Escena XXIV: El cambio de Eldo Lunte Banto en la pastelería Vaccari y la historia personal de Kirno Ripto
Fecha: 24 de mayo del 2022 (Tarde)
Personajes:
· Eldo Lunte Banto
· Kirno Ripto
· Hurtina Riltela
Lugar: El interior de la pastelería Vaccari
(Descripción del lugar: El interior de la pastelería Vaccari es un espacio amplio que consta de los siguientes aspectos. En el lado izquierdo, se puede apreciar un estante blanco que tiene diversos pasteles de cumpleaños en trozos o en pedazos. En el lado derecho, se puede observar otro estante donde se colocan las empanadas, panes con carne, postres deliciosos y otros pasteles en trozos. En el centro se hallan dos mesas grandes con servilletas y cubiertos. El ambiente se halla un poco oscuro, porque ya es la noche)
(Se abre el telón)
(Ingresa Eldo Lunte Banto caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
(Ingresa Kirno Ripto caminando al escenario por el pasillo derecho)
Eldo: (frío) Kirno, buenas tardes. Pensaba que no iba a estar acá desde hace temprano. Realmente creo que usted debió estar ayer para consolarme por mi triste cumpleaños. Ahora ya no soy tan feliz como antes, porque me siento traicionado. Sigo enojado con Nunto y tal vez él nunca vaya a cambiar por nada del mundo.
Kirno: (educado) Eldo, me enteré lo de ayer por Hurtina. No te preocupes que no serás despedido. Es bueno que sepas diferenciar quiénes son tus amigos de los que no son. Te recomiendo que desde ahora te encuentres al lado de mí en caso de que alguno de esos chicos venga otra vez a molestarte. Solo dime y yo llamaré a la policía.
Eldo: (frío) Kirno, gracias por tu preocupación. Todo esto fue hecho por Nunto. Es un chico que vive en mi casa, aunque ayer pues digamos que no vino a mi cumpleaños. Ayer fue un día triste y un martirio para mí. Espero que usted se haya acordado de mi cumpleaños, aunque comprendo sí se le olvidó.
Kirno: (contento) Feliz cumpleaños, Eldo. Si quieres te invito una cerveza después del trabajo para que seamos amigos. Quiero que seamos aliados y nos preparemos en caso de que alguno de esos chicos quiera volver a la pastelería. Te aprecio mucho y no te preocupes por lo que pasó, porque no tienes la culpa.
Eldo: (frío) Kirno, usted es un gran caballero. Si hubiera venido ayer, entonces creo que habría sido un cumpleaños muy diferente. Perdón por repetir tanto mi experiencia de ayer, pero es que me marcó mucho. Ahora ya no soy muy alegre y me comporto de una forma distinta. Me siento muy enojado por dentro, pero no lo voy a expresar.
(Kirno Ripto se acerca a Eldo Lunte Banto y ambos se dan la mano)
Kirno: (gentil) Si quieres te puedo dar un suéter mío para que no te puedan manchar. Tu trabajo es importante en la pastelería y tú también. No quiero forzarte a renunciar, pero creo que podrías darte un pequeño descanso del trabajo. Te iré a visitar si quieres. Quiero verte bien y necesito que ahora estemos juntos para enfrentar a esos chicos.
Eldo: (frío) Kirno, ahora debo confesarte que yo me encuentro mal. Si fuera capaz de expresar una emoción sería ira, pero no lo voy a hacer, porque ando en horario de trabajo. Hurtina creo que se podría incomodar. Gracias por tu preocupación y tendré cuidado la próxima vez que vea a Nunto. Quiero sentirme bien.
Kirno: (cordial) Eldo, me haces acordarme de mis primeras veces como dueño de una pastelería. En una ocasión, mi padre que era dueño de un pequeño negocio de pasteles, pues me dio la tarea de contratar al personal para la tienda. Sabía cocinar, pero no era abierto con la gente al igual como eres ahora.
Eldo: (frío) Kirno, agradezco que te preocupes por mí. Quisiera conocerte más, aunque recordando que eres mi jefe de trabajo. A mí me encanta escribir en vez de cocinar, pero aun así respeto el talento de las otras cosas. Espero que usted no me esté engañando. A mí me fascina la gente que respeta la privacidad de cada persona.
Kirno: (cordial) Eldo, soy el dueño de esta pastelería y tú me pareces simpático. Eres un chico que seguro tiene defectos, pero que es muy colaborativo y sociable o al menos lo que vi antes del día de ayer. Ojalá esos jóvenes desgraciados no te hayan insultado, porque ahí sí se las van a ver conmigo. Estoy dispuesto a protegerte, Eldo.
Eldo: (frío) Kirno, lamento que me tengas que ver en mi peor versión. Necesito saber sobre lo que pasó con su ausencia. Pensaba que estaba de viaje de negocios, pero veo que ha regresado de nuevo a este local y no ha dicho en dónde estaba. Tal vez me lo podría contar, porque me interesa conocerlo más para establecer un lazo de confianza.
