Cuando Xie Ke despertó del coma, el sistema dio un suspiro de alivio y le contó en detalle lo que había sucedido en los últimos días. Pero después de que el sistema divagó en un párrafo tan largo, Xie Ke una vez más se centró en el punto equivocado.
"¿Llamó al guardia de la sombra? Esa invocación de Zhiyu me salvó", Xie Ke, acostada en la cama, no pudo evitar reírse después de escucharlo, "La gracia de salvar una vida se da a cambio".
"...Te ruego que te despiertes un poco", el sistema se quedó sin palabras, "¿Salvarte? Quería que salieras de allí, ¿vale? Durante la batalla de Qianyuan, estaba muy preocupado. Este es un mundo reiniciado. Nadie puede decir qué pasará. Si realmente mueres aquí, tal vez el actor también muera. No es un problema que pueda solucionarse cambiando el caparazón. El Señor Dios está muy enojado, ¿puedes dejar de pensar en Fu Zhiyu?
"No", dijo Xie Ke. Ahora pensó en Fu Zhiyu y su corazón se llenó de burbujas rosadas de felicidad. "El Señor Dios no puede interferir conmigo ahora. Nada puede interferir con que Zhiyu y yo estemos juntos".
El sistema se quedó atascado por un momento, sin poder encontrar qué decir: "Está bien, de todos modos, ahora has sobrevivido, puedes hacerlo tú mismo, ya no me preocupo por ti".
Como resultado, tan pronto como la condición de Xie Ke mejoró un poco, inmediatamente corrió a la residencia de Wang Zhao.
Fu Zhiyu lo escuchó hablar, pero no respondió nada, solo lo miró con frialdad. Xie Ke fue observado y, aunque no entendía lo que significaba esta mirada, simplemente sintió que todos los pensamientos en su mente habían desaparecido y que solo quedaba Fu Zhiyu.
"Regrese, no tenemos nada que decirnos y no quiero escuchar ninguna disculpa", dijo Fu Zhiyu. "No quiero recordar el pasado contigo, ni quiero escuchar tus andanzas psicológicas. Cualquiera puede decir cosas bonitas. Llamaré a un narrador y él podrá inventar esas cosas durante tres días y tres noches sin ninguna dificultad".
Xie Ke no se atrevió a hacerlo enojar. Después de irse a regañadientes, Fu Zhiyu se sentó en el lugar por un rato con la cabeza gacha, pensando en algo. En ese momento, una voz familiar apareció de repente en su mente.
"Zhiyu, Zhiyu", la voz del Señor Dios sonaba un poco furtiva, "¿Puedes oírme?"
Fu Zhiyu se sorprendió y se levantó del sofá.
"¿Señor Dios?"
En total, hacía más de un año y medio que no escuchaba esa voz.
"Soy yo", dijo el Señor Dios en voz baja, "Zhiyu, ¿está bien el mundo?"
"Depende de cómo lo definas", pensó Fu Zhiyu por un momento. "En comparación con la trama original, naturalmente se está desmoronando, pero en términos de estabilidad general, debería ser buena. La guerra acaba de terminar y el tiempo se ha comprimido. El pueblo ha sufrido menos. Desde este punto de vista, el mundo está bien".
El Señor Dios exhaló un suspiro de alivio y dijo: "Eso es bueno. ¿Qué pasa contigo? ¿Cómo estás?"
Fu Zhiyu pensó en su vida por un tiempo, solo para sentir que no había nada con qué ser exigente excepto el terco Xie Ke.
Al ver que estaba en silencio, el Señor Dios comenzó a preguntarse: "¿Xie Ke se ha quedado contigo?"
Fu Zhiyu extendió la mano, se frotó la frente y preguntó: "¿Puedes llevártelo? Es realmente molesto".
"Obviamente no, de lo contrario no estaría tan abrumado ahora", dijo el Señor Dios. "Me arriesgué a venir aquí nuevamente porque recibí una fluctuación especial de este mundo. Creo que debería ser Xie Ke quien volvió a hacer algo, o él mismo es una fluctuación. Sólo después de que llegué aquí descubrí que estaba herido".
"Entonces no te preocupes", dijo Fu Zhiyu, "es muy egoísta y aprecia su vida, y no morirá así".
