Era la mañana del sabado, mañana de reyes. Chiara y Elizabeth seguían dormidas, con el brazo de la rubia rodeando a Chiara. Elizabeth llevaba puesta, de nuevo, una camiseta de Chiara, se le empezaba a hacer costumbre el dormir con ropa de la pelinegra. La música para despertarse había sonado hacía diez minutos, pero ellas seguían dormidas.
— Míralas, que monas.— Susurró Naiara, la cual las miraba junto a Ruslana.
— Vamos a despertarlas con cuidado, para que no se lleven un buen susto.— Le dijo la pelirroja en el mismo tono, acercándose a ellas para hablarles en bajo.— ¡Levantaos lesbianas!
Naiara no pudo evitar reir al escuchar el grito de Ruslana, el cual asustó tanto a Elizabeth como a Chiara, despertándolas. La rubia se levantó de un salto de la cama y empezó a perseguir a Ruslana por toda la habitación de los armarios, siendo frenada por Juanjo.
— Mátala luego.— Ruslana miró a Juanjo ofendida y Elizabeth rió.— Pero ahora espábila que quiero ir a desayunar, que hay churros. ¡Y reyes!
— ¡¿Hay churros?! — Preguntó la menor, sonriendo emocionada, y corrió a por su micrófono.
Cuando ya estuvieron todos listos, fueron a la sala de ensayos a por sus reyes, y Elizabeth sonrió, zarandeando a Chiara al ver que había regalos. La pelinegra rió suavemente dejando un beso en la mejilla de la menor, para después ambas irse a por sus respectivos regalos, los cuales habían colocado al lado.
Elizabeth se sentó cerca de sus regalos y vio que había dos cosas, una bolsa y un regalo. En el regalo había una etiqueta que ponía "de parte de tus hermanas". Sonrió suavemente, hicieron todos una cuenta atrás y abrieron el regalo de sus familias. La rubia sonrió al ver una libreta, le vendría muy bien para escribir y componer.
— ¡Mira Kiki! — Dijo emocionada, arrastrandose hacia donde Chiara para enseñarle su regalo, como si fuese una niña pequeña, al ver lo que había en la portada de la libreta, pues ponía IKAG en grande delante con varias fotos de Elizabeth y Chiara pegadas.
— Dios, ¡me encanta!— Exclamó Chiara cogiendo la libreta y viendo la portada, para después pasar algunas páginas.— Hay algo escrito dentro, Lizzy.
Elizabeth frunció el ceño y cogió de nuevo la libreta, pasando algunas páginas. Había varias escritas, con dedicatorias de sus amigos y de sus hermanas. Sus ojos se llenaron de lágrimas pero decidió leerlas más tarde, no quería ponerse a llorar en esos momentos.
Después abrieron el otro regalo, y vieron que, junto con lo que venía dentro de la bolsa, había algunas cartas de los fans (N/A: lo meto aquí porque se me olvidó hacerlo antes JAJAJAJ). Todos empezaron a leer una de las cartas, y Elizabeth eligió una que tenía un corazón de color azul y rojo.
Era muy bonita, decía que lo estaba haciendo super bien en el concurso, que fuera había muchísima gente que la apoyaba, que todas eran fieles creyentes del Chiabethismo o Barbarie, cosa que hizo reír a la rubia, y que amaban como se llevaba de bien con todos. Le animaron a seguir así, con una sonrisa y apoyando a todos, y cuando terminó de leer la carta una lágrima cayó por su mejilla.
— ¡Denna, Elizabeth! — Gritó Ruslana, acercándose a donde ambas y enseñándoles su carta. — ¡Han mencionado a Rusdeli! ¡El trío depresivo! Aún se acuerdan de eso. — Las tres rieron mientras leían la carta de Ruslana. — También mencionan a Nairelirus, le han puesto un nombre a nuestro grupo. — Siguió mencionando la pelirroja, emocionada por la carta.— ¡Y dicen que aman nuestra amistad! Que es como que nos hacemos bullying pero en el fondo nos tenemos cariño.
— Eso es una total mentira.— Elizabeth miró hacia la cámara.— Yo a esta no le tengo ni una pizca de cariño, que no os engañen.
Ruslana abrió su boca ofendida y le empujó la cabeza hacia delante a la rubia, la cual rió para después abrazar a Ruslana con fuerza.
— Mira Liz, en mi carta dicen que aman nuestra relación y que somos el "safe place" de muchas. — Leyó Chiara sonriendo, viendo como su novia sonreía del mismo modo.
— Amo a esa gente, te lo juro.— Elizabeth volvió a mirar a una cámara.— ¡Os amo! — Hizo un corazón con las manos y Chiara se levantó con ella, pasando un brazo por sus hombros y mirando hacia la cámara.
— Os amamos.— Lanzó un beso hacia la cámara y después dio un beso en la mejilla a la rubia.