Kirno: (interesado) Eldo, parece que nosotros estamos estableciendo un lazo de amistad. Yo estaba en la casa de mis padres arreglando unos asuntos familiares que son un poco confidenciales. Si te los contara, me metería en problemas legales y tal vez cambies tu percepción sobre mí. Espero que pronto puedas ir a mi casa para conversar.
Eldo: (frío) No tengo muchas ganas de convivir con casi nadie excepto con usted, Hurtina y mi familia. Las demás personas son dañinas para mí, porque siempre buscan hacerme daño. No es justo que esos chicos hayan tenido el derecho de insultarme o denigrar mi imagen como si no tuviera sentimientos dentro de mí.
Kirno: (interesado) Eldo, por favor ten confianza conmigo. No te voy a hacer daño, porque te prometo que yo no voy a estar molestándote como esos chicos. Yo te quiero ayudar y si no usaras tu mascarilla entonces te abrazaría muy fuerte para que veas lo mucho que te quiero. Deseo verte bien y no llorando.
Eldo: (frío) Kirno, te recomiendo que nunca me traiciones. No me agrada la hipocresía y pienso que es el peor pecado de todos. Me harta ver que todavía alguien crea que una persona hipócrita pueda estar bien. Estoy seguro de que usted no me va a decepcionar, aunque tengo miedo de que así sea. Quiero sentirme bien.
Kirno: (cordial) Eldo, ya te recomiendo que vayas a casa. En realidad, debo contarte que Hurtina no necesita tanta ayuda como antes. Si quieres quedarte, entonces quiero que prometas que te vas a cuidar. No deseo que uno de esos chicos regrese y te manche tirándote un pastel. Es urgente que ahora nos mantengamos juntos en todo momento.
Eldo: (reservado) Kirno, ahora no tengo ganas de hablar. Si no hubiera ocurrido algo malo en mi cumpleaños, posiblemente ahora estaría feliz, pero no lo estoy. Ya no veo a las personas de la misma forma. Espero que usted no me haga daño ni me insulte. No sirve de nada insultar, porque no he hecho nada malo.
Kirno: (interesado) Eldo, ahora me vas a tener que contar acerca de tu plan. Necesito que me digas cómo es Nunto para poder demandarlo pronto. No quiero que te cause malestar o deterioro en tu interior. Siempre puedes contar conmigo para lo que necesites. Te estimo demasiado y cuando acabe la pandemia entonces te voy a dar un abrazo.
Eldo: (reservado) Kirno, te voy a decir que agradezco tus palabras. Me causa una gran tranquilidad que todavía haya personas que me quieren como tú. Mi familia no pudo hacer nada para calmarme, porque siento que no pudieron consolarme. Solo me decían que lo olvidara, pero yo no voy a olvidar ese suceso, porque fue importante en mi vida.
(Ingresa Hurtina Riltela caminando al escenario por el pasillo izquierdo)
Hurtina: (cordial) Kirno, buenas tardes. Me alegra verte por aquí. Mi hija ayer vino con sus amigos y realizó varios destrozos. Encima tengo que arreglar toda la pastelería, porque parece que han quedado manchas de los pasteles que tiraron ayer. Lo debo limpiar pronto, porque un cliente podría venir. No quiero que vean la pastelería sucia.
Kirno: (comprensivo) Te entiendo, Hurtina. Yo también quisiera que esta pastelería se encuentre limpia. Sin embargo, creo que no te va a alcanzar el tiempo para limpiar todo el piso. Esos chicos lo deberían hacer y nosotros no. Si vienen de nuevo, quiero que me los digas para demandarlos por entrar a una tienda y causar destrozos.
Eldo: (reservado) Kirno, usted es una buena persona. No deseo saber nada de Nunto y planeo organizar una salida con mi familia para explorar todos los rincones de San Miguel. A veces pienso que nada malo hubiera pasado en caso de que hubiera estado acompañado. Estoy un poco enojado con Nunto y me está empezando a dar hambre.
Hurtina: (cordial) Kirno, estoy comenzando a sentirme mal. Me siento cada vez más decepcionada de la hija que tengo. Por su culpa Eldo tiene una actitud distinta que deseo sea cambiada. Eldo, no mereces tener un trauma por el día de ayer y pienso que podrías darte un descanso del trabajo. Puede ser una buena idea u opción para que la pruebes.
Kirno: (comprensivo) Hurtina, parece que ahora Eldo no quiere hablar con nadie. Te recomiendo que vayas a otro lugar. Lo que pasa es que vincula a tu hija, porque participó el día de ayer en esa broma. Te recomiendo que no hables con él, ya que lo voy a hacer yo cuando él quiera hablar de una forma civilizada sin discutir o pelear.
(Eldo Lunte Banto se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Kirno Ripto se retira caminando del escenario por el pasillo derecho)
(Hurtina Riltela se retira caminando del escenario por el pasillo izquierdo)
(Cierre del telón) (Fin de la escena XXIV)