𝔼𝕣𝕠π•₯π•šπ•” ℙ𝕝𝕒𝕔𝕖

By Coffee_park

65.8K 2.6K 434

[π’½π’Ύπ“ˆπ“‰β„΄π“‡π’Ύπ’Άπ“ˆ 𝓁ℯ𝓂ℴ𝓃 𝓅𝒢𝓇𝒢 β„Šβ„―π“ƒπ“‰β„― 𝒸ℴ𝓃 π’Άπ’·π“Šπ“‡π“‡π’Ύπ“‚π’Ύβ„―π“ƒπ“‰β„΄] 𝔼𝕣𝕠π•₯π•šπ•” ℙ𝕝𝕒𝕔𝕖 β€’ Estas so... More

Ζ¬ΟƒΧ ΞΉ FΟ…sΠ½ΞΉgυяσ
Sαтσяυ GΟƒΧ Οƒ
Megumi Fushiguro
Toge Inumaki
Yuji Itadori
ΠŸΞ±ΟƒyΞ± ZΡ”Ξ·ΞΉΞ·
Γyσмєη Sυкυηα
KΡ”Ξ·Ρ‚Οƒ Пαηαмι
Ψυтα ΞΈΠΊΠΊΟƒΡ‚sΟ…
Suguro Geto (2)
Roronoa Zoro

SΟ…gυяσ GΡ”Ρ‚Οƒ

4.3K 182 32
By Coffee_park

Este short está relacionado levemente con mitología griega.

Modifique varias cosas en realidad.

Iba feliz con caja en mano y una sonrisa deslumbrante en el rostro. La calidez de la caja que sostenía le hizo dar apenas pequeños saltos de alegría para no despertar al pequeño animalito que tenía dentro.

Verán, para una bruja, un acompañante es de suma importancia para poder graduarse de la academia de magia, ahora a tan solo algunos días de ponerse el sombrero de forma oficial y servir a la milicia del reino como hechicera, tener un acompañante era el paso final para sentirse completa.

En un inicio todo había sido un desastre, no sabía exactamente qué tipo de animal querría que le acompañara, pues sus compañeras ya habían escogido la gran mayoría de compañeros, ratones, gatos, perros, mariposas, incluso escarabajos, entre aquellas era mal visto que otra tuviese un mismo acompañante animal, así el animal variará de color. Le había costado mucho pensar en algún acompañante, pero después de una sería de eventos que ocurrieron en una pequeña excursión al bosque, había encontrado al animal que le acompañaria en su viaje; una serpiente.

No le había tomado mucho llegar hasta el bosque, hacer algún que otro símbolo, decir algunas palabras y luego derramar un poco de agua y miel en el centro del círculo, facil y rápido, aquel libro había sido claro y apreciaba haberlo encontrado. Cuando la runa se vio cubierta de una nube de humo se olor agridulce, similar al limón, sintió tres pinchazos en la muñeca y cuando el humo se disipo, tenía a una serpiente enredada en su brazo mientras dejaba una mordida pequeña pero dolorosa, con su lengua se encargó de lamer la sangre que caía.

Había sido extraño, no pensó que los animales necesitaran de su sangre para finalizar aquel contrato. No le dio muchas vueltas y después de que la serpiente cayera dormida, la puso en una caja con agujeros y la llevo hasta su habitación.

Después de hacerse un vendaje improvisado y sacar a la serpiente cuidadosamente de la caja y dejarla en un lugar apropiado, se dispuso a darse una ducha y vestirse de una forma sencilla, estaba agotada, la mayoría de su energía se había ido en la invocación y la mordida sorpresiva le había dejado algo impactada.

Termino de hacerse algunos retoques, lo siguiente que debía hacer era investigar un poco más sobre el trato, pues ella no había escuchado antes que la invocación terminará con el animal bebiendo sangre, mucho menos había escuchado sobre una naturalidad violenta ante el invocador. Acomodo su ropa y salió, tampoco es que tuviera problemas si aquel animal bebía de su sangre.

