— te dije que no vinieras más de una vez al mes —el hombre se cruzó de brazos, mientras veía a Soojin entrar a la habitación y tomar asiento en la silla frente a su escritorio— incluso le dije a Heedo que no te dejara entrar
— no harías eso
— lo hice —sonrió— tiene nuevo auto, ¿no lo viste?, aumenté su salario solo para que no te dejara llegar a mi
— ella me adora
— mm —hizo una expresión pensativa— en realidad, diría que es más temerte que adorarte
Soojin rodó los ojos, una risa burlona se escapó de los labios del mayor mientras se acomodaba mejor en su asiento.
— solo dame las malditas pastillas
— te lo dije Soojin, no te daré más de esas pastillas hasta que aceptes hacerte un examen completo
— eso tomaría aproximadamente la mitad de mi día —explicó— no tengo tiempo para eso
— tampoco tengo tiempo para darte esas pastillas, ¿sabes el trabajo que toma escribir tu receta, bajar las escaleras, pedir tu medicamento, volver a subir y entregarte esa bolsa de papel? —alzó una ceja— no, eso tomaría 15 minutos de mi día
Soojin miró mal a su amigo, mientras este le devolvía la mirada graciosa.
Finalmente, el hombre suspiro rendido, anotando algunas cosas en una hoja de papel.
— ¿qué tan doloroso es esta vez? —cuestionó— ¿los ejercicios están funcionando?
Ella negó con la cabeza.
— ni siquiera los haces —bufo— está bien, ven mañana y los tendré listos para ti
— ¿mañana?
—asintió— los cargamentos se atrasaron, no llegarán hasta mañana por la mañana
— las necesito ahora
— y yo necesito una paciente que siga mis instrucciones, haga sus citas adecuadamente y no me moleste los fines de semana —la miró otra vez— supongo que no tenemos lo que necesitamos
Soojin volvió a rodar los ojos, buscando dentro de bolso y sacando un pequeño sobre de papel con detalles y olor a perfume caro, se la paso al hombre quien la tomo curioso. Abrió el sobre y sacó de el una hoja de papel, aún más caro, tenía algunas cosas escritas con tinta negra y una fotografía de pareja al final.
—miró a Soojin, al papel y de nuevo a Soojin— ¿ige mwongayo?
— una invitación —sonrió forzada— mi prima conoció al hombre de sus sueños y se casaran hoy, ¿olvide contarte?
El mayor abrió la boca asombrado, mientras se acercaba la foto para verla mejor.
— ¿chincha? —Soojin asintió— wow, así que ella lo logró... su prometido, ¿no es ese famoso empresario del que corres rumores de adulterio?
— es una memorable historia de amor, ¿no lo crees?
— ¿de verdad iras? —cuestionó preocupado— esa mujer, es una bruja, tiro su almuerzo sobre mí en la preparatoria
— por eso necesito mis pastillas —recordó— es un evento importante
El hombre la miró otra vez, suspirando algunos segundos después, se paró de su lugar y salió de ahí. 20 minutos después la puerta de la oficina volvió a abrirse, Soojin se dio vuelta para encontrar a su amigo viéndola desde la entrada, una bolsa de papel en manos y una sonrisa poco entusiasta en sus labios.
— ven a que te revise mañana
— mmm, ¿en mi día libre?, se supone que debo descansar —se burló, tomando la bolsa que se le ofrecía—
— sé dónde vives, Kang Soojin —advirtió, la mencionada no pudo evitar reírse— toma una antes del evento y si el dolor de espalda empeora durante la cena, toma otra, pero no más ¿okey?
—asintió— como usted diga, doctor
Abrió la puerta, despidiéndose con la mano, pero antes de que pudiera alejarse, fue tomada del brazo, Soojin se giró, encontrando la mirada nerviosa del otro
— ¿mm?
— avísame si quieres un acompañante, tengo un nuevo traje que no he podido usar —sonrió—
Soojin también sonrió, quitando el agarre del hombre sobre su brazo y dando un paso para atrás.
— está bien, ya hay alguien que me acompañará
Vio al contrario abrir los ojos sorprendido, pero antes de que pudiera decir o preguntar cualquier cosa, se fue de ahí corriendo.
Cuatro horas más tarde, Soojin se encontraba en su departamento terminando de arreglarse y de preparar el papeleo que dejaría para sus subordinados, todo lo que ellos necesitaban saber para cualquier emergencia que tuviera que ver con los pacientes, estaba en todas esas hojas bien guardadas y apiladas, dentro de los bonitos folder color crema, obsequio de su madre.
