A la mañana siguiente, Off se despertó primero. El sol lo deslumbró y se dio cuenta en donde estaba. Gun dormía tan plácidamente en sus brazos, lucía como un ángel a sus ojos. Todo parecía más brillante y la forma en que el sol entraba por la ventana del cuarto de Gun y se reflejaba en su cuerpo parecía que estaba rodeado por un aura blanca. Era hermoso, su cabello brillaba por los rayos del sol que se tornaba de un café rubio y sus labios de color cereza estaban húmedos como si Gun estuviera usando lip balm, pero no, era la luz natural los que le daban ese brillo. Off simplemente lo admiro y comenzó a delinear, con cuidado, con su dedo índice, el perfil de Gun tratando de no despertarlo. Comenzó con sus cejas, bajando por su nariz.
Cuando llegó al contorno de sus labios no pudo aguantar sus deseos de besarlo, así que posó suavemente sus labios en los de Gun. Dulce, ese era su sabor. Desde que los probó la noche anterior supo que se volvería adicto a esos labios. Era irónico, a Off no le gustaban las cosas dulces pero los labios de Gun era un tipo de dulzura que no había probado antes.
Entonces, Off escuchó el pequeño gemido de Gun, tan tierno, pero no despego sus labios. Gun se despertó y sintió los labios de Off en los suyos y medio dormido sonrió mientras sus bocas estaban unidas. Sin embargo, al darse cuenta, Gun se separó y se sentó rápidamente cubriendo su boca con una mano.
— ¿Qué sucede, pequeño?
Con la boca tapada por su mano, Off a penas logró escuchar. —No me he lavado los dientes, tengo mal aliento.
Off soltó una carcajada y abrazó a Gun de la cintura para atraerlo de vuelta a sus brazos. Gun dejó salir un chillido agarrando con sus manos los brazos de Off que estaban envueltos en su cintura.
—Te amo. —dijo Off dándole otro beso.
— ¡Off!
—Vamos a desayunar —replicó Off escondiendo su cara en el cuello de Gun dándole besos.
— Off, me haces cosquillas. —Gun comenzó a retorcerse en los brazos de Off soltando risitas mientras él seguía dando besos por todo su rostro y su cuello. —Ya... Off... por favor. Vamos a comer.
— ¿Qué hora será? —preguntó retóricamente Off quien no quería soltar a Gun de su abrazo.
—No lo sé, déjame ver mi... —Gun fue interrumpido por el sonido del timbre. Cuando Gun vio la hora en su celular eran las 8:00 y su clase comenzaba a las 8:30, con todo lo que había pasado a noche se le olvidó activar su alarma. Nunca le había pasado eso. — Merde!
A Gun no le gustaba decir malas palabras en tailandés, prefería insultar en otros idiomas. Y como para su carrera era obligatorio aprender un tercer idioma además del inglés y su lengua nativa que era el tailandés, Gun sabía hablar español, coreano y francés; le encantaban aprender idiomas. Gun amaba como se escuchaban los insultos en francés.
El pequeño se levantó rápidamente de la cama, trastabillando con las sabanas.
—Ya es tarde, nunca he llegado tarde a una clase. Deben ser Bright y Win. —o eso pensó hasta que escuchó su nombre.
— ¡Gunnie! —gritó New dando portazos en la puerta. — ¡Sabemos que estás ahí! ¡Abre la puerta!
Gun escondió su cara de vergüenza entre sus manos. — Putain! ¿Por qué diablos están aquí?
Off salió de la cama con una sonrisa ladina usando solamente su playera y sus boxers, divertido de como Gun maldecía en francés, mientras Gun se lamentaba y hacia pucheros. Gun no se dio cuenta que Off se dirigía a abrir la puerta del departamento, hasta que vio pasar una sombra por el rabillo de su ojo saliendo de la habitación.
— ¡Off! —Gun corrió tras Off pero fue demasiado tarde.
— ¡Gunnie, abre la puer...! —New ya no terminó su frase. Sorpresa, reflejado en la cara de New con los ojos bien abiertos y Krist a un lado con una mano en su boca. Mientras que dentro del departamento, Off les abrió con una sonrisa enorme y Gun tenía las manos levantadas como si lo habían atrapado en el acto, cosa que era parcialmente verdad.
—Buenos días chicos, ¿quieren pasar? —Off se hizo a un lado pero ninguno de los otros tres se movió así que caminó hacia Gun y le dio un pequeño, tierno y corto beso. —Mi pequeño, me iré a cambiar a mi depa. Te veo en un rato. —Gun no tuvo tiempo de reaccionar tenía sus ojitos de búho y solo asintió lentamente mientras Off se dirigía a la puerta pasando a New y a Krist. — Nos vemos más tarde chicos. — Off hizo un gesto de despedida y se marchó a su departamento. Cuando estaba a punto de cerrar la puerta de su departamento escuchó los gritos de New y Krist: "¡Gunnie!". Off solamente sonrió orgulloso y comenzó a negar con la cabeza cerrando su puerta para ir a darse una ducha.
