Había pasado horas y nadie podía separar a Madame Wen de donde estaba el cuerpo de su pequeño sol.
Wei Ying con manos temblorosas acariciaba la cabeza del hijo del sol, esperando que el habrá sus ojos y lo mire. Sin embargo, habían pasado mucho tiempo y eso no sucedía.
Los médicos en el lugar, se miraban entre sí, sabiendo que no podían hacer nada más por el segundo heredero. Reprendiéndose entre si sobre lo poco capaces que son.
Tampoco pudieron convencer a su Madame de ir a descansar. Ni siquiera pudieron pedirle a Wen Ruohan de aconsejar a su señora que descasara, ya que este ni siquiera se atrevía a separar a su esposa del cuerpo Wen Chao.
Los ancianos de secta habían llegado pocos minutos después que llegaron los lideres al lugar, y tampoco se atrevieron a interrumpir la escena frente a sus ojos. Nadie pudo decir nada excepto el anciano cuatro, Wen He... quien queria ver sangre correr
¿Quién rayos se había atrevido a hacerle daño al segundo joven maestro?
¿Quién era tan idiota para no apreciar su vida?
¿Cómo el segundo joven amo podría caer? ¡Algo tuvo que haber pasado!
Wen He quería encontrar esa persona y acabar con él.
Wen He tenía sujetada la empuñadura de su hermosa espada, lista para sacarla de su funda
Se calmaba solo por el hecho que la única persona que estuvo en el accidente fue Wen Zhuliu. No podía ir a intimidar a Wen Zhuliu, ya que este era el protegido del Líder, aunque quisiera no podía hacerlo. Se consolaba a si mismo pensando que el Líder luego le pediría una clara y consistente explicación de lo sucedido. Los demás ancianos solo mostraban una expresión melancólica, entristecidos por ver como el joven lleno de vida había acabado así, y segundo por ver a Wei Ying al estar tan triste por su pequeño.
El clima había empeorado, la lluvia había caído fuertemente en el lugar, y había continuado por horas.
Wen Ruohan había cubierto en cuerpo de su esposa con una gruesa manta para protegerles del frio, del cansancio de su cuerpo se había quedado dormido junto a Wen Chao.
Wen Ruohan estuvo despierto todo el tiempo
Los suspiros del Líder era lo único que se podía escuchar de su parte. Se encamino hacia la salida apreciando que todas las personas se habían retirado del lugar.
Necesitaba un tiempo en silencio y meditar mucho para no cometer alguna locura.
Cuando hecho un vistazo hacia afuera del pabellón médico, vio a un discípulo haciendo guardia a una distancia considerable. Con palabras secas y cortas el Líder le mando a traer a Wen Xu.
Ese día Wen Xu había salido a una cacería. Tras muchas quejas de parte de Wen Xu por tener tanta gente extraña ahí, Wen Ruohan le concedió un respiro, acepto en que podía irse a una cacería para despejarse un poco, si y solo sí regresaba a la secta intacto. Wen Ruohan a este punto no sabía cómo reaccionaria su hijo con tal noticia
Wen Ruohan vio al discípulo retirarse rápidamente por los pabellones. El sonido del viento y de la lluvia era lo único que percibían sus oídos, el olor a petricor le hacía caricias a su nariz y el viento hacia bailar su largo cabello y túnicas.
Sus ojos vagaron hasta un punto en específico. Al parecer ese guardia no era el único que se encontraba ahí.
Un discípulo estaba de rodillas a pocos metros.
Wen Ruohan dio la espalda ignorándolo completamente. En este momento el Líder no se sentía capaz de sostener alguna conversación.
Para todos fue esperado ver al primer heredero en un brote de histeria al saber lo de su hermano. Había tomado su espada y se encamino rápidamente a la secta dejando a todos los discípulos que se encontraban en medio de la cacería sorprendidos por tal rapidez y furiosa reacción.
Wen Xu voló con su espada tan rápido, sin importar que en cierta parte del camino hacia la secta estaba lloviendo y se hacía complicado ver, sabía que su A-Die y A-Niang le reprenderían, pero necesitaba llegar a la secta pronto y un poco de lluvia no le detendría, y siguió avanzando sin titubear.
En la entrada estaban esperándole un grupo de guardias, estos al ver su expresión y el estado de su cuerpo se sorprendieron, corriendo a brindarle algo con que secar su ropa. Sin embargo, Wen Xu no tenía tiempo para esas cosas, y paso de largo sin importar cuan empapado estaba por al lluvia.
Llegando al sector medico y ver a su hermano en cama, su cuerpo se tenso.
