A medida que la noche avanza en el muelle de loto, la magia del lugar se intensifica. Las linternas de papel, colgadas estratégicamente, emiten una luz suave que se mezcla con la luz plateada de la luna, creando un ambiente de ensueño. La brisa nocturna acaricia los pétalos de loto, llevando consigo el delicado perfume que llena el aire y añade un toque de misterio al lugar.
La noche es oscura y tranquila, pero también llena de magia y misterio. El muelle de loto se extiende sobre el lago, como un puente entre el mundo humano y el espiritual. Los pétalos de los lotos se mecen con la brisa, creando un suave murmullo que se mezcla con el chapoteo del agua. La luna llena ilumina el paisaje con su luz plateada, haciendo que los lotos parezcan brillar con un aura etérea. Las estrellas titilan en el cielo, como testigos silenciosos de los secretos que se guardan en el muelle.
La temperatura fresca y agradable que abrazaba el muelle de loto también se filtraba a través de la ventana abierta de la habitación del Líder de la secta Jiang Cheng. La fragancia de los lotos penetraba en el espacio, añadiendo un toque de serenidad al ambiente. Las paredes de la habitación, decoradas con motivos espirituales, resplandecían con una suave luz de velas que destellaban en sintonía con el entorno mágico fuera de la ventana.
Jiang Cheng se llevó una mano a la cabeza, sintiendo una punzada de dolor persistente. Su mente retumbaba con la incomodidad de las experiencias recientes. Se tomó un momento para reajustarse a su entorno, parpadeando repetidamente mientras la luz de la habitación gradualmente reemplazaba las imágenes fugaces de su desmayo.
Se dio cuenta que estaba en su habitación, y la suave luz de la luna se filtraba por la ventana entreabierta, dibujando un patrón tenue en el suelo de madera pulida. Jiang Cheng se esforzó por convencerse de que todo había sido solo una pesadilla, un mal sueño que se desvanecería con la realidad del nuevo día. Sin embargo, el crujido a su lado, le recordó que la realidad podía ser más cruel de lo que deseaba.
Un escalofrío recorrió su espina dorsal cuando una voz conocida resonó en la habitación.
-Cuñado, que holgazán. Finalmente, despiertas.
Jiang Cheng sintió cómo el corazón le daba un vuelco doloroso. No era un sueño, y la presencia de aquella figura repulsiva confirmó que lo peor aún no había pasado.
No era un sueño...- murmuró para sí mismo, anhelando que la realidad fuera diferente. Jiang Cheng quería llorar
-Jiang Cheng, nos preocupaste- al lado de Wen Ruohan apareció Wei Ying, sosteniendo con su mano un nuevo dulce confitado dado por su esposo, mientras la otra descansaba amorosamente sobre su vientre.
-¡Ustedes!- gruño Jiang Cheng, una mezcla de enojo y desesperación apoderándose de su voz -¡Basta de bromear!
Wei Ying y Wen Ruohan se vieron entre ellos
Con una mirada cómplice antes de soltar una risa alegre y contagiosa que llenó la habitación. El rostro de Jiang Cheng se tornó de confusión a incredulidad, , agudizando la sensación de pesadilla que se aferraba a su realidad, mientras observaba cómo los dos individuos se acomodaban en la habitación como si estuvieran en su propia casa.
Los dos intrusos, en lugar de detener su risa, parecían disfrutar aún más la confusión del Jiang Cheng. Wen Ruohan, con una elegancia calculada, se sentó en la orilla de la cama del líder Jiang como si estuviera en su propio palacio, mientras que Wei Ying permanecía de pie a su lado apoyándose en sus hombros, con una sonrisa traviesa que sugería que conocía algún secreto oscuro.
-¿Bromear?- dijo Wen Ruohan con una sonrisa traviesa -¿Acaso no estás contento de vernos, cuñado?
-¿Por qué debo estarlo? ¡No estoy feliz! -espetó Jiang Cheng, sus ojos lanzando chispas de frustración y enojo-. ¿Y por qué diablos estás en mi cama?
La risa de Wen Ruohan disminuyó gradualmente, y con una expresión burlona en su rostro se acercó al cuerpo de Wei Ying, para sostenerlo entre sus brazos amorosamente.
Jiang Cheng se sentó, sintiendo una mezcla de emociones que iban desde el asombro hasta la ira. Observó a su alrededor, buscando alguna explicación o indicio de que todo esto era un truco, pero la habitación estaba tan real y tangible como siempre.
-Oh, cuñadito, deberías relajarte. Solo estamos aquí para... ver cómo te sientes, nos preocupaste mucho -dijo, como si estuviera hablando del clima y no de la salud de Jiang Cheng. El desinterés era claramente visto por los demás.
Jiang Cheng gruñó, con los dientes apretados al ver tal descaro del Líder Wen al hacer demostraciones al público.
-Preocupado- repitió Jiang Cheng, su incredulidad transformándose en indignación- ¿Wei Wuxian, dime que sucede?
Wen Ruohan, en cambio, mantuvo una expresión imperturbable mientras observaba a los dos hermanos.
-Jiang Cheng, A-Ruo es mi esposo, y tendremos dos hijos en unos cuantos meses- dijo Wei Ying con las mejillas calientes al sentir las manos de Wen Ruohan acariciar su espalda. Tal vez era sus hormonas, pero su cuerpo se sentía demasiado caliente en este momento que su esposo lo tocaba.
-Pero ¿Cómo?- Jiang Cheng toco su corazón, mirándolos con desconfianza-Esto no puede ser real.
-Jiang Cheng, tu sabias hace tiempo de mi cuerpo... sé que tío Jiang te conto.
Jiang Cheng se quedo helado al escuchar eso. Por supuesto que su padre le había comentado, en sus recuerdos recordaba que su padre le advertía que le mantuviera vigilado. Pero poco a poco a Jiang Cheng se le fue olvidando, tanto que realmente le sorprendió escuchar que Wei Wuxian estaba realmente embarazada, si lo ve detenidamente, podría notar que su estomago estaba un poco hinchado.
Jiang Cheng parpadeó, procesando la información. Su mente estaba llena de confusión y preguntas sin respuesta. No podía entender cómo estos dos individuos podían ser tan descarados.
-Imposible...- murmuro Jiang Cheng -¿Cómo terminaste con él?- dijo refiriéndose al Líder Wen.
Wen Ruohan no lo tomo bien.
-¿Cómo puedes decir eso? ¿Acaso no me crees capaz de atrapar a una esposa hermosa?- dijo Wen Ruohan frunciendo sus cejas, sintiendo su ira quemando su pecho -Trabaje muy duro para poner dos hijos aquí adentro, ¡No me subestimes!
Jiang Cheng miro la mano de Wen Ruohan acariciando el estómago de Wei Wuxian y no dudo en gritar:
-¡Desvergonzados!
-No te preocupes, cuñado. Esta vez te perdono por tus dudas -añadió Wen Ruohan con un gesto juguetón- Estamos aquí para animar tu día. No todos los días se recibe la visita de personas tan agradables como nosotros. ¿No es así, amor?
Wei Ying asintió con una sonrisa sutil, y Jiang Cheng se encontró a sí mismo en un estado de incredulidad absoluta. El muelle de loto, que había sido un refugio tranquilo, ahora se transformaba en el escenario de un encuentro surrealista.