— ¡Esto no es justo! — Exclamó Naiara acercándose a Elizabeth y enseñándole su carta.— En vuestras cartas ponen cosas super bonitas, ¡y en la mía me dicen que parezco madre de Elizabeth y de Ruslana!
— Es que es un poco cierto.— Dijo Ruslana acercándose a ellas, apoyando su cabeza en el hombro de Naiara para leer la carta. — Solucionas nuestras cagadas y eres como la "protectora" de este grupo, es como... yo inicio las peleas, Elizabeth me anima a hacerlo y tú nos sacas de ahí.
— Hombre, es que si fuese por vosotras la academia ya estaría reducida a cenizas.— Elizabeth y Ruslana se miraron y rieron, sabiendo que posiblemente Naiara tenía razón con esas palabras.
...
Era la tarde de ese mismo sábado, justo después del pase de micros. A Lucas y a Elizabeth les había ido bastante bien, pero seguían sintiéndose inferiores al resto de sus compañeros, sobre todo a Elizabeth, a la cual le estaban entrando cada día dudas más grandes de su paso por el programa.
Estaba en la terraza, sola, con una taza de café en su mano y lágrimas retenidas en sus ojos. Tenía un gran bajón, no sabía si era por la canción que no daba para más o porque ella no daba para más, pero estaba por debajo de sus compañeros.
No sabía bailar como Ruslana, afrontar los retos como Martin, hacer cualquier cosa bien como Juanjo o Naiara, no tenía un estilo de voz único como Chiara... Era tantas cosas que podía numerar con todos los concursantes que quedaban en la academia que prefirió cerrar sus ojos, dejando caer una lágrima.
— ¿Qué pasó, loki?
Elizabeth abrió sus ojos y miró hacia Lucas, el cual tenía un café en manos y la miraba con cierta preocupación. Se sentó a su lado y la rubia alzó ambos hombros, levantando su mirada para evitar llorar.
— No sé muy bien ahora mismo qué hago aquí.— Susurró, secándose las lágrimas.— Como que... de un día para otro he perdido mi sitio en este programa, supongo que será un bajón pero... es que no se, me siento tan inferior al resto...
— No, ni se te ocurra insinuar eso de nuevo.— Lucas la miró, viendo como Elizabeth iba en serio por sus ojos llorosos.— Ay loki, ¿vos no sabes que desde que entramos hay mucha gente aquí que te ve como finalista?
— ¿Qué dices? — Elizabeth rió suavemente y negó.— Imposible, no llego a la final ni de coña.
— ¿Por qué te tienes como tan inferior? No lo eres, si estás aquí es porque cantas de la bestia.— Elizabeth rió suavemente, y Lucas lo miró.— Sabes transmitir, no sabes lo que yo pagaría por transmitir como tú.
— Tampoco transmito tanto, no seas exagerado.— Susurró Elizabeth sin saber muy bien qué decir, nunca había escuchado a alguien decirle tantas cosas buenas en tan poco tiempo.
— ¿Me está diciendo eso la chica que consiguió emocionar a todo el plató en la gala 4?— Elizabeth dejó salir una risa y miró de nuevo hacia Lucas.— El lunes vamos a hacerlo perfecto, vas a hacerlo perfecto. Y que pase lo que tenga que pasar.
— ¿En serio crees todo eso? — Preguntó Elizabeth, como si fuese una niña pequeña.
Una niña pequeña que nunca había recibido algo que no fuesen criticas por parte de sus padres, y eso le estaba afectando justo en esos momentos.
— Claro que sí, loki.— Susurró el uruguayo abrazando a la menor.— Ven, vamos a molestar a Naiara, eso siempre me anima.— Elizabeth lo miró con el rostro iluminado por una sonrisa.
— ¿Te gusta molestar a Naiara? — Lucas asintió obvio y Elizabeth sonrió.— Te vas a convertir en mi mejor amigo y en el de Ruslana.
El mayor rió y ambos salieron de allí, como mencionaron previamente, a molestar a Naiara, haciéndole cosquillas y recibiendo insultos por parte de la pelinegra.
— ¡¿Pero desde cuando tú y este os lleváis bien!? — Exclamó Naiara tratando de huir de ellos.
— Desde que descubrimos que a ambos nos gusta molestarte. — Rió Elizabeth, sintiendo como alguien le abrazaba por la espalda. Elizabeth rió y se giró, para mirar a Chiara con una sonrisa.
— ¡Ja! Te quedaste solo, Luquitas.— Lucas miró hacia Elizabeth poniendo una mano en su pecho, haciéndose el ofendido.
— Lo siento guacho, prioridades.— Lucas rió suavemente y tanto él como Naiara se fueron de allí, una corriendo tratando de huir de Lucas y este persiguiéndola.
