Playlist de hoy:
-Ariana Grande ft Doja Cat: motive
-Harry Styles: only Angel
-The neighborhood: you get me so high
-BTS: hold me tight
-BTS: Stigma
Jungkook era un muchacho lindo, atractivo, no necesariamente engreído pero si con la cantidad requerida que una persona como el es merecedora, es decir, sabe lo que tiene (tanto encantos como defectos) y como usarlo, es por eso que Iseul desconoce en que momento terminaron los tres chicos en un carrera de autos deportivos, seguramente ilegal, como todo lo que parecía rodearla últimamente.
– Pretty girl, deja de pensarlo tanto. Con nosotros aquí nadie se atrevería a ponerte una mano encima, si es lo que te pone nerviosa.
Jungkook parecía haberse percatado de su incomodidad y de la preocupación pintando sus facciones.
Y no dudaba nada que ni siquiera en este lugar alguien se atrevería a tocarla, mucho menos siendo escoltada por dos jóvenes de buen aspecto y hasta cierto punto, intimidantes.
– ¿Y qué hay de la policía?, escuchen... Esto no es seguro, no me siento bien y-
Iseul, se sentía acorralada pues entre ambos muchachos y ella existía una diferencia notable de estatura, haciéndolos notar aún más intimidantes, además de haber alguna clase de tensión en el ambiente que hacía que no pudiera mantenerse estable ni quieta todo el tiempo.
– Is... Nunca pensé que la chica que me pidió cubrirla hace unas semanas sería la misma que tengo frente a frente, tan aburrida, si me permites ser sincero.
Una situación que añadía más tensión al cuerpo de la chica nerviosa era que una de las manos de los dos jóvenes se mantenía a cada lado de la cintura de Iseul, mientras que al hablar ambos se inclinaban demasiado cerca para el gusto de una mujer con el fabuloso sentido de la vista, y claro, con buenos gustos y necesidades fisiológicas de cualquier adulto joven.
También, cabía recalcar que lejos había quedado la imagen que Jungkook había creado en Iseul, lejos había quedado el muchacho de traje elegante y en cierto punto, hasta tímido, en su lugar estaba alguien que visiblemente se sentía bien en su propia piel, usando combat boots y chaquetas de piel.
Atractivo de las dos maneras, sin duda.
– Is, hoy estamos aquí para olvidar un poquito de estos días tan difíciles que hemos pasado, confía en mi, ¿si?
Cuando Taehyung hablaba para Iseul era como el sentimiento que se tiene al hacer algo que realmente te gusta, el burbujeó en el pecho está presente en todo momento al ser honrada de escuchar su bonita voz acompañada de un sentimiento cálido que aún no puede nombrar con exactitud, tal vez cariño, por más raro que suene.
– Está bien... ¿Pero que vamos a hacer aquí?, o más bien, ¿que haré yo aquí?
Jungkook parecía estar dentro de su ambiente preferido definitivamente, se le notaba al saludar a la gente que parecía idolatrarlo, joder, incluso caminando.
– ¿No es obvio pretty girl?, vas a correr conmigo hoy, en exactamente esa belleza de allá.
Iseul no pudo siquiera comenzar a pelear y a defender el hecho de que era una total estupidez semejante idea, pues Jungkook maniobró el cuerpo de la chica, de manera que la mencionada estaba frente al que podría ser, el carro más bonito que pudiera ver en toda su vida. En todo su resplandor a los pies de Iseul se hallaba un deportivo precioso, en color morado obscuro metálico, impecable y elegante, demasiado a la altura del chico a su lado.
– Es un Pagani Huayra, una belleza italiana que tendrá la dicha de correr contigo dentro, si le harías el honor.
Jungkook sonreía coqueto en casi todo momento, mientras Taehyng observaba divertido desde el lado izquierdo de la chica, brindándole por fin un poco de espacio personal.
– Es una locura total Jungkook, ¿que pasa si alguien llama a la policía?, no, no, no, absolutamente no, ¿que pasa si ocurre un accidente o-
Una vez más Iseul es interrumpida por la risa sin preocupaciones de Jungkook, quien parece comunicarle algo a Taehyung, su compañero en crimen, con tan solo una mirada.
– Vamos, solo un viaje, los chicos-
Jungkook fue arrastrado de repente por una chica pelirroja, alta y muy bonita, dejando momentáneamente desconcertada y con un sentimiento raro creciéndole en el pecho a Iseul.
– No te preocupes preciosa, ya vuelve, nada le va a sacar de la cabeza que te subirá en ese carro, aunque eso signifique arrastrarte, rogarte o ponerse de rodillas, quindi non essere geloso.
"No te pongas celosa"
Taehyng expresó eso mientras abrazaba a la chica de lado, con una sonrisa coqueta primero y luego mordiéndose el labio aún sonriendo, lo cual aumentaba más los nervios de Iseul, si eso era posible.
– No estoy celosa Tae, es solo que eso fue grosero.
Iseul no sabía si quiera a donde mirar pero había algo que le impedía apartar la mirada del intercambio de palabras entre Jungkook y la muchacha bonita, sin embargo, verlos la frustraba un poco, pero hacia lo mejor por ocultarlo, aún sabiendo que Taehyung era capaz de leer a las personas tal cual libro abierto.
– Entra.
La chica no tuvo tiempo de reaccionar pues en cuanto le fue posible restablecerse, ya estaba presionada contra el asiento de piel del auto y con Jungkook sobre ella colocándome el cinturón de seguridad, y con una sonrisa grande más un guiño se retiro para trotar rápidamente al asiento del piloto.