Jiang Cheng sintió que podría escupir una bocanada de sangre al momento que vio a Wen Ruohan limpiar los rastros de dulce de los dedos de Wei Ying con su lengua, el corazón de Jiang Cheng no soportaría tanto a estas dos personas desvergonzadas.
-Ah, Jiang Cheng te advertí que cultivaras mucho cuando volviéramos a vernos. No me escuchaste, y ya te desmayaste dos veces- se burló Wen Ruohan con una sonrisa juguetona, saboreando la satisfacción de sus provocaciones.
Jiang Cheng le dedicó una mirada oscura, sus ojos lanzando chispas de indignación. Wen Ruohan, astuto como siempre, supo que las cosas no iban a terminar bien después de ese intercambio.
Momentos después, Wen Ruohan se encontraba solo en la habitación que había sido designado exclusivamente para él. Wen Ruohan debió hacer caso a su presentimiento anterior a esa mirada oscura de Jiang Cheng. Ahora estaba separado de su esposa. La habitación de Wei Ying estaba al final del pasillo, con guardias cuidando el lugar. Wen Ruohan no podía hacer mas que suspirar. Pero no se lamentaba del todo haberse burlado de Jiang Cheng.
Wen Ruohan se recostó en la cama, pensando en la extraña situación en la que se encontraba. A pesar de su actitud juguetona, sabía que Jiang Cheng no estaba contento con su presencia, y menos con la relación que ahora compartía con Wei Ying.
Se preguntó cuánto tiempo duraría esta visita antes de que Jiang Cheng decidiera expulsarlos del muelle de loto. Sin embargo, no podía evitar sentir cierta satisfacción al ver la expresión de sorpresa y desagrado en el rostro del Jiang. Era evidente que la revelación de la relación entre Wen Ruohan y Wei Ying lo había dejado aturdido. Sin embargo, esto no le molestaba a Wen Ruohan, el estaba muy feliz con su matrimonio, y quien se opusiera lo enfrentaría hasta la ultima consecuencia.
Esta fue la única vez que Wen Ruohan cedió.
No estaba dispuesto a escuchar los incesantes gritos de Jiang Cheng, sobre todo ahora que Wei Ying estaba embarazada, no quería someterlo a cualquier situación estresante. Solo esta noche, aceptaría la frialdad de la cama sin la presencia de su esposa.
Wen Ruohan lidiaba con la soledad. Aunque su actitud segura y juguetona en el exterior ocultaba sus propias dudas, la realidad de estar separado de Wei Ying le afectaba más de lo que estaba dispuesto a admitir. Cada noche ambos normalmente compartían la cama desde que estaban casados, la intimidad que compartían era una parte esencial de su conexión. Ahora, el lugar donde estaba acostado se sentía vacío y frío, sin la presencia reconfortante de su esposa. La cama ya no tenía el calor que solía irradiar cuando Wei Ying estaba a su lado, ni el suave aroma de su esencia mezclado con la suya.
Wen Ruohan suspiró, contemplando la luna a través de la ventana antes de cerrar los ojos. En su mente, recordaba las noches compartidas con Wei Ying, donde la cercanía física iba más allá de la mera comodidad. Ahora, se encontraba solo en una cama que se sentía más como una losa de hielo que un lugar de descanso. Aunque su expresión no mostraba ningún rastro de vulnerabilidad, su corazón resentía la ausencia de su esposa.
Wen Ruohan se dispuso a entrar en un estado de meditación antes de ceder a sus impulsos e ir hasta donde estaba su esposa.
Mientras tanto, en la habitación de Madame Wen, el ambiente no era diferente. Wei Ying miraba por la ventana hacia el lago, la luz de la luna iluminando su rostro y revelando una mezcla de emociones que iban desde la preocupación hasta la tristeza.
Sabía que la reconciliación con Jiang Cheng no sería fácil. Sin embargo, estaba decidido a saldar su deuda con la familia Jiang, y después de eso, sus caminos se separarían. La vida de Wei Ying ahora estaba en Qishan Wen.
El muelle de loto, que alguna vez fue un refugio tranquilo, y cuyo lugar que Wei Ying consideraba hogar ahora se llenó de tensiones que le hacían sentirse como un completo extraño. La brisa nocturna susurraba entre las hojas de loto, pero ya no traía consigo la melodía armoniosa que solía acompañar las noches de descanso. Wei Ying se sentía atrapado en un torbellino de emociones confusas mientras observaba la superficie del lago iluminada por la luz de la luna. Cada onda que se formaba en el agua reflejaba la agitación que sentía en su interior.
A medida que pasaba la noche, ninguno de los amantes pudo conciliar el sueño por separado, sintiendo el vacío de la ausencia del otro. Wei Ying y Wen Ruohan, experimentaban el vacío palpable de la ausencia del otro. El espacio entre ellos, aunque físicamente cercano, se sentía como una brecha insalvable.
Tras un largo momento de pensarlo, Wei Ying supo lo que tenía que hacer. Si el esposo no puede llegar a la esposa, la esposa debe ir hacia él. Sabía en su corazón que Wen Ruohan estaba soportándolo simplemente para no enfurecer a Jiang Cheng, y para evitar que su relación con su hermano se estropeara aún más de lo que ya se encontraba.
Wei Ying creció en esa secta, aunque la mayor parte de la secta fue reconstruida luego del ataque, sabia como ir y venir sin ser detectado, decidió dar un paso hacia la ventana, de un salto pudo estar finalmente fuera de la secta. Aunque la mayor parte de la secta fue reconstruida luego del ataque, él conocía cada recoveco, cada pasaje oculto, así que se sentía con la suficiente confianza de poder llegar hasta su esposo. Se movía con la gracia y la agilidad de una sombra, evitando a los pocos discípulos que patrullaban la zona. Cada paso estaba lleno de determinación, su deseo de estar con Wen Ruohan superando cualquier barrera.
El deber del esposo era mimar y cuidar a su esposa embarazada, y Wei Ying no iba a permitir que Wen Ruohan descuidara su deber, y sobre todo ahora que se encontraba tan necesitado...
Miró a su alrededor para asegurarse de que no había nadie cerca, entro nuevamente hacia el lugar, caminando sigilosamente en el pasillo, con su alto nivel de cultivo podía estar seguro que nadie lo descubriría.
Wei Ying miro el anillo en su mano que contenía la esencia de su esposo, le dictaba que su esposo estaba tras esa puerta frente a él. El hermano que no le gusta la comida de perro lo dejo tan lejos de su amado esposo. Por un momento Wei Ying se sintió enfadado. Con un movimiento fluido, abrió la puerta sin hacer ruido. La habitación estaba a oscuras, solo iluminada por la tenue luz de la luna que se filtraba por la ventana.
La figura de su fornido hombre estaba sentada en la cama con ojos cerrados. Wei Ying avanzó en silencio, su corazón latiendo con fuerza, sabia que su esposo estaba cultivando. Miro a su esposo completamente ajeno a su presencia.
Wen Ruohan estaba concentrado en su cultivo, solo escuchando los sonidos de los grillo y el viento acariciando las hojas de los árboles. Tiempo después, sintió unos pasos entrar en su habitación. Wen Ruohan no necesitaba abrir sus ojos para saber de quién se trataba. En su corazón se sintió feliz.
