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Con cada sollozo sentía que mi corazón se rompía, verlo con el rostro lleno de lágrimas mientras temblaba descontrolado me llenó de impotencia y ahora en el carro todavía trataba de consolarlo besando sus mejillas sonrojadas y empapadas.
-Je-Jeongguk...-gimoteó aferrándose a mi cuello.
-Ya pasó mi cielo, ya saliste de ahí, eres fuerte, lo lograste.-susurré contra su oído mientras frotaba su espalda, debía de estar incómodo sentado sobre mis muslos, pero no era capaz de moverlo ni un centímetro.
-Q-Quiero ir a casa.-balbuceó para luego sorber por la nariz.
-Llegaremos pronto, lo prometo.-aseguré, Taehyung alejó el rostro de mi hombro para verme, sus ojos estaban rojos e irritados, lo tomé con ambas manos y besé cada parpado, luego dejé otro en su nariz y terminé en sus hinchados labios.
Suspiró cerrando los ojos, frotó su nariz con la mía unos segundos y luego volvió a recostar su cabeza en mi hombro. Por lo menos estaba distraído de la tensión en los asientos de adelante, cuando Namjoon lo vio salir de la estación en un estado inestable, estuvo a punto de meterse y buscar a su padre, pero Taehyung y Jimin le detuvieron y lo convencieron para irnos pronto.
-¿Te qu-quedarás conmigo?-preguntó Taehyung un tanto rasposo.
-Me quedaré a tu lado el tiempo que quieras.-aseguré.
Ya lo había considerado, Taehyung me necesitaba y no planeaba separarme de él ni por un segundo, al menos no hasta que se sintiera mejor.
-Siempre.-murmuró.-Quiero que siempre estés conmigo.
Sonreí ante sus palabras y besé su frente.
-Entonces queremos lo mismo.-murmuré.
Taehyung alzó la mirada, entre tanta tristeza había un atisbo de ilusión brillando en sus ojos, no dijo más recostándose en mí de nuevo, al menos ya no lloraba, mi corazón calmándose un poco con solo verlo descansar.
El resto del camino fue silencioso, lo arrullé hasta que se quedó dormido y aún al llegar a su casa seguía igual, ni siquiera me tomé el atrevimiento de inspeccionarla, simplemente me dirigí hacia el cuarto de Taehyung con ayuda de Jimin y lo acosté con cuidado.
-Sal un momento, tenemos que hablar de lo que pasó.-dijo Jimin, se veía pálido y muy tenso, asentí renuente a dejar solo a Taehyung, pero entre más pronto iba, más pronto regresaba.
Salí tras él hacia la cocina donde Namjoon daba vueltas con impaciencia y enojo, me senté mientras que Jimin iba al refrigerador para sacar tres botellas con agua, dejó una frente a mi y le extendió otra a Namjoon quien lo tomó con demasiada fuerza.
-¿Qué le pudo haber dicho para lastimarlo así de nuevo? Sabía que no era una buena idea dejarlo ir, al menos debí entrar con él.
-Nam cálmate.-dijo Jimin dejando su botella en la mesa para sujetar los brazos de Namjoon.-De nada sirve que te molestes así, no es lo que Tae necesita en estos momentos.
-Lo sé, lo sé y lo entiendo, pero no es fácil controlarme cuando ese idiota se atrevió a lastimarlo de nuevo.-se excusó.
-Por ahora hay que dejar que descanse todo lo que necesita.-dije observando la botella frente a mi.-Teníamos que esperar que algo como esto podría pasar, Tae fue lo suficientemente fuerte y valiente como para entrar ahí él solo sabiendo que se encontraría con su mayor dolor, está bien que haya descargado todo lo que sentía.
Namjoon suspiró, él también debía de estar cansado, la preocupación que ha tenido durante el día por su hermano debía tenerlo agotado mentalmente.
-Por ahora será mejor que regreses con él.-murmuró escuchándose más tranquilo.-Creo que yo también descansaré por lo menos por una hora.
