Sanscest lemon || One-shots +18

Y ahora que? ;; Afterdeath

"Tu eres Geno. Si no me equivoco" Geno suspira. "Si, ahora, cuál es tu problema aquí? Que es lo que buscas?" El mayor le acaricia la mejilla al contrario. Geno podría detenerlo. Debería, según el. Pero no lo hizo.

Es decir.

Apenas sabe su nombre, si, ya lo había visto varias veces por la zona pero, ni siquiera hablaban tanto. No lo consideraba más que un conocido. Sin embargo le atraía mucho su forma de moverse, su misterio, su expresión siempre calmada. No podía evitar sentir que sus fémures temblaban ligeramente.

"Solo estaba esperando a que te atrevieras a hablarme o preguntarme algo, ya sabes, sobre mi" A Geno se le había olvidado casi por completo el hecho de que su toque lo hacía sentir extraño. Y pequeño dolor extraño que sentía en el hueso del pómulo.

Justo cuando Reaper acerco su boca con la del menor, el hace que lo suelte, y se aleja dando pasos hacia atrás. "Que crees que estás haciendo?" El está confundido. Solo fue su conciencia. Su alma no quería que se fuera, en realidad.

"Puedo sentir que no quieres evitarlo. Me habrías parado hace mucho tiempo. Te quiero a ti."

Era muy extraño. El. Sus voluntades. Su moral. Todo se portaba extraño. Que quería decir que sabía que era lo que quería Geno? Acaso leía mentes? Acaso podía sentir la emoción en su alma?

Mientras tanto el ni se daba cuenta, pero su cuerpo se acercaba cada vez más al mayor. Hasta que su boca se plantó en sus dientes, rápidamente la abrió dejando entrar su lengua. Se escuchan los sonidos de la saliva en ese universo vacío, al final, antes de separarse para respirar, Reaper succiona levemente la lengua del contrario, haciendo enrojecer aún más su rostro.

"Ngh... Reaper, yo... no debería" jadeaba para recuperar el aliento. Su pecho subía y bajaba de forma irregular.

Puso su mano en un hombro de Reaper, enroscando las falanges de la otra mano en las costillas del mayor sobre la bata negra.

Un pequeño empujón hacia Geno hace dar un pequeño grito, amortiguado por el beso de Reaper, ya que casi lo hace perder el equilibrio. No estaba pensando. Luego de eso siente que Reaper descansa sus brazos en la espalda del menor.

Reaper da unos pasos para adelante, haciendo que la respiración y el latido de Geno se acelere y tenga que dar cuantos pasos dio Reaper pero hacía atrás. Retrocedieron de más o menos cinco pasos, justo donde había un árbol grueso y lleno de nieve, Geno apoyó su espalda y de consecuencia Reaper también puso sus manos ahí a su lado, presionándolo. Cada que pasaban los segundos Geno sentía sus huesos calentándose y la necesidad de que su magia se forme.

No sabía si lo que hacía Reaper era solo un juego, o que vendría después de eso. Nuevamente se separaron para tomar aire y sus pechos se inflaban tanto que llegaban a tocarse. La mano que sostenía el hombro del mayor se deslizó a lo largo del húmero y luego, antes de llegar más abajo, la mano de Reaper la alcanza y la agarra. Geno deja que sus dedos de entrelacen.

Sus piernas se debilitan y lo obligan a arrastrar su espalda por el árbol, llevando a Reaper con el. Mientras apoya su pelvis sobre la fría nieve sus piernas se abren, dando paso a Reaper, quien ya había bajado sus manos en los fémures del menor.

Geno no tenía muy buena resistencia, de hecho, solía dejarse llevar muy rápido. Su magia no podría esconderse por más tiempo, jadeando, siente que su entrada se forma, pero extrañamente lo sintió en una forma diferente.

Aún no hay rastro de que la magia de Reaper se haya formado, sin embargo logra ver que un rubor traicionero empieza a aparecer en sus mejillas, siguiendo al cuello, y hasta le parece verlo entre sus piernas.