«Me enamore de un prostituto...

By JordanRgz

97.8K 4.9K 1.3K

Nuevos personajes, nueva trama y sobre todo nuevos líos. Esta vez podrán perduran ante todos los obstáculos q... More

Sinopsis
Dedicatoria
Prólogo
Capítulo Piloto
Capítulo 1
Capítulo 2
Capítulo 3
Capítulo 4
Capítulo 5
Capítulo 6
Capítulo 7
Capítulo 8
Capítulo 9
Capítulo 10
Capítulo 11
Capítulo 12
Capítulo 13
Capítulo 15
Capítulo 17
Capítulo 18
Capítulo 19
Capítulo 20
Capítulo 21
Capítulo 22
Capítulo 23
Capítulo 24
Capítulo 25
Capítulo 26
Capítulo 27
Capítulo 28
Capítulo 29
Capítulo 30
Capítulo 31
Capítulo 32
Capítulo 33
Capítulo 34
Capítulo 35
Capítulo 36
Capítulo 37
Epílogo
Agradecimientos
Dedicatoria
Sobre el Autor

Capítulo 14

2.5K 113 31
By JordanRgz

Dedicatoria Especial:

Para mi nuevo amigo, fan y admirador de la novela

Con mucho cariño para. Jesús Esparza.

Marcus Charpentier

Estaba cansado, claramente el viaje por el cumpleaños de Jacob nos había sacado todas las energías, apenas llevábamos como 2 días de haber llegado de Florida y no quería ir a trabajar.

Tome el teléfono celular en mi mano para llamarle a mi jefe y reportarme como enfermo para poder quedarme en cama un día más y cobrar fuerzas del todo.

Se escuchaba la llamada entrante, después de que mi jefe contestara y escuchara su voz grabe detrás de la bocina, con algo de tartamudeo y la voz más clara por fin hable diciendo.

―Emm, Hola... Jefe, soy yo Marcus el Ayudante de chef que le ayuda en el restaurante.

El hombre rio del otro lado del teléfono― Lo se Marcus sé quién eres, tampoco eres nuevo, si dime que pasa.

Abrí la boca y tome aire para soltarlo, me daba algo de pena tener que faltar y darle excusas de que estaba enfermo, pero no me sentía de ánimos para ir hoy.

―Oye como te fue de vacaciones, digo el fin de semana de descanso que fuiste a Orlando, Florida tú y tu pareja. Disfrutaron todo — rio un instante.

―Pues... — no sabía que decir―Pues todo bien, gracias por el interés y preguntar Jefe, bueno le hablaba porque. quería decirle si puedo faltar hoy al trabajo, creo que no me siento bien y me pregunto si podía darme el día libre hoy le prometo que mañana cuando valla me pondré al tanto sobre todo lo nuevo que allá.

―Ey, Marcus no supiste, no te llego el correo que te mande a enviar ¿con tu compañero de cocina? El rubio alto alemán le dije que te hablara o se comunicara contigo para que te dijera que no vinieras en toda la semana.

Estaba algo confundido sobre lo que me estaba diciendo, como si me pusiera en blanco.

―A qué se refiere Señor, me puede decir.

El hombre aclaro su voz y de una forma entendible resumió todo lo que me tenía que decir.

―El restaurante esta en descanso, están fumigándolo porque.... Encontraron intrusos y tuvimos que cerrarlo unos días en lo que limpian el establecimiento.

―oh― aun no entendía — Se refiere a que había ¿ratas?

―No, no, niño no lo digas así como así, suena tan feo. Se puede decir que si pero no quiero que mi restaurant tome mala fama por eso. Es por la ubicación y solo fue una y era afuera en los contenedores cerca de los de basura.

Continuo― en fin tomate la semana de descanso el próximo lunes te veo aquí con muchas ganas de querer trabajar, no me faltes vale.

―Oo, okay gracias jefe, hasta el lunes.

Colgué el teléfono un poco emocionado, realmente fue como una señal que hacia dios para evitar que fuera al trabajo ― gracias ―susurre para mí mismo mirando al techo agradeciendo al señor.

Me levante de la cama, ahora si tenía ganas de salir creo que no quería pasar toda la semana en la casa aburrido ya que no había nada que hacer.