El Señor Dios suspiró y dijo: "Zhiyu, tal vez realmente tengas que cambiar tu forma de pensar fija sobre Xie Ke. Él realmente está aquí para ti. No tuve tiempo de decírtelo la última vez. Para reiniciar el mundo, renunció a todo lo que había guardado. El grado de su obsesión es inimaginable. Ahora que casi muere, naturalmente le resulta imposible dejarlo ir fácilmente".
Fu Zhiyu estaba un poco desconcertado cuando escuchó esto. Originalmente pensó que Xie Ke acababa de pasar un tiempo invadiendo el sistema. Resultó que había algo detrás.
El Señor Dios le explicó, más bien como escupiendo amargamente: "Los actores también están organizados. Te mencioné esto. Cada vez son más difíciles de gestionar. Xie Ke es el alma de la organización más grande.
Reiniciar un mundo no es tan sencillo. No lo puede hacer un solo actor. Le tomó mucho tiempo unir varias organizaciones para lograr su objetivo. Otros no son filántropos1. No había ninguna razón para que lo ayudaran casualmente. Intercambió muchas cosas. Y no sabía cómo resultaría todo una vez que él se hubiera ido. Todos los asuntos de la organización fueron entregados temporalmente a otros, y todo el mundo de los actores pensó que estaba loco".
"¿De verdad vas a morir por un dato indígena? No es de extrañar que otros se rían de él", Fu Zhiyu levantó la comisura de su boca con una sonrisa, "Él es realmente... un psicópata caprichoso".
Cada vez que conocía a Xie Ke en esta vida, la percepción que Fu Zhiyu tenía de él se actualizaba. Había sentido varias veces que su vocabulario era insuficiente y no podía describir el comportamiento de Xie Ke que iba en contra de la lógica humana.
"Pero tú también has mutado, ¿así que debería estar bien tratar con él?" El Señor Dios continuó: "Apagué las funciones de su sistema y ahora él debería..."
"Espera", Fu Zhiyu no pudo evitar interrumpirlo, "¿Apagaste las funciones de su sistema? No, todavía puede usar accesorios. Estoy seguro de que debe haber usado accesorios y su sistema todavía está ahí".
El Señor Dios quedó desconcertado y luego le explicó: "El sistema y el actor están atados. Es imposible separarlos sin circunstancias extremas. No puedo controlar los accesorios y mejoras físicas que se han canjeado con puntos. Me refiero a las funciones básicas del sistema".
"¿Incluyendo... bloquear el dolor?"
"Por supuesto." El Señor Dios añadió: "No tienes que preocuparte por los accesorios. Eres un dato anormal o un supererror que ni siquiera yo puedo eliminar. A diferencia de otras personas, sus accesorios básicamente no funcionarán para ti".
Fu Zhiyu lo sabía desde hacía mucho tiempo, pero se sintió algo aliviado cuando el Señor Dios lo confirmó.
Pensó por un momento y de repente hizo una pregunta: "Si Xie Ke muere en este mundo libre en particular, ¿morirá también el actor? ¿O es posible que encuentre otro cuerpo para regresar?
"Se verá muy afectado y puede desaparecer todos juntos", dijo el Señor Dios. "No estoy seguro, pero si el cuerpo de Xie Ke muere, debería poder controlarlo. No podrá volver".
Después de escuchar esta frase, Fu Zhiyu tamborileó con los dedos y su mente dio vueltas; Estaba a punto de preguntar algo nuevamente, cuando la voz del Señor Dios desapareció repentinamente, como si el canal de comunicación se hubiera cerrado.
En ese momento, Steward Zhou llamó a la puerta y entró, primero saludando a Fu Zhiyu y luego diciendo: "Su Alteza, el palacio la ha recompensado con otro regalo, está en el patio. ¿Quieres ir a echar un vistazo?
La victoria sobre los bárbaros fue grandiosa y la familia Xie ascendió nuevamente. El emperador Qingyuan parecía finalmente haberse relajado. Se otorgó una serie de recompensas, e incluso la residencia de Wang Zhao que no tenía nada que ver con eso fue recompensada.
"Pongámoslo todo en el tesoro", suspiró Fu Zhiyu, que acababa de recuperarse de la conversación con el Señor Dios, y dijo: "No iré a verlo. Durante este tiempo, todos en la residencia también han trabajado duro. Dale a cada persona un regalo de cinco taels de plata. En cuanto a Steward Zhou, usted..."