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—Gun Atthaphan Phunsawat, jamás pensé que tu... —Krist fue interrumpido por un New que tenía sostenido a Gun por los brazos zarandeándolo de atrás hacia delante como un muñeco de trapo.
— ¿Fue duro y sucio? ¿Fueron una o varias veces? ¿Qué pasó? Ya escúpelo, quiero saber.
—New me estás lastimando, necesito 5 minutos sin que ustedes hablen, ¿de acuerdo? Si no, no hablaré. —dijo Gun con los brazos cruzados haciendo un puchero de advertencia.
—Está bien. —replicaron Krist y New al mismo tiempo sentándose en el sillón mientras Gun comenzaba con la explicación haciendo ademanes con sus manos.
—Bien. Bueno, primero no pasó nada de lo que ustedes piensan. Segundo, ayer mientras comíamos spaguetti Alfredo con pollo, que yo cociné y que a Off le encantó, me pidió que fuéramos novios y claramente acepteeeee. —Los tres soltaron un chillido mientras se daban los 5 emocionados, como unos niños de primaria. Hasta que Gun paró e hizo una señal de silencio. —Ajá, tercero, le pedí a Off que se quedara, al principio con la intención de... bueno ya saben, pero después no creí justo para Off que no supiera de mi trauma y como él sacó el tema, tal vez no me pude controlar en clase como pensé porque él me preguntó sobre Wayar.
— ¿Se... lo contaste?— inquirió Krist de manera vacilante.
—Sí... se lo conté... todo.
— ¿Estás bien, Gun? —fue New esta vez quien preguntó preocupado.
—Sí... la verdad tenía miedo. No, estaba aterrado de que Off se alejara de mí o peor que pensara que estuviera manchado, sucio. —La expresión de Gun era serena pero sus ojos contenían las lágrimas que querían salir. Sin embargó, cambió su expresión cuando recordó como Off le dijo que lo amaba y la calidez que sintió al estar entre sus fuertes brazos. —Pero pasó todo lo contrario. —New y Krist, hasta este momento, estaban aguantando la respiración pegados al sillón, hasta que Gun pronuncio esas palabras que los dejaron tranquilos.
— ¡En verdad estoy muy feliz por ti, Gun! —exclamó Krist parándose para darle un abrazo al pequeño. New siguió su ejemplo y terminaron en un abrazo grupal.
— ¿Saben una cosa? —dijo Gun mientras seguían en el abrazo.
— ¿Qué? —respondieron Krist y New al mismo tiempo separándose del abrazó.
—Nunca había faltado a clases en mi vida. —dijo Gun haciendo un puchero de llanto fallido.
Krist y New comenzaron a reír como desquiciados. Gun era un estudiante ejemplar, siempre asistía a clases y nunca llegaba tarde.
—Hay una primera vez para todo. —Krist codeo a Gun bromeando, levantando sus cejas.
—Igual para el S-E-X-O ¿verdad Krist?— dijo New molestando a Gun mientras Krist soltaba una carcajada.
— ¡Pervertidos! —Gun no pudo ocultar su rubor. — ¿Vamos a desayunar o qué?
—Sí, me muero del hambre. — respondió New tocando su panza inexistente porque lo único que había allí era una barra de chocolate. New era de esas personas que podía comer y nunca engordaba. Por lo que aunque los tres se ejercitaban New era el que más marcado y tonificado estaba sin estar en los extremos porque los tres eran medio perezosos en ese sentido. A lo sumo solo hacían ejercicio 1 hora pero era más la charla de lo que se ejercitaban.
—Tú siempre tienes hambre Newwie. —Krist aclaró.
—Bueno, déjenme darme una ducha exprés y nos vamos.
— ¡Noooo! ¡Gunnie! —reprocharon New y Krist. Las "duchas exprés" de Gun eran de 20 minutos.
—Ahhh, ya dejen de lloriquear, ya regreso. Seré rápido como conejo. —dijo Gun guiñándoles un ojo.
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25 minutos después...
— Bien, ¿Nos vamos?— Un Gun bañado y arreglado salió de su habitación.
—Ya era hora. Muero de hambre. —New refunfuñó.
Cuando estaban saliendo del departamento de Gun vieron en el pasillo a Off hablando con dos hombres, que Gun reconoció como sus vecinos, los del departamento 5D. No los conocía muy bien. Se había topado con ellos un par de veces, aunque no podía recordar sus nombres. Eran muy guapos pero no eran su tipo, ellos no eran Off.
Off estaba hablando muy seriamente con ellos.