Solamente ocupaba un día para recuperarme por el largo viaje de ida y vuelta, pero tantos días extras.

Fui a la cocina y tome una taza blanca con un gato y un mostacho en su rostro y la llene de agua caliente y le eche dos cucharadas de café negro, lo revolví y golpee la cuchara en la esquina de la taza, tome dos sobres de azúcar y uno de leche y los disolví en el mismo para endulzarlo.

Tome el control remoto y encendí la televisión, poniéndose el canal de deportes, hice un zapping cambiando hasta el noticiero donde daban el clima de hoy.

Las voces de los conductores hablaban y conversaban. Daban las noticias y después pusieron el clima y pusieron los grados que hacía en Tallahassee, estábamos a 32 grados. Creo que haría mucha calor realmente estaba antójale para ir a la playa pero Jacob no estaba aquí, había ido con su madre mi suegra y tenía días de no verla así que le daría su espacio con ella para ponerse al tanto sobre sus cosas, desde hace tiempo que le había propuesto matrimonio y creo que aún no le había dicho sobre nuestro compromiso.

Me senté en la silla alta que estaba frente a la barra y me recargue en la larga barra fría tocando mi espalda con los pies colgando de la gran silla.

A pesar de que estaba fresco la casa por la refrigeración y eso que andaba en bóxers a cuadros cortos, empezaba a sentir algo de calor y suponía que me metería a ducharme para calmar el calor de mi cuerpo.

En ese entonces tocaron el timbre y me levante hacia la puerta y sin fijarme por la mirilla simplemente abrí la puerta y me tomo por sorpresa ver a mi ex novio con unos Shorts cortos de mezclilla y una camisa blanca de tirantes playera con una gorra aleves, se veía muy bien ya que siempre andaba con ropa cara, fina y de marca.

Pues me sorprendía verle tan simple como un chico común... Como un chico ordinario.

No quise sonar mal educado pero conteste ― ¿Qué haces aquí? Se te ofrece algo, dime.

Hizo una mueca y después se esfumo transformándola en una sonrisa cálida― Vine a visitarte y...

Miro por detrás de mi hombro para confirmar que estaba solo y volteaba a los lados.

―Él no está aquí, descuida que buscas―conteste con mi café soplándole para enfriarlo un poco.

―Puedo entrar- me contesto algo tímido, me sorprendió.

―Pues ya que. Entra — abrí mas la puerta para dejarle entrar, realmente debería sentirme incomodo, por estar en bóxers frente a un hombre que no era mi novio pero él no era un extraño era mi ex novio y ya me había visto desnudo y me había hecho el amor cuando éramos jóvenes, pareja, cuando éramos estúpidos.

Pero por respeto y por no querer poner celoso a mi novio y sentirme raro tome mi bata de baño que estaba sobre el sofá y me la puse, cerrándola tapando mi cuerpo.

Me di cuenta que en las manos traía unas bolsas de Home Depot ―Que traes ahí — le pregunte con intriga.

Mi interrogatorio parecía despertarle interés que yo quisiera saber que planeaba ― traigo pintura y brochas para pintar el departamento con un color más bonito ya que el ultimo inquilino tenía horrible gusto y estilo de interiores.

―Oh — tome de mi café.

―De hecho he venido para pedirte un favor.

Sabía hacia donde iba esto, creo que tenía una ligera idea.

―Me podrías ayudar en mi departamento a mover los muebles y a pintar, claro... te voy a pagar si te sientes mejor.

Mordí mi labio, pues estaba aburrido y no tenía nada que hacer, me vendría bien algo de efectivo a cambio de labores domésticas ya que andaba gastado en el viaje había costado un ojo de la cara.

Pues no veía el inconveniente o la parte mala en que le ayudara solamente era ayuda no es que le fuera infiel con mi ex, solamente íbamos a pintar su casa.

No vi necesario tener que mandarle mensaje a Jacob explicándole que me pagarían por pintar una casa.

―Bien, ok acepto pero tengo que ir a ponerme ropa vieja y sucia por si me ensucio.

Deje la taza vacía sobre la barra de la mesa en la cocina y le mire―No tardare, ya vengo.

El tomo asiento sentándose en el sillón de en medio mirando frente a la Televisión.

