<< ¡¡Rugby!!>>
El sábado había llegado y un fuerte sol brillaba en el cielo.
Amity se levantó con entusiasmo de su cama, preparó sus cosas y, después de desayunar, se reunió con su Abue y con los gemelos en la sala.
—¡Vamos Mittens! Tienes un partido que ganar— dijo Edric mientras Amity cargaba sus cosas.
Amity dio un asentimiento determinado en dirección a su hermano en respuesta.
—¿Ya llevas todo Mittens? — preguntó su Abue empezando a abrir la puerta para que todos salieran.
Los gemelos salieron primero y subieron al auto de Ed.
—Si Abue, estoy lista— mencionó la menor Blight mientras salía por la puerta también.
Con un asentimiento divertido por parte de su abuela, cerraron la casa y subieron al auto también.
. . .
La ventaja de entrar junto con los jugadores era que, por ser temprano, encontraban amplios espacios de estacionamiento.
Probablemente en unos minutos el estacionamiento se llenaría de los aficionados que vendrían a ver la final del torneo.
Al bajar del auto Amity entregó los boletos a su familia para que pudieran adelantarse a las gradas, mientras ella se iba a presentar a los vestidores.
Al atravesar el estacionamiento pudo distinguir a Hooty estacionado a escasos metros de la entrada de los vestidores.
Sonrió para sí misma pensando en que Luz ya estaría dentro.
En los vestidores encontró primero a Skara quien la saludó y se sorprendió al ver su nuevo tono de cabello.
—Wow, Amity te ves genial— le dijo ella.
Amity agradeció el comentario y preguntó por Boscha, debía reportarse primero con su capitana.
Avanzó en la dirección que le señaló Skara y entró a una sala de casilleros donde ya se encontraban Cat, Boscha y Luz, al parecer repasando algunas de las jugadas que pondrían en práctica hoy.
—¡Hey chicas!, ¿listas para aplastar a Glandus? — se presentó Amity con entusiasmo.
Todas dirigieron su mirada a la entrada de la sala y diversas expresiones de sorpresa se posaron en sus rostros.
—¡Por supuesto! — dijo Cat saliendo de su estupor —y oye chica te ves muy bien—.
Amity sonrió agradecida y Boscha se acercó entregándole una hoja para que se registrara.
—Siempre es bueno un cambio Blight, ese tono te queda bien— le mencionó mientras la chica llenaba su registro, una vez terminado le entregó la hoja a su capitana —pero debemos guardar ese entusiasmo para el partido— dijo mientras le hablaba a Cat para que la siguiera —nos vemos en diez minutos en el campo— salió de la sala, dejando solas a Luz y a Amity.
La menor Blight dirigió su mirada a Luz, quien ya se había recuperado de su sorpresa inicial, pero que todavía tenía los ojos muy abiertos.
Por un momento, un pequeño temor de que a Luz no le gustara el nuevo color se instaló en ella.
—Es... diferente— dijo la morena acercándose y alcanzando un mechón lavanda del nuevo tono de cabello de Amity.
—Si...ya tenía muchos meses con el verde...yo quería un cambio— dijo ella tímidamente, sentía que la cara se le calentaba lentamente.
La cercanía de Luz tampoco ayudaba, pero notó un ligero sonrojo por parte de la morena.
Aunque no lo podría asegurar, la luz le daba en la espalda.
—Diosa de cabello algodón de azúcar— Amity juró que escucho esta frase murmurada por Luz.
De pronto, escucharon la voz de Skara llamándolas no muy lejos.
Se separaron en seguida algo avergonzadas.
Amity evitó entrar en pánico esta vez, tenían cosas importantes que hacer.
Así que empezó a caminar hacia la salida —vamos, tenemos un partido que ganar— le sonrió a Luz, quien asintió llena de entusiasmo.
. . .
Estaban entrando en el campo y se oían los gritos de emoción de la afición.
Es verdad que no era un gran estadio, pero se había llenado según podía ver Amity.
Dando una mirada rápida a los lugares que decían los boletos pudo distinguir a sus hermanos y a su Abue apoyándola con la misma intensidad que predominaba en los espectadores.
Escuchó un poco también los gritos de Gus, y volteó buscando a sus amigos, quienes no tardó en reconocer.
Gus se había pintado prácticamente toda la cara y si seguía gritando así probablemente se quedaría afónico.
Willow ondeaba también un par de banderas y lucía emocionada.
Pudo distinguir a un lado una cabellera rubia que debía ser de Hunter.
Amity se preguntó si Luz había invitado a toda su familia y, de ser así, por qué Hunter no estaría en las gradas principales.
Pero su atención se centró en Boscha quien las juntó para dar un último discurso motivacional, para después entrar en posición dentro del campo.
Amity escuchó el silbato del árbitro que indicaba el inicio del partido.
. . .
Amity estaba respirando pesadamente tratando de recuperar el aliento cuando se escuchó otro pitido, ahora marcando el medio tiempo.
Las chicas se retiraron rápidamente del campo para tomar agua y escuchar las indicaciones de su capitana.
Boscha se veía más presionada de lo normal, y es que en la primera mitad comenzaron perdiendo, y ahora cerraron apenas alcanzando al equipo de Glandus.