Wen Xu pidió explicaciones y exilio saber el estado de su hermano
Los ancianos al ser notificados sobre la llegada del primer joven amo, fueron enseguida a verle, estos le explicaron cuidadosamente el estado del segundo joven maestro, que todo dependía de Wen Chao si despertaba. Su cuerpo estaba sanando despacio, cerrando las heridas que tenía y reparando su cuerpo.
Wen Xu al igual que su A-Niang no se movió de su lado.
Wei Ying en su preocupación y luego de haber madurado por un tiempo su idea. Le pidió permiso a su esposo si podía usar energía resentida en él. Al decirlo le entro pánico y moviendo sus manos rápidamente le explico a su esposo el por qué decía eso.
—Cuando caí de ese acantilado mis huesos se rompieron y cuando la energía entro en mi cuerpo se repararon más rápido de lo común, el dolor no se adormeció... podría decir, pero dolió lo necesario. Se que no suena bien, pero A-Ruo deberíamos de intentarlo ¿Suena tan mal?
Con cariño el Líder tomo las manos de su esposa, de esa forma tan delicada que solo la sabia—Frías... Tus manos están frías — repitió el Líder, fue sorprendente que su voz no temblara por saber lo que paso su esposa, sin duda esa llama en su interior nunca se apagaba. Nuevamente se prometió que se vengaría
—Esposo, prometo que no se manchara de la energía, solo...
—Calma esposa, puedes hacerlo. Pero si te empiezas a sentir mal por ello, detente ¿Bien? Intentaremos de nuevo más tarde. No te excedas
Wei Ying se llevó una gran sorpresa ante la respuesta de su esposo. Con esas palabras le demostró que tenía plena confianza en él. Incluso para hacer tal experimento con su propio hijo. Podía sentir el fuerte latido de su corazón. Definitivamente había elegido bien a su esposo.
Su esposo ni siquiera se inmutó al saber que hablaban de la "energía resentida" otras personas hubiera dado un grito en el cielo por tal cosa. Sin embargo, el solo le había sonreído y le recordó que tuviera cuidado. Ciertamente en ocasiones Wei Ying no le parecía real tener a un pequeño ser que se formaba en su vientre y que tenia que tener mucho cuidado.
El intento de Wei Ying tuvo un pequeño avance, la apariencia de Wen Chao había mejorado un poco. Paso dos varitas de incienso pasándole energía a Wen Chao, hasta que su esposo le detenía y le indicaba que siguiera después. Incluso Wen Xu notaba su mejoría, agradeciendo con ojos amorosos a las acciones de Wei Ying, pero también estaba pendiente de que su madre no agotara todas sus energías, estaba igual de preocupado que su padre.
Wen Qing, aunque no apoyo su método, también aseguro que Wen Chao había mejorado. Paso mucho tiempo regañando por sus acciones, sin tomar en cuenta que estaba en un estado delicado. Wen Qing pensaba que era mejor quedarse en la secta por un tiempo, esos sustos que le pegaban los discípulos apareciéndose en Yiling cada que algo pasaba en Qishan le hacía querer mudarse, sin embargo esta vez se sintió tan preocupada por la situación que no se quejo por ser arrastrada por los discípulos. Definitivamente se mudaría.
Wei Ying le escuchó pacientemente los regaños, sin arrepentirse ni un poco
Al día siguiente Wei Ying con pasos lentos y pastosos se movía de un lado a otro cuidando a su pequeño, el dolor de sus caderas aún no pasaba por completo, así como tampoco sus energías se habían renovado, pero eso no lo detuvo a moverse de algún modo. De vez en cuando se detenía y tomaba un respiró cuando el dolor era mucho
Wen Ruohan no se separó de su lado, dejo de un lado todas las tareas de la secta, su prioridad número uno era su familia.
Trataba de auxiliar a su esposa de lo que necesitara, para que no se esforzará, ni que se moviera tanto. Cuando notaba que ponía sus manos en su espalda en una manera de apaciguar el dolor, Wen Ruohan le daba una mirada de disculpa a su esposa.
HuaiSang apareció luego que sus nervios se estabilizaran, entonces fue a dar una visita a Wen Chao. En los largos pasillos A-Sang fue caminando hacia donde se encontraba el segundo joven maestro y los lideres, fue una gran sorpresa para este ver a la mano derecha del Líder, de rodillas frente al pabellón.
—Wen Zhuliu ¿Qué haces aquí? ¿Por qué estas de rodillas? ¿El Líder te ha castigado, necesitas que hable con el?