Me metí a mi habitación y rebusque entre mi ropa sucia y vieja, saque del canasto la ropa sucia que no estaba lavada.

Tome una playera negra de tirantes y la olfatee, olía algo mal a sudor mío. Bueno era hombre, olía a hombre así de simple.

No tenía caso usar una playera limpia que oliera a flores o detergente si la terminaría ensuciando y transpirando, así que no me importo y me la puse.

Rebusque más entre la canasta muy grande y onda, encontré un pantalón negro de mezclilla con hoyos rotos por todos lados skinny.

Me parecía bien para pintar así no me ensuciaba el cuerpo, me senté en la orilla de la cama, me puse el pantalón y me lo abroche.

Tome un tenis Nike Rojos color cereza, me puse las calcetas primero y después los tenis para atar las agujetas y hacer nudo.

Me levante, busque mi celular entre las sábanas blancas y frescas que olían al cuerpo de Jacob, respire hondo y suspire. Me gustaba mucho el olor que tenían porque era mi fragancia favorita desde hace tiempo su piel al natural su dulce sabor y olor.

Encontré el celular y lo metí en el bolsillo y Salí de la habitación hasta la sala y encontrar de nuevo al francés de mi ex.

―Listo, vamos a tu departamento.

Se levantó y tomo las bolsas de home depot con la pintura, como siempre había sido un caballero, le ayude con las bolsas aunque sabía que él no necesitaba ayuda porque era más grande, musculoso que yo y era hombre no era una damisela en apuros, no lo hacía por querer quedar bien con el por qué no necesitaba yo ya tenía novio.

Su departamento era justo el que estaba frente al mío, aun no me creía que entre toda la ciudad fuera a buscarse uno en el mismo edificio donde vivíamos mi novio y yo, claro lo hacía por molestar y estar más junto a nosotros y molestar.

El introdujo la llave en la cerradura y le dio vuelta para quitar el seguro y abrirla.

Entre antes que él y puse las bolsas que contenían las latas de pintura selladas de home depot en el suelo y voltee a ver.

Realmente estaba muy bien el departamento estaba muy cuidado y bien pintado, sobre todo con los muebles que había rentado o comprado Patrick, incluso tenía muy buen gusto y estilo no veía ningún inconveniente en lo que ya tenía le había dado un gran estilo no necesitaba más.

Creo que esto lo estaba haciendo a propósito―Oye la casa está linda, muy bonita y la pintura es linda por que no te gusta.

―No me gusta a mí, no es mi estilo quiero pintarla de nuevo y no he desempacado algunas cosas siguen en cajas para no ensuciarlos.

Infle mis mejillas tomando aire y respirando lento ―Pues okay es tu departamento tu mandas.

―Si yo mando ― contesto y mordió sus labios riéndose, no sé qué le habría venido a su mente sucia y retorcida pues no quería seguir su juego yo venía a pintar y a cobrar no a dar mi opinión.

―Quieres que mueva los muebles de la sala separándolos de las paredes y los ponemos en el centro así no mancharemos de pintura o gotas de salpicadura la tela.

―Bien.

Me acomode detrás de un sillón largo y el igual y de la parte de abajo lo arrastramos y después lo levantamos con nuestra fuerza y lo pusimos hasta donde estaba la cocina repagado casi en la mesa del comedor y los otros dos más pequeños los arrastramos hasta donde estaba el más grande, despejando el área de la sala y tener más espacio libre y pintar las paredes, así podríamos movernos más fácil.

Voltee a verlo y el empezaba a abrir una lata de pintura con sus fuertes manos grandes y largos dedos.

― ¿Te ayudo?- Le mire con una sonrisa por ser amable.

―claro no puedo abrirla, por favor — tome la lata y le di vuelta a la tapa abriéndola y dejando la parte de la tapa al revés boca arriba así no mancharía el suelo del piso.

―Wow eres tan fuerte, como haz crecido ahora tienes más fuerza que yo pequeñito.

―No soy pequeñito, soy un hombre adulto ya y lo sabes.

―Si pero es que recordar hace 3 años como eras tenías 22 y eras tan chico y débil y ahora no dependes de un hombre que te proteja y te haga sentir cuidado.

―Lose, pero sirve para hacer sentir cuidados y protegidos a otros, a "mi novio" — le añadí para aclararle, no pensaba caer en sus idioteces de nuevo.