—Creo que necesitamos cambiar la estrategia— dirigió una mirada a Skara quien entendiendo el mensaje fue por su libreta de jugadas para proponer los cambios.
—Son más fuertes que las que enfrentamos la vez pasada— comentó Luz dando un trago de agua.
—También cambiaron a la mayoría del equipo este año— mencionó Bo.
Una vez que Skara regresó, Boscha analizó cuidadosamente la libreta.
—No podemos ganarles en fuerza, así que debemos ser más rápidas y agiles, con suerte podremos hacer la trampa de espinas como última jugada— explicó mientras señalaba las nuevas posiciones que ocuparían durante la segunda mitad.
Una vez que todas entendieron las indicaciones volvieron al campo.
Todavía tenían esperanzas, tenían todo otro tiempo para poder superar a Glandus.
. . .
Los minutos corrían, la voz del narrador se escuchaba lejana para Amity, su uniforme se encontraba totalmente embarrado con el lodo del campo y trataba de contener a una de las chicas de Glandus.
A pesar de todo el riguroso entrenamiento al que se sometieron las Banshees, estas chicas eran más corpulentas y, por ende, tenían mucha más fuerza.
El equipo de Hexside apenas se estaba manteniendo un par de puntos por encima de su rival.
De continuar así, todo se decidiría en la trampa de espinas que planeaban.
Un pitido la sacó de sus pensamientos y un jadeo del público en general la hizo ponerse nerviosa.
—¡Esa fue una jugada muy ruda por parte de la capitana de Glandus!, la capitana de Hexside apenas puede levantarse— fue lo que Amity escuchó de voz del narrador.
Se dirigió junto con sus compañeras hacia el árbitro para pedirle un minuto para revisar a Boscha, petición concedida rápidamente, querían evitar perder más tiempo, estaban en la recta final del partido.
Se quitaron los cascos y corrieron hacia su capitana solo un par de yardas después de la mitad del campo.
Al llegar Amity escuchó una gran cantidad de insultos que nunca se habría imaginado que existían.
Luz ayudó a Boscha a quitarse el casco por un momento.
Su capitana se encontraba agotada por el cansancio y tenía una expresión de dolor profunda.
—Creo que me torcí el tobillo— le mencionó al equipo.
—¿Qué haremos?, si decides irte nos desclasifican— dijo Skara.
—No saldré, pero no voy a poder correr para la jugada final— sentenció.
Todo el equipo quedó pensativo, ¿cómo se organizarían para la trampa de espinas?
—Yo puedo correr— declaró Luz rápidamente —pero necesito que me cubran bien, si me derriban ya no nos podremos recuperar—.
Boscha negó con la cabeza, —tú eres quien cubre mejor, necesitamos rapidez y resistencia, deben cruzar casi medio campo para anotar—.
Al escuchar eso Skara levantó la mirada hacia Amity, Boscha siguió su mirada y su cara se iluminó.
Amity por su parte estaba aterrada.
Las demás chicas parecieron entender rápidamente lo que Skara estaba proponiendo.
El árbitro se acercó para preguntar si continuarían, a lo que las chicas asintieron.
Ayudaron a Boscha a ponerse de pie, cosa que la capitana estaba sufriendo sobremanera.
—Boscha, no puedo, es demasiada responsabilidad, sólo lo practique una vez— Amity empezaba a explicar desesperadamente, todas las expectativas caerían sobre ella y eso la paralizaba.
Boscha se volvió a colocar el casco.
—Es una orden de tu capitana, Blight— le expresó —y no te preocupes, Noceda te cubrirá, sólo tienes que correr con todas tus fuerzas— después le puso una mano en el hombro —confiamos en ti—.
Amity se quedó viendo al vacío mientras las chicas se dispersaban una vez más tomando sus respectivos lugares para la trampa de espinas.
No había mentido, en sus entrenamientos a veces cambiaban las posiciones para entender todas las partes que componían una jugada y solo en una ocasión tuvo oportunidad de ser la corredora en la trampa de espinas.
Lo había hecho bien según Skara, pero hacerlo en el campo y combatiendo a este equipo en particular no le generaba confianza.
Salió de su ensimismamiento cuando una mano se posó en su hombro dando un pequeño apretón que supuso buscaba confortarla.
Luz seguía ahí.
—Tranquila Amity, no eres la única que está jugando, confía en tu equipo, así como tu equipo confía en ti— declaró volviéndose a poner el casco, se acercó para dar una última línea —no permitiré que alguna te toque—.
Con esa declaración Luz se alejó y se colocó en su posición no muy lejos de la menor Blight.
Amity tomó un fuerte respiro, se colocó el casco y se mentalizó, no habían trabajado tan duro estas dos semanas, ni se habían esforzado tanto en este torneo, como para perder cuando estaban a una escasa jugada de volver con un trofeo a casa.
El sentido competitivo de Amity se activó.
El árbitro silbó y empezaron la jugada.
<< La descripción de jugadas es deficiente, lo sé, el único deporte que conozco es el soccer jajaja, pero se intentó.
¿Logrará Amity anotar para que su equipo gane?
Nos vemos ;) >>