Asentí levantándome, antes de salir vi como Jimin le abrazaba y Namjoon se aferraba con fuerza a su cuerpo, salí con una pequeña sonrisa en mis labios y saqué mi celular para escribirle a mi madre y avisarle que probablemente no regresaría a casa y explicándole el motivo, por suerte no tardó en contestar pidiendo que cualquier cosa le llamara y que le saludara a Tae de su parte.
Entré de nuevo a su cuarto directo a su cama, me retiré los zapatos y me acosté junto a él abrazándolo por la espalda, esperando que al despertar se sintiera tranquilo. Luego de un par de minutos terminé cerrando los ojos y cayendo dormido.
Cuando desperté me sentí envuelto bajo calidez, una que se removía mientras se pegaba más a mi costado. Moví mi brazo en un estado somnoliento y lo pasé sobre el cabello sedoso de mi fuente de calor mientras abría lentamente los ojos. Me sentía extrañamente descansado, como si hubiera dormido más de 10 horas.
Me topé directamente con sus ojos atentos, parecía que llevaba un tiempo despierto, la imagen de Taehyung recién despertado con el cabello hecho un desastre, era algo que quisiera ver el resto de mi vida.
-Jeonggukie.-me llamó en voz baja.
-¿Has descansado?-le pregunté en tono rasposo.
Taehyung asintió, sus mejillas estaban incendiadas mientras sus ojos brillaban, tardé en procesar, nuestros cuerpos estaban pegados y aquel calor en la parte inferior de nuestros cuerpos no era lo único que se sentía por parte de ambos.
Sonrojado y avergonzado, me moví hasta sentarme, bueno era algo normal, despertar con una erección no era algo nuevo aunque se sentía diferente al estar a su lado.
-¿Q-Qué hora es?-pregunté desviando la mirada y carraspeando, observando por la ventana en el lado izquierdo de la habitación, todavía estaba claro, no parecía ser de mañana como para pensar que habíamos dormido tanto.
Taehyung también se sentó colocándose una almohada sobre las piernas, sus ojos me buscaron tímidamente y yo no pude evitar sonreír ante su expresión de cachorro perdido. Acuné su rostro y besé fugazmente sus labios.
-Es normal cariño ¿Quieres tomarte un baño? Te hará sentir mejor.-murmuré suavemente acariciando sus mejillas.
Sus ojos se ensancharon y boqueó un poco.
-¿J-Juntos?-balbuceó asombrado.
Parpadeé repetidas veces sintiendo que se me subían los colores.
-N-No, s-solo tu, y-yo te espero aquí.-respondí dejando ir su rostro con lentitud.
-Oh...-fue lo único que soltó entre avergonzado y decepcionado.
No era como que yo no quisiera pero probablemente sería hombre muerto si Namjoon se daba cuenta.
-Anda bebé y luego hablaremos ¿De acuerdo?
Taehyung asintió y salió de la cama torpemente, le observé llegar a la puerta al fondo del cuarto el cual parecía ser su baño y suspiré levantándome, debía lavarme la cara y bajar de alguna forma mi problema.
Tomé mi celular el cual había dejado en la mesita de noche de Taehyung, lo encendí viendo que eran las cuatro de la tarde, lo dejé donde estaba observando que tenía algunas notificaciones de mensajes, luego los revisaría.
Salí lo más silencioso que pude, la casa estaba en completo silencio, busqué el baño y apenas lo encontré me encerré ahí, me eché agua en la cara y pensé en cosas desagradables hasta que pude controlar mi cuerpo, cinco minutos después estaba regresando al cuarto de Taehyung donde lo esperé hasta que salió media hora después con el cabello húmedo y en bata, correteó hasta mi y se lanzó feliz a mi cuerpo diciendo que ya se sentía mejor.
¿Cuánto tiempo duraríamos estando "bien"? Cuando podía sentir su desnudez bajo la bata. Inhalo y exhalo, de alguna forma debía salir vivo de esta.
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