Abrimos las brochas desempacándolas de su envoltorio y le quitamos algunas cerdas sueltas que tenían y se caían.

―De qué color es este dime, no se dé estilo de interiores.

―Tontito, este es color perla es como beige pero más claro pero no tanto como el blanco esta entre esos dos.

―Oh bien ya estoy aprendiendo algo, al menos se un nombre de un color.

Sonreímos los dos al mismo tiempo como tontos estúpidos ― y de qué color es cada pared así no, nos equivocamos.

Patrick destapo la otra lata, por lo que vi no se le dificulto en abrir esa lata y la primera si, lo que note es que quería lanzarme piropos sobre mi musculatura o cuerpo para hacerme sentir incomodo desde el inicio.

―Este es color Marfil es como beige pero en otro tono.

Me empezó a señalar que pared quería de cada tono y yo observaba bien para no confundirme ―Okay muy claro, entiendo.

―Derecha color perla e izquierda color marfil, solo son dos paredes pero están largas y altas.

Remoje la brocha grande dentro de la lata de pintura perla para empezar con la pared derecha, mientras el pintaría la contraria con el color marfil.

Daba fuertes brochazos de arriba hasta abajo, muy suaves en línea recta sin jugar con marcas y direcciones de la brocha por todos lados como Patrick lo hacía , de la misma forma cuando un niño te ayuda a pintar y hace dibujos y garabatos por todos lados.

Seguía pintando y concentrado en lo que hacía para terminar pronto y marcharme.

Después de media hora voltee para ver qué tanta tenia avanzado Patrick, me sorprendió lo que veía pues había dibujado una persona desnuda con músculos grandes y marcados y un pene como de 40 cm súper ancho y gordo con venas en toda su base y bastante vello púbico con una flecha que decía mi nombre "Marcus". El volteo, me miro y se rio como loco.

―¡¡¡Que haces!!! — casi le grite molesto por que estaba jugando como niño haciendo sus dibujos obscenos sobre una idea exagerada y errónea sobre mi cuerpo.

―lo siento es que, quería hacerte reír con esto.

―Estás loco, ayúdame o mejor no lo hagas empeoraras la pared con marcas aleatorias hacia todos lados y acabaras la pintura y nunca acabare yo.

―lo siento, perdón- quito su sonrisa cambiándola a una triste mueca y soltó la brocha en el suelo.

―lo siento, no sirvo para esto, tu eres el artista Marcus tu sabes pintar yo no tanto, yo estudie diseño de modas y eso lo mío es el estilo y la moda y esto no lo es.

―Perdóname, lo siento yo, fui un estúpido tu eres el dueño es tu decisión como quieres que quede tu pared, no debí gritarte solamente que pensé que lo tomabas en serio no en juego esto.

―Es enserio.

Levante una ceja ― si se nota.

―Bien, mejor iré a preparar una jarra de limonada fresca con hielos por que hace calor.

―Joder, me parece bien... Oye y tu aire acondicionado no sirve acaso o por qué no lo enciendes así la pintura seca más pronto.

―No sirve lo siento tengo que traer a alguien que lo arregle, no enciende nadita.

Voltee para ver si encontraba algún ventilador pero nada ― y ningún ventilador para que abanique y refresque la habitación, tienes.

―No, lo siento tendré que ir a home depot a comprar uno, creo que lo olvide- se sonrojo y fue a la cocina.

Estaba empezando a sudar, sentía las piernas húmedas y la tela del pantalón de mezclilla negro se me pegaba más al cuerpo, porque eran súper ajustados y la camisa negra de tirantes ya la tenía empapada de sudor.

Decidí sacármela para poder respirar mejor y no sentirme tan acalorado, tome la camisa haciéndola una bola y me seque el sudor del pecho y después la pase por mi abdomen y cuello.

Mientras tanto y Patrick hacia su limonada yo seguiría pintando las paredes así podría dar un gran avance y si acababa hoy podría irme de aquí sin tener que venir mañana.

Estuve pintando como por una hora la pared ya casi acababa, salvo por la parte de arriba, las esquinas no la alcanzaba y tendría que ocupar un banco bajo para subirme y delinear las esquinas.

