Lois no se dio cuenta que tomamos el auto aquella noche. Por otra parte, con la tina de hidromasaje nos duró poco el gusto, unas escasas dos semanas para ser exactos, ya que un par de sapos decidieron realizar su nido ahí, y por obvias razones no entraríamos mas en ella, Hal quien no pensó lo mismo, se recuperó de la infección que había contraído por entrar en aquélla agua estancada de la Tina de hidromasaje, por ello aquella noche había venido lleno de pomada por Todo el cuerpo.
La cuestión a la que ahora nos enfrentábamos era ocultar una cuanta "travesura" más.
El día de ayer había acompañado a Malcolm a hacerse una perforación en la lengua. Si Lois se enteraba, era capaz de arrancarle el arete de un jalón.
-Buenos días- saludo Malcolm a Lois quien sacaba la ropa de la lavadora.
Me había quedado a dormir en casa de los Wilkerson ya que papá tuvo que ir a resolver un problema con su pago de jubilación en el ejército y no tenía ganas de quedarme sola todo un fin de semana, dormía en sofá, pero estaba lo suficientemente cómoda.
Malcolm se colocó junto a mi y se comenzó a servir jugo de naranja en un vaso
-¿Que escondes?- preguntó Lois colocándose junto a Malcolm
Bebí de mi leche disimulando.
-¿De que hablas?- preguntó Malcolm manteniendo la calma.
-No malgastes mi tiempo, huelo la culpa hasta acá.- respondió Lois analizandonos.- Si confiesan ahora tal vez no los regañe.- aceptó.
-No quieras hacerte la que te sabes todo esperando que se nos escape una confesión.- atacó Malcolm.- No oculto nada.- finalizó guardando la caja de jugo en la nevera.
Lois nos dio un último vistazo y se marcho a seguir con la ropa.
-¿Es genial no?- preguntó Malcolm mostrándome el arete de su lengua.- Si se lo ocultamos a papá y mamá por un mes podre quitarme lo y ponerme lo cada que quería.- comentó sonriendo.
-Aun no entiendo porque te colocaste eso.- dije bebiendo más de mi vaso.
-Yo tampoco.- se encogió de hombros.
Negué para caminar hacía el baño, me daría una ducha antes de desayunar y de que alguien mas acapare el baño.
(...)
Después de esa ducha y de cambiar me por una muda de ropa limpia, me encontraba desayunando.
Reese, Dewey, Malcolm y yo estábamos sentados en la mesa. Hal y Lois aún ni siquiera desayunaban, el apetito se les había arruinando cuando la abuela llegó por sorpresa a la casa.
La susodicha estaba junto a Malcolm, el cuál estaba justo a mi lado.
-Es el Señor Lee, nos iremos de crucero por alaska, y nos casaremos mañana.- explicó Ida para apagar su cigarillo en uno de los panqueques del plato de Malcolm.
Malcolm se quejó moviendo su mano en espera de que el humo del tabaco se esparciera lejos.
-¿Se van a casar mañana?!- preguntó Lois sorprendida
No era la única, quién diría que la abuela se iba a casar después de tanto tiempo.
-A mi edad si tiene dientes y es bueno en la cama para luego es tarde!.- admitió la abuela
-Ahg- se quejó Malcolm por el comentario.
También me había dado asco tan solo imaginar eso
-Ay! Lo olvide!- exclamó la abuela mirando a Malcolm- a este no le gustan las niñas.- susurro como si dijera un secreto.
¿Que le pasa a la abuela? Cuando entró a la casa nos vio a Malcolm y a mí besándonos en el sofá de la sala.
-Abuela, no soy gay.- afirmó Malcolm
-Es cierto, yo soy la mentirosa.- dijo sarcástica levantándose de la mesa.- Harán la cena de ensayo aquí, esta noche.- aviso a Lois.
-¿Hoy?!- preguntó Lois.- ¿Susan no viene?.