Chiara miró riendo a la menor y la abrazó, cuando entraron Martín, Juanjo y Ruslana a aquella sala.
— Joder que sola estoy. — Susurró Ruslana pasando al lado de Chiara y Elizabeth, y estas se giraron hacia ella riendo.
— ¿Queréis que os enseñe como hago un mortal en el sofá? — Preguntó Chiara hacia Ruslana y Elizabeth, las cuales asintieron.
— No, Chiara no hagas eso, te vas a hacer daño. — Intentó frenarla Martin mientras iban hacia los sofás.
— ¡Papá! — Gritó Chiara hacia Martin.
— A tu padre les respetas eh, niña. — Le dijo Juanjo hacia la pelinegra, mientras esta empezaba a saltar en el sofá.
— Pues mi papa favorito es Martin. — Se burló Chiara mirando a Juanjo, mientras Ruslana y Elizabeth se subían en el sofa.
— Que te jodan. — Susurró Juanjo hacia Chiara.
— Dios, el encierro nos está afectando. — Susurró Elizabeth hacia Ruslana, la cual, riendo, asintió, completamente de acuerdo.
— Es el delirio colectivo. — Ruslana, después de decir eso, se levantó en el sofá y Chiara la abrazó.
— Y mi hermana favorita es Ruslana. — Juanjo las empujó cayendo ambas al sofá. — ¡Y mi prima favorita es Elizabeth!
— Cuanto más primo más me arrimo no te jode, anda la niña, que no es tonta ni nada. — Habló Juanjo escuchando la carcajada de Elizabeth, la culpa se acercó a Chiara y a Ruslana y se tumbó encima de ellas.
Estuvieron durante un rato más con ese mini juego que se habían montado, donde Martin y Juanjo eran los padres de Ruslana y Chiara, y en un momento llegaron Denna y Violeta, las cuales fueron la madre de Elizabeth y tías de las otras dos.
— ¡Te vas a quedar sin cenar! — Exclamó Violeta hacia Elizabeth, pues esta le había llamado "pelirroja teñida".
— Cariño, calmate. — Susurró Denna hacia Violeta, viendo cómo Elizabeth le sacaba la lengua a Violeta y esta se lo devolvía.
— Pues mi madre favorita es Denna, porque tú eres mala. — Violeta le hizo una peineta a Elizabeth mientras Denna reía.
Estuvieron un buen rato haciendo lo mismo, divirtiéndose todos juntos, tratando de no pensar en que el lunes podría ser que Denna abandonase la academia.
...
— ¿Tú te quedarías embarazada para tener hijos? — Le preguntó Bea a Elizabeth, mientras ambas estaban en la terraza.
Era el domingo a la tarde, eran las únicas que estaban en la academia porque Lucas se estaba duchando y los demás aun seguían en los ensayos en plató. Elizabeth miró a Bea y esta empezó a reír por la cara de la menor.
— Pues como no sea a través de los dedos mágicos es complicado.
Bea soltó una carcajada mayor y le dio un golpe a Elizabeth en el brazo, señalando la cámara con la cabeza. La rubia puso ambas manos sobre su boca, últimamente le estaba pasando mucho que se le olvidaba que la gente podían verla casi todas las horas del día, y últimamente estaba soltando unas barbaridades considerables.
— Me van a funar por Twitter al final. — Murmuró Elizabeth mirando a Bea con preocupación, pero esta tan solo reía, como si tan solo la simple existencia de la rubia le causase gracia.
— Eres icónica te lo juro.
— Pero que icónica, que dices, si la gente me tiene que tachar de gilipollas. — Bea volvió a reír, le empezaba a doler la tripa de tanto reír. Elizabeth se terminó contangiando de su risa, era muy pegadiza.
— Desde lo de las navajas en la cena de Navidad la gente tiene que tener normalizado tus barbaridades. — Elizabeth rió, recordando aquel momento.
— Mira, mira, callate, que vergüenza. — Bea la miró aún riendo. — Que por un momento realmente pensaba que se estaba pidiendo unas navajas para clavarselas a alguien. — Explicó, rodando los ojos con gracia al ver como Bea seguía riendo.
— Yo creo que la gente fuera nos ama por lesbianas. — Dijo Bea tras unos minutos en los que se dedicó únicamente a reírse de Elizabeth.
— Pues bueno, que vivan las mujeres. — Soltó directamente, levantando su taza de café como si estuviera haciendo un brindis. Ya le daban igual sus padres, que hicieran lo que quisieran... Bueno, a ella, a su hermana que no la tocasen.
— Eso es, Elizabeth, te hemos pasado al buen camino de la vida. — Bea chocó su taza con la de la menor y ambas rieron. — Por el lesbianismo en la academia.
— Por el lesbianismo en la academia.