– Jungkook, no, esto es un error, no creo que-
Jungkook presionó el dedo índice de la mano derecha sobre los labios de Iseul mientras que la izquierda la mantenía arriba, en señal de que quería que parara.
– Vas a disfrutar esto tanto como yo, solo descansa that pretty head of yours.
Iseul estaba nerviosa, pero era el tipo de nervios que adquieres cuando conoces a alguien por redes sociales y tienes la incertidumbre de si seguirá mensajeando o no, mezclado con la adrenalina de lo que estaba a punto de hacer, y siendo el primer sentimiento el que la dejaría pensando y cuestionándose unos momentos en lo inapropiado que era lo que acababa de pensar.
– ¿Y Taehyung, no se supone que venga con nosotros?
– No, el tiene su propio auto, el Aston Martin gris de allí, le pertenece a el, así que hoy te tengo para mi solamente.
¿Como se suponía que se tenían que responder todas las insinuaciones de Jungkook?
Dios, ni siquiera era algo que se pudiera googlear.
– ¿Lista?
A jungkook no le tomo nada más que ver asentir a Iseul para encender el motor.
– Solo daremos una vuelta en la ruta que generalmente tomamos, solo Taehyung, tú y yo, ya sabes... Para calentar las cosas.
Iseul miraba a Jungkook aún con nerviosismo evidente, (mismo nerviosismo que no le permitió percatarse del todo del doble sentido en la última pequeña frase), pero al mismo tiempo más relajada y permitiendo que la adrenalina corriera por sus venas.
– No seas tímida Iseul, déjate llevar...
Jungkook dio alguna clase de señal con dos dedos por la ventana a quien parecía ser Taehyung, acelerando ambos.
– ¿No es fantástico?
Iseul decidió soltarse un poco, sonriéndole a Jungkook, claramente comenzando a divertirse, pero aún había algún factor en ella que le indicaba que algo no andaba bien, pero Iseul se esforzaba por querer impedir que sus pensamientos negativos, arruinaran algo que claramente le agradaba al chico a su lado.
Al paso de unos quince minutos y de Jungkook acelerar más y más, Iseul se encontró, de hecho, adorando el viaje, siendo capaz de entender por que había personas a las que les fascinaba tanto esto.
– ¿Usualmente corren en esta ruta?
Jungkook la miro por segundos separados sonriendo aún.
– Dios, ojos al camino por favor, no me hagas arrepentirme.
El muchacho copió el saludo estilo militar para hacerle entender a Iseul que haría lo que le había dicho.
– Pues si, usualmente corremos por este mismo lado, como podrás ver Taehyung ha tomado otro camino, por lo que lo veremos más adelante, si no decide tomar otro atajo.
Ambos muchachos estaban cómodos, con música de fondo que Kookie cantaba en voz baja y disfrutando ambos a su manera.
Pero la preocupación comenzó a recorrer el cuerpo de Jungkook al haber recorrido desde hace tiempo el tramo en donde se suponía que Taehyung debió haberse unido nuevamente y ciertamente no había señales del Aston Martin por ningún lado, pero antes que cualquier cosa Jungkook tenía que esperar por alguna noticia, sin embargo, eso no restaba la zozobra del paradero de Taehyung.
– Pretty girl, hazme un favor y alcanza la chaqueta de atrás... En el bolsillo izquierdo está un móvil, ¿puedes traerlo al frente contigo?
Iseul frunció el ceño de manera rápida, pero hizo lo que Jungkook le pidió.
– ¿Puedes decirme si tengo alguna notificación?
– Uh, si, tienes veinte llamadas de un número privado.
Fue en ese mismo instante que Jungkook sintió toda la sangre que le corría por el cuerpo drenarse.
– Mierda, desbloquea el celular y devuelve la llamada lo más rápido que puedas a ese mismo número y ponlo en altavoz.
A este punto las manos de Iseul comenzaron a temblar pues, evidentemente, Jungkook no era el tipo de persona que se preocupaba en vano.
– ¿Que pasa Jungkook-
Iseul fue interrumpida por la voz frenética de un hombre al otro lado de la línea.
– Carlo, tranquilízate, porque no puedo entenderte, voy al volante...
Además de la histeria del hombre, había problemas en la conexión de la llamada.
– Señor Jeon, era urgente que respondiera y tomara la llamada, lo he estado tratando de localizar desde hace diez minutos, usted sabe cómo es esto, yo...
– Al punto por favor Carlo.
Con la mirada en el camino y el corazón bombeando a todo lo que da, Jungkook se encontraba más preocupado que de costumbre, tenso y con el ceño fruncido, lo cual era raro de ver el cara de bonita y juvenil del mencionado.
– Es el señor Kim, el...
Iseul cayó en la cuenta de que la situación era más seria de lo que parecía, implorándole a Jungkook que dijera algo, pero Iseul sabía que en estas situaciones y tomando en cuenta las posiciones de Jungkook y Taehyung lo único que se podía esperar era lo peor.
– Tratamos de comunicarnos con el pero alguien interfirió en la llamada, y... No sabemos en dónde está, el único conocimiento que tenemos es que escapó y que le dispararon señor, está lastimado, es crucial que lo encontremos antes de que... Pueda suceder algo más, por favor disculpe que no pudimos hacerlo a tiempo, yo...
Las palabras del que parecía ser "Carlo" se desvanecieron para Iseul y fueron reemplazadas por un pitido incesante, induciéndola en alguna especia de shock.
Taehyung está herido, probablemente sangrando en alguna parte y desaparecido, solo, sin ningún tipo de ayuda.