Al instante, sintió que un cuerpo trepaba en su cama, acercándose a él desde su espalda, y unos brazos lo sostuvieron por su pecho. Una cálida voz le susurró en el oído, enviándole escalofríos por todo su cuerpo.
-Hermoso hombre, ¿Por qué esta tan solitario en esta hermosa noche de luna llena?
Wen Ruohan sonrió ante lo dicho, y respondió -Es porque esta noche estoy soltero.
La otra persona parecido sonreír al escucharle -¿Es eso así? Significa que hay posibilidad de secuestrar al Líder Wen por esta noche... mi señor ¿No desea tomar esta doncella pura y hacerla suya?
Wen Ruohan sonrió maliciosamente -Esa propuesta es muy atrevida para una doncella pura.
-Esta doncella en definitiva es pura... sin embargo, mis pensamientos no lo son. En este momento quiero que el Líder Wen me tome hasta el amanecer, que me tome tan fuerte que no pueda usar mis piernas tanto como mi voz.
Wen Ruohan se estremeció ante la idea, sin embargo, permaneció inmóvil a pesar de la enorme tentación -Mi fidelidad es hacia mi esposa, mi cuerpo solo le pertenece a mi esposa.
La otra parte se sintió muy complacido por al respuesta -Ya veo Líder Wen, no sabia que usted era una persona tan romántica y pura
Wen Ruohan pensó un instante antes de soltar -Puedo decir que mis sentimientos son puros, pero mi mente no lo es.
Wen Ruohan sintió como unas manos lo acariciaban por su pecho, siendo estas manos tan atrevidas como para meterse debajo de sus túnicas.
-Mi señor, en este momento le deseo mucho- dijo Wei Ying con una voz necesitada.
La respiración de Wen Ruohan se atascó.
-Wei Ying no podemos.
Ante la clara negativa de su esposo, Wei Ying se quejó -¿Por qué no? Esposo te deseo tanto.
Wen Ruohan pareció notar que su esposa había perdido la noción, su esposa pudo olvidar que esta vez no se encontraban en la plenitud de su habitación.
-Wei Ying, recuerda donde estamos.
Wen Ruohan por ningún motivo permitiría que alguien escuchara los sensuales sonidos de su hermosa esposa.
Wei Ying no desistió -No hare ruido, lo prometo, seré silencioso.
-Sabes que ambos no tenemos mucho control en este aspecto. Y Jiang Cheng puso guardias a vigilar nuestras habitaciones. No deseo que entre gritando mientras tu y yo estamos unidos- expreso Wen Ruohan.
Wei Ying gimoteo con necesidad -Lo sé, pero esta esposa te desea tanto. No lo sé, quizás es por el embarazo, pero realmente quiero que hagas un desastre de mi en este momento.
Vaya, el embarazo podría estar afectando de igual manera a Wen Ruohan ya que en ese momento sentía su cuerpo arder en deseo.
-A-Ruo, eres mi esposo, me prometiste que complacerías todos mis antojos. Debes de cumplir tu deber.
Esto hizo eco en Wen Ruohan, pero sabia que no debían escucharlos. También temía que se dieran cuenta que Wei Ying no estaba donde lo habían dejado. No quería que los interrumpieran con los gritos desenfrenados de Jiang Cheng, así como tampoco quería que vieran a su esposa desnuda, eso significaría tener que arrancar un par de ojos. Sin embargo, Wen Ruohan no se atrevía a llevarle la contraria a Wei Ying.
-Esta bien cariño, este esposo cumplirá. Así que acércate, y siéntate sobre mi esposa- dijo el Líder palmeando sus muslos.
Las manos de Wei Ying se detuvieron, rápidamente. Y emocionado se arrastro hasta colocarse a horcajadas sobre su esposo, sintiéndose muy emocionado.
-Me obligaste a hacer esto. Tómalo como un castigo por tentarme tan deliciosamente.
Wei Ying frunció el ceño un poco sin saber a lo que su esposo se refería. Solo miraba los calientes ojos de su esposo sobre él. Para luego mirar como su esposo levantaba su mano derecha con los dedos índice y medio juntos. Wei Ying miro como la energía de su esposo parecía reunirse en ambos dedos. El ambiente se llenó de una energía palpable, creando una anticipación en la habitación.
Wen Ruohan movió sus dedos en un gesto preciso, y un delicado resplandor dorado comenzó a envolver sus dedos, poco a poco se acercó hasta la frente de Wei Ying. Este se estremeció ligeramente al sentir la energía cálida y familiar de su esposo. Sin embargo, aún no entendía completamente qué estaba por suceder.
-Prepárate, esposa, porque esto será inolvidable -dijo Wen Ruohan, sus ojos destellando con malicia mientras la energía dorada se intensificaba.
La mente de Wei Ying entendió lo que pasaba, pero ya era muy tarde. Su frente fue tocada por la energía de su esposo de golpe.
!!!!
Una corriente de la cálida energía de su esposo lo envolvió cubriéndolo de placer. Pintándolo de aquí a allá como un lienzo en blanco, el placer lo cubrió hasta llegar a cada rincón de su ser. La sensación era abrumadora y al mismo tiempo increíblemente deliciosa. Wei Ying no pudo evitar que su cuerpo se estremeciera, dejándose llevar por la intensidad de la conexión de su esposo.
Por suerte su esposo lo sostenía firmemente de su cintura evitando que pudiera caerse. Cada caricia etérea de la energía dorada se traducía en un éxtasis profundo y penetrante. El vinculo entre ellos podía sentirlo, incluso Wei Ying podía sentir cada pensamiento, cada emoción de Wen Ruohan entrelazándose con los suyos. Sus almas bailaban en perfecta armonía fusionándose en una conexión tan profunda que iba más allá de las palabras.
Al entregarse al orgasmo abrumador, el tiempo pareció detenerse en ese momento mágico, donde la energía de ambos se fusionó en una sinfonía de placer y conexión. Wen Ruohan aun sostenía la mirada con intensidad, su rostro reflejando la pasión y el amor que sentía por su esposa.
Aun con la visión borrosa, Wei Ying captó la mirada llena de malicia de su esposo, y ni siquiera pudo prepararse para la siguiente ola de placer que lo envolvió, llevándolo a un estado aún más placentero. Cuando la energía dorada alcanzó su punto culminante, una explosión de sensaciones inundó a Wei Ying. La habitación estaba impregnada de una luz efímera, y la conexión entre ambos se volvió más profunda y significativa. Wei Ying sintió como si hubieran alcanzado una nueva dimensión, donde el amor y la intimidad se hubieran elevado a niveles significativos.
El cuerpo de Wei Ying se desplomó en el pecho de Wen Ruohan, agotado pero lleno de satisfacción. Su esposo lo sostenía con ternura, acariciando su espalda con gestos reconfortantes. En ese momento, no existía nada más que la unión única entre ellos. Wei Ying sintió que fueron días enteros entregado a ese intenso placer, sin embargo, fueron simplemente un par de minutos, y sus pantalones se encontraban completamente húmedos por su propia mancha y semen. El cuerpo de Wei Ying se apoyo completamente en el pecho de Wen Ruohan, el sudor perlaba su frente y sus mejillas se encontraban completamente sonrojadas, dejando salir de su boca rosada jadeos irregulares.