Estuvieron durante un rato más hablando, conversación que se basó en Bea riéndose de cualquier cosa que salía por la boca de la rubia. Eran Dos chicas que nunca antes habían hablado mucho, pero que cuando se juntaban eran unas risas garantizadas. Porque Bea se reía por todo y Elizabeth era una persona de la cual todo el mundo podía reírse por las barbaridades que podría llegar a soltar.
...
— ¿Sabes que siento que aquí he evolucionado mucho más como persona que como cantante? — Le dijo Elizabeth a Chiara la noche del domingo, con el directo ya terminado, mientras ambas estaban en el sofá, tumbadas y abrazadas.
— ¿Tú crees? — Le dijo la inglesa con sarcasmo, haciendo reír a la rubia.
— Es que lo estuve pensando ayer, al entrar aquí yo... Dios, me llegas a decir que iba a estar así contigo, una chica, y me hubiese reído en tu cara, para después insultarte y posiblemente ir corriendo a donde mis padres. — Chiara rio acariciándole las costillas a la menor.
— No tienes que júrarmelo, los primeros días, cuando ya estabas que sentías algo por mi, parecía que era la peor cosa que te habia pasado en la vida. — Elizabeth sonrió y alzó su mirada hacia donde Chiara.
— Pero bueno, cambié y ahora he aceptado que no soy hetero, que me gusta una guiri medio metro, y he aprendido a hablar las cosas.
— Oye perdona, que eres más bajita que yo. — Elizabeth rió suavemente, apoyando su cabeza en el pecho de Chiara. — Y segundo, lo de hablar las cosas aún tienes que mejorarlo.
— Bueno, déjame ser feliz. — Ambas rieron y se quedaron calladas durante unos segundos. — Gracias.
— ¿Qué? — Preguntó Chiara confundida.— ¿Por qué?
— Porque llegaste en un momento de mi vida bastante bajo y... Fuiste como mi salvavidas. — Chiara la miró con ternura y Elizabeth siguió hablando, a pesar de estar completamente avergonzada.— Que me has enseñado mucho más de lo que crees y eres la relación más sana y bonita que he tenido en toda mi vida, y eres una persona de 10 que se merece lo mejor del mundo. Y que te quiero, muchísimo más de lo que crees.
— Joder Lizzy, que mona eres cuando quieres. — Elizabeth rió golpeando suavemente la pierna de Chiara.— Tú también me has salvado, cuando entre aquí me sentía... Que no encajaba en ningún lado, por mi personalidad y tal, y siempre me reprimía, me guardaba muchas cosas para mí. Pero... Contigo puedo ser yo misma al completo, no me juzgas nunca, me escuchas y me dejas quererte con intensidad sin tacharme de alguien demasiado intensa. Y que yo también te quiero, muchísimo más de lo que crees también.
— Que cursi eres. — Dijo Elizabeth riendo, recibiendo un golpe por parte de Chiara. — Es broma, tonta.
— Lo sé, más que nada porque se que tú eres mucho más cursi que yo, amor. — Elizabeth sonrió, alzando una ceja.
— ¿Ves como si que me habías llamado amor? — Chiara rodó los ojos, empujado el rostro de Elizabeth para que dejase de mirarla.
— Callate.
— Se me ocurre una forma de que me calle. — Susurró Elizabeth mirando hacia Chiara, la cual la miró con una ceja alzada.
— Ah, ¿Si? ¿Cual? — La rubia ladeó su cabeza con una sonrisa.
— Podrías... No se, como idea eh, ¿Callarme tú?
— ¿No decías que era una cursi? — Cuestionó Chiara con una ceja alzada, y Elizabeth rodó los ojos.
Sin decir nada más, fue Elizabeth quien rompió la distancia que las separaba, juntando sus labios en un beso tranquilo, suave, y lleno de amor. Cuando se separaron, Elizabeth la miró con una sonrisa.
— Por cierto... Me gusta que me digas amor, suena muy bien. — Susurró mirando hacia los labios de Chiara, y acariciándolos suavemente con dos de sus dedos, dejando a la pinegra atontada.
— Entonces te llamare así más veces, amor. — Susurró, justo antes de volver a fundirse en un profundo beso con Elizabeth.
...
AAAAAH siento que este capítulo no quedó muy bien, pero no sé JAJSJDJKSZ
ENFIN amo a Bea y a Elizabeth, y a Lucas Jakjdksja decidí que iba a hacer que hablase con los tres, Álvaro ya llegará, denme un momentito JAJAJA
POR CIERTO les traigo otra pregunta, a pesar de que ya tengo todo pensado en mi cabeza, quiero saber qué pensáis.
¿Que creéis que pasará cuando salgan de la academia de OT? Decidme que creéis que pasará con Elizabeth solo, Elizabeth con Chiara, con sus amigos... Lo que queráis JAJAJAJAJ
Besis de fresis,
¡Nos leemos!