Ya era bastante raro que no escuchara a Patrick decir alguna idiotez o lloriquear y quejarse de la casa y que no podía hacer nada.

Pues había pasado ya la hora y ni luces de la dichosa limonada, como tenía sed realmente estaba seco.

Levante la camisa del suelo y me seque el sudor del rostro para poder calmarme lo agitado que estaba, tenía manchas y gotas de pintura por todo el pecho parecían pecas de colores, una gota grande sobre mi pezón oscuro y en mi pecho igual.

Me di la vuelta y ahí estaba el, sentado en el sillón que pusimos en la cocina muy cómodo el, tomando limonada fresca viéndome pintar.

Pero qué diablos, dije dentro de mi mente, este idiota enfermo se la paso como 40 minutos en silencio viéndome pintar.

―Y la limonada — le pregunte en un tono enfurecido y ofendido.

―Aquí esta — tomo un vaso con hielo y limonada y me la entrego en la mano, tan feliz como si no pasara nada.

―Porque no me dijiste que ya la habías echo, me moría de sed y tu aquí sentado viéndome joderme y trabajar como burro.

―Lo siento, te veías muy feliz pintando y metido en el trabajo que no quería desconcentrarte.

Tome el vaso y me lo bebí todo de un solo trago, tenía bastante sed―Quiero más-le conteste con ansias.

Él me sirvió otro vaso lleno de limonada con hielo y se levantó cerca mío y tomo una toalla de papel y me empezó a secar el sudor de la frente y las mejillas bajando su mano hasta mi barba y cuello.

Yo tomaba del vaso con bastante sed y algo nervioso por como hacia eso.

―Que haces... — le pregunte con tono de indiferencia.

―Te vez tan cansado. Solo quería limpiar tu sudor.

Deje el vaso en la mesa de la cocina y volví a tomar la brocha―Estoy bien gracias, me aguanto como los hombres, cuando necesite tu ayuda tú estabas cómodo tirado descansando.

―Oh lo siento, dime en que te puedo ayudar ahora-contesto con su tono seductor, lo cual me ponía los pelos de punta.

―Un banco o una escalera pequeña donde poder subirme para pintar la parte superior y delinear las equinas.

―okay, deja lo busco no tardo.

Pues después de unos minutos traía una escalera chaparra y pequeña donde la extendió y la puso frente a la pared― listo aquí está tu escalerita.

―gracias — afirme con ímpetu.

Saque mi celular antes y revise el reloj, eran las 3:39p.m, creo que Jacob no había llegado a casa si no ya me hubiera hablado diciéndome donde estaba, creo que estaría en casa de su madre aun.

Pues si hubiera querido que fuera por él ya me hubiera hablado, o a menos que su madre lo trajera a casa.

Apague la pantalla del celular y lo deje en el suelo para no ensuciarlo más de pintura y para que no se me saliera del bolsillo que estaba medio roto.

Pues estuve pintando lentamente cada parte y cada esquina con cuidadosa y cautelosa manera de trabajar sin manchar el techo o la pared siguiente.

Termine después de los 10 minutos en esa larga pared de la sala, cuando baje deje la brocha en el suelo y fui por otro vaso de refrescante limonada.

Bebí una y otra vez hasta llenarme, tenía ganas de orinar tendría que ir al baño a descargar tanta limonada.

Creo que viaja rápido en mí, mire a Patrick que estaba sentado viéndome con una brocha en sus manos jugando con ella.

―Puedo ir a tu baño — interrogue con vergüenza.

―Si claro, esta al final del corredor es la última puerta.

―gracias ― cortamente añadí y fui por el pasillo mirando todo tipo de cuadros abstractos colgados en sus paredes, y un pequeño buro con cuadros de él y míos juntos cuando éramos jóvenes, no sé por qué aun guardaba esto, me daba vergüenza verme hace años cuando era un niño idiota e indefenso que ocupaba de el mismo, tendría la edad actual de Jacob en la foto mía y de él, me imagino como se ha de sentir a veces Jacob conmigo que lo sobreprotejo y no lo dejo crecer porque siento que es frágil y necesita extra cuidado.

Pues me sentía así con Patrick, tome el marco de la foto analizando bien la foto, y lo deje de nuevo en su lugar pero esta vez boca abajo.

