sí sabía una cosa. Sabía que, por más diferentes que fueran, por más extraño y raro que sonara, tenía que hablarle o algo así.
La hora de almorzar había llegado y Frank le había pedido almorzar con él.
-¿Ha sido una mañana difícil? -le pregunta Frank.
-Podría decir que sí -le dice este.
Guillermo dirige su mirada y se encuentra a Samuel formado en la fila para comer. Sin pensarlo, Guillermo se muerde el labio inferior mientras lo ve.
-Guille, Guille... -lo saca de sus pensamientos Frank-. ¿Estás bien?
-Sí, sí. Se me fue el avión un segundo -le dijo reaccionando.
Frank se la pasó la mayor parte del día con Guillermo, ninguno de los dos había hecho otro amigo así que su único consuelo era ese.
Cuando la campana sonó, lo único que quería era correr a casa y pensar en algo para hablarle a Samuel. Corrió tan rápido que no se dio cuenta que había chocado contra alguien, el impacto hizo que cayera junto con sus libros al suelo.
-¿Te he hecho daño? -preguntó aquel chico.
Y Guillermo alzó la mirada para encontrarse con Samuel.
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Primer cap. Espero les guste :) esto apenas empieza ~(•-•~)