-No!- negó.- Así tu hermana lo pensara mejor antes de gritar las repuestas de la trivia de la televisión.- opinó Ida.- hizo que otro ganará.- dijo con desdén.- La boda es mañana a las dos de la tarde, nuestro vuelo a Hong Kong sale a las seis, no lleguen tarde.- explicó.
-¿Se irán a Hong Kong?- preguntó Hal cargando a Jamie
-Tiene una casa ahí, ahí viviremos.- respondió Ida sonriendo.
-¿Como?, ¿Te mudaras a China?- preguntó Lois aún sin creerse la.
-Lo se, gallinas en las calles, niños en las fábricas, todo el mundo fuma.- comentó.- Un sueño hecho realidad.- admitió caminando hacía la puerta
-Pero... Es muy repentino.- dijo Lois siguiendola.
Sin pensar nos lo corrimos hacía el globo terráqueo que casualmente estaba en la mesa junto al sofá. La abuela se iba, y todos estábamos felices por eso. Claro también nos importaba su felicidad...creó.
Movi el globo hasta llegar a Hong Kong y señalarlo.
-¿No les parece mal que..- Lois se quedó callada mirándonos.
-Estará casi exactamente del otro lado de la tierra.- explicó Malcolm
-Estaremos separados de ella por todo el centro del planeta!- exclamó emocionado Hal aún sosteniendo a Jamie.
Los hermanos Wilkerson sonrieron.
-Es como navidad.- apretó Hal sus labios aguantando la emoción.
(...)
-No tengo calcetines limpios Dewey.- respondió Malcolm.- pregunta le a Reese.- opinó
-¿A quién?- preguntó Dewey.
Se me olvidaba, Dewey fingía que Reese no existía.
-Dewey, pon esto en la mesa.- extendió Reese un plato y lo soltó creyendo que el pequeño lo había tomado, por consecuencia cayo al suelo rompiéndose.
-¿Que fue eso?!- preguntó Dewey aún en su papel
-Reese! Por Dios, limpia eso.- ordenó Lois.
El timbre sonó y me acomode mi cabello. Sería la cena de ensayo para la boda de Ida y obvio Lois estaba muy nerviosa por conocer al que sería esposo de su mamá.
(...)
La cena va bien hasta ahora, el señor Lee parece ser buena gente y creó que realmente quiere a la abuela.
-La lengua esta Matándome.- me susurro Malcolm.- Nadie me dijo que atravesar te la lengua con un pico de metal sería incómodo.
Esa lógica era tan absurda. Yo le había dicho que era muy probable que estuviera incómodo hasta que eso sanará.
-Yo te lo dije.- le recorde tomando un camarón con mis palillos chinos.
La cena tenía que agradar le al señor Lee, así que que mejor que comida china.
-Con que se enamoraron en un crucero.- sonrió Lois.- ¿Como fue eso?- preguntó interesada.
-¿Que es esto!? ¿Un interrogatorio?!- preguntó a la defensiva Ida.- Las personas se enamoran, pasa todos los días.- respondió
-Es una historia interesante.- recordó el señor Lee sonriendo.- La mujer con la que cene esa noche fue llevada a la enfermería al caer por la borda.- afirmó e instintivamente mire a la abuela.
-El mar estaba agitado.- se excuso la abuela
Malcolm y nos vimos pensando lo mismo, hasta Lois y Hal tenía ese temor en su rostro. La abuela si que era capaz.
-Pero como siempre digo, la mala suerte trae oportunidades.- comentó.- Porque entonces conocí a la hermosa Ida.- alagó el señor Lee
Hal tosió ahogándose.- lo siento.- se disculpó con voz entrecortada.- trague mal.- se justificó
-Mamá, Jamie tiene tus cigarrillos.- señaló Lois al bebé el cuál sostenía el tabaco entre sus manos pequeñas.
-¿Quien rayos es Jamie?- preguntó la abuela, vire los ojos, el bebé estaba junto a ella y ¿no lo veía?
-Tu nieto.- respondió molesta Lois quitándole los cigarrillos al bebé.