Cada fibra de su ser resonaba con el eco de la experiencia compartida, y una sonrisa sutil jugueteaba en sus labios. Wei Ying levanto la mirada hacia su esposo encontrándose los ojos penetrantes de su esposo, encontrando en ellos la complicidad de un amor profundo y la satisfacción de haber compartido algo más allá de lo físico.
Wen Ruohan, con una expresión serena, acarició suavemente el cabello de Wei Ying, disfrutando ese momento íntimo que los envolvía. En ese instante, el tiempo parecía haberse detenido, y ambos se perdieron en el susurro suave de la brisa nocturna que entraba por la ventana. La magia del momento se extendía por la habitación, envolviéndolos en una atmósfera de calma y plenitud. Un momento que les pertenecía.
Wei Ying no tenía fuerzas para moverse, aunque para ojos ajenos hubiera parecido que sucedió en un abrir y cerrar de ojos, para Wei Ying fue algo demasiado duradero que lo dejo completamente destrozado. Wei Ying jadeo por un largo tiempo, y hasta que se sintió lo suficientemente recuperado para hablar, suspiró profundamente
-Eso, querido esposo, fue verdaderamente inolvidable- murmuró Wei Ying con voz ronca, su mirada aún nublada por la experiencia. Se intento acomodar con lentitud, apoyándose en el pecho de Wen Ruohan, pero sus brazos se negaban a corresponderle, además de que cada rose en su cuerpo le hacía estremecer a su sensible cuerpo, Wei Ying hacia lo posible para no soltar ningún sonido de sus labios. Al final Wen Ruohan le ayudo a incorporarse sosteniéndolo firmemente. Wei Ying le dedicó una sonrisa radiante, una sonrisa de una esposa completamente extasiada.
-Atrévete a decir ahora que tu marido no cumple.
La esposa se sintió intimidada por la mirada oscura del marido.
La sonrisa de Wei Ying se congelo y negó rápidamente -¡No me atrevería!
Wen Ruohan se sintió satisfecho con la respuesta.
-Mi hermoso Wei Ying, siempre estaré aquí para ti. ¿Te sientes bien, amor?- le dijo acariciando la mejilla de Wei Ying con ternura.
Wei Ying asintió débilmente, sintiendo una mezcla de agotamiento y plenitud. Wen Ruohan atendió a su esposa, dejándolo limpio y fresco para que pudiera dormir plenamente.
Wei Ying durmió con el pensamiento de nunca más volver a provocar a su esposo.
...
El cielo nocturno dejaba espacio a una paleta de colores cálidos, desde tonos morados y rosados hasta los primeros destellos dorados que anunciaban la llegada del amanecer. El lago, que había sido testigo de muchos secretos y emociones en la oscuridad de la noche, ahora se iluminaba gradualmente con la luz del nuevo día. Los reflejos del sol naciente en la superficie del agua creaban destellos centelleantes que bailaban al compás de las suaves ondas.
Los pétalos de loto, aún cerrados durante la noche, empezaban a abrirse lentamente, revelando su belleza a medida que absorbían la luz matutina. Los sonidos de la naturaleza llenaban el aire fresco del amanecer: los trinos melodiosos de los pájaros que despertaban, el suave murmullo del viento entre los árboles y el ocasional chapoteo de algún animal acuático en el lago. Era como si la propia naturaleza estuviera celebrando el inicio de un nuevo día.
Wen Ruohan observaba cómo la penumbra cedía ante la luz creciente del día, consciente de que se acercaba un enfrentamiento inevitable. Sin embargo, en ese instante, su único deseo era aferrar a su esposa entre sus brazos por un poco más de tiempo.
Cuando los sonidos matutinos de la secta comenzaron a resonar, Wen Ruohan anhelaba poder retroceder en el tiempo y prolongar esos minutos junto a Wei Ying. Pero sus deseos más profundos, como si fueran susurros perdidos en el viento, no encontraron eco.
El repiqueteo de pasos apresurados resonó en el pasillo fuera de su habitación. Wen Ruohan esbozó una sonrisa pensando: Ya se dieron cuenta.
En preparación para lo que seguiría, Wen Ruohan opto por cubrir a su esposa con mantas, protegiendo su belleza mientras aún reposaba en un sueño profundo. Una belleza por la cual derribaría ciudades enteras sin que él sintiera el más mínimo remordimiento.
Wen Ruohan sin contenerse ante la imagen vulnerable de su mitad se aprovechó de ese último momento besando a su esposa, después se detuvo a admirar los labios de Wei Ying ahora húmedos por el beso, tomó un profundo respiro tratando de aplacar la inquietud en su corazón.
Finalmente, los pasos finalmente se detuvieron frente a su habitación.
-Puedes pasar- dijo lo suficientemente alto para que la persona que estaba afuera escuchara. En ese momento, Wen Ruohan agradecía en silencio que el sueño de su Wei Ying fuera pesado, tanto como para que no se despertara.
Realmente no le gustaría ser el culpable de que su señora despertara.
Temía la furia de Madame Wen.
El discípulo principal de la secta Jiang, titubeó al escuchar la voz del Líder Wen, pero finalmente ingresó a la habitación. Dirigió una mirada al bulto envuelto en sábanas entre los brazos del líder.
El discípulo dirigió una mirada al bulto envuelto en sabanas, escondido entre los brazos del Líder Wen.
-Buscabas a Wei Ying- declaró más como una afirmación que una pregunta. Wen Ruohan, sonriendo continuó -Mi esposa no es alguien a quien puedas mantener quieto. Así que no importaba cuánta guardia pongan para vigilarnos, el resultado sería el mismo.
-El esposo y esposa deben dormir juntos naturalmente- soltó el discípulo.
Wen Ruohan levanto sus cejas levemente.
-Tu si entiendes sobre los asuntos del matrimonio. No como tu líder- se quejó Wen Ruohan -Seguramente Jiang Cheng estará en la lista negra, y quedará solo.
El discípulo asintió con respeto ante las palabras del Líder Wen, entendiendo la dinámica compleja. Temía que la calma aparente en el Líder Wen estallara en cualquier momento.
-Me disculpo por aparecer repentinamente a estas horas, pero era necesario, el líder Jiang se enojará si los encuentra juntos. Su cultivo no ha estado bien últimamente y este discípulo teme que el líder sufra una desviación- comentó el discípulo, con un tono de voz cauteloso. Sabía que la paz era frágil en ese momento, y cualquier chispa podría encender la llama de la confrontación.
Wen Ruohan, aun manteniendo a su esposa cubierta y protegida, se puso de pie y se acercó al discípulo. Una mirada seria se reflejó en sus ojos mientras sostenía al discípulo con su intensa mirada.
-Mis intenciones siempre han sido pacíficas, pero la paz no siempre es posible cuando se trata de proteger lo que es mío. Si Jiang Cheng sigue poniendo a prueba mi paciencia, él mismo sellará su destino- advirtió Wen Ruohan, sin titubear -Esta vez soporte este ridículo arreglo simplemente para no empeorar las cosas, pero no soportare que Wei Ying se sienta incomodo de alguna manera. Como ves, mantenernos a distancia no funcionará. Wei Ying está embarazada, y no es de mi agrado que se mueva a oscuras para estar conmigo; podría haber pasado cualquier cosa. Si ese hubiera sido el caso, no quedaría nada en pie de este lugar.