Entre al baño, al fin para poder descargar tanta orina. Al ver el interior del baño me quede sorprendido, estaba tan limpio, ordenado y blanco.

Muy bien cuidado hasta el jodido baño tenía un bonito aspecto como si estuvieras en esos hoteles de 5 estrellas con su regadera de cascada y su sus puertas corredizas de cristal trasparente de su ducha.

Levante la tapa del inodoro y baje mi cierre sacándome la polla morena y me la jale un poco para despegarme la cabeza de mis testículos y poder orinar derecho.

Pues sentí un alivio cuando esa orina salía de mi cuerpo como si me vaciara todo, sentía que mi vejiga explotaría o me orinaría encima, que mierda tenía esa limonada que me hizo sentirme tan lleno.

Bueno no importa eso ahora, lo importante es acabar e irme de su casa.

Me guarde la polla de nuevo y me subí el cierre del pantalón acomodándome el bóxer y le baje la llave y la tapa del inodoro saliendo del baño cerré su puerta y volví por el pasillo hasta la sala-cocina y me encontré a Patrick mensajeando.

―Que haces — le pregunte.

Él se asustó obviamente como si supiera que hacia algo mal porque rápidamente soltó un grito y guardo el celular―nada.

Fui hasta la pared donde estaba pintando y trate de buscar mi celular, pero no lo encontraba, me palme los pantalones para ver si lo tenía ahí, pero no.

Recuerdo que lo había sacado para revisar la hora y no lo habría metido de nuevo, pero no estaba.

Busque en el suelo para observar si lo deje tirado o lo cambie de lugar, no recuerdo. ―Joder...

Joder donde estaba el puto teléfono celular, mierda. Donde.

En eso me vino a la mente Patrick asustado por que lo atrape mensajeando y me recordó el habría tomado mi celular.

Camine hasta él y cruce mis brazos molesto―Dámelo.

El me miro indignado como si no supiera de qué hablaba ―De que hablas Marquée.

Odiaba ese estúpido apodo francés que él me decía cuando éramos más jóvenes.

―Dame mi celular Patrick sé que lo tienes tú, no te hagas el idiota. Porque te asustaste cuando Salí el baño, es obvio que era mío y algo malo estabas haciendo dámelo.

―No! —respingo él.

―Como que no, es mío dámelo.

―No, no lo tengo.

Voltee a todos lados, y visualice el celular de Patrick sobre la mesa de la cocina que era un iPhone 6 plusplata y el que el traía en sus manos era negro y estaba muy grande más que su iPhone porque era un Samsung Galaxy note 11.

―Te vi, dámelo.

―No lo tengo- escondió sus manos detrás de su espalda y soltó una risa.

―Joder! Si serás un inmaduro.

Me lance sobre él, tratando de sacarle las manos de sus espalda para que me lo diera, estábamos forcejeando tomándolo de las manos y agarrándole de los hombros para meter mis manos detrás de su espalda.

El gimió ― oh basta Marcus esa no es mi espalda — se rio burlándose.

―Ya dámelo, que hacías con el- Patrick abrió sus piernas y las enredo en mi cintura acorralándome como un koala enredado sobre su madre.

―suéltame, déjame ah mierda me aprietas, suéltame, deja mi cintura, me aprietas.

Le lance golpes en su pecho firme y duro que parecía ser de roca y no dolerle.

Maldición odiaba esto, me hacía sentir inferior, un niño, tan inmaduro peleando por esto, tan débil como si fuera un pequeño que necesita de alguien mayor que lo cuide, como cuando era menor y más chico que él, y me protegía con su cuerpo.

Me hacía sentir de nuevo tan vulnerable como cuando yo trato a Jacob así de frágil y se molesta por que dice que ya es un hombre grande y no un niño.

Estaba enfurecido de rabia y coraje, Patrick tenía tanta fuerza era un hombre fuerte, si yo me consideraba fuerte comparando mi fuerza con mi pequeño Jacob le ganaba en mucho, pero yo contra Patrick el me ganaba por mucho, yo no era nada de fuere contra él.

Pues era un chico alto, de 1.90 y rubio, bronceado, súper dotado y musculoso como si acudiera a los esteroides, lleno de bolas en los pechos y bíceps.