Finalmente, Wen Zhuliu hablo —No es nada de eso joven maestro. Tampoco he hablado con el líder
El corazón de A-Sang se estrujo al ver tal lamentable estado de Wen Zhuliu, sabia que el accidente de Wen Chao le había afectado grandemente —No te preocupes Wen Zhuliu— consoló —El segundo joven amo se pondrá bien ¿Puedes levantarte? ¿Quieres ayuda para ponerte de pie? Sabes que no necesitas estar de rodillas
Wen Zhuliu no dijo nada, ni se movió
A-Sang volvió a insistir —El Líder no creo que salga de ese lugar, no necesitas estar de rodillas más tiempo ¿Bien?
—No lo hago por el— soltó de repente
A-Sang no supo como reaccionar ante esas palabras
—Wen Zhuliu no te culpes, fue un accidente, pronto se recuperara y estará todo bien
—Nada estará bien
HuaiSang se puso de cuclillas para estar a su altura, le miro con preocupación sin saber que decir. Sus ojos fueron hacia abajo y vio que las manos de Wen Zhuliu tenían algo fuertemente agarrado. Al enfocar ese objeto en sus ojos, reconoció esos hilos trenzados que salían de su mano y lo reconoció al instante. Era el regalo que Wen Zhuliu había comprado en Yunmeng Jiang para el segundo joven amo. Un adorno para la espada de Wen Chao.
¿Entonces nunca se lo dio? ¿Porqué?
Los dedos de Wen Zhuliu acariciaban delicadamente esa borla color dorado y rojo, esa artesanía que había escogido minuciosamente para Wen Chao. Había planeado dársela en el momento que lo viera, pero desistió de la idea. Intento mantener la distancia de Wen Chao y suprimir los sentimientos que tenía hacia él. Ahora no sabía que hacer con ese objeto que había guardado recelosamente a su lado. Incluso no sabía si habría algún día en que se lo diera.
Su cargo de conciencia lo tenía de rodillas en ese lugar, sus piernas hace mucho tiempo se habían dormido por quedarse tanto tiempo en la misma posición. En todo ese tiempo había pedido a los dioses que Wen Chao despertara pronto.
En su corazón se lamentaba no haberle entregado su obsequio.
En este momento podía decir que había perdido la oportunidad de dárselo. Incluso si despertaba.
Sentía que había perdido todo el derecho en volver a establecer la misma relación que tenían antes.
Cualquier cosa que pasara, lo afrontaría
Incluso si era la muerte.
Y hablando de la muerte, Wen Xu pudo sentir eso al ver el rostro enfurecido de el Primer Joven amo acercarse hacia el
—¡Wen Zhuliu! ¿Qué haces aquí? ¿Acaso ocurrió algo para que tengas algún arrepentimiento en tu corazón?— dijo acusatoriamente
—Primer Joven Amo yo solo...
—En tus ojos veo arrepentimiento
En ese momento HuaiSang sintió que era oportuno interrumpir —Eh... Wen Xu, debes de calmarte, el solo...
No pudo continuar hablando ya que la voz de Wen Xu le corto
—No importa que hagas ahora, incluso yo no puedo hacer nada, El Líder prohibió preguntarte algo, quiere esperar a que mi hermano despierte. Espero que el cuente todo lo que paso. Pero sin duda veo extraña tu expresión y tus acciones, incluso si eres la mano derecha de mi padre, no te escaparas de mi si Wen Chao esta así por tu culpa.
Al no tener respuesta de parte de Wen Zhuliu, enfureció aun mas al Primer Joven Amo
—Si tuviste algo que ver en esto. Incluso si te arrodillas hasta que tus piernas queden inservibles, no te ayudara. Wen Zhuliu deberías temer. Toda la secta sabe que Wen Chao es la debilidad de Niang ¿Qué crees que haría si se entera que tuviste algo que ver en el accidente? O incluso que pudiste hacer algo para evitarlo ¿Qué crees? ¿Quieres tener a un cultivador demoniaco tras tu cabeza?
La amenaza era clara. Incluso HuaiSang se sintió incapaz de decir algo.
Con pisadas grandes Wen Xu se retiro del lugar.
El nudo en el cuello de Wen Zhuliu se volvió casi asfixiante.
HuaiSang intentó tranquilizarlo —No te preocupes, en estos momentos el ambiente es muy tenso y las emociones están descontroladas, no creo que tu tuvieras algo que ver en esto, estimas mucho a Wen Chao, no tomes enserio las palabras de Wen Xu— al ver que no había respuesta alguna, decidió seguir con su camino, no sin detenerse y decir —Incluso si tuvieras algo que ver... dudo que Wen Chao...
Las palabras no fueron dichas.
Pero Wen Zhuliu sabía que quería decir
Wen Chao no dejaría que nada te pase, porque te aprecia
Saber esto lo hizo sentir mucho peor.