El discípulo asintió una vez más, comprendiendo la gravedad de la situación y sorprendiéndose de la determinación del Líder Wen al proteger a Wei Wuxian.
-Este discípulo entiende. Sin embargo, aquí estoy antes que el Líder despierte, y comience a gritar. Es de conocimiento que su esposa cuando estaba en la secta Jiang, dormía hasta medio día, este discípulo supone que los hábitos de mantienen.
La complejidad de la situación no pasaba desapercibida para él, y cada paso que daba debía ser cuidadosamente calculado para evitar cualquier consecuencia no deseada con un Líder de tal inmensidad como lo es Wen Ruohan. Pero al ver la sonrisa en el rostro de Wen Ruohan, el temblor en sus manos cesó.
-Que discípulo más competente. Me agrada, dime ¿Cuál es tu nombre?
-El nombre de este discípulo es Jiang Shao, nombre de cortesía es Jiang MingXuan.
Wen Ruohan saboreo el nombre en su lengua. En términos generales, "Ming" puede traducirse como "brillante" o "iluminar", mientras que "Xuan" puede tener significados asociados con el misterio o la profundidad. Así que, en conjunto, "Mingxuan" podría interpretarse como "brillante misterio" o "iluminación profunda". De inmediato Wen Ruohan entendió que este pequeño discípulo era muy capaz. Sin embargo, Wen Ruohan esperaba que su futuro fuera igual de brillante que su nombre.
-Realmente no me interesa si sufre una desviación de Qi, tu Líder. Pero lo hare porque no quiero escucharlo gritar tan temprano por la mañana y que despierte a Wei Ying. Además, no me gustaría causarte problemas a ti.
-El líder Wen es un esposo muy considerado.
-Dame un momento. Y espérame afuera.
Jiang Shao se inclinó y salió de la habitación con un leve movimiento de cabeza. Wen Ruohan regresó junto a su esposa, quien aún descansaba plácidamente, y se aseguró de que estuviera cómodo y protegido antes de contemplar el nuevo día que se extendía más allá de la ventana. Wen Ruohan sabia que eran los únicos segundos que se le permitía estar a solas con su esposa, por lo menos por el resto del día, así que, sin pensarlo demasiado, dejó que sus deseos se desataran.
Se acercó a Wei Ying con una determinación apenas contenida y asaltó sus labios, una danza apasionada que reflejaba la intensidad de su deseo. Sin restricciones, Wen Ruohan succionó, besó y mordisqueó, entregándose al frenesí del momento.
Sin embargo, cuando percibió que Wei Ying comenzaba a quejarse ligeramente, Wen Ruohan se detuvo de inmediato, temiendo perturbar su sueño tranquilo. Retirándose con cuidado, dejó un último beso en los labios de su esposa antes de abandonar la habitación con rapidez.
Afuera, Jiang Shao esperaba pacientemente, sin indagar en los detalles de lo que sucedía dentro. El líder Wen, con una expresión serena, pero con los ojos aun centelleando por la pasión compartida, cerró la puerta tras de sí. Con un suspiro discreto, se preparó para enfrentar el nuevo día, llevando consigo su pequeña travesura con su esposa.
-Tienes algo que decirme, adelante, dime -mencionó el líder Wen al notar al nervioso discípulo a su lado.
-Este discípulo se atreve a preguntar, ¿Cuál fue su historia con su... esposa?
Wen Ruohan sonrió al escuchar esto, se dijo a si mismo que este discípulo frente a él le agradaba mucho.
Wen Ruohan no sería mezquino con su historia de amor con su hermosa esposa. Invitó al discípulo a caminar con él mientras compartía sus recuerdos. Mientras se dirigían hacia un lugar apartado fuera de la secta, Wen Ruohan comenzó a relatar la única y apasionante historia que compartía con Wei Ying.
Wen Ruohan no admitiría que con Wei Ying fue amor a primera vista cuando lo vio en los túmulos funerarios rodeado de energía resentida. Wen Ruohan guardaría ese secreto.
-Joven discípulo. Esa es una maravillosa historia es mejor que tomes asiento y me acompañes a rememorar ese hermoso momento.
Ambos se ubicaron en un lugar de descanso que estaba en medio del patio.
-Fue amor a primera vista no lo oculto- menciono con ojos brillantes -Además, todo el mundo sabes que yo estuve casado anteriormente. Después que la madre de mis hijos muriera, nunca pose mis ojos en alguien más. Hasta que lo vi, el hombre más hermoso que había visto en mi vida. Cabello negro como la noche, que caía en su rostro, labios exquisitos y ojos fénix, tan hermosos como la luna misma. Su sonrisa cautivadora y su voz más dulce que la miel. Desde ese momento supe que ese cultivador seria mi completa perdición. Quería conocerlo, hablar con él. Eran como si el destino nos hubiera puesto en el camino del otro.
Wen Ruohan decía cada palabra con ojos llenos de calidez. Por un momento se detuvo, y dirigió su mirada hacia un lugar, justo atrás de el -Jiang Cheng puedes venir a sentarte con nosotros, así escucharas mejor la historia.
Ya que había sido expuesto Jiang Cheng, no le quedo más alternativa que salir de su escondite de tras lo arboles.
Jiang Cheng tosió a aclarándose la garganta. Y sentándose con arrogancia, como si hace algunos momentos no hubiera perdido cara.
-No sabía que eras tan curioso cuñado- Wen Ruohan sonrió maliciosamente.
Jiang Cheng tuvo que soportar la burla de Wen Ruohan. No dijo nada porque claramente tenía una pequeña espina de curiosidad en su ser.
-¿Tú también deseas conocer la historia?- al ver que Jiang Cheng no dejaría su orgullo, Wen Ruohan siguió -No te preocupes te contare la historia de amor con mi esposa, querido cuñado. Te contare como conquiste a tu hermoso hermano.
Wen Ruohan sonrió con suficiencia al ver Ia expresión de Jiang Cheng.
Jiang Cheng -No me interesa, solo me gustaría saber por qué mantuvieron esto oculto. No me interesa saber sobre su "historia de amor". Además, aún te di doble ración de semillas de loto la vez anterior, me debes eso.- Mencionó Jiang Cheng con un tono que aparentaba no bromear.
Al escucharlo Wen Ruohan no pudo detener la risa que salió de sus labios.
Wen Ruohan recordó perfectamente la última vez que se vio con Jiang Cheng. Cuando obtuvo una bolsa de semillas de loto de parte de Jiang Cheng para dárselas a Wei Wuxian. Aparte de las que el mismo Jiang Cheng había conseguido para su Madame Wen. No podía reírse de la ignorancia de Jiang Cheng al no saber sobre la verdadera identidad de su Madame Wen, sin embargo al ver la expresión enfurecida de este, no podía regular su risa.
Wei Wuxian era su Madame Wen.
-Querido cuñado sé que dejaras pasar una pequeña broma del pasado ¿no?- Continúo riéndose Wen Ruohan - Mira el lado positivo... Wei Ying recibió muchas semillas de loto de tu parte. Las disfrutó mucho, por cierto, me asegure que las comiera.