Fu Zhiyu pensó por un momento. Hoy llevaba un colgante de jade en la cintura, preparado por la criada, uno de los artículos sacados del tesoro. A juzgar por su color, valía unos cientos de taeles de plata. Al ver que no tenía ninguna marca imperial, Fu Zhiyu se lo quitó y se lo dio al mayordomo.
Steward Zhou estaba naturalmente feliz. Había servido a la gente durante muchos años, pero nunca había conocido a un maestro de tan buen carácter. Wang Zhao nunca acosó a sus subordinados y no pidió demasiado en cuanto a comida, ropa, alojamiento y viajes. También recompensaba a menudo a la gente. Por eso Steward Zhou tenía que estar agradecido y servir con cuidado.
Después de recibir el colgante de jade, primero agradeció al maestro y luego dijo: "Las cajas y objetos que se enviaron están bien, pero esta vez el palacio también envió... algunas personas".
Fu Zhiyu finalmente lo miró y se preguntó: "¿Cuántas personas? Ya hay cincuenta o sesenta sirvientes y personal de mantenimiento en la residencia para cuidar de Mingdao y de mí. ¿Por qué necesitamos más gente?"
Steward Zhou se secó el sudor y dijo: "No son sirvientes, son concubinas. Escuché al eunuco que entregó los bienes decir que fue Su Alteza el Príncipe Heredero quien habló con el emperador y le dijo que Wang Zhao había vivido fuera del palacio durante tanto tiempo y que no había nadie cerca para cuidarlo. Era inevitable que se sintiera solo. Y Wang Zhao tenía dieciocho años, ya era un adulto, incluso era tarde para darle a alguien en este momento.
El emperador consideró que tenía sentido. La cuestión de elegir una consorte tenía que discutirse a largo plazo, pero primero se podían preparar las concubinas, por lo que el emperador envió algunas personas".
Fu Zhiyu frunció el ceño y dijo: "¿Cuántos hay?"
"Seis, todas hermosas", dijo Steward Zhou. "Están parados afuera. ¿El Maestro quiere verlos?
Esta era una recompensa del emperador y no podía enviarse casualmente. Fu Zhiyu originalmente quería que vivieran en una parte más remota de la residencia y se cuidaran solos, pero justo cuando estaba a punto de dar una orden, pensó en algo y cambió de opinión.
"Los veré ahora", dijo, "llámelos a todos adentro".
Tan pronto como Steward Zhou recibió la orden, trajo a la gente.
De hecho, había algo que mirar. Fu Zhiyu simplemente dijo "ellos", pero para ser más precisos, había cuatro mujeres y dos hombres entre las seis personas. Después de entrar, todos se arrodillaron y saludaron a Fu Zhiyu, diciendo sus nombres uno por uno según la orden del mayordomo Zhou.
Parecían estar un poco asustados y sus voces eran muy bajas, por lo que Fu Zhiyu no escuchó con mucha claridad.
La existencia de concubinas masculinas en esta dinastía no era extraña y no tenía nada que ver con la apertura de mente. Las personas poderosas harían cualquier cosa por diversión, y las concubinas masculinas no eran nada especial mientras este tipo de relación estuviera escondida en la parte trasera de la casa.
De hecho, eran muy hermosos, y el emperador tuvo cierta visión al elegirlos. Fu Zhiyu los observó con interés, recordando el pasado.
En aquel entonces, fue su decisión no tocar a nadie más por el bien de Xie Ke. Y después de convertirse en emperador, aprobó monumentos conmemorativos casi todos los días hasta la noche, dedicándose a los asuntos políticos. Realmente no tenía tiempo libre. Ahora que era libre, estaba bien intentar algo que nunca había intentado en su vida anterior.
No planeaba casarse con una consorte. Huiría cuando llegara el momento, así que no quería hacerle perder el tiempo a una mujer inocente. Afortunadamente, Jilin no tenía la tradición de casarse temprano. El Príncipe Heredero y el Tercer Príncipe eran mucho mayores que él y aún no se habían casado con una esposa formal. La esposa formal del Príncipe Heredero era un tema de interés y muchas partes debían seleccionarla cuidadosamente. Fu Zhiyu era más joven que ellos, así que, naturalmente, había una excusa para posponerlo.
Era cierto, pero sentía que no necesitaba estar atado al árbol torcido de Xie Ke por otra vida, ¿verdad?
1) Disposición natural del espíritu hacia la solidaridad con el prójimo.