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Jimin había llegado esa mañana a la casa de sus padres, la verdad es que estaba muy feliz y sabía que sus padres lo estarían por él.
—Mi retoño. — Baekhyun sonrió abrazando a su bonito hijo.— Que sorpresa tenerte en casa, en donde dejaste a mi bolita de arroz?
Jimin río. — Yoongi está preparando las últimas páginas de su proyecto final y estará trabajando en una maqueta que sería su calificación final. Ha estado muy cansado.
— Falta un mes para su graduación, verdad?
—Si, yo he terminado mi presentación y solo estoy arreglando uno que otros detalles para el dia. He enviado mi investigación escrita así que me han calificado ya, pero el de Yoongi si es complicado.
— Espero que lo estés ayudando.
—Por supuesto, me siento a su lado y le digo lo bonito que es. — sonrió. — Así no se queda dormido.
Baekhyun río.— ¿Entonces que te trae por aquí? Nos has tenido muy abandonados.
—Quiero hablar con ustedes. — sonrió. — ¿Padre está?
—Si, está en una reunión con Donghae. Podemos ir a interrumpirlos, llevan mucho tiempo dentro.
—Me parece perfecto, tengo que volver con Yoon. — tanto Baekhyun como él se pusieron de pie y llegaron a la oficina de Chanyeol
Su papá dio dos toques a la puerta y luego abrió para ver a ambos hombres estrechar su mano.
— Señor Lee — Jimin hizo una reverencia.
—Asi que no mentía tú padre cuando hablo de su guapo hijo. — sonrió. — Me dará mucho gusto tenerte en la familia, muchacho. — el hombre palmeó su brazo y Jimin frunció el ceño.
—¿Disculpe?
Chanyeol aclaro su garganta y se puso de pie. — Él es mi hijo Jimin.
—Oh. — Donghae se apeno. — Lo siento, supongo que estaré conociendo a mi futuro yerno en otra ocasión.
Chanyeol asintió y se despidió de su invitado.
—¿Que fue eso Park Chanyeol?. — Baekhyun se cruzó de brazos.
— Bueno. — el hombre rasco su nuca. — Jihyun acepto ser quien se case con la hija de Donghae.
—¿Que dijimos sobre eso? — dijo molesto Baekhyun.
—Mi sol, Jihyun fue quien hablo conmigo sobre eso, él quiere hacerlo, le dije que no lo haríamos e insistió. Te juro que no haría nada para que mis hijos sean infelices en una relación o matrimonio arreglado.
—Entonces hablaré con Jihyun. — dijo Baekhyun mirando mal a su esposo y luego miró a su hijo. — Estamos aquí cariño, que era lo que querías decirnos?. — pregunto sonriendo a Jimin quien le regaló la misma sonrisa.
—Como saben, en un mes nos graduamos y mi preciosa estrella llega en unos meses más.
—Es verdad, ese gato gruñón no me ha invitado a su ceremonia. — Chanyeol se cruzó de brazos haciendo reír a Jimin.
—Por supuesto están invitados, solo que Yoon ha estado ocupado con su proyecto final por eso no ha podido venir a visitarlos.
—Bueno, mi yerno será el mejor arquitecto de toda Seúl. — infló el pecho con orgullo.
—Parece más tú hijo Yoonie que yo..
—Por supuesto, eres adoptado. — dijo Chanyeol asintiendo.
— Papá!. — Jimin miró a Baekhyun quien se rió. — Gracias por querer tanto a mi chico— sonrió. — Y-yo bueno... — Jimin metió la mano al bolsillo de su pantalón y saco una cajita de terciopelo azul y lo abrió para dejarlo sobre el escritorio de su padre.
—Jimin. — Baekhyun cubrió sus labios con su mano.
—Es el amor de mi vida. — miró a sus padres. — Y es el padre de mi nena
El bonito anillo de oro blanco yacía en la cajita, tenia un gran diamante en el centro con diamantes pequeños que lo rodeaban, era precioso.
—¿Estás seguro de tu desición? — pregunto Chanyeol mirando la sortija.
— Más seguro que cuando acepte cursar ese año de administración de empresas solo para que me dejaras tomar danza contemporánea.
Chanyeol río. — Sabes que debías hacerlo. — Jimin asintió.
— Les juro que es la mejor decisión que voy a tomar por el resto de mi vida. . — sonrió. — Quiero pasar hasta el último día de mi vida a su lado, quiero que mi hija crezca con tanto amor.
—Mi pequeño Jiminie. — Baekhyun tomo su mano. — sabes que tienes nuestro apoyo incondicionalmente— sonrió con tanta felicidad. — y sabes que aquí estaremos siempre para ti y tú familia.