Ida miro a Jamie- Nosotros no les poníamos nombre hasta saber que sobrevivirán.- comentó despreocupada
-Me encanta su sentido negro del humor!.- alagó Hal.
La verdad es que Hal lo hacia para que el señor Lee no se arrepintiera de casarse con Ida. Era obvio que deseaba que se fuera pronto a Hong Kong.
-Reese, estos camarones a la diabla son fantásticos!.- felicitó Lois
-Si, no sabía que se podían conseguir estos picantes en este país.- opinó el señor Lee.
-Ahg!- se quejó Malcolm sacando un camarón de su boca.
El picante de seguro estaba lastimando su perforación.
-¿Te ocurre algo?- preguntó Lois a Malcolm
Abrí mis ojos por la sorpresa, nos iba a descubrir y yo también saldría castigada por acompañarlo y tapar su mentira.
-Acaba de entender que la abuela se va de verdad.- mentí fingiendo que estaba triste.
-Necesitó un momento.- me siguió la mentira Malcolm para correr de seguro al baño.
-Consiguen le una mujer antes de que sea tarde.- opinó Ida, Hal y Lois hicieron una mueca, ya estaban cansados con eso de que Malcolm era gay.- Una fea, son más baratas y talonean duro.- afirmó
-Mamá, ya te dijimos que Malcolm no es gay.- respondió Lois.
-Prueba lo.- exigió Ida
-Esta saliendo con Tn.- me señaló.- llevan bastante tiempo siendo novios.- afirmó
Ida me miró.- Pues no esta fea.- me analizó y el señor Lee asintió.- Ella le servirá para que se haga hombre.
-Ay mamá!.- se quejó Lois por ese comentario.
No dije nada, me dediqué a que la vergüenza que sentía se disimulara.
-Ire a ver como esta Malcolm.- me disculpe levantandome de la mesa una vez que pasaron unos minutos.
Llegué al baño y toque la puerta.- Soy yo.- susurré y Malcolm abrió la puerta dejando me pasar.
-Mi lengua arde.- admitió
-Deberías tomar algo frío. Tal vez eso alivie el ardor.- opine recargandome en el lava manos.
-No tuve oportunidad de decirte que ese vestido se te ve lindo.- alagó sonriendo
-Claro, es el que me relgalaste.- le recordé feliz
El vestido era de un color pastel, tenía unos cuantos detalles en la parte superior, y daba una buena forma a mi cuerpo.
Se acercó a mí y me beso, trate de tener cuidado por su lengua la cuál estaba lastimada. Pero al ver que no se quejaba me deje llevar por el beso que estaba dirigiendo.
Una de mis manos se paseó por su cabello el cuál estaba alineado. El también lucía guapo hoy con esa camisa de vestir y sus pantalones a juego.
Cuando su mano acarició mi cintura la puerta del baño se abrió, apenas y reaccionamos cuando alguien nos empujó a ambos fuera del cuarto de aseo.
-Vayan a tener sexo a otro lado mocosos!- nos grito la abuela antes de cerrar nos la puerta del baño en la cara.
Sin más y arruinado el momento caminamos de regreso a la mesa.
-Se que suena raro, pero desde que conocí a su madre, me ha hecho muy feliz.- Dijo el señor Lee a Lois.
Levante una ceja escuchando eso al recién llegar con los demás.
-Nunca había estado tan feliz en toda mi vida.- recalcó el señor Lee dejándonos callados por unos segundos.
-¿Y feliz en su cultura significa lo mismo que...- preguntó Lois aún sin entender.
Nadie entendía, ¿Quien en su sano juicio dice que la abuela lo hace feliz?
.....
Nuevo capítulo!..¿Que opinan?..Ya saben que sus comentarios son bien recibidos, no se sientan apenados de expresar lo que sienten, todas sus opiniones me ayudan a escribir mejor.
Si le gusto el capítulo me ayudan mucho votando.
Un saludo!
Horannella