Se dio un vistazo en el espejo, su largo cabello peinado en una perfecta media coleta risada, un listón delgado y liso adornando. Su maquillaje había sido hecho por ella misma, había obtenido un cupón para un mes de clases con una maquillista profesional, regalo de SooAh su cumpleaños pasado, así que, aunque obviamente no era una profesional, aun así aprendió varias cosas. El vestido que compro especialmente para esta ocasión, largo hasta las rodillas, la parte de arriba era ajustada y tenía una pequeña apertura antes de llegar al pecho, la parte baja era un poco más suelta, tenía pequeñas mangas abultadas un poco más transparentes, con detalles tejidos. Los tacones que llevaba ya eran viejos, pero seguían siendo lindos, Saint Lauren de charol liso, tacón delgado y punta filosa.
Se veía bastante bien. Lo suficiente para que su apariencia no fuera tema de conversación entre su familia. Se atrevía a pensar que esta vez, su belleza sería halagada más de 10 veces en la noche.
Kang Soojin sabía que era bonita, y por supuesto, le agradaba cuando la gente también lo notará, así le era más difícil olvidarlo.
"Está bien si lo olvidas, yo me encargaré de recordarte cuan hermosa eres, cada día de mi vida"
Su voz hizo eco en la mente de Soojin, haciéndola tambalearse y casi caer al suelo, un nudo se formó en su garganta y las ganas de llorar la invadieron. Se miró en el espejo una vez más, sintiéndose la pequeña Soojin de 15 años, la cual aún no sabía lo bonita que era.
— miau
Escucho un maullido, miro instintivamente el piso y vio a la pequeña gatita sentada a sus pies. Soojin sonrió, agachándose y levantando a la blanca bola de pelos, besándole la frente.
— bom-ah —la llamó— ¿me veo bien?
— miau
—junto su mejilla con la gatita— bom-aaaah —ronroneo— hoy llegare tarde, ¿gwenchana?
— miau
— ¡eres la gatita más bonita! —chillo, volviendo a besar a la gatita y poniéndola otra vez en el suelo— está bien, mañana estaré contigo todo el día
Tomó su abrigo color vino, su bolso y el montón de papeles y con un último vistazo a la pequeña Bom, salió de su departamento y subió a su auto, abrochando su cinturón, arranco el auto y partió de ahí rumbo al hospital.
— ¿me veo bien? —preguntó Seojun por tercera vez, Seon Ho simplemente asintió cansado— ¿seguro?, creo que este traje me hace ver menos alto
— eres alto, nada en el mundo puede cambiar eso
— pues este traje si —se miró en el espejo, Seon Ho suspiró— ¿crees que a la Doctora Kang le guste?
— ¿por qué sigues llamándola así? —cuestionó—
— mm, ¿cómo? —respondió sin mirarlo, mientras peinaba su cabello por segunda vez—
— "Doctora Kang" —imitó su voz— llámala por su nombre, tienen la misma edad y ambos ya son lo suficientemente cercanos para que conozcas a su familia
— no es así —la defendió—
— pues como yo lo veo, es exactamente así
Seojun rodo los ojos, girándose para ver a su amigo, quien estaba acostado en su cama.
— ella aún no me ha dicho que puedo llamarla por su nombre
— ¿y?
— no lo haré si ella no quiere
Ahora si fue turno de Seon Ho de rodar los ojos.
— ¿tu pierna no duele? —cambio el tema, Seojun negó— ¿tu brazo?, apenas te quitaron el yeso hoy, es normal si te sientes incómodo —volvió a negar—
¿tu estómago, dedos o algo?
— hyung —seojun se acercó— ¿de verdad quieres que me duela algo?
— ¡lo quiero! —levantó un poco la voz— si eso te impidiera ir, pero sé que no lo hará —suspiro— Seojun-ah, tan solo falta una semana para que te den de alta de aquí, no quiero que ocurra algo que lo atrase...
— ¿porque no quieres que me duela algo o solo porque no te agrada que no me guste esa persona?
— nunca tuve problema con tus intereses amorosos, incluso cuando querías salir con Jugyeong, te animé
— pero los estás teniendo ahora —tomó asiento a su lado— hyung, ya no soy ese pequeño e inexperto aprendiz al que cuidabas, soy un adulto ahora, estoy consciente de que cualquier cosa que haga me afectará a mi o a la banda —lo pensó— jamás haría algo que pusiera en riesgo mi esfuerzo... o el tuyo
Seonho miró a su amigo, una pequeña sonrisa se formó en sus labios y se acercó para palmear la espalda del más alto, Seojun sonrió también, sus mejillas abultándose tiernamente.
Toc, toc
La puerta de abrió, ambos se giraron en su dirección, una alta y elegante mujer entraba a la habitación, sus tacones hacían eco con cada paso que daba, acercándose a ellos.
Seojun trago saliva y casi podía jurar que sus mejillas estaban sonrojadas.