Joder podría aplastarme si quisiera o asfixiarme. Me enfurecí de rabia que pude meter la mano detrás y revise entre el asiento y los cojines que era donde escondió mi celular, porque ya no lo tenía en sus manos, por esa forma me sujetaba para evitar que buscaba mi celular.

Tome mi celular, al fin y saque la mano debajo de los cojines, pero Patrick me lo arrebato y lo tiramos al suelo.

El me tomo de las muñecas apretándome y cortando la circulación de mi cuerpo que se sentía tan frágil como una ramita de árbol quebrarse cuando presionaba más en mí, obviamente para él era un juego de luchas y competíamos por obtener el celular, pero para mí no era juego, si me estaba lastimando enserio.

Me tomo de la cintura, del cinto y me apretó el trasero con fuerza y me jalo del cuello a la fuerza y me dio un beso en la boca, duramos como 5 segundos besándonos, me dio asco y repulsión, pues el ya no me gustaba y no podía sentir, más bien no sentía eso por él.

Aparte él era mayor que yo, tenía como 28 años y cumpliría 29 en unos meses y ya iba para sus 30 casi y yo tenía 25 y éramos diferentes por edad y forma de pensar que ya nada de un hombre mayor me atraía, solo me atraían los hombres menores y solamente tenía ojos para uno solo y ese era Jacob.

Le mordí el labio a Patrick y él se separó de mi boca, un hilo de saliva se unio de su labio inferior al mío, junte un gargajo de saliva y le escupí en el rostro, eso me hizo sentir como Rose en titanic.

Era un cerdo, un imbécil como podía abusar de mi confianza así usando su fuerza contra la mía, si yo fuera como Jacob actualmente ya me hubiera violado por que no podría defenderme del mismo.

―Estúpido!

Grite y le empuje para que abriera y soltara mi cuerpo de sus piernas enrolladas en mí, lo cual me libero y caí de nalgas al suelo sobre el tapete y tome el celular.

―Eres un asqueroso Marquée como te atreves y esos modales no los tenías en Francia, esta ciudad te ha cambiado como un vil callejero.

Se limpió con una toalla de papel la cara abriendo y pestañeando que no le entrara mi saliva en sus ojos.

Desbloquee la pantalla y revise todo para ver qué era lo último que había entrado Patrick,

Entre a las fotos para ver si no me había borrado algo.

Encontré una foto mía de la retaguardia sin camisa arriba de la escalera con mis jeans negros ajustados, estaba sudado y se me veía los músculos de la espalda.

Si no supiera que era yo, hasta yo mismo me daba, me veía bien, me daba pena tenia buen aspecto.

Me di la vuelta y mire a Patrick molesto―me tomaste una foto, eres un idiota.

―Lo siento es que te veías hermoso quería capturar ese momento y tu cuerpo sucio y sudado.

Entre a mensajes y vi un mensaje nuevo de hace unos 10 minutos de Jacob y decía:

"Wtf, ¿quién eres imbécil? ¡Deja a mi novio!"

Pase el dedo más arriba y mire una foto mía, la misma foto que estaba en la galería que acababa de ver y era enviada a Jacob desde mi celular y con el comentario diciendo: "Mira a tu novio que bien se ve trabajando para mí en casa, tiene un buen culo no crees, yo lo cuido por ti"

Eso había enviado el imbécil.

Quería estrellarle el celular en la cabeza y rompérsela, llame a Jacob y la llamada no era tomada me mandaba a buzón, colgué y volví a marcar e igual me mandaba a buzón.

―Pendejo que haz echo.

Quería llorar, tenía esas ganas y coraje de rabia de querer romperle la cara pero él era fuerte y solo salía dañado o violado no quería enfrentarme cuerpo a cuerpo con él, con sus mañas sucias.

―Le envié una foto a tu novio de tu retaguarda y tu perfil se ve bien tienes buen culo y es la verdad seguro el querría saber que hacías.

―imbécil, no le dije que estaría aquí contigo trabajando.

―Por qué lo ocultas que tiene de malo.

Le interrumpí ― pues nada pero no vale la pena molestar en vano con celos enfermizos donde no hay porque entre tú y yo no hay nada oíste.

―Eso no fueron lo que dijeron tus labios sabes, sé que le gustaron.

