Mi destino eres tú (Calum Hoo...

By Lila_LyL

348K 21.2K 4.9K

Él famoso, ella una chica más, pero el destino les tiene preparado algo diferente. Todas las parejas se con... More

¡Bienvenidas!
Mi destino eres tú.
1. "Mundos diferentes"
2. "Australia ¡Allá voy!"
3. "¿Una chica?"
4. "Una agradable bienvenida"
5. "No le agrado"
6. "Los chicos"
7. "Compartiendo con ellos"
8. "Primer día de clases"
9. "La pelirroja y la rubia"
10. "Verdad o reto"
11. "Mali-Koa Hood"
12. "Ensayo y playa"
13. "Tarde de chicas"
14. "La pulserita"
15. "Una canción dice más que mil palabras"
16. "Chloe"
17. "¿Sentimientos? o ¿Alcohol?"
18. "Un agradable desayuno"
19. "Un poco de Ariana y yo"
20. "¿Amigos? Amigos."
21. "¿Quién es el amo?"
22. "Yo sí quiero besarte"
23. "Tu baba es mía"
24. "Batido de frambuesa."
25. "Nadie se mete con mi fresita."
26. "Llamadas."
27. "Estas cosas no me pasan a mí"
28. "Guerra"
29. "Siento cosas por Calum Hood"
30. "Su baba es malditamente mía"
31. "Tiempo de amigos"
32. "Linda pijama"
33. "Faltemos a clases juntos"
34. "Una canción, una conexión"
35. "No estamos destinados a estar juntos"
36. "No es la única mujer que existe"
37. "Escape Room"
38. "Orgullo y corazón roto"
39. "Es lo mejor"
40. "Ya no somos amigos"
41. "Olvidaré a Calum"
42. "Bolas de papel"
43. "Haciendo planes"
44. "Ian"
45. "Nueva salida: todos juntos somos un desastre"
46. "Nueva salida: la verdad"
47. "Eres mía"
48. "¿Celoso?"
49. "Que Dios te acompañe, Calum"
50. "Estaba celoso"
51. "Sí que me gustas"
52. "Empalagosos e inseparables"
53. "¿Cuál es la verdad?"
54. "Abrazos mojados"
55. "Siempre fue ella"
56. "Me haré cargo de mis desastres"
57. "Aminovios"
58. "La psíquica"
59. "Excursión"
60. "Confianza"
61. "La luna"
63. "No hay esperanzas"
64. "¿Que clase de aminovia fui?"
65. "Estás peleando sola"
66. "Este no es un final de cuento"
¡Mi inevitable destino!
Para más noticias...
MUY IMPORTANTE

62. "Estoy orgulloso"

3.1K 242 70
By Lila_LyL

—¡Despierta!

Escuchaba gritar a Mike mientras me zamarreaba.

Esperen un momento ¿Mike? ¿Es que ahora se aparecía en mis pesadillas? ¿Qué demonios hacía Mike acá?

—¿Qué haces acá? —pregunté despertando de golpe y llevándome las mantas a mi cuerpo para protegerlo de los ojos curiosos de mi amigo.

—Son las ocho y tenemos cosas que hacer. —me reprochó con una sonrisita burlona.

—¿Qué cosas? —pregunté confundida.

—¡Hay baños que necesitan limpiarse! —canturreó Ashton.

¿Cómo era posible que siempre entraran sin que nadie los notara?

Oh, pero si decido, por primera vez en mi vida, flexibilizar una pequeña regla... pues entonces me pillan.

Entonces de repente observé a Luke caminar hacia la cama en donde dormía Ariana.

—Ni se te ocurra. —le advertí.

—¿Por qué? —me preguntó confundido.

—Porque será tu culpa si despierta de malas, pero seré yo la que tenga que aguantarla.

Luke me miró aterrorizado. Sí, para que vea que no todo es color de rosa. ¿Acaso no quería a Ariana? Pues ahora tendrá que soportarla o morir en el intento.

—Yo me encargo de Ariana.

—Apúrense, porque tenemos que limpiar el desastre que quedó luego de la fiesta. —me recordó Ashton haciendo que yo cayera de golpe a la cama nuevamente.

(...)

—Esto es un desastre. —comentó Ariana mirando en todas direcciones.

Bueno, digamos que los adolescentes son iguales en Chile y en Australia. No saben el significado de responsabilidad. ¿Tanto les cuesta recoger lo que utilizan?

—Sí, tenemos trabajo que hacer. —concordó Luke.

—¿En serio eres el hada de la limpieza o algo así? —le pregunté juguetona mientras me ponía los guantes.

—Luke es la diva del trabajo. comentó Ashton mientras agarraba una bolsa de basura y provocando la risa de Ariana.

—¡Ariana, se supone que debes defenderme! —le pidió Luke como un niño pequeño.

—Jódete, Luke. —le gritó Mike mientras recogía un vaso de plástico del suelo y lo ponía dentro de la bolsa.

