You are my princess(Wigetta).

26.

O quizá, no. Bienvenida desastrosa oportunidad.

Antes de siquiera pensar en reanudar mi paso, una mano se apretó contra mi brazo. Una corriente me recorrió, estaba ansioso. Entonces espere.

-Guille...- y lo obtuve, su voz. Trague duro y sonreí para darme animo. ¡Vamos a por ello, Guille! Incluso podía sentir las voces de aquellos dos, dentro de mi cabeza- ¿Necesitas algo? Digo, porque estabas fuera de la casa.

-Si- respondí efusivo, pero luego se corrigió para cambiar su voz a una mas pasiva- Quiero decir, si. Si es que tu puedes, por supuesto, no quiero ser una molestia.

-Por supuesto que no- se apresuro a mencionar, mi corazón dio un vuelco al sentir su voz tan emocionado- Entonces, entremos y bebamos algo- asentí, pero entonces pasaron unos segundos en los que ninguno de los dos hizo un movimiento.

Caí en cuenta de que aun su mano se aferraba a mi y mantuve mi mirada por un tiempo, el se dio cuenta y la corrió de inmediato, llevándosela hasta su nuca. Fue entonces, que entramos. No era la primera vez que entraba, era obvio, pero la situación era diferente y esta vez estaba determinado o hasta el momento.

Me llevo hasta el patio trasero donde me senté, el se fue mencionando que traería algo para beber, solo asentí como respuesta. Cuando ya no se encontraba dentro de mi rango de vista, comencé a ordenarme y estirar aquellas arrugas inexistentes. Mire alrededor y casi gimo del susto al ver como dos pares de ojos me observaba, había olvidado que los dos fisgones se encontraban ahí. Cuando se dieron cuenta de que los miraba, empezaron a hacer algunas señas extrañas y en unas de esas tantas, Rubén empezó a estirar sus labios, señalándome que debía besarlo; de solo pensarlo me ruborice.

Minutos después, Samuel llego con una bandea y unas cuantas cosas, las cuales coloco en la mesa. Limpie mis manos contra mis pantalones, estaba sudando hasta por si acaso y como nunca en mi vida. Lentamente y sin que Sam se diera cuenta, intente regular mi respiración.

- Recordé nuestra conversación acerca de las cosas dulces y te traje algunas- sonrió, oh mi dios, no es un simulacro, este chico es muy guapo. Eh, rimo.

-Gracias eres muy amable-sonreí. No desaproveche la oportunidad y empecé a comer, sintiendo una repentina alegría, gracias al azúcar- Por cierto- intente tragar lo que mantenía en la boca- ¿Dónde esta tía Any?

- La necesitaban urgente en su trabajo. La verdad es que ha estado muy atareada, es por eso que casi ni se muestra, aunque siempre menciona lo mucho que te extraña y el pasar tiempo contigo. No sabia que se llevaban tan bien.

-Oh, pues claro- exclame feliz- Ella es realmente una buena persona y tenemos mucho en común- sonreí y continúe comiendo. Un silencio se formo, en donde de vez en cuando topaba con la mirada de Sam y sentía mi cuerpo una gelatina, pero estaba animado comiendo que no quise darle mayor importancia.

-¡Estoy exhausto y repleto!- el chico frente a mi solo rio suavemente. Segundos después y muy para mi sorpresa, su cuerpo se movió hacia delante -dejándome congelado. Uy quieto- trague y seguí sus movimientos. Su pulgar se acercaba a mi, para luego deslizarlo por mi rostro.

-Lo siento, tenias algo de azúcar- me ruboricé, sentía como el calor subía desde donde había tocado hacia arriba, posándose en mis orejas. Me desplace hacia atrás como un acto de reflejo tardío y mi mente quedo en blanco por un tiempo.

-O-oh, g-gracias, supongo, si-reí como un robot, sin sentido. Entonces lo que estaba esperando pero en realidad, esperaba que no pasara. El hablo.

-Entonces... puedo saber el motivo de tu grata compañía.

-Por supuesto que lo puedes saber, claro, si. 