—¿Eh? —Cuando vio la caja de cristal vacía, con la tapa medio abierta, se alarmó un poco ¿Acaso ya había despertado? Camino más cerca de su cama, notando como un cuerpo se removia entre las sábanas. -Qué demonios...

Era un hombre tendido en su cama, y no cualquier hombre, era uno tan hermoso como los mismos rayos del sol. Su cuerpo desnudo bien marcado, estaba recostado en su cama, con la sábana de lino rojo entre sus piernas y abrazada por su brazo derecho. Dejaba al descubierto parte de su pecho, subiendo parsimonioso, con sus cabellos negros regados por la cama, como cascadas oscuras y brillantes que podrían deslizarse por sus dedos con facilidad. Su expresión tranquila, como si duermiera en un lecho de flores y algodón, y sus labios rosados apenas un poco abiertos. Sus pestañas largas y negras como dos abanicos y el aroma frutal que daba. Recordaba bien esa imagen ¿Como había podido?

Salió rápidamente de la habitación, con la cara entre tonos rojos y pálidos. Tenía el libro firmemente sostenido contra su pecho, pero su corazón palpitaba como loco.

Al entrar a la biblioteca, lo primero que vio fue a Nobara, una experimentada bruja que se graduaria junto con ella. Nobara le sonrió apenas la vio y dirigió sus ojos al libro de tapa oscura que apretaba como si su vida dependiera de ello.

—T/N no sabía que te interesarán ese tipo de libros. —Nobara se acercó dejando el pequeño libro que leía en una de las mesas. Afortunadamente no había nadie más que ellas, pues en su día libre realmente no a muchas les gustaba estar metida en la biblioteca.

—¿Tipo de libros? —ladeo la cabeza levemente, con la cara tan blanca como un papel, se pellizco la mejilla para que al menos cojiera el color de la marca de sus dedos.

—Si, hace rato le escuché a un profesor que era un libro de invocación divina. Aunque era inútil porque los dioses no parecen muy interesados en hacer contratos con humanos. —Extendió sus manos para tomar el libro, el cual T/N le pasó con cierto temblor en los brazos. —Mira. —Abrio una página del libro. —De estos libros hay muchos y de todo tipo, por ejemplo este es uno de pertenencia. El humano entrega algo sé si mismo a cambio del favor de un Dios, ya sea protección, poder, fuerza, etc. Aunque para serte sincera. —Miro las hojas con una sonrisa juguetona y algo sarcástica. —Si esto fuese real, los dioses seguro pedirían un intercambio sexual. Son símbolos del sexo sea cual sea su santo.

—¿Se-sexo? —Nobara le pasó el libro y ella ojeo de nuevo las páginas.

—Es de lo poco que disfrutan en este mundo, si pudiese hacer un trato con alguno quisiera que fuese el Dios Adonis o Hermes. —Su voz sonó como si se derritiera. —Son los únicos que realmente valen la pena.

—Pero esto es casi imposible ¿Verdad? —Habia apenas un brillo de esperanza en ella y se esfumó apenas Nobara sonrió con algo de maldad.

—Si alguien hubiese logrado hacerlo, estoy segura de que habría muerto de placer. -
—Apreto los labios y miro al suelo. —Tengo algunas otras cosas que hacer, Maki insiste en prácticar magia de materialización de armas. Entonces, te dejo con tus fantasías. —Le regalo un beso en la mejilla y se marchó con una pila de libros a la salida.

En el silencio de la biblioteca, camino lentamente hasta la mesa y puso su mano sobre ella, intento sostenerse pero callo sentada al suelo, cubriendo su boca de la impresión. Probablemente estaba roja hasta las orejas y asustada como ningún otro.

No era realmente común que un dios se presentará en frente de un humano, es más, jamás pensó que se presenciará ante una bruja. Para muchos creyentes, las brujas eran parte de herejes, humanos ambiciosos de magia, a pesar de que era tan importante.

Intento calmarse y se levantó de forma pesada, miro de nuevo el libro y lo abrió justo en donde estaba el nombre de Adonis. Sus manos temblaron, había sido culpa de su impaciencia, tampoco es que no se sintiera orgullosa de su capacidad para invocar a un Dios, pero no había deseado que fuese de esa manera.