—¿Dónde está Calum? —pregunté intentando no sonar muy interesada.

—En la cama. —respondió Luke sin mayor interés.

—¿Y por qué no vino con ustedes? —pregunté frunciendo el ceño.

—Porque no hay manera de sacarlo de la cama, _______ (Tn). —me respondió Ashton esta vez para luego mirarme de manera burlona—. ¿Por qué no haces el intento?

—Y si ustedes no lo lograron... ¿Qué les hace pensar que lo lograré yo? —le debatí confundida.

—Solo hazlo, fresita. —me molestó Ariana ganándose una mala cara de mi parte.

Dejé la bolsa que traía en mis manos y la dejé sobre una mesa. Ya nadie estaba interesado en lo que hacía, así que caminé rápidamente hacia la cabaña. Esta estaba totalmente vacía, deducía que era porque todos se encontraban haciendo las actividades, que agradecía no hacer. Era obvio que las actividades debían tratarse de actividades físicas que la gente encontraba divertidas. Bueno, no lo eran para mí. ¿Había mencionado que era pésima en la actividad física?

Entré silenciosamente a la habitación y sentí una corriente extraña en mi estómago cuando lo vi medio destapado mostrando su abdomen. Tuve que contenerme para no exclamar demasiado fuerte y guardarme los pensamientos impuros.

Cuando ya estaba dentro —y concentrada en otra cosa que no fuera su abdomen— me acerqué a él y sonreí inconscientemente. Me tapé la boca, porque no quería despertarlo aún. Quería pensar en alguna manera ingeniosa para hacerlo.

—Sé que eres tú, fresita.

Casi me voy de espaldas cuando lo escuché hablar aún con los ojos cerrados. ¿Cómo era posible? Oh, y es importante agregar... voz ronca. Repito, voz ronca.

Sin dejarme tiempo para reaccionar, me tomó del brazo jalándome hacia la cama para luego hacerme quedar en posición fetal con él pegado a mi espalda.

Diosito santo, era la primera vez que estábamos compartiendo la cama siendo novios.

—Creo que es hora de ir a trabajar. —le dije con nerviosismo, y no era para menos. ¡Estaba contra del trabajado torso de Calum Hood!

—Te extrañé anoche. —me susurró al oído estremeciéndome.

—¿Ah sí? —pregunté inconscientemente dejándome distraer por mis hormonas.

—Así es. Y hora que te tengo, no pienso soltarte nunca más. —dijo para luego reacomodarse y apretarme más contra él.

Ay, virgencita, por favor ayúdame a ser como tú.

—No creo que sea posible, Sr. Hood. —comenté tratando de moverme, pero no podía—. Si estabas despierto ¿Por qué no fuiste con los chicos?

Lo escuché reír y miré por sobre mi hombro para enfrentarlo. Esta vez si estaba con sus hermosos ojos marrones bien abiertos.

—Porque sabría que vendrías tú.

—Eso es trampa.

—Pero me funcionó. —concluyó con una sonrisa ganadora.

—Está bien, es cierto. —reconocí intentando zafarme de él—. Debes ir a vestirte. Si el profesor llega y no estamos... quizá qué locura nos manda a hacer ahora.

—Bueno, si es contigo podría hacer cualquier locura. —dijo guiñándome el ojo.

—Oh, pero yo no. —sentencié seria.

—Está bien. —se rindió rondando los ojos—. Pero debes darme mi besito de buenos días.

Sus labios se estiraron hacia mí y reír por eso, pero, de igual forma, me acerqué y los besé. Eso lo dejó contento, ya que, con una inmensa sonrisa, se paró, cogió unas toallas, algo de ropa y se encaminó al baño.

—¡Hey, fresita! —me volteó haciendo que girara a mirarlo, ya que todavía me encontraba sentada en su cama—. Deberías venir conmigo.

—En tus sueños, Hood.

Y en los míos.

Calum entró al baño sin debatir más, pero en seguida mi peor pesadilla apareció y como un resorte me levanté de la cama de Calum.

—¿Qué haces acá? —le pregunté con una mezcla de cansancio y molestia.

—Eres tú la que no debería estar aquí.

Holly se encontraba en la entrada a la habitación. Se veía realmente enojada.

—No tengo nada que hablar contigo, Holly.

—Tienes razón. Ya no tenemos que hablar. —dijo sorprendiéndome mientras se acercaba más a mi—. Tú no entiendes palabras.

—Ándate, Holly. —la amenacé dispuesta a no mover ni un dedo fuera de esa habitación. Calum estaba dándose una ducha y me negaba a dejar a la pelirroja que no se cansaba de ir tras de él sola en la misma habitación—. Calum está aquí y no quieres que él se entere de lo fastidiosa que eres.

—¡Me tienes harta! Tú y toda tu serenidad. —gritó desesperada—. ¡Nada te molesta! ¡Nada sirve para alejarte de Calum! ¿No te sirvió el castigo? No.