Toque mis labios con la yema de mis manos y trate de limpiarme su ADN de mi boca.

―Cerdo! Patrick no cambias, tan viejo y con tus artimañas pensé que habías madurado.

―Oye tu culito esta tan grande y bien formado y en su lugar, no creerás ¿qué me lo debes a mí?

―De que hablas idiota.

―Tu culo esta tan grande e hinchado porque cuando yo te tenia entre mis piernas dándote duro todos los días hizo que creciera y se hinchara, tu culito sigue bien formado gracias al trabajo en la cama que hacíamos a diario.

―¡¡Idiota!! — fue lo único que pude decir, no me venía nada en la mente, me perturbaba pensar y recordar que Patrick era mi amo, mi novio y yo su sumiso su niño su pequeño frágil chico que le entregaba su cuerpo todas las noches haciendo el amor muy enamorado, su estúpida polla no hizo nada, simplemente mi cuerpo creció y se desarrolló, que idiotez en pensar que tengo el culo así gracias a sus embestidas.

―Eres un animal y nunca cambiaras, me largo! Que alguien te ayude a pintar tu maldita casa, no me busques.

―Oh ey ey perdón es una broma todo lo tomas tan agresivo hombre donde quedo mi pequeño marq...

-interrumpí antes que terminara ― no digas Marquée porque te rompo el hocico, odio que me digan así no soy un niño pequeño.

―Pero así te decía tu madre marq... Marcus.

―Si mi madre porque es mi familia, pero tú ya no eres nada mío, aun cuando éramos novios me gustaba. Haz echo que perdiera la confianza que tenía en ti.

Tome mi camisa y mi celular, deje la brocha en el suelo y camine hasta la puerta, pero Patrick me detuvo de la mano jalándome hacia su pecho, y con la brocha que tenía en la mano jugando me la paso por el rostro pintando mi nariz y mis mejillas.

―Te vez tan adorable así como todo un niño chiquito pintado.

Lo aparte de mí y empuje, abrí la puerta para salir de su departamento y estrellar su maldita puerta entrando a mi casa muy molesta,

Fui al baño y deje tirada la camisa sucia y me quite los pantalones,

Tome el celular y le volví a llamar a Jacob pero él no respondía como anteriormente, joder seguro ha de estar molesto enfurecido conmigo y me gritara cuando llegue, quería llorar de impotencia y coraje porque caí en su estúpido engaño, maldito seas Patrick.

Me mire frente al espejo, me veía tan ridículo con la naricita pintada y las chapetas de pintura en mi mejilla.

Talvez se hubiera visto si yo hubiera echo eso con Jacob porque el es tan dulce y lindo, pero cuando él lo hizo conmigo me hizo sentir tan idiota.

Me limpie la cara y tome el cepillo de dientes, le puse pasta dental y me talle los dientes, las encías y la lengua para retirar esa saliva y su ADN de mi boca, nomás de recordar sus labios que sabían a limonada y menta fresca me daba asco, no como la boca de Jacob que siempre sabia a moras, porque comía siempre galletas de ese sabor.

Me acostumbre a su dulzor, que no podría cambiarlo por ninguno más.

Me desnude lentamente sacando el bóxer y abrí a la llave de la regadera para ducharme y librarme del calor y el sudor del cuerpo para poder estar limpio y oler mejor para cuando llegara Jacob y explicarle todo, con una linda cena y decirle que no es lo que él pensaba.

―Creo que estoy en problemas y ni quien me salve de esta.

Continue Reading

You'll Also Like

349K 42.3K 62
Meredith desde que tiene uso de razón, conoce la existencia de Darek Steiner, aunque ha estipulado una regla bien marcada en su vida: NO ACERCARSE A...
372K 15.7K 36
Elena ama leer tanto como ser animadora, su sueño más grande es ser escritora, para ella su vida era perfecta, pero todo eso cambia en su último año...
118K 9.4K 34
"-te prometo que esperare lo que sea necesario para formar una vida contigo, para tener esa familia que ambos queremos, te prometo que haré todo lo q...
3.6K 298 9
Lisa, regresa a Paris para reunirse con el hombre de sus sueños en el ambiente donde fueron felices, pero ve que las cosas han sufrido un profundo ca...