¿Sería irrespetuosa al rechazarlo?

Busco alguna forma de anular el contrato y sintió como el alma se le iba a los pies.
Algún tipo de último favor para no ser odiada por Adonis, a esas alturas y con todo tipo de situaciones pasando por su mente, probablemente esa era la más fácil de todas.

[ 💦 ]

Abrió lentamente la puerta con los ojos bien cerrados, y se adentro tan lentamente cerrando de nuevo sin querer voltearse. Sentía la respiración pesada pero debía ser valiente. Había sido su culpa por apresurarse y hacer aquel hechizo tan a la ligera, por no haber leído que era lo que tenía en las manos.

—Pareces como si entraras a la cueva de la gorgona. —Una voz profunda, tan tranquila. Sintió una oleada de sentimientos apenas la escucho. Como una melodía que le acariciaba cada centímetro de su cuerpo. —Mirame, humana, fuiste tú quien me llamo.

Se dio la vuelta, tenía las mejillas rojas y la mirada en el suelo. Los puños bien apretados y el aire en el pecho, sin dejarlo salir, moriría allí mismo. Levantó la vista con cuidado. Estaba sentado con la mano derecha apoyada en la cama y la izquierda jugando con el borde de la sábana, los rayos del sol, le bañaban virtuosos. Sus ojos eran oscuros, pero brillaban como dos hermosas estrellas.

—Yo...—Trago saliva y apretó con más fuerza. Se agachó en el suelo y se sentó de forma respetuosa, puso las manos en el suelo y dejó el libro frente a ella. —Debo pedirle mis más sinceras disculpas, realmente estoy muy arrepentida.

—¿Por qué? —Se movió para apreciarla con mayor facilidad.

—Yo he sido una persona descuidada. Soy una bruja, actualmente estudio para ser parte de la milicia del reino. Debido a condiciones en el proceso de elección y graduación, yo necesitaba un compañero, alguien que me ayudara como fuerza para lograr mi objetivo. —Corrio un poco más el libro hacia el. —Lamentablemente mi descuido ha hecho que escoja un libro incorrecto, no leí mucho al respecto, la emoción del momento no me lo permitió. —Dejo salir el aire que mantenía retenido y volvió a mirarlo directo a los ojos. Le miraba atentamente, escuchando cada pequeña palabra. —He terminado por llamarle usted, mi señor, le estoy realmente arrepentida por mis descuidadas acciones y llamarle aquí cuando no tengo mucho que ofrecerle. Si decide castigarme por mi insolencia, lo aceptaré sin rechistar. —Pego la frente al suelo y junto sus manos.

—¿Puedes dejarme ver el libro? —Tomo rápidamente el libro y lo extendió hacia el, quién ojeo con despreocupación las páginas. —Tampoco es como si fuera realmente claro. —Se levantó, la sábana se deslizó y termino en sus pies, aún con el libro en la mano, lo levantó levemente y pensó sinceramente que estaba en frente de una estatua.

Quería tocar, rozar con sus dedos su piel y hundirse en el. Su desnudes no era más que un regalo divido para sus ojos. No quería dar la fama repugnante de que una bruja lasciva, pero en esos momentos se sintió realmente atraída por un calor enbriagante que se concentró en su entre pierna.

—¿Mi señor? —Le miró con misticismo y se agachó a su altura.

—Supongo que lo que deseas es que cancele el contrato ¿No? —Asintio levemente y el sonrió ante ello. Con gentileza. —Esta bien, haremos esto rápido.

—¿Eh? —Se levantó y puso sus manos en su cintura para levantarla y recostarla en la cama.

—Tengo ahora yo un trato para ti. Si lo que haré te gusta, seguiremos el contrato, si por el contrario no te gusta, lo romperemos y yo de hecho te daré personalmente uno de mis guardianes para que sea tu compañero. —Su voz fue gentil en todo momento, mientras la acomodaba en la cama. Se acercó peligrosamente a su oreja y susurro con una voz gutural. —Y si descubro que me mientes en alguna de las respuestas, te lo haré hasta que me digas la correcta.