Holly continuaba hablando, pero yo me había quedado en la parte en la que había confesado arruinarles el viaje a mis amigos. ¡Sabía que había sido ella! ¿Pero que lo hubiera hecho solo para vengarse de mí por Calum? Era demasiado.

—Entonces sí fuiste tú. —dije perpleja.

Holly detuvo su extraño monólogo que a nadie le importaba y me miró desafiante.

—Sí. Y haría de todo para alejarte de Calum. —respondió como si no fuera la gran cosa—. ¿Cuándo entenderás que al final... yo soy la única chica ideal para él?

—Esto no está bien. —dije haciendo que ella me mirara extrañada—. Entiendo que me odies. Eso me da igual, pero hiciste pagar a todos mis amigos.

—¿Y crees que eso me importa? —me preguntó soltando una risa irónica.

Negaba con la cabeza mientras intentaba entender cómo había podido llegar tan lejos. Sé que odiar a alguien es injustificable, pero a veces al menos la gente tenía motivos coherentes para dar.

—Me tienes harta, tú y toda tu actitud fresa. —me dijo casi llorando de rabia mientras se acercaba peligrosamente a mí. La miré sorprendida, porque nunca había visto a alguien cambiar tan rápido de ánimo—. ¡Ya no te aguanto!

De un momento a otro se tiró sobre mí haciendo que cayéramos al suelo. Yo no sabía pelear, claro que no, pero tampoco era tan tonta como para dejar que me golpearan ¿O sí?

Me estaba golpeando, o intentando golpear, la cara, pero yo no la dejaba. La hice rodar tirando de su cabello rojo tieso. Intentaba contener sus manotazos mientras seguía tirando de sus mechas. No me reconocía.

En esos momentos yo estaba llorando. Llorando, porque de todos los escenarios que me imaginé peleando, jamás me imaginé este. Llorando por todas las emociones que me estaban alcanzando, pero, sobre todo la rabia por haber permitido que ella hiciera que yo no confiara en mí y, mucho peor, que hiciera pagar a mis amigos por eso.

—¿Fresita? —escuché una voz desconcertada—. ¡Fresita!

Me tomó en sus brazos y me levantó, quitándome de encima de Holly.

—¡Tu fresita me estaba matando! —dijo Holly llorando. Sentí rabia por lo cínica que era y por lo bien que le salía hacerlo, porque hasta yo le habría creído.

—Ándate de aquí, Holly. —sentenció Calum. No lo había mirado, pero por su voz podía decir que estaba enfadado—. Tú no deberías estar aquí y si no quieres que les informe a los profesores, debes irte.

Ella me mandó una mirada de furia y desapareció.

—¿Estás bien?

Entonces sentí miedo.

Todo siempre se había resumido entre lo que Holly y yo podíamos decir y a quién Calum le creería. Siempre sentí que la prefirió a ella. En todos los demás problemas siempre fue tras de ella, por la razón que haya sido, pero ahora estaba aquí, conmigo. ¿Lograría creerme?

—Ella fue. —solté sin poder esperar a ver cuál sería su respuesta. Calum me miró sin entender—. Ella les aviso que estábamos en el río.

La mirada de Calum se ablandó. ¿Lo haría por pena? ¿Creería que estoy loca?

—Ya pasó, fresita. —dijo envolviéndome en sus brazos.

—¿Me crees? —pregunté sintiéndome tonta por lo frágil que me oía.

—¿Por qué no te creería? —me preguntó, pero yo no respondí.

Me alejó del calor que me entregaba su pecho y me obligó a mirarlo. Quería correr de ahí y negar todo lo que había dicho, pero ya era muy tarde. Acababa de mostrar, una vez más, mis inseguridades al chico que me gustaba.

—Puede que me haya comportado como un idiota. Puede que haya querido que lo creyeras así, pero jamás y escúchame bien, fresita, jamás puse la palabra de ninguna chica antes que la tuya.

Suspiré aliviada y reclamé su calor de vuelta.

—Y... ¿No estás enfadado? —le pregunté. Acababa de presenciar una escena que me hacía quedar como una salvaje.

—No. En realidad, estoy orgulloso, pero se supone que no debo decírtelo. —reconoció haciendo que yo riera para luego dejar un camino de besos por mi cara.

________________________

*Capítulo corregido*

Continue Reading

You'll Also Like

285K 22.6K 51
Historias del guapo piloto monegasco, Charles Leclerc.
256K 18K 91
Todas las personas se cansan. Junior lo sabía y aun así continuó lastimando a quien estaba seguro que era el amor de su vida.
418K 66.7K 30
Park Jimin, un padre soltero. Por culpa de una estafa termina viviendo con un completo extraño. Min Yoongi, un hombre solitario que guarda un triste...
463K 64.6K 43
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ¿Un embarazo? ¡Imposible!