Idol

✨ XIV: Part I ✨

En cuanto escuché la risa de Jin, pude sentir como el ceño fruncido que aún se encontraba en mi rostro se terminaba por desvanecer al completo, para así poder ser reemplazado por una sonrisa; a su vez, intentaba no dejar escapar ninguna carcajada, porque en ese entonces significaría que me estaba riendo de mí misma.

- Tranquila Elisabeth-ah, eso no pasara - comentó Yoongi mientras se acomodaba en su asiento, aún con su mirada puesta en mí.

- Exacto - respondió esta vez Jin, dejando poco a poco de reírse - Ninguno permitiremos que te pierdas, así que puedes estar tranquila Elisabeth-ah.

La sonrisa que estaba adornando mis labios se fue haciendo un poco más grande que la anterior, ya que el hecho de que hubiesen dicho esas palabras, asegurándome de que iban a intentar evitar que me perdiera, había desvanecido cualquier rastro de mal humor.

Normalmente, suelo llegar a sentirme un poco molesta si alguien da a entender que soy tan "pequeña" o "despistada" hasta tal punto que necesito que alguien cuide de mí para que no haya posibilidad de que me pierda. No es algo que pase a menudo, pero sí que ha habido casos en el pasado donde algunas personas, con no muy buenas intenciones, decían algunas cosas dando a entender lo anterior.

En el caso anterior, donde fue uno de mis hermanos mayores donde menciono mi "antiguo" problema para orientarme, no lo suelo echar cuenta, ya que obviamente sé que nadie de mi familia haría ningún tipo de comentario si saben que me ofenderá o puede hacerme algún tipo de daño; es por eso que mis "enfados" con ellos no suelen ser de larga duración. Además de que entre nosotros nos solemos burlar los unos de los otros, obviamente sin llegar a pasar ningún límite.

Pero en el caso de Yoongi y Jin, no llegue a sentir ningún tipo de molestia ni nada parecido, porque note en sus voces que no lo estaban diciendo con ningún tipo de malicia; de cierta forma, me recordaba vagamente al tiempo donde yo solo era una niña pequeña y cuando salía al exterior, no dudaba en tomar las manos de mis hermanos mayores, ya que al estar junto a ellos me hacían sentir protegida, como si nada malo me pudiera pasar.

- Komawo, Yoongi-oppa, Jin-oppa - no dude en agradecerles, mientras apoyaba mi cabeza en el reposacabezas del asiento.

- No tienes por qué agradecernos, no es nada - dijo Jin con una leve sonrisa en sus regordetes labios, a la vez que se giraba un poco en el asiento, haciendo posible que pudiese verle desde atrás - Aunque ahora que has mencionado que tienes un hermano, tengo curiosidad por saber cuántos hermanos tienes, Elisabeth-ah.

- Pues tengo cuatro hermanos y una hermana - en cuanto dije aquellas palabras, los ojos de Jin se abrieron como platos.

- ¿Tantos? - pregunto de nuevo el mayor, con un tono de voz que le hacía parecer que estaba en shock.

- Ne - no tarde en responder con una sonrisa en mis labios, ya que me parecía algo divertida su reacción- Dos de mis hermanos son más mayores que yo mientras que los demás ya son más pequeños; lo cual me convierte en la hermana mediana, por así decirlo.

Poco a poco el tema de conversación se fue tornando en la "familia", ya que Jin me contó que él solo tenía un hermano mayor, y no tardó en hacer algunas cuantas preguntas sobre mi familia, las cuales yo no tenía ningún problema en contestar. En algún momento, también se nos unió brevemente Yoongi, quien me contó que él también tenía un hermano que era mayor que él.

Por lo que me dieron a entender, yo era la única en todo el grupo que parecía tener una "gran" familia, por lo menos en hermanos. Era obvia la diferencia que cuando ellos parecían tener uno o dos hermanos, yo tenía nada más ni nada menos que cinco.