—Ademas Yoongi ya es de la familia. — Chanyeol sonrió apretando el hombro de Jimin. — Estamos orgullosos de ti, Jimin. Se que serás un increíble esposo y sobre todo, un gran padre.
— Y no tenemos miedo ni necesitamos preguntar si Yoongi siente lo mismo, porque con solo ver sus ojos al mirarte sabemos la respuesta.
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Cuando Jimin volvió a casa pasadas las nueve de la noche se encontró con Yoongi (el cual estaba sentado en la alfombra) recargado en la mesa del centro y durmiendo, en una muy mala posición.
No pudo evitar sonreír al mirarlo con la boca entre abierta.
Dejo sus cosas, se quitó los zapatos y camino hasta el para con delicadeza tomarlo entre sus brazos sin moverlo mucho y levantarlo.
Jimin era muy cuidadoso, Yoongi cargaba ya con su bonita pancita de seis meses imedio y su preciosa estrella amaba despertar a su papá cuando este dormía.
—¿Jimin?. — dijo adormilado
—Si mi amor, duerme un rato ¿Si? Prometo ayudarte cuando despiertes. — lo dejo sobre la cama y lo arropó.
—Tengo que avanzar aunque sea la mitad.
—Lo se mi cielo, voy a ayudarte a pintar las piezas en lo que duermes ¿Si? Recuerda que no dormiste bien anoche porque estrellita estaba de traviesa— se acercó y beso los bonitos labios de su novio y luego bajo hasta el bonito vientre para hablarle a U bebé. — Amor. — beso sobre la tela. — deja dormir a papá por favor.
Yoongi rió al sentir la patadita—Te amo. — murmuró acariciando la cabeza de Jimin.
—Tambien te amo, los amo mucho. — dejo un beso en el vientre y con ello salió.
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Jimin acomodo el espacio en donde estaba trabajando Yoongi, sabía que su chico estaba muy estresado en todo su proyecto y el que su pequeña hija se la pasará moviéndose en la madrugada no le ayudaba mucho, pero sabía cuánto amaba sentir a su estrellita.
Acomodo los papeles de un lado, luego puso el computador del otro mientras dejaba las piezas encima de la mesita para comenzar a pintar todas las piezas de lo que armaría Yoongi más tarde.
Fueron más de cien piezas y le llevo más de seis horas terminar de pintar., junto a los retoques que les dio a otras piezas. No sabía que era en lo que Yoongi estaba trabajando, tampoco entendía mucho los planos pero el que Yoongi haya marcado las piezas con el color que irian se lo facilito.
Miró el reloj, iban a dar las siete de la mañana así que dejo todo y fue a lavarse las manos para ir a la habitación, si levantaba más tarde a Yoongi se enojaría.
Se acostó con delicadeza, pero antes de despertarlo se puso a la altura del vientre de Yoongi para dejar unos besitos.
—Buenos días mi vida. — sonrió mientras sus labios rozaban con la piel. — No despiertes a papi aún, se que me escuchas. — beso de nuevo el vientre. — quiero que sepas que estamos muy feliz por tu llegada. — acaricio la piel con delicadez, Yoongi comenzaba a despertarse. — Cuando vengas al mundo mi amor, vas a ser la niña más amada. — beso el bultito que sobre salió. — ¿Te desperté? — Jimin río. — Es por todas la que has despertado a papá. — volvió a reírse. — Papá te ama mucho mi amor, se ha cuidado mucho para que vengas sana con nosotros, cuando lo conozcas estoy seguro de que te vas a enamorar de él así como yo lo hice. Tendrás al papá más hermoso de todo el mundo, amor.
Yoongi quien ya había despertado, estaba sonriendo de lo feliz que se sentía.
— Papá también es muy inteligente, espero que seas tan inteligente como él y que saques su belleza y sus ojos y no me molestaría que te parecías solo a él, papá es precioso. — beso de nueva cuenta el vientre. — Nunca conocí a tus abuelos amor, pero se que ellos desde donde estan te aman. También mis padres te aman y tu tío Jihyun se ha vuelto loco cuando lo supo, ni que decir de los amigos locos de papá y del estúpido de Taemin. — Yoongi le escucho murmurar a lo bajito. — Lo siento amor, no le digas a papá que dije esa última palabra, por favor no vayas a decir malas palabras. — se golpeó los labios y escucho la risa de Yoongi así que lo miró.
— Te escuché Park .. — sonrió y Jimin se incorporó para estar frente a su rostro.
— Lo siento mi vida, es lo que provoca Lee Taemin.
Yoongi se carcajeo de nuevo y Jimin sonrió.
— Buenos días, mi amor. — beso los delgados labios de Yoongi.
— Buenos días mi corazón. — le respondió y sonrió. — Estrellita dice buenos días también. — soltó un pequeño quejido y Jimin colocó su mano en el vientre para comenzar a acariciar.
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