La sonrisa en el rostro de Wen Ruohan al decir eso, le enviaba escalofríos en la columna a ambos.
Jiang Cheng sentía que había perdido mucha cara.
-Cuñado no te enfades, este Líder cuida muy bien de tu hermoso hermano. Incluso realice todo el cortejo de la mejor manera, obsequie regalos dignos de Wei Ying. Lo suficientemente hermosos y todos diseñados por mí. Así que no debes preocuparte, no deshonre a Wei Ying.
-Insisto que no quiero saber sobre su historia. No me interesa- declaro Jiang Cheng de forma dura.
Jiang Shao interrumpió -Líder Wen yo sí deseo escucharlo.
Jiang Cheng le dedico una mirada furiosa a su discípulo, una vez más sentía que en ese momento le quedaba poca cara.
Discípulo traidor.
...
Wen Ruohan observó por un tiempo a Wei Wuxian cuándo recién había llegado a su secta. En ese momento, agradecía tanto a Wen Ning y a Wen Qing por haberlo llevado a Qishan Wen. Gracias a ello, podía deleitarse a diario ante la belleza de Wei Wuxian: su talento, su carisma y rebeldía que presencio a lo largo del tiempo. Increíblemente, era el único que se atrevió a desafiarlo, incluso a burlarse de él y provocarlo. Wei Ying era el único que le hacía sentir algo más que aburrimiento, indiferencia o desprecio.
A pesar de tener innumerables personas que lo alababan por simple interés, actuaban de forma sumisa y servicial simplemente para obtener algún beneficio, la llegada de Wei Ying fue un refrescante bálsamo para el Líder Wen. Un ser tan libre y un tanto descarado, alguien que no temía enfrentarse a él y que, de alguna manera, lograba encontrar el lado más auténtico de Wen Ruohan.
A pesar de tener innumerables personas que lo alababan por simple interés, simplemente para obtener algún beneficio, la llegada de Wei Ying fue un refrescante bálsamo para el Líder Wen. Un ser tan libre y un tanto descarado, alguien que no temía enfrentarse a él y que, de alguna manera, lograba encontrar el lado más auténtico de Wen Ruohan.
Con esa resolución en mente, Wen Ruohan comenzó a idear maneras de acercarse a Wei Ying, de hacerle notar que su presencia significaba más para él que la de cualquier otro.
Ese mismo día, Wen Ruohan lo invitó a que lo acompañara a cenar, bajo la premisa de discutir "asuntos importantes". Wei Ying aceptó, ajeno a lo que le esperaba.
Llegado el momento, Wen Ruohan recibió a Wei Ying con una sonrisa y le pidió que lo acompañara primero a su oficina. No pasó desapercibida la sorpresa en el rostro de Wei Ying al adentrarse por primera vez en el espacio personal del líder.
Una vez en la habitación, Wen Ruohan le mostró una caja de madera finamente tallada. Al abrirla, reveló un colgante de jade verde con el símbolo distintivo de la secta Qishan Wen. El jade era pulido y brillante, reflejando la luz de la habitación.
-Wei Ying, este colgante no solo es un símbolo de la secta, sino también un gesto de mi aprecio hacia ti -dijo Wen Ruohan, observando la reacción de Wei Ying.
Wei Ying, sorprendido, tomó el colgante entre sus dedos y examinó el delicado trabajo de la joyería. El símbolo de Qishan Wen estaba meticulosamente grabado en el jade, y la pieza en sí misma era elegante y refinada.
A simple vista Wei Ying podía ver cuan valioso era.
-Es un regalo que deseo que aceptes. Considero que eres una parte esencial de esta secta, y este colgante representa nuestra conexión, si tu corazón lo desea este es tu hogar, este colgante representa que eres uno de los nuestros. -explicó Wen Ruohan con seriedad, pero también con una chispa de su característico encanto.
-Líder Wen, esto es demasiado... no merezco algo tan valioso -comentó Wei Ying con humildad.
Wei Ying, con gratitud en sus ojos, asintió y se colocó el colgante con cuidado en la túnica.
-Gracias, Líder Wen. Aprecio sinceramente este regalo -dijo Wei Ying con una sonrisa genuina.
Al ver la luz en los ojos de Wei Ying, Wen Ruohan sintió que el momento era propicio para expresar lo que había guardado en su corazón.
Los sentimientos que ardían en su interior.
-Tengo otro regalo para ti- dijo esta vez sacando una cajita de menor tamaño que la anterior, pulcramente tallada, era algo que Wei Ying nunca había visto.
Wei Ying observó con curiosidad la caja, sus ojos brillaban con expectación. Wen Ruohan abrió la caja con cuidado, revelando un hermoso anillo que destellaba con encanto y elegancia.
-Esto lleva mi esencia -dijo Wen Ruohan, sosteniendo el anillo con reverencia-. Es más que un simple adorno...
Wen Ruohan quien tenía fama de una persona explosiva de un enorme carácter, quien era cruel y despiadado con sus enemigos, alguien que jamás titubeo en cualquier aspecto. Ahora se encontraba con sus manos frías ante su nerviosismo.
-Es un símbolo de mi amor y compromiso hacia ti. Admito que me costó reunir el valor para decirlo, pero Wei Wuxian, yo, Wen Ruohan, te ruego que me concedas el honor de ser mi pareja de cultivo.
El corazón de Wen Ruohan latía con fuerza mientras esperaba la respuesta de Wei Ying. El silencio se prolongó por un momento, y la mirada intensa de Wen Ruohan buscó la conexión en los ojos de su amado. Finalmente, Wei Ying rompió el silencio.
-Esto contiene mi esencia- le dijo Wen Ruohan con voz firme, mientras el mismo abría la cubierta de la caja, dejando ver un hermoso anillo, que brillaba encantadoramente -Esto te lo doy como prueba de mi amor y compromiso. Admito qué tomé mucho valor para poder decir esto. Wei Wuxian, yo Wen Ruohan té pido que me concedas el honor de ser mi pareja de cultivo.
El corazón de Wen Ruohan latía con fuerza mientras esperaba la respuesta de Wei Ying. El silencio se prolongó por un momento, y la mirada intensa de Wen Ruohan buscó la conexión en los ojos de su amado. Finalmente, Wei Ying rompió el silencio.
-Líder Wen, esto es... -Wei Ying se esforzó por encontrar las palabras, sus mejillas coloreadas por la sorpresa y la emoción-. Es hermoso, pero... ¿Es en serio? ¿Quieres que seamos compañeros de cultivo?
Wen Ruohan sostuvo la mirada de Wei Ying con firmeza, sus palabras resonando con honestidad y determinación.
-Sí, Wei Wuxian. Mis sentimientos por ti son sinceros y profundos. Quiero compartir contigo no solo mi amor, sino también mi energía espiritual y todo lo que poseo. Quiero que nuestra conexión vaya más allá de lo físico y se convierta en un lazo que trascienda el tiempo.
Wei Ying sintió una mezcla de emociones en su interior. La incredulidad persistía, pero también había algo más: una chispa de esperanza que comenzaba a encenderse. No podía entender por qué alguien como Wen Ruohan, con su estatus y poder, querría unirse a él, pero las palabras del líder resonaban con una autenticidad que no podía ignorar.