-Te escucho- su posición cambio y ahora se encontraba mas relajado que antes. Tiro hacia atrás su espalda, sin quitar su penetrante mirada de mi rostro. Tire hacia delante las mangas de mi suerte.

-Ja, ja. Si, gracias. Umh, bien- divague por un momento, sin saber que decir, que palabras serian las correctas. Creía incluso que había olvidado hablar. Un miedo se apodero, mis ojos comenzaron a mirar alrededor y me encontré con las miradas de los chicos- Bueno, si tengo algo importante que mencionarte.

-Esta bien Guille, aun estoy prestando atención.

-Okay. La verdad es que he pensado en muchas cosas, a... acerca de nosotros, digo, nuestra amistad, yo realmente la aprecio y valoro, mucho, demasiado- mis manos se posaron en la mesa y de inmediato fueron cubiertas por unas mas grandes, me sorprendí, continúe hablando, sin embargo- en la mañana, mientras mencionabas el pasado me hizo sentir nostálgico, realmente extraño nuestro momentos junto y eso, eso es porque yo- mi corazón empezó a latir rápido y descontrolado.

Mi cuerpo se levanto, corriendo en el acto, la silla y acercándome hasta Samuel en un espacio muy pequeño, quizá unos pocos centímetros.

-Y-yo, te a...-y mis palabras se ahogaron en mi boca, mis ojos se abrieron, el paso había sido reducido un poco mas y si solo daba un leve empujoncito podría besarme con Samuel e iba a hacerlo hasta que el lejano sonido de la puerta interrumpió.

Samuel se alejo como si nada, para obviamente ir a abrir la puerta, así que me deje caer y aparte de golpear mi cabeza contra la mesa, mi trasero se estampo contra el suelo. Poco después decidí, por la curiosidad, seguir a Samuel como un pequeño patito.

Pero, por supuesto, nunca pensé que las cosas podrían ser peor, pero la vida siempre me da golpes. Me asome por detrás de Samuel, cuando este abrió la puerta, y lo primero con lo que me tope fueron unos ojos oscuros, los cuales me miraba de igual manera.

Mire un poco su figura, solo se podía notar un ligero cambio, nada muy serio. Podía sentir una leve tensión. Nuestro intermediario se corrió al sentir la tensión, entonces ambos quedamos mas al descubierto.

-¡Guille!-exclamo como si nada y con una sonrisa, como las que siempre me daba- Y-yo, estoy feliz de poder verte, la verdad es que necesito hablar contigo- sus manos se estiraron hasta alcanzarme y fui atraído por el, hacia su cuerpo.

-Frank...

-Supongo que no te molesta que me lo lleve un momento- estaba ves miro hacia Samuel. No le mire porque, bueno, sentía miedo de ver su semblante y que este fuera neutro al respecto, así que me abstuve- Bien, si es el caso- su mirada volvió a mi- Por favor acompáñame.

-Espera, ¿A donde iremos?

-Te comprare un helado- mis ojos brillaron- Y, es cierto, necesito hablar contigo, es importante.

Acepte. Si, lo se, me vendí por un helado, pero es que también era una buena oportunidad de poder aclarar las cosas con Frank, quería mantener las cosas lo mas ligeras y llevaderas posibles, así que lo acompañe.

|'∀｀●)*~

¡Holaaaa, mucha gracias por estar acá!

Antes de cualquier cosa, quisiera desearles un bueno año, aunque en lo personal, no me gusta año nuevo, espero que ustedes lo hayan pasado bien junto a sus seres queridos. 

¡Construyamos un mejor año!~ seamos positivas y no nos rindamos con facilidad, seamos perseverantes y alcancemos nuestros sueños.  Dejemos a un lado el odio y el rencor y aprendamos a amar libremente, sin resentimientos.

Espero que las cosas puedan mejorar y sean felices.       (〜￣△￣)〜

Muchas gracias por todo el apoyo que me han dado y mencionar que ustedes son la base de todo, así que se llevan todo el merito. De verdad, estoy muy agradecida ﾐ☆( *uωu人)+ﾟ.

Espero que este capitulo sea de su agrado y que puedan disfrutarlo. 

Cuiden su salud 🖤 [ y ya saben, si hay algún error, estaré editando luego de publicarlo, xoxo]