—Si, mi señor. —Lo había dicho casi automáticamente, aunque tampoco es como si pudiese negarse y tampoco es como si no quisiera. —¿Qué es lo que quiere exactamente de mi?

Geto pensó un poco su respuesta y luego llevo su mano hasta su entre pierna.

—Quiero un orgasmo húmedo de ti.

La forma de cancelar el contrato era dándole algo a aquel Dios, lo que sea que quisiera para que se marchara, por supuesto por la cancelación no habían recompensar para el invocador, aunque le traía una enigmática buena suerte para conseguir sus objetivos. El dios Adonis quería un orgasmo suyo, nunca había experimentado uno y esa sería su primer vez.

—Si es por mi señor, estaré de acuerdo. —Geto sonrió levemente y empezó a desvestirla con cuidado. Poco a poco la ropa iba sobrando hasta que la muchacha queso en su ropa interior.

—¿Es ésta tu primera vez? —Pregunto al ver las bragas negras de encaje.

—Si señor. —Dijo casi en un susurro, tímida por su desnudes.

Geto como los extremos de la ropa interior y bajo de ellos con cuidado. Los paso los sus piernas y aprovecho para tocarlas con los nudillos de sus dedos. Las cálidas caricias iban hacia ella como un torrente. Sus mejillas estaban rojas, y aunque estaba tentada a mirar, prefirió mantener los ojos fijos en el techo.

—Sere cuidadoso, no te preocupes. —Termino de quitar la prenda y la tiro en algún lugar de la habitación. —Por lo general, mantener este tipo de encuentro con humanos, es algo más complicado que con ninfas o deidades. —Puso su dedo medio justo en su clítoris, causándole un respingo de sorpresa. Geto empezó a mover su dedo en pequeños círculos. —Aunque es más divertido.

Poco a poco empezaba a mojarse ante el toque tranquilo de geto. No dejaba desatendida su zona, con su mano izquierda empezaba a dar caricias suaves en su abdomen, con sus nudillos. Le hacía estremecer. Se acercó a ella mientras sus dedos seguían acariciando su intimidad, empezando a mojarse por los fluidos de la mujer. Empezó a regalarle besos en las mejillas, bajo por su cuello rozando sus labios, dio un beso en la mitad de sus clavículas, bajaba lentamente. Pasó su mano izquierda por debajo de su espalda, y con algo de fuerza, hizo que arqueara su espalda y beso su ombligo. Sus ojos le miraban gatunos, como si se estuviera divirtiendo. T/N dejaba que suspiros y gemidos salieras de sus labios.
Bajo sus labios hasta su intimidad y dio un beso sonoro causando una pequeña vibración, sorprendió a la chica que no se retuvo a sacar un sonido de sorpresa y puso su mano en su cabeza. Estaba sostenida por sus codos y le miraba sonrojada, entre lasciva y algo confusa.

—Tus expresiones, son lindas. —Sonrio enternecido.

Justo cuando pretendía decir algo, la calidez de su lengua tocó su intimidad. Empezando a moverse de forma lenta contra su clítoris, separando sus piernas por lo alto para tener más comodidad. Se dejó caer en la cama, apretando las sábanas. Estaba llena de experiencias nuevas, nunca pensó que algo como un oral se podía sentir tan bien.

Separó sus labios vaginales con sus pulpares y observo la jugosa flor que lloraba por su toque. Cerró sus ojos y se dejó llevar, paso su lengua por la longitud y succionó gustoso. Bajo hasta la entrada y sin pudor, penetró con su lengua causando que la muchacha arqueara su espalda y apretara las sábanas. Era un sabor amargo, pero no desagradable. Siguió lamento, y penetrando con su lengua, mientras con su pulgar empezaba a dar caricias en su clítoris. Siguió así unos segundos más, hasta que noto una pequeña contracción en el abdomen de la chica. Se reincorporo, sin dejar de tocarla y antes de que la chica protestará, la beso. Invadió su boca con su lengua, jugando con la contraria, movió sus dedos de forma rápida, sin dejar de estimular.
T/N intento protestar en el beso, empezaba a sentir que se iba a orinas y si seguía siendo tan rudo definitivamente no podía contenerse. Sus ojos de cristalizaron y gimió durante el beso apretando la sábana con fuerza.
Su abdomen de contrajo y levantó su cadera levemente, mientras sus fluidos salían disparadas. Su voz salió sin quererlo, una voz agitada, mordió el labio del dios sin querer y se calmó cuando el orgasmo había pasado.