— ¡Off! —Gun llamó la atención de Off.
Al escuchar la voz de Gun, Off se volteó y le sonrió a Gun tendiéndole una mano para que Gun se acercara y la agarrara. Gun se apresuró a ir al encuentro de Off quien estaba en la puerta del departamento de los vecinos, sin importarle sus amigos que veían con la boca abierta a los vecinos de Gun. Antes de alejarse, Gun les susurró a sus amigos: "Cierren la boca porque entran moscas". Krist y New, rápidamente, se unieron a Gun, sin quitar la mirada de bobos.
—Pequeño, ellos son Tay y Singto, nuestros vecinos. Y él es Gun mi novio. —dijo Off orgulloso, presentando a sus amigos a su novio, pero Gun no lo sabía y no tenía que, por el momento.
—Hola. —Gun hizo una seña con la mano en forma de saludo. —Sí, ya nos habíamos encontrado en los pasillos antes ¿verdad? Pero, de nuevo que bueno verlos, ¿cómo están?
—Bien gracias, llegando a casa. Fuimos al super. —se apresuró a responder Tay. Gun sonrío pero vio que no llevaban nada de bolsas en las manos. Antes de seguir con la conversación, Krist le dio un codazo a Gun, susurrándole "Preséntanos".
Gun le dio una mirada matadora a Krist porque casi se queda sin aire.
—Eh... ellos son mis mejores amigos. Krist y New. —Dijo señalando a cada uno mientras decía sus nombres.
—Mucho gusto. —Krist les tendió la mano. —Gunnie, no nos habías contado que tus vecinos eran tan guapos. — Gun rodó sus ojos ante lo que dijo su amigo, Krist no tenía pelos en la lengua.
Singto se apresuró a tomar la mano de Krist para el respectivo saludo. —Mucho gusto, encantado de conocerlos.
New también extendió su mano para saludarlos pero el primero que la tomo fue Tay. El New extrovertido y juguetón que conocía Gun se había ido.
— ¿A dónde iban, amor? —Off le preguntó.
—Vamos a ir a desayunar. Bright y Win nos están esperando en el lobby. ¿Quieres venir? —Krist volvió a darle un codazo a Gun, quien solo abrió sus ojos para ver a Krist a manera de un ¿¡QUÉ!? Krist solo movió su cabeza rápidamente para señalar a los vecinos de Gun. — Tay, Singto, ¿quieren venir con nosotros?
Los tres agentes se vieron rápidamente.
—Perdona Gun, creo que será en otra ocasión, tenemos trabajo atrasado. —respondió Singto.
— Que lastima. —declaró Krist. — ¿A qué se dedican?
Tay y Singto se miraron un momento y respondieron al mismo tiempo con nerviosismo.
—Soy contador.
—Soy administrador.
Off decidió salvar a los hombres.
— Tay es administrador y Singto es contador. Trabajan para la misma empresa, la ATp. — lo que dijo Off era parcialmente cierto. La agencia de seguridad, del Primer Ministro pero más de Mike Phunsawat quien era accionista mayoritario de la empresa, era parte de la ATp. Una empresa que contaba con varios rubros y una de ellas era la seguridad además de los bienes y raíces e inversiones en la bolsa.
—Wow. Es una empresa muy reconocida. Gun, ¿tu papá no es el accionista mayoritario de allí? Qué pequeño es el mundo. —estableció Krist sin darse cuenta que realmente el mundo era muy pequeño. —Mis padres y los de New son accionistas también. Mis padres se dedican a los bienes e inmuebles y los padres de New a la bolsa. ¿No es así, New? —Krist volteó a ver a New quien no había respondido.
New no había dejado de mirar a Tay, y reaccionó cuando Krist le dio un empujoncito en el hombro.
—Eh... Sí. Que pequeño es el mundo. —sonrió tímidamente.
—Sí que coincidencia, que mal que no nos puedan acompañar. —Gun decidió que sería un buen amigo y propuso. —Tal vez el viernes, mañana, podamos hacer una pequeña reunión en mi departamento. ¿Qué les parece? ¿Podrán? —Krist y New estaban viendo a Gun con ojos de agradecimiento. Pero lo que no notaron fue que Off les hizo una señal a los otros dos agentes para indicarles que asistieran. Más seguridad para Gun.
—Sí, gracias por la invitación, Gun. Allí estaremos. —anunció Singto. —Nos vemos chicos, fue un gusto conocerlos. Off. —Singto asintió con la cabeza, al igual que Tay, y entraron a su departamento.
— ¿Nos vamos? Muero de hambre. —reprocho Gun quien hizo un puchero mientras Off le sonreía.
—Vamos a comer, pequeño. — Los dos comenzaron a alejarse mientas dejaban a dos hombres emocionados que chocaban sus manos dejando escapar unos grititos.