CELO DE LOBO

II. SU NATURALEZA

Naruto y Gaara se miraron unos momentos antes de sentarse junto con Deidara, los tres juntos no tenían idea de porque estaban ahí, la habitación quedo en silencio unos momentos, se sentía la tensión del lugar, nadie decia nada.

-¿Y bien?- Deidara no aguantaba más la tensión y no sabía que hacia ahí, el dia se volvía cada vez más extraño. En la mañana había ido a la universidad, en clases se había sentado junto con su amigo Akuma no Sasori, apenas habian terminado de la nada apareció Itachi y lo tomo del brazo arrastrándolo lejos del aula, su amigo pelirrojo trato de intervenir pero recibió un gruñido del azabache que sorprendió a los que estaban alrededor. El Uchiha era conocido por ser calmado y maduro, pero su actitud cambiaba con el Namikaze cerca, pero esa reacción causo miedo que los dejo paralizados, Itachi siguió arrastrando al rubio a un salón vacio, lo acorralo en el escritorio del maestro, Dediara no sabía qué hacer, se sobresaltó cuando el azabache metía su mano bajo su camisa antes de que una silla le diera en la cabeza, dejándolo inconsciente y encontrándose con Shisui, quien se presentó como el primo del que estaba en el suelo, lo saco de ahí y lo llevo a donde estaban ahora- ¿Qué hacemos aquí? Me trajeron sin saber nada.

-B-Bueno...-Minato no sabia donde empezar ¿Cómo le explicarían esta situación?

-Creo de nosotros deberíamos explicar esta situación, Minato- Hablo Mikoto mientras le sonreía, volvió a mirar a los más jóvenes, debía admitirlo, eran muy lindos y si apostaba, tendrían una actitud parecida al matrimonio Namikaze-Uzumaki y eso la fascinaba- Bueno muchachos, esto se deben a mis hijos.

Eso solo los confundió más a los tres ¿Lo trajeron por los tres Uchihas?

-¿Qué tiene que ver el Teme en esto?- Los Uchihas no se sorprendieron en como se refería a Sasuke, conocían al rubio desde que tenia 5 años y siempre se habían llevado de esa manera.

-En realidad es algo que tiene que ver con nuestra familia- Hablo por primera vez el patriarca Uchiha- ¿No han notado nada raro en nuestros hijos?

Los tres se quedaron en silencio, tratando de recordar los días anteriores que habian pasado con los azabaches.

-Bueno...-Empezó Naruto- Sasuke ha estado raro, esta demasiado pegado a mí y ni siquiera me deja hablar con alguien más, el ultimo que trato casi se le va encima.

-Sai estaba más o menos igual- Siguio Gaara- Esta vez no me dejaba ir a ningún lado solo y actuaba de manera extraña cuando había alguien cerca.

-Itachi igual- Colaboro Deidara- Estaba cada vez más irriante con la gente pero conmigo no.

Fugaku y Mikoto se miraron, eso solo confirmaba sus sospechas pero no los tranquilizo, ahora debían tomar medidas.

-Bueno chicos- Llamo Mikoto- El comportamiento de ellos es algo natural para ellos, están madurando.

-¿Qué?- Exclamo Deidara mirando a Mikoto- ¿Cómo que están madurando? No es como la pubertad o algo ¿Verdad? Porque ya están como medio grandecitos.

-Es normal para nosotros- Fugaku miraba fijamente a los tres- Somos lobos- Lo dijo sin nada más, Kushina se golpeó la cara con su mano, conocía a ese hombre desde hace años y no había cambiado nada en su sutileza.

Los tres solo se quedaron en silencio con cara de sorpresa, no tenia ningún sentido lo que había dicho el mayor.

-E-Espere Fugaku-san...-El único que se atrevio hablar fue Gaara- ¿Cómo que "Lobos"? Eso no tiene ningún sentido.

El adulto se quedo en silencio para meditarlo un poco, miro a su sobrino Obito quien al notar la mirada de su tio y saber lo que queria decir, asintió y dio un paso al frente. Naruto, Gaara y Deidara se le quedaron mirando al azabache, él cual dio un brutal gruñido antes de que su cuerpo empezara ha crecer de una manera alarmante para después su cuerpo empezó a ser cubierto por un pelaje oscuro, dando el paso a un lobo de dos metros de altura que se veía imponente.