-Pero... ¿por qué?- preguntó Wei Ying, aun tratando de asimilar la propuesta -¿Por qué querrías casarte conmigo? ¿Qué encuentras en mí que te haga tomar una decisión tan importante? No poseo título ni secta, no tengo padres tampoco un buen pasado ¿Cómo sería digno de alguien tan importante como tú? Puedes incluso tener a la esposa que desees, alguien que pueda ser digno. Tu eres un Líder de secta ¿Cómo podría ser digno de algo así?
Wen Ruohan se acercó a Wei Ying, deteniéndose a una distancia donde sus almas casi podían tocarse.
-Wei Wuxian, has despertado algo en mí que nunca creí posible. Tu valentía, tu espíritu indomable, y esa sonrisa tuya que desafía incluso a los cielos. No me importa tu pasado, ni tu estatus actual. Lo que veo en ti va más allá de títulos y sectas. No vengo ante ti, como un Líder, estoy ante ti como un hombre que quiere unirse a ti no solo en cuerpo, sino también en espíritu. Quiero que seamos uno, compartiendo todo lo que la vida tiene para ofrecer.
Wei Ying estaba sin palabras, sintiendo cómo sus barreras emocionales comenzaban a desmoronarse ante las sinceras palabras del Líder Wen. No sabía qué decir, pero una parte de él anhelaba la posibilidad de aceptar ese amor inesperado y genuino.
-Con este anillo, quiero que aceptes mi cortejo.
La atmósfera se llenó de una dulce tensión mientras Wen Ruohan sostenía la mirada de Wei Ying, esperando con el corazón en vilo la respuesta que sellaría sus destinos de una manera más profunda y significativa.
Los dos intercambiaron miradas llenas de significado, sabiendo que este paso marcaba un nuevo capítulo en sus vidas entrelazadas.
Wei Ying sonrió, una mezcla de gratitud y aceptación en sus ojos.
A partir de eso, la alegría de parte de Wen Ruohan no podía ocultarse. La ilusión de tener a Wei Ying como su compañero de cultivo y vida le llenaba de dicha, y cada noche se sumía en pensamientos sobre el próximo regalo de cortejo perfecto para su amado.
El primer regalo de cortejo, fue hecho con mucho cuidado por el mismo, era un anillo espacial bellamente decorado con piedras preciosas. Este anillo poseía un espacio sorprendentemente amplio y contenía en su interior algunos regalos adicionales que Wen Ruohan sabía que serían útiles y apreciados por Wei Ying.
Con admiración, Wen Ruohan se detenía a observar el anillo en las hermosas manos de Wei Ying, cada que compartían tiempo juntos, y cada vez sus ojos reflejando el amor que sentía. Cada joya y cada detalle del anillo simbolizaban el deseo del Líder Wen de hacer feliz a su futuro esposo.
La relación entre ambos se fortalecía con cada gesto y regalo, creando un vínculo profundo y especial que iba más allá de las formalidades del cultivo. Wen Ruohan no solo estaba cortejando a Wei Ying, sino construyendo un puente entre sus corazones que perduraría mucho más allá de los límites de cualquier secta o título.
Wen Ruohan y Wei Ying compartían numerosos momentos juntos, explorando sus preferencias y gustos personales, así como intercambiando experiencias y aprendizajes. Cada día, la conexión entre ellos se fortalecía.
...
Wen Ruohan sonreía al recordar los primeros momentos que marcaron el inicio de su hermosa relación con su esposa.
-Cuñado, tú mismo viste los edificios dedicados a tu hermano. Todos esos fueron creados bajo mi mano. No podía tolerar que alguien mas lo hiciera, soy un hombre perfeccionista así que puse mi corazón en ello.- comentó Wen Ruohan con orgullo.
-No seguiste el cortejo como es debido- Jiang Cheng murmuro con los dientes apretados.
Wen Ruohan le miro sin entender.
-¡Primero tenias que decirle a la familia!- gruño Jiang Cheng.
La situación entre Jiang Cheng y Wen Ruohan se volvía cada vez más tensa. Jiang Cheng, aferrado a su papel de hermano protector, expresaba su descontento por no haber sido consultado antes sobre el cortejo de Wen Ruohan hacia Wei Ying.
Wen Ruohan, confundido por la reacción de Jiang Cheng, respondió -Sus padres ya no están. Los padres de Wei Ying murieron cuando el estaba pequeño, lo sabes bien.
-Pero estoy yo, así que a mí me tuviste que preguntar primero.
Wen Ruohan quedó desconcertado ante la insistencia de Jiang Cheng. No obstante, la respuesta de Jiang Cheng reveló una creencia errónea, el mismo Jiang Cheng asumía que su relación con Wei Ying aún era tan fuerte como lo había sido en el pasado.
Que lamentable.
Jiang Cheng no sabe que Wei Ying, al enterarse de la propuesta de Wen Ruohan, no acudió a él, sino que buscó el apoyo y la aprobación de Wen Ning y su hermana Wen Qing. Para Wei Ying, ellos eran su familia más cercana después de la pérdida de sus padres y de todo lo que sufrió en la secta Lan y Jiang. Wen Ruohan, observando la situación, sintió cierta lástima por Jiang Cheng, quien parecía no comprender completamente la realidad de los lazos actuales de Wei Ying.
La tensión en el aire persistía.
La lástima paso a enojo, cuando Wen Ruohan recordó de las faltas de Jiang Cheng, después de todo el mismo Jiang Cheng provoco que el resultado fuera de esa manera.
-Tu no tienes derecho a quejarte. Después de todo, ¿No fue el propio Líder Jiang quien hecho de la secta Jiang a Wei Ying?- replicó Wen Ruohan con firmeza -¿Ahora tu con que cara vienes a quejarte?
Las palabras de Wen Ruohan golpearon a Jiang Cheng directamente en su culpa y responsabilidad. Al ser confrontado de esa manera, Jiang Cheng no soportó que sus propios pecados fueran lanzados en su cara y, sin decir una palabra más, se marchó del lugar, dejando tras de sí una atmósfera cargada de descontento y resentimiento.
Sin embargo, Wen Ruohan no dejo que su humor se viera opacado. Y se dirigió al discípulo que había estado viendo su intercambio de palabras en silencio y le dijo
-Discípulo Shao, ¿Quieres seguir escuchando la historia?
Inmediatamente Jiang Shao asintió con su cabeza.
-Bueno, como te decía. Incluso Wei Ying y yo unimos nuestro cabello[1].
Los ojos del discípulo principal brillaban ante la historia.
No fue sorpresa para el cuando escucho que el propio Wei Wuxian se autoproclamo como "Esposa"
-Mi Wei Ying se llamó de esa manera a si mismo ¿Quién era yo para llevarle la contraria? Nunca me atrevería cuando me ve con esos ojos brillantes.
-El Líder Wen es admirable- soltó Jiang Shao
-Permíteme continuar, discípulo Shao. Nuestra relación no solo se basó en el amor romántico, sino también en la amistad y el respeto mutuo. Wei Ying y yo compartíamos nuestras alegrías y tristezas, y siempre nos esforzábamos por comprendernos. Además, respeto y la comunicación son fundamentales en cualquier relación. Aprendimos a ignorar los prejuicios y a centrarnos en nuestro amor mutuo. Esa es la verdadera esencia de un matrimonio duradero.