Sus ojos estaban algo idos y el caminito de saliva que bajo por la comisura de su labio, fue limpiado por la mano del dios.

—¿Fue bueno? —Se recostó a su lado, de lado y apoyando su codo sobre la cama y luego su cabeza en su mano. Con sus dedos apartaba los mechones que habían quedado en el rostro de la mujer que aún temblaba.

—L-lo fue, muchas gracias. —Dijo adormilada, siguió intentando ver el rostro del hombre a su lado, pero el dormirse fue inevitable.

[ 💦 ]

Cuando abrió los ojos, su habitación estaba oscura y ella estaba sola en la cama. No esperaba ver a alguien a su lado después de levantarse. Se sentó lentamente, apretando las sábanas contra su cuerpo, prendió las velas de su habitación con un pequeño movimiento con su dedo y se estiró luego.

Vio por el rabillo del ojo algo al lado de su cama y cuando se acercó, encontró un ramo de flores con una nota entre ellos.

“Lamento mucho que tenga que dejarte así, verte dormir tan plácidamente, podría volverse un hábito peligroso para mí autocontrol. Nos volveremos a ver, después de todo, soy oficialmente tu compañero.

Por cierto, puedes llamarme Geto, mi señora. ”

Algo se bloqueó en su cabeza y la dejo en blando. “mi señora” era la forma en la que los compañeros se referían a sus invocadoras, ella también le había dicho “mi señor”.

Se envolvió en las sábanas, despreocupada de su desnudes, ahora tenía un contrato con un dios, uno lascivo y hermoso como lo era Suguro Geto.

A⃤g⃤r⃤e⃤g⃤a⃤d⃤o⃤s⃤

🪐 El día de la graduación, geto se presentó como una serpiente, enroscado en el brazo de su nueva “ama”.

  🪐 Se hablo por un tiempo de lo meloso que se veía el compañero de T/N.

🪐 Aunque casi siempre está ocupado en sus deberes, siempre saca tiempo para ver a T/N

🪐 Le gusta escucharla hablar de magia, casi siempre usa ese método para quitarse el aburrimiento.

🪐 T/N lo sorprende algunas veces con pequeños detalles duraderos. En una ocasión le obsequió una cajita de cristal con una ilucion de galaxia adentro.

🪐 Después de su encuentro, en realidad no sé han vuelto involucrar sexualmente, aunque ganas no les faltan.

X: No puedes escribir cosas lascivas sobre una bruja y una deidad, es grosero.

Yo: Aja

Banda ya pronto llegaremos al final del apartado de Jujutsu kaisen.

Se viene sabrosura con Nanami y trio con yuta y junpei 🤙

Como agradecimiento y finalización del apartado, haré segunda parte de alguno de los shorts hechos hasta ahora.

Pueden decir cual desean y el más sugerido lo haré.

Muchas gracias por el apoyo, las y los amo mucho <3

Continue Reading

You'll Also Like

104K 5.6K 28
Chiara, una farmacéutica profesional y dispuesta a la que el mundo se le pone patas arriba por una pelirroja sin receta. ⚠️ +18 (incluye contenido ex...
461K 73.8K 32
Park Jimin, un padre soltero. Por culpa de una estafa termina viviendo con un completo extraΓ±o. Min Yoongi, un hombre solitario que guarda un triste...
488K 67.5K 43
Una sola noche. Dos mujeres lesbianas. ΒΏUn embarazo? Β‘Imposible!
104K 5.6K 12
El maldito NTR pocas veces hace justifica por los protagonistas que tienen ver a sus seres queridos siendo poseidos por otras personas, pero ΒΏQuΓ© suc...