— veo que ya está listo —la mujer lo analizo de arriba abajo—
Ella se veía, realmente hermosa, fue lo que pensó Seojun. Su cabello peinado en una media coleta, era la primera vez que no llevaba su cabello liso, un perfecto vestido un poco más abajo de las rodillas, el color negro resaltaba su bronceada piel, los tacones la hacían lucir un poco más alta, tal vez cinco centímetros más.
Seojun aprecio el lápiz labial, marrón rojizo.
— Usted se ve–
— ¿arreglo lo de las cámaras? —Seonho se apresuró, interrumpiendo a Seojun quien lo miro mal— puedo hacerme cargo si es demasiado problema para usted
— lo hice —asintió— nada es demasiado problema para mí, señor Kim
— ¿hizo lo que le pedí?
— tengo a sus guardaespaldas cuidando las puertas, descuide, todos pensaran que son parte de la seguridad de mi familia —sonrió—
Seon Ho asintió, un poco más tranquilo.
Miró a Seojun una vez más, el chico ya estaba parado al lado de la mujer, la cual también olía bastante bien, Seojun decidió que ese sería su nuevo olor favorito.
— pasare a la hora acordada, por favor ayúdelo a llegar sano y salvo a la salida trasera como prometió
La mujer asintió, comenzando a caminar hacia la salida, Seojun le dio una última mirada a su amigo y siguió a la mujer.
— póngase esto —le ofreció una mascarilla, Seojun miró dudoso— por su seguridad, no queremos que alguien lo reconozca saliendo de aquí y no en la boda
Asintió, tomando la mascarilla y colocándosela. Salieron de ahí y subieron al auto de la mujer, Seojun descubrió que también tenía buen gusto en autos, aunque bueno, él prefería las motocicletas.
Condujeron en silencio, con Soojin concentrándose en el camino y en la punzada que comenzaba a sentir en su espalda, Seojun tratando de encontrar la valentía para decirle lo hermosa que se veía.
El auto se estacionó, antes de bajar Soojin buscó en su bolso el frasco de pastillas, tomando una ante la atenta mirada del más alto.
— ¿está listo? —cuestionó, guardando de nuevo el frasco en su bolso— ¿Señor Han? —se giró para verlo cuando la respuesta no llegó—
— cuando estaba en la escuela secundaria fui a un viaje de excursión, un pequeño campamento en unas cabañas —respondió— el último día me escape de mi cabaña y equipo, fui hasta un pequeño lago, ese día, en el lago, vi reflejada la más hermosa luna que jamás haya visto, todas las brillantes estrellas al rededor y el movimiento del agua haciendo parecer que la luna era la que se movía —sonrió nostálgico— nunca volví a ver algo tan hermoso...
Silencio, Seojun miró de nuevo a la mujer, sus ojos encontrándose directamente, pudo verse reflejado en ellos.
— pero hoy, pude ser testigo de algo mucho más bello —bajo su mascarilla, dejando ver su rostro completo— usted, señorita Kang...
Soojin sintió de nuevo ese revoloteo en su estómago, su garganta se sintió seca al instante.
— es mucho más hermosa que la luna —terminó, volviéndose a poner la mascarilla al ver que un hombre se acercaba al auto—
Soojin parpadeo un par de veces, volviendo a tomar conciencia, tomó su bolso y ambos bajaron de auto, le entregó las llaves al hombre que lo llevaría a estacionar y después caminaron hacia la entrada, uno al lado del otro.
Había varios fotógrafos fuera del edificio, pero muchos más en la recepción, Soojin miró mal a cada uno así que ninguno intento acercarse.
La gran puerta estaba frente a ellos, Soojin trago saliva, mirando de reojo a su acompañante
"Es mucho más hermosa que la luna"
Volvió a tragar saliva, su dolor de espalda había comenzado a desvanecerse.
Tomó aire, y entrelazo su brazo con el de Seojun, quien la miró sorprendido al instante.
— puede llamarme Soojin
Dijo sin mirarlo, el personal abriendo para ellos la puerta, la música clásica y voces llegaron a sus oídos al instante, las tenues luces y flashes de algunas cámaras opacaron un poco sus vistas.
— si usted está de acuerdo, obviame–
— ¡lo estoy! –la interrumpió—
Soojin no pude evitar reírse ante esto, asintiendo mientras ambos comenzaban a caminar hacia el interior del lugar. Las miradas de las personas clavándose en ellos al instante.
La menor se sintió nerviosa, Seojun lo notó, quitándose la mascarilla con su mano libre y después pasándola por encima de la mano con la cual Soojin sostenía su brazo. Ella lo miro.
— usted también puede —susurró— llámeme Seojun, por favor
Soojin asintió nerviosa.
— dije que sería su títere, así que no se preocupe, úseme cuando sea
Incluso con la poca luz, Soojin aún se vio reflejada en los ojos del contrario.
Estos serían sus atuendos en la velada.
¿Pueden adivinar quién es el fisioterapeuta y mejor amigo de nuestra Soojin? 🤭