El discípulo Jiang Shao asintió y Wen Ruohan continuó narrando la historia de su matrimonio, revelando los momentos que habían compartido a lo largo de los años. La historia resonó en el corazón de Jiang Shao, quien admiraba la fuerza y la dedicación que Wen Ruohan mostraba hacia su esposa.
El respeto y la comunicación son fundamentales en cualquier relación. Aprendimos a ignorar los prejuicios y a centrarnos en nuestro amor mutuo.
En la habitación, Wei Ying abrió sus ojos, observó la habitación que lo rodeaba con cierta confusión, mientras los recuerdos de la intensa experiencia de la madrugada inundaron su mente. La realidad golpeó su conciencia, y recordó claramente que compartió cultivo dual con su esposo Wen Ruohan. Al ponerse de pie, se sintió un poco desorientado por el entorno desconocido, pero la realidad se aclaró rápidamente, recordó que en este momento se encontraba en la secta Jiang.
Sus labios, por otro lado, llamaron su atención cuando notó la sensación de hinchazón. Un gesto de sorpresa cruzó su rostro, era algo inusual. Recordó con claridad que, durante el apasionado encuentro con Wen Ruohan, no habían llegado a los labios. El recuerdo sobre el apasionado momento compartido con su esposo, provocó un rubor en las mejillas de Wei Ying.
La habitación parecía cargar con la energía de su conexión, y Wei Ying se sintió lleno de calidez y satisfacción ante ello. Mientras reflexionaba sobre la noche pasada, una sonrisa traviesa se formó en sus labios. La intimidad compartida con Wen Ruohan siempre era increíble.
Wei Ying salió de su habitación con una gracia que denotaba una mezcla de determinación y ligereza en cada paso por los pasillos extrañamente solitarios. Sintió la necesidad de disfrutar del aire fresco, así que se dirigió a la pérgola que ofrecía vistas panorámicas. Al salir al exterior, se encontró con el tranquilo mirador, un lugar especial donde podía deleitarse con la serenidad del entorno sin alejarse demasiado de la comodidad de la secta.
Su figura esbelta, envuelta en túnicas negras que ondeaban suavemente con la brisa, destacaba la elegancia de sus movimientos. Su cabello oscuro ondeando al viento, creaba una danza caprichosa alrededor de su rostro, resaltando los destellos dorados que se mezclaban con el ébano de sus hebras.
A medida que avanzaba, los rayos del sol acariciaban su piel, revelando unos rasgos faciales que, con el tiempo, se habían vuelto más maduros y seguros. La suave curva de sus labios dejaba entrever una sonrisa tranquila, mientras que sus ojos, llenos de una mezcla de determinación y serenidad, reflejaban el cúmulo de experiencias que había vivido.
El vientre de Wei Ying, ligeramente abultado, sugería la presencia de una nueva vida. Su postura reflejaba una mezcla de gracia y orgullo, como si llevara consigo un tesoro invaluable. Aunque la ligera hinchazón apenas era perceptible, daba un toque de plenitud a su figura, haciendo que cada movimiento irradiara una cierta luz y vitalidad.
Al llegar al tranquilo mirador, Wei Ying parecía una obra de arte viviente, un cuadro donde la serenidad y la maternidad se entrelazaban de manera armoniosa. El entorno silencioso le proporcionaba un escenario perfecto para disfrutar del paisaje que se extendía ante él, mientras el sol pintaba tonalidades cálidas en el cielo. En ese momento, Wei Ying no solo era el maestro de su propio destino, sino también la personificación de la belleza en su forma más natural y auténtica.
Todo eso fue visto por Jiang Wanyin.
Jiang Cheng observaba desde la distancia, oculto entre las sombras, mientras Wei Wuxian se movía con gracia y seguridad por los pasillos. Cada paso de su antiguo hermano revelaba una transformación notable, y aunque Jiang Cheng se resistía a admitirlo, no podía ignorar el cambio que había tenido lugar en Wei Wuxian.
El porte digno y la presencia impactante de Wei Wuxian resonaban con la autoridad que solo los líderes de sectas más prominentes poseían. Aquel muchacho despreocupado que una vez corría a su alrededor ahora era un hombre con responsabilidades importantes y un estatus elevado. Jiang Cheng sintió una mezcla de emociones, entre el orgullo por el crecimiento de su antiguo amigo y la nostalgia por los días más simples de su juventud.
Las túnicas que Wei Wuxian llevaba, ahora en tonos oscuros, evocaban una sensación de familiaridad y confort en el corazón de Jiang Cheng. Aunque no podía negar que se sintió incómodo al ver a Wei Wuxian vistiendo las túnicas Wen, la visión actual aliviaba un poco su corazón constipado.
eran unas túnicas combinadas con las del líder de secta.
¡Túnicas de pareja!
Vaya acto tan infantil ... pensaba Jiang Cheng.
Las túnicas que llevaba ahora eran conocidas, eran las que recordaba de sus días compartidos en la Secta Yunmeng Jiang. La ironía no pasó desapercibida para Jiang Cheng al darse cuenta de que las túnicas que alguna vez consideró infantiles y caprichosas eran, de hecho, un consuelo para él.
Ya no eran aquellos jóvenes que jugaban y reían despreocupadamente, ambos tenían mucha responsabilidad sobre sus hombros.
Ahora cada quien residía en una secta diferente.
La figura de Wei Wuxian, vestido con esas túnicas familiares, evocaba un sentimiento de conexión con el pasado. Era como un viaje a aquellos momentos, antes de que el destino los llevara por caminos divergentes.
Aquellos tiempos donde podían llamarse hermanos.
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[1] En la cultura china, la ceremonia de "unir el cabello" es un ritual tradicional que tiene lugar durante las bodas. También se conoce como "jìn tóu" (进头) o "jié fá" (结发). Este ritual simboliza la unión de dos personas en matrimonio y representa el compromiso y la conexión duradera entre la pareja.
Durante la ceremonia, los novios se sientan uno al lado del otro, y un sacerdote o anciano de la familia toma un mechón de cabello de cada uno y los entrelaza. Este gesto simboliza la unión eterna de las dos almas y la creación de un vínculo inseparable. Es un acto simbólico que representa la conexión física y espiritual entre el esposo y la esposa.
♡♡♡
La autora tiene algo que decir:
Buenas tardes, Buenas noches, Buenos dias.
He vuelto. Mi salud esta mucho mejor, luche por un tiempo para encontrar finalmente a un doctor que me tratara. Todo esta bien ahora.
Lei todos y cada uno de sus comentarios, agradezco su preocupación, y como recompensa les escribi este capítulo especialmente largo.
Espero que sea de su agrado.
En cuanto al tema tratado en la anterior nota. Me dieron varias propuestas sobre alguna cuenta o pagina de respaldo por si está la eliminaban.
Mi cuenta de Twitter es @Coralsnake_1111
asi mismo en mi perfil de wattpad se en cuentra el enlace que los lleva directo a mi cuenta de Twitter.
Ao3 tengo, sin embargo no eh entendido bien como se utiliza, cuando me instruya bien. Publicare mi cuenta por aquí.
Sin más que agregar, tengan un lindo día, los amo💕 